mi primer historia de Sonic the hedgehog, disfrútenla!
Amelia: y dejen comentarios!
yo: tu si sabes Amy!
Capítulo 1: Amelia Sunshine
(POV general)
Era un día cualquiera en el ARK, los GUN y el doctor estaban a la mitad de un gran descubrimiento, tardaron unos meses pero, en compañía de María, la sobrina del doctor, lograron crear la perfecta forma de vida: Shadow el erizo.
Al principio fue difícil, ya que debían hacerle varias pruebas y enseñarle muchas cosas, pero con el tiempo, fue aprendiendo y hasta se volvió un experto, aunque de vez en cuando no obedecía, con la intención de enojar a los GUN, quienes no soportaban a ese erizo fastidioso.
María se llevaba muy bien con el erizo color negro, siempre lo animaba y encontraba la forma de hacerlo reír y pasar un rato agradable, pero a veces ella sentía que algo le faltaba a Shadow, asi que un día fue con el doctor y le expuso su preocupación, a lo que este, después de escucharla, se puso a meditar, pensando en lo que podía hacer para solucionar el problema.
Shadow era a veces muy rebelde y ocasionaba fallas para que se molestaran, le fastidiaba el que lo trataran más como a un experimento que como un ser vivo, aunque técnicamente eso es lo que era.
Un día, llegó una eriza de púas color blancas, con un vestido morado y unas púas de color negras, su nombre era White Collar, una antigua amiga del doctor, quien le platicó el problema y si era voluntaria a llevar un bebé en su vientre por medio de la inseminación, ya que era estéril y que cuando ese bebé creciera fuera la compañera de Shadow.
-cual es el trato doctor?-mirándolo con sospecha.
-cuando tengas al bebé, le haremos pruebas para ver que este sano, y luego te quedaras a vivir con ella o el aquí, cuando tenga edad, se hará inmortal y podrá vivir con Shadow-sonriendo.
-no lo se, los GUN no le harán daño?-sonando asustada.
-descuida White, eso no lo permitiré-dándole la mano.
-acepto, pero si me dejas estar qui-firmando un contrato.
-como quieras querida-recogiendo el contrato.
Acto seguido White se levantó de la sala y se dirigió al comedor, debía comer si iba a ser sometida a tal tratamiento, mientras que el doctor, satisfecho, mandaba llamar a María para contarle las noticias, la cual, al oírlas de inmediato sonrió y corrió a decirle a Shadow, más este no entendió nada y se fue.
Pasaron los meses y dentro de poco se dio a notar que dentro del vientre de White Collar crecía una vida, una maravillosa vida, lo que la hacía sonreír y sentirse extasiada, aun si los GUN la miraban con desprecio y odio.
Shadow ya había cumplido los 19 años, y ahora que era inmortal, ya no necesitaba preocuparse por la edad, aunque sin embargo buscaba esmeraldas chaos, lo único que podía liberarlo de estar en el ARK y de los GUN, aunque era reacio, ya que quería mucho a María y, lentamente, quiso a White como la madre que jamás tuvo.
White, estando ya en su 9 mes, dio a luz a una eriza de ojos grises, púas blancas y una en medio de color negra, a la cual llamaron Amelia Sunshine, aunque le decían Amy, de cariño. María y ella, al crecer, se convirtieron en las mejores amigas, poco a poco Shadow le empezó a coger cariño y aprecio, el doctor estaba complacido y los GUN cada vez más furiosos.
Cuando Amelia cumplió 17 años, curiosamente, dejó de crecer, asi que se dio a notar que era inmortal como Shadow, quien, ahora que Amelia era una eriza adolescente, pero bien formada, se empezó a interesar en ella como más que amigos. Algo que no pasó desapercibido ni por María, el doctor y White.
-Amy, ¿Qué estas haciendo?-le preguntó Shadow, curioso.
-estoy investigando acerca de las esmeraldas-dándole una sonrisa.
-crees que las vayamos a encontrar?-intrigado y dudoso.
-claro, debemos hacerlo-frunciendo el ceño.
-¿por...?-le preguntó, confundido.
-los GUN, temo por mi madre, y por ti-le dijo, sorprendiéndolo.
-E...en serio?, te lo agradezco-abrazándola con sentimiento.
Después de eso pasaron meses antes de que se volvieran a hablar, ya que el doctor necesitaba las esmeraldas y White entrenó a su hija en el arte de defensa, en caso de necesitarlo, y para que no estuviera del todo indefensa, algo que le agradeció y se pusieron a trabajar.
Una noche de particular emoción, White Collar paseaba en busca de información útil que le pudiera servir para encontrar la esmeralda chaos. Sin éxito. Más cuando estaba a punto de irse, escucho pasos por el lado sur de la biblioteca, y antes de que pudiera pensar siquiera en correr, unas manos la sujetaron y le amarraron las piernas y ambas manos, dejándole en el suelo, tirada.
Trató de liberarse, en vano, escuchó como se burlaban de ella y alcanzó a distinguir un símbolo bastante claro: los GUN. Furiosa, empezó a dar patadas, tratando de liberarse, pero uno le golpeó el rostro mientras otro le cortaba cerca del cuello. El que parecía ser el líder estaba comunicándose con otro a través de un dispositivo, indicándole que buscara a los dos experimentos y a la chica, y los matara.
-¡NO!, DEJEN A MI HIJA EN PAZ!-gritó con todas sus fuerzas.
-demasiado tarde White-le dijo, amenazante, el GUN.
-¿Qué es lo que van a hacer?-temblando de pánico.
-eso no te incumbe, solo que le daremos un don precioso, mátenla-ordeno, neutral.
-¡NOOO!-fue su último grito, antes de morir.
De inmediato desecharon el cadáver y luego se dirigieron hacia donde estaba el doctor, matándolo de igual manera y buscando hasta que encontraron a Amelia, la cual leía un libro acerca de las esmeraldas chaos, pero ni siquiera tuvo tiempo de que dijera nada, cuando sintió que le inyectaban una sustancia, desmayándose en el acto.
Cuando despertó, se sintió extraña: vitalidad, más que antes, fuerza, leer la mente y al mirarse en el espejo, se vio con unos colmillos, al parecer era un vampiro-erizo. Se rió al pensar en eso, pero de repente escuchó los gritos de María y la voz de Shadow, asi que, rápidamente, corrió, maravillándose de lo rápido que iba, y llegó hasta donde estaban.
Observó que estaban tratando de contener a los GUN, los cuales habían tomado a María del brazo y amenazaban con matarla, mientras Shadow trataba de luchar sin herirla, cosa complicada.
De inmediato sintió una especie de furia que creció dentro de ella, haciendo que, sin pensarlo, se abalanzara sobre ellos y les arrebatara a María con rapidez, mientras tomaba a Shadow de la mano y cerraba la puerta, escuchando un disparo.
De inmediato dejó a María en el suelo, la cual trató de empujar una palanca, para que ambos escaparan, Shadow no quería hacerlo, pero María lo convenció de irse del ARK.
-no puedo dejarte María!-grito, enojado.
-debes irte Shadow, Amy irá contigo-jalando la palanca.
-váyanse, y vivan por mi-empujándolos a la nave.
Justo a tiempo la nave fue lanzada al espacio, cuando los GUN entraron por la puerta y mataron a María, pero sin hallarlos. Aterrizaron en un planeta parecido a la tierra, pero llamado Mobius, lamentablemente al aterrizar se golpearon la cabeza, borrando sus recuerdos de lo que había pasado en el ARK.
Salieron de la nave, cada uno por separado, y se dirigieron en direcciones opuestas, encontrándose cada uno con alguien que los ayudó, aunque no dela manera que esperaban: a Amy la encontraron Amy Hedgehog, Sonic, Tails, Rouge, Silver y Blaise, mientras que a Shadow lo encontró Egman.
Pasaron unos años tranquilos, llenos de felicidad y comprensión, ya que no sabían pero si entendían el que no tuviera memoria, y asi fue, hasta una noche, en la que todo cambio...
...Tiempo presente
(POV general)
-vamos Sunshine!-le gritó Amy, jalándola del brazo.
-cual es la prisa Amy?-le preguntó, medio dormida.
-nos encontraremos con Sonic y tal vez veas como lucha!-sacando su martillo.
Sunny suspiró, la verdad es que desde que llegó allí, hace como 2 años, siempre en las batallas la dejaban de lado y Sonic se la quedaba viendo, y Amy a el, pero parecía que ambos estaban lejos de quedar juntos, pero al parecer no se daban cuenta.
Ella tenía también un arma: una lanza, pero jamás lo dejaban usarlo, asi que lo escondía y fingía que no hacía nada, cuando a veces en la noche salía a pelear con bandas, ladrones y de ese tipo. Al llegar a la ciudad de Mobius, se encontraron con Blaise, Silver y Sonic, los cuales estaban luchando contra un robot de tamaño gigante, esquivando y lanzando ataques a diestra y siniestra.
Amy, de inmediato, sostuvo su martillo y se abalanzó sobre uno más que había aparecido, destrozándolo al momento, mientras Silver usaba su telequinesis para destruir a 3 más y Blaise convocaba fuego para quemarlos y Sonic corría de un lado a otro, quitándole las piezas y tratando de que no alcanzaran más allá del parque.
Sunshine, frustrada porque no podía luchar, se dispuso a irse cuando, de repente, un robot le cerró el paso y la acorraló contra la pared, los demás se habían dado cuanta y quisieron ayudar, pero, aprovechando su distracción, los habían rodeado y solo podían mirar con horror y preocupación por su amiga.
Ella, sin embargo, aunque estaba asustada, de pronto sintió algo dentro de ella surgir, su púa de en medio de su cabeza que era gris se volvió negra, sus púas se hicieron más alargadas, y le salieron sus colmillos, los cuales enseño y, sacando su lanza, se abalanzó sobre el robot, destrozándolo al clavarle la lanza en el medio de su pecho, para luego, con una velocidad sorprendente, destruir los demás, liberando a sus amigos, los cuales se quedaron a su lado, hasta que ya no hubo nada que destrozar.
Para sus sorpresa, no cambió en nada, y sus colmillos eran visibles al abrir la boca, algo que no pudieron hacerle notar. Sunshine, sintiendo un ligero dolor de cabeza, se volvió y, al verlos tan sorprendidos, decidió prepararse para el interrogatorio.
-¿como hiciste eso?-Sonic
-¿desde cuando eres vampiro?-Amy
-¿puedes sujetar fuego?-Blaise.
-¿que otros poderes tienes?-Silver.
-¡SILENCIO!-dejándolos a todos con la boca abierta-no lo se, desde hace mucho, no, y no lo se.
Fue lo último que les dijo, antes de que, viendo que querían interrogarla de nuevo, usando su descubierta velocidad, echó a correr sin parar hasta que llegó a una construcción abandonada, donde se sentó un momento, mientras se veía en un espejo del cristal en la pared a su lado: era cierto, sus púas seguían siendo blancas, pero la de en medio era negra y eran más largas, además de sus ojos color negro y sus colmillos.
Pasaron muchas horas y cuando quiso darse cuenta, que ya eran más de las once de la noche, se dispuso a levantarse del lugar, pero de repente vio dos cosas: una figura negra que se acercaba desde el lado norte, y 7 gemas brillantes en el medio de la construcción.
Rápidamente se levantó, y, usando su visión nocturna y su sigilo, siguió a la figura y consiguió llegar antes que ella a las esmeraldas, observando que una de ellas brillaba intensamente de color blanco, mientras que otra brillaba color negro.
Tomó la esmeralda, sintiendo una sensación de calor por todo su cuerpo, al mismo tiempo que creía distinguir una voz en su mente:
la portadora de la esperanza ha sido unida.
Su estupor duró unos segundos, antes de que tomara las otras esmeraldas, excepto la negra, la cual la tomó la figura negra, dándole un golpe con su mano y quitándose la máscara, revelando un rostro de ojos carmín, una púa roja y negras, con una mirada de furia y conteniéndose.
De repente, sin darse cuenta, de sus labios salió lo que Sunshine nunca creyó escuchar: Amy?
continuará...
