Nota de traductora: Ok, aquí vamos con mi primer proyecto de traducción así que espero les guste y espero yo hacerlo bien. Traducción autorizada por la autora. Todos los derechos de los personajes de Yuri! on ice a MAPPA y Kubo-sensei. Historia original de KawaiiUsagi2.

Notas de la autora: ¡Después de ver The Phantom Thief AU art que Somachos hizo en Tumblr, estuve inspirada para escribir esto! ¡Así que vayan y échenle un vistazo al art! ¡Espero que a todos les guste! Por favor déjenme saberlo ^.~ Obviamente YOI no me pertenece y hago esto sin ningún fin de lucro.

Under the Cover of Eros

YOI Phantom Thief AU

Capítulo 1 – Primer Aviso

El aire estaba vivo con el sonido de los teléfonos sonando, personas tecleando, y el distante sonido de las sirenas. Dulce música para sus oídos. El hermoso periodista rubio respiro profundo y fue golpeado por el mordaz aroma a café rancio y colonia barata. A su alrededor las personas estaban arrinconadas sobre sus teclados, tratando furiosamente de respetar sus plazos de tiempo. Chris Giacometti ha sido un periodista por casi una década, pero aun así ama su trabajo. Este le permite conocer gente nueva e interesante. Le permite aventurarse en los bajos mundos de Manhattan. Esa era su pasión. Al pasar de los años, ha visto numerosos asesinos seriales, ladrones de banco y violadores ir y venir. Ha destapado escándalos políticos, carteles de droga y una red de tráfico de personas. Pero, nunca ha visto algo así. Esto era nuevo y excitante para él. La emoción de la caza.

-Así que, veo que ya los has leído- decía el editor de Chris mientras se dejaba caer en la silla vacía que estaba junto a Chris. Stephan se estiro sobre el escritorio y tomo el fax que había sido enviado a la policía y a cada periódico de la ciudad. El apuesto y castaño editor agito su cabeza en consternación –¿Loco cierto? - pregunto con una carcajada.

- ¡Valiente diría yo! Pero Viktor dijo que la policía se lo está tomando en serio- comento Chris mientras se reclinaba hacia atrás en su silla – Pero por el valor de la piedra que es mencionada, ellos incluso han creado un equipo de investigación especial- Chis sonrió - y pobre del viejo Nikiforov, le toca llevar la carga de ser el detective en jefe para este caso- él sonrió. Hace algunos años Chris se convirtió en el amigo de un prominente detective llamado Viktor Nikiforov. El elegante ruso muy pronto se convirtió en uno de los mejores detectives en Manhattan. El llego hace seis años los Estados Unidos con su sobrino cuando su hermano y su cuñada murieron en un accidente automovilístico. Chris y Viktor se conocieron en un bar una noche y congeniaron instantáneamente, y han sido amigos cercanos desde entonces.

-Eso apesta para el- Stephan se encogió de hombros y estampo el fax de vuelta al escritorio. El en secreto estaba ligeramente celoso de la relación que Chris tenía con el apuesto detective. Stephan comenzó a salir con Chris dos años atrás y recientemente se mudaron juntos. Y debido a que era el editor en jefe de Chris, ellos mantenían su relación en secreto en la oficina – y creo que tendré que asignarte esta historia a ti después de todo – Stephan suspiro.

-Estaba esperando a que tu llegaras a esa conclusión- Chris sonrió y soltó un guiño. Él sabía que a Stephan no le agradaba Viktor, pero su novio no tenía nada de qué preocuparse. Chris había caído como loco de amor por Stephan y no había nadie que pudiera tomar su lugar – bueno- Chris se levantó con gracia – creo que mejor me dirijo a tener una pequeña platica con Nikiforov entonces- él sonrió y se inclinó para susurrar sensualmente en el oído de Stephan – Te veo más tarde cielo, mantén la cama caliente para mí- orgulloso del sonrojo que se extendió por todo el rostro de su amante, tomo su chaqueta y se fue rumbo al elevador.

Stephan cubrió su oído y murmuro – ese bastardo- luego se levantó y energéticamente camino de vuelta a su oficina. Azoto su puerta y se sumergió en trabajo para así no pensar sobre Chris o su cama. No funciono.

El fax que inocentemente reposaba sobre el escritorio de Chris decía:

Querido Jean-Jacques Leroy,

Tomare posesión del Corazón de Fuego mañana en la noche a las 10:30pm

~Eros, el ladrón fantasma~

-Bien Yurio-kun, ese fue un mejor arabesque, la próxima vez trata de enderezar tu rodilla un poco mas- Yuuri instruyo al adolescente rubio platinado.

-Sí, si viejo, puedo oírte- Yurio murmuro y puso sus ojos en blanco.

-Oi, solo tengo veintiocho años, la misma edad de tu tío sabes? - se defendió sumisamente Yuuri. El no creía que estuviera tan viejo. El definitivamente no se veía tan viejo, un regalo de su herencia japonesa. Yuuri no creía que el tío de Yurio se viera viejo tampoco. Sexy si, viejo no. Yuuri decidió que el camino por el cual iba su mente era peligroso así sacudió su cabeza para despejarla como una pizarra mágica – Creo que nos detendremos aquí Yurio-kun, tu tío debería estar aquí en cualquier minuto-.

-Bien- Yurio resoplo, mientras se soltaba de la barra y se dirigía furiosamente hacia el vestidor.

Yuuri sonrió con suficiencia y sacudió su cabeza – demasiada ira para alguien tan pequeño-.

- ¡Te escuche idiota! - grito furiosamente Yurio desde detrás de la puerta.

Yuuri sonrió para sí mismo y empezó a ordenar el estudio. Reconocía que el chico tenía una excelente forma y gracia para alguien tan temperamental. Él ha instruido a Yurio por apenas dos años, pero el chico ya había tenido algunas lecciones cuando el aún vivía en Rusia. Yuuri fue sacado de sus cavilaciones al momento en que la puerta del estudio se abrió y un desalineado hombre en una chaqueta color canela entro a trompicones.

-Lo siento por venir tarde! - Viktor sollozo. Paso su mano a través de sus cortos cabellos plateados y los quito de su rostro, revelando ambos ojos de un deslumbrante azul – Hay un loco caso nuevo en el cual yo fui asignado y reuniones y ahh- el hizo berrinche y se rasco la cabeza con ambas manos en frustración.

Yuuri vivía para esos momentos, estos cortos intervalos. Él sonrió al agotado hombre frente a él y alzo sus manos restándole importancia–No se preocupe por eso Viktor-san, nosotros terminamos hace un minuto- dijo Yuuri calmadamente.

-Gracias a dios- Viktor dejo salir un suspiro de alivio. El llevo su mirada al gentil hombre que estaba parado al lado de la pared de espejos. Conoció a Yuuri dos años atrás cuando el inscribió a su sobrino Yurio en clases privadas de ballet. Desde el momento en que Viktor conoció a Yuuri él se enamoró locamente. El hombre más pequeño es gentil, con un desordenado cabello negro, lentes de montura azul y adorables gestos asiáticos eran completamente su tipo. El solamente no estaba seguro si el hermoso instructor de ballet se sentía de la misma manera. Yuuri era una persona difícil de leer, al menos Viktor pensaba eso – Yuuri, cuantas veces te he pedido que me llames solamente Viktor- dijo en un patético gemido.

Yuuri se sonrojo y sacudió su cabeza – Oh no, yo…yo no podría…eso no sería lo correcto- el tartamudeo – lo siento- murmuro mientras bajaba la cabeza con vergüenza.

Viktor se precipito sobre él y coloco sus manos en los hombros de Yuuri - No, yo soy el que lo siente, no fue mi intención hacerte enojar Yuuri- dijo suavemente "¡demonios, él es tan malditamente adorable!" se gritó mentalmente cuando Yuuri lentamente levanto su cabeza y abrió sus ojos del color del chocolate caliente. Dándose cuenta que todavía seguía tocándolo, Viktor alzo sus manos en el aire como si alguien estuviese amenazándolo.

Yuuri no pudo evitarlo y empezó a reír por los gestos exagerados de Viktor "si solo fuera lo suficientemente valiente para decirte como me siento, si solo pudiera hacerte mío Viktor" suspiro en su cabeza.

- ¡Y hablando del maldito tiempo! - Yurio grito mientras salía del vestidor.

- ¡Yurio! - Viktor grito alegremente y se lanzó sobre su sobrino – Tu amado tío ha venido a llevarte a casa! - El chillo y enrollo a Yurio en un vergonzoso y fuerte abrazo- Estas creciendo muy rápido- Viktor hizo un puchero mientras mecía a su sobrino- ¿Cómo es posible que ya tengas 16? - sollozo.

- ¡Eww asqueroso! ¡Quítate anciano! – grito Yurio mientras trataba de liberarse. Eventualmente él fue capaz de liberarse y poder desarrugar su ropa de forma colérica – ¡Ya vámonos! -.

-Nos vemos en dos días Yurio-kun, buenas noches Viktor-san- Yuuri se despidió con una gentil sonrisa.

-Buenas noches Yuuri – Viktor sonrió y agito su mano en señal de despedida – Di buenas noches Yurio- susurro mientras golpeaba la espalda de su sobrino con el codo.

- ¡Si, si buenas noches! - gruño Yurio con una mano alzada en el aire mientras salía del estudio.

Viktor rodo sus ojos por el comportamiento rudo de Yurio - Niños - dijo mientras se encogía de hombros soltando una risita nerviosa y se giró para seguir a Yurio.

Yuuri no podía borrar la sonrisa de su rostro mientras seguía limpiando el estudio. Justo cuando termino, su teléfono vibro en su bolsillo. Él lo saco y vio hacia el texto de Phichit.

{Hey, después de que cierre el café por la noche, podemos finalizar nuestros...planes}

Yuuri soltó una risita sofocada mientras veía hacia las brillantes luces de la vibrante ciudad. El siempre pensó que la ciudad brillaba como relucientes piedras preciosas. Yuuri creció rodeado de piedras preciosas, sus padres eran tercera generación de joyeros. Cuando Yuuri tenía diez, un joven hombre llamado Jean-Jacques Leroy llego tambaleándose dentro de la tienda de los padres de Yuuri, Katsuki no Houseki (La gema de Katsuki), en Hasetsu, Japón. Los padres de Yuuri cuidaron al errante joven viajero, proveyéndole empleo y refugio. JJ, como lo llamaron ellos, se convirtió en el aprendiz personal del padre de Yuuri, Toshio. Cerca de un año después, mientras Yuuri estaba en la casa de un amigo por una pijamada, JJ se dirigió escaleras abajo hacia la tienda y robo la pieza más valiosa que sus manos pudieron tener. Luego el dejo Japón, pero no sin antes prender la tienda en llamas. Desafortunadamente, los padres de Yuuri y su hermana mayor estaban durmiendo escaleras arriba y no pudieron salir vivos. Con el accidente descrito como un incendio accidental, nunca se hizo una investigación en la tienda. Unos años después, JJ emergió como la nueva y brillante estrella de la joyería.

Yuuri no tenía parientes vivos, así que fue enviado a vivir con un amigo de la familia en los Estados Unidos. Celestino Cialdini, tomo a Yuuri y lo crio, junto con su hijo adoptivo Phichit, de Tailandia. Yuuri tenía la misma edad que Phichit y ellos se volvieron rápidamente inseparables. Celestino era un instructor de baile y enseñaba patinaje artístico al mismo tiempo. Ambos chicos crecieron aprendiendo baile y patinaje artístico como resultado. Yuuri se enamoró del ballet, patinaje, y todo lo relacionado al teatro. El incluso hizo unos pequeños papeles en la secundaria. Yuuri disfrutaba el hecho de ser capaz de crear nuevos personajes y sumergirse a sí mismo en un rol completamente fuera de su propia zona de confort. Por otro lado, Phichit se enamoró de las computadoras y la fotografía. A la edad de dieciséis, Phichit podría rivalizar con los mejores hackers a su alrededor y sus selfies eran una belleza.

Cuando los chicos se graduaron de la secundaria, se mudaron de Detroit, Michigan a la ciudad de New York juntos. Yuuri estudiaba baile en Juillard y Phichit iba a NYU. Pero luego de dos años, Yuuri tuvo una terrible lesión en la rodilla y Phichit era más inteligente que todos sus profesores y él lo sabía. Ambos chicos a la edad de veinte dejaron la escuela y empezaron sus propios negocios. Ellos encontraron una buena propiedad que podría cumplir sus necesidades en East Village. Phichit fundo un cyber café bastante a la moda en el primer nivel llamado The Fluffy Hamster. Era un lugar popular para bloggers, vloggers, periodistas y gamers por igual. En el segundo piso, Yuuri creo un pequeño estudio de baile, el cual el llamo Yutopia. Admitía que ese nombre era agrio, pero fue lo mejor que se le pudo ocurrir.

Yuuri observo su celular, riendo sofocadamente, y envió un mensaje de vuelta a Phichit.

[Suena bien, solo estoy cerrando el estudio y me adelanto. necesitas ayuda allá abajo?]

{no gracias, lo tengo todo bajo control, debería subir en cualquier momento}

[k]

Yuuri camino hacia la puerta, apago las luces y cerro todo. Camino escaleras arriba hacia el pequeño apartamento que él y Phichit compartían. Ellos vivían en el tercer piso sobre el estudio de baile de Yuuri. Cuando Yuuri no estaba dando ninguna clase de baile o ayudando en el café, el iría a la pequeña pista de hielo cercana. Luego de su lesión, él no era capaz de seguir una carrera de bailarín. Yuuri seguía ágil y en forma, pero las largas horas de practica que requiere ser un bailarín profesional era muy doloroso para su rodilla. Así que él es instructor de baile y aun patina en su tiempo libre.

Con el pasar de los años Phichit ha estado obsesionado con el trágico pasado de Yuuri. Él estaba determinado a saber que era lo que había pasado hacía ya tantos años. Yuuri le había dicho en repetidas ocasiones a Phichit cada detalle que pudiera recordar. Ellos decidieron hace mucho tiempo que JJ debió ser el que inicio el fuego. Luego los chicos asumieron que lógicamente el había robado algo de la tienda Katsuki antes de irse. Ellos mantuvieron un ojo en las actividades de JJ hasta que un día el cometió un fatal error. JJ salió con una nueva y exclusiva línea de joyería que el denomino como "JJ Style!" Muchas famosas celebridades corrieron a su boutique, rogando para conseguir una de esas nuevas y raras piezas. Las cuales estaban siendo vendidas a precios exorbitantes y los ingenuos clientes felizmente entregaron el efectivo. En una de las conferencias de prensa el mostro un collar de rubí de la colección 'JJ Style' que el llamo el "Corazón de Fuego". El collar era de la madre de Yuuri, había sido obsequiado por su abuela como regalo de bodas. Cuando Yuuri vio esto, el lanzo la laptop a través de la habitación en una cólera ciega. Él le compro a Phichit una nueva el día siguiente.

Esa fue la noche en que todo cambio, esa fue la noche en que Phichit y Yuuri formaron un plan, un plan por venganza. Mañana, todos esos planes darían fruto. Yuuri sentía vértigo ante el pensamiento.

Luego de abrir la puerta y sacarse los zapatos, Yuuri perezosamente se arrastró dentro de la cocina. Lleno la tetera eléctrica, la coloco de vuelta a su base y la encendió. Mientras espera a que el agua empezara a hervir el tomo el folder rojo que descansaba sobre el desayunador. Abriéndolo, el leyó las azules impresiones dentro hasta que la tetera se apagó. Bostezo mientras sacaba una taza limpia del escurridor del lavaplatos y colocaba algunas hojas de té verde dentro del infusor. Se sacó los lentes y froto sus ojos. Bostezando de nuevo Yuuri coloco el infusor dentro de la taza y la lleno de agua hasta el tope. Este era su ritual vespertino. Phichit se negaba, incluso, a hablar con Yuuri hasta que él hubiese tomado algo de su te vespertino. Esto calmaba los nervios de Yuuri y lo ayudaba a relajarse. Era un pequeño recordatorio de donde viene, el lugar que el solía llamar hogar.

Phichit atravesó la puerta como un remolino - Hey Yuuri! - dijo mientras agitaba una mano y lanzaba sus zapatos cerca de la puerta - ¿Acabas de entrar? ¿Ya bebiste algo de té? ¡Oh, parece que aún no! Entonces iré directo a tomar una ducha, te veo en un momento - se despidió rápidamente y se lanzó al baño.

- Hola Phichit - Yuuri saludo a la nada con una carcajada. Regreso su atención de vuelta a su té y el folder rojo.

Viktor y Yurio viven en un pequeño apartamento de dos dormitorios a unas cuantas cuadras del estudio de baile de Yuuri. Tan pronto Viktor abrió la puerta, una gran bola de pelos castaña lo ataco - ¡Ah! Makkachin! - grito - Ok, dame solo un segundo y te llevare a pasear amiguito - el sonrió y acaricio al enorme poodle detrás de sus orejas. El camino en dirección a la sala con algo de dificultad y coloco su saco en el sofá.

- Voy a tomar una ducha - dijo Yurio mientras pasaba al lado de Makkachin, acariciando su cabeza de manera rápida - hola Makkachin - susurro.

Viktor agarro la correa y la unió al collar de Makkachin. Justo cuando él iba a abrir la puerta, alguien toco la puerta y Makkachin empezó a ladrar - Deme un minuto - grito Viktor y empujo al emocionado poodle.

- ¡Hey, hola Makkachin! - canturreo Chris desde el pasillo.

- Chris - Viktor rio mientras abría la puerta - ¿Cómo estás? - pregunto mientras seguía intentando mantener a su perro a raya.

- Mejor que tu - Chris soltó una risita baja y acaricio a Makkachin - ¿Llevándolo de paseo? – pregunto mientras hacia un mohín.

- Si, apenas acabamos de regresar a casa y yo iba a sacar a pasear a Makkachin. ¿Te importaría unírtenos? – Viktor sonrió.

- Me encantaría – dijo Chris y tomo la correa de Makkachin de las manos de Viktor. – Ven dulce muchacho – arrullándolo. Chris prefería los gatos, pero él tenía un suave espacio en su corazón para el adorable poodle.

Ellos caminaron dentro de la fría briza en un atardecer pacifico. Viktor y Chris tuvieron una pequeña charla por unos minutos hasta que Viktor no pudo soportarlo más. – Ok, vamos dímelo -.

- ¿Qué Viktor, lo que sea que eso signifique? – Chris actuó como si lo hubieran insultado. – Yo solo vine a ver a mi querido amigo y tú piensas que yo tengo una segunda intención, que vergüenza querido chico, que vergüenza – él dijo con su voz tornándose cada vez más dramática. Chris era solo dos años mayor que Viktor, pero él sabía que llamar a su amigo "chico" lo hacía enojar, esa era la razón por la cual lo hacía.

Viktor no está creyendo ni una palabra y miro a Chris. – Yo sé que tienes segundas intenciones Chris, así que corta esta mierda y escúpelo – gruño.

-Moo, tú no eres nada gracioso – Chris hizo berrinche. De repente vio la mirada de la muerte patentada de Viktor así que se decidió por hablar. – Fui asignado a la historia del ladrón. Yo sé que Stephan no me quería en ella, pero él sabe que yo soy el mejor hombre para el trabajo-dijo orgullosamente.

- ¿Quieres decir que lo engañaste de alguna manera? – lo acuso Viktor con un bufido. – Y yo que pensé en tanto. Entonces, ¿vamos a estar trabajando juntos? – dijo Viktor sonriente.

Chris decidió ignorar el pequeño insulto y mejor contestar la segunda pregunta. – Si, aunque Stephan no me quiera en la historia – Chris suspiro.

- ¿Ya le has explicado el hecho de que tú no eres para nada mi tipo y que solo somos amigos? – pregunto Viktor en frustración. – Sin ofender ni nada – añadió de manera rápida.

-No me ofendió para nada – Chris soltó una risita y le dio una palmada en la espalda – y si, como un millón de veces Viktor – gimoteo. – Yo creo que es porque eres obviamente atractivo, somos cercanos, y creo que mencione accidentalmente que nos besamos una vez – Chris hizo una mueca.

-Ghhaa, eso fue solo una vez y fue la primera vez que nos conocimos y estábamos estúpidamente ebrios y nos reímos luego de eso porque se sintió tan mal – Viktor chillo mientras sacudía su cabeza ante el recuerdo.

-Lo se Viktor, yo también estaba ahí – Chris soltó una risita – Tu sabes que eres como un hermano para mi ahora, yo creo es un poco lindo que Stephan se ponga todo celoso – Chris sabía que su conversación iba a terminar solo en un argumento, así que decidió cambiar de tema. –Así que dime algo sobre este ladrón, ¿alguna pista? -.

- ¡No! Y, de todas maneras, ¿quién carajos manda una advertencia de que van a cometer un crimen? ¿Qué diablos? – se quejó Viktor. – Y quienes sean este loco Eros, ¡ellos mandan un estúpido fax imposible de rastrear a cada periódico y departamento policial en cinco distritos! – Viktor ha gastado todo el día con las mentes más brillantes en la ciudad tratando de encontrar alguna pista, solo para terminar con las manos vacías.

- Si, lamentablemente yo tampoco tengo nada – Chris suspiro. Incluso si él estaba molesto de que la policía aún no había encontrado nada, le excitaba el hecho de tener un nuevo reto. - ¿Ha habido algún escape reciente del manicomio? – él se rio de su propio chiste.

-No te rías, ya revisamos eso hoy – Viktor sofoco una risita. – Y no, ¡No hay! ¡Ese estúpido ladrón va a causarme mucho papeleo y horas extras! – gruño.

-Bueno, te dejare saber si mis pequeños informantes alrededor de la ciudad me dicen algo bueno – Chris sonrió. – Ahora pasando a un tema más jugoso, - sonrió, - ¿cómo está tu linda y pequeña manipuladora*bailarina? -.

- ¡Él no es una manipuladora! – grito Viktor indignado.

-No lo sé Viktor, por la manera en que lo describes, suena como una manipuladora para mí – Chris sonrió. Él amaba molestar a Viktor y el instructor de ballet de Yurio le ha estado proveyendo de un amplio repertorio por ya dos años. - ¿No me contaste de que incluso tiene un tubo para Pole Dance en su estudio? ¡Eso es ardiente! -.

- ¡El enseña todas las formas de baile Chris! – defendió Viktor mientras empezaba a sonrojarse.

- Talvez deberías pedirle por una sesión privada, y no me refiero al ballet – ronroneo Chris.

- ¡Cierra tu sucia boca Chris! ¡Yuuri es un santo! ¡Un dulce, inocente, adorable y pequeño santo asiático! – defendió Viktor. – Él fue enviado directamente del cielo – se detuvo – ¡solo para torturarme! – lloro mientras la lucha que mantenía consigo mismo se detuvo.

-Ya, ya amigo – Chris acaricio el hombro de Viktor. – Esta bien, solo tienes que traerlo a nuestro nivel – sonrió perversamente. - ¡Tienta al chico! -.

- ¡Chris! ¡Cállate! – grito Viktor y se sonrojo hasta sus pies. Ciertamente, Viktor deseaba tentar a Yuuri, él quería hacer que la pequeña belleza de cabello negro gimiera y rogara por él. Él quería hacer suyo a Yuuri, y solo para él. Solo que no tenía idea de cómo. Con un pesado suspiro se dio por vencido, pediría ayuda. – Esta bien, me doy por vencido, ¡Estoy en mi limite! – Viktor gimoteo.

-Oh dulce Viktor, ¡Pensé que nunca preguntarías! – chillo Chris en absoluto deleite.

Cuando Phichit salió de la ducha y se había puesto su pijama, llego a la sala solo para ver a Yuuri poniéndole los últimos detalles a su traje. El semi transparente traje apretado de cuerpo completo color negro no era algo que Yuuri usara normalmente. Su amigo era más reservado y tranquilo la mayoría del tiempo, pero como el mismo, él sabía que Yuuri tenía un lado oscuro. Phichit noto que Yuuri estaba embelleciendo su traje con unos cuantos largos y brillantes diamantes de imitación. El, definitivamente, estaba haciendo una declaración.

-Eso se ve realmente bien Yuuri, o ¿debería decir "Eros"? – Phichit le guiño un ojo de manera juguetona.

Yuuri lo observo y sonrió, - estoy feliz de que lo apruebes, "Ágape", - y le guiño de vuelta.

-Hice el algoritmo final para la seguridad de la mansión de ese idiota, - dijo Phichit mientras se sentaba al lado de Yuuri. – Guang-Hong, digo Philia, fue capaz de obtener la información que necesitaba de los policías, así que ellos no representan tampoco ninguna dificultad – Guang-Hong era un amigo de Phichit de NYU y actualmente trabajaba como el asistente oficinista del Detective Nikiforov. Él se estiro para tocar la sedosa tela de la nueva identidad de Yuuri. – No debería haber ningún problema de mi parte, el resto dependerá de ti -.

- Genial, gracias – dijo como si Phichit hubiera mencionado que a él le tocaba lavar los platos.

- Yuuri – Phichit espero a que Yuuri lo viera a los ojos, - ¿estás seguro de esto? Después de mañana, ya no hay…vuelta atrás – observo los oscuros ojos de Yuuri y vio la resolución que había en ellos. Él ya sabía la respuesta, solo quería estar seguro una vez más.

- Yo estoy seguro Phichit, ¿tú lo estás? – Yuuri pregunto con determinación en su mirada. No había duda de que el planeaba ver funcionar hasta el final. Él sabía que Phichit se sentía igual, después de todo, todo era plan suyo.

- Si Yuuri, estoy contigo, siempre lo estoy, ya sabes eso, - el sonrió tiernamente. Sus pensamientos se desplazaron a Yuuri, y la manera en la que el había perdido a todos los que alguna vez le había importado. Como había perdido todo. El ayudaría a Yuuri a encontrar algo parecido a la justicia, él lo ayudaría sin importarle nada. – Guang-Hong esta también con nosotros, le di la opción de salirse ahora y él me dijo que me callara - Phichit rio – así que, ¿mañana eh? – suspiro.

- Mañana por la noche daremos nuestro primer paso, mañana por la noche todo cambiara, - dijo Yuuri con una sonrisa inusualmente perversa sobre su rostro mientras cubría su torso con su traje de "Eros". Phichit le dio una sonrisa satisfecha.

*Manipuladora: en el texto original aparece la palabra "minx", y buscando su significado en san google me aparecía que era una mujer que gustaba de manipular hombres a su antojo, así que opte por usar la palabra manipuladora, si en femenino porque habla específicamente de una mujer (su significado).

N.T.: ok, aquí está el primer cap., cuéntenme que les pareció y espero que para el próximo domingo tenga el otro capítulo. Nos leemos (espero) en una semana ;)