Demencia


El cuerpo sin vida de aquella guerrera, permanece recostado sobre el pecho del que ahora es un asesino y no solo eso sino que también es un sicópata. Un loco.

— ¿Por qué lo preferiste a él y no a mí? ¡¿Por qué?!

Entierra su nariz en aquellos cabellos negros y con total y absoluta demencia los acaricia como si ella aun pudiera sentir su roce pero la realidad es otra.

El cuerpo de la menor de los Son, aún permanece cálido mientras que el hijo varón de Vegeta sumerge su rostro en el cuello ajeno y lo llena de besos porque en medio de su locura cree que ella no ha muerto y que solo está fingiendo para lastimarlo.

— ¡¿Por qué lo preferiste a él si era sangre de tu sangre?! ¡Era tu tío! ¡Maldita sea!

Grita cegado por el dolor y los celos al recordar que en el mismo momento que él reunió valor para confesarle su amor la azabache le había confesado que amaba a otro, que amaba a su tío y no a él.

El demente la sigue acariciando y la cubre con su abrigo para protegerla del frío que comienza a invadir la habitación y entre susurros y besos no correspondidos por ella, Trunks le relataba todo los planes que tiene con ella.

—…no permitiré que nadie te separe de mí.

La abraza con mucha más posesión y al besarla una vez más se percata de lo helado que están sus labios pero no hace más que abrazarla al creer que muy pronto ella va a despertar y todo volverá a la normalidad.

— ¡¿Qué hiciste, Trunks?!

Un grito sale de la nada pero él no deja de abrazarla y su mirada se muestra perdida, sin dirección…sin razón.

Bulma, llora y se arrodilla en el marco de la puerta al ver como la sangre, proveniente del cuerpo de Pan, se esparce por la alfombra de la habitación mientras que su hijo no deja de aferrarse a ella con todas sus fuerzas.