Éste fic es algo especial, los primeros capitulos tienen la descripcion desde el punto de vista de Tomoyo, y los demas siguen narrados por mi, espero que les guste. es largo, para las que le gusta leer (en capitulos).

Al hacer este fic no quiero quitarle la esperanza a nadie.

Espero que les guste y siempre dispuesta a recibir sus comentarios y criticas.

Disclaimer: CCSakura no me pertenece, es una obra de las exitosas Clamp, solo utilizo los personajes para satisfacer mis ideas locas.


Hasta que me duema

Capitulo 1

Felicidad

—.—.— Tomoyo

"Que es la felicidad, sino un momento pasajero que se ve interrumpido por diferentes situaciones.

Según varios filósofos: la felicidad es una meta del ser humano, pero es una meta que nunca se alcanza completamente.

Por ejemplo, cuando uno es un niño y desea un juguete, piensa que no habrá nada que le cause mayor dicha que obtener ese juguete, pero al pasar el tiempo se da cuenta que el juguete ya no es de su adoración o que hay algo más que capta su atención. Cuando es mayor, anhela un novio… anhela un amor… y piensa que no alcanzaría la felicidad si esa persona especial no está a su lado, pero luego vienen diferentes situaciones que te alejaran de esa persona o nacerán nuevas prioridades.

Aun con un amor no correspondido, uno puede conocer distintas formas de felicidad. Lo he vivido en carne propia… y sinceramente he llegado a pensar que he sido… completamente feliz.

¿Qué es la felicidad, entonces? Para mi… la felicidad es un recuerdo hermoso que te alegrara en los momentos difíciles.

Recuerdo mis momentos felices… al lado de las personas que me amaron de verdad. Es en los momentos cuando aparecen los verdaderos amigos…

Yo conocí a un hombre que decía que yo le fui importante y hasta este momento… hasta el último momento, pienso que todavía soy especial para esa persona…

Recuerdo vagamente cosas de mi pasado, de mi niñez ¿Y quién no? pero hay momentos que se quedan gravados en tu memoria, como si los escribieran sobre ti para que jamás los olvidaras.

Felicidad Momentánea

Once años, mi mundo era sencillamente perfecto: mi familia acomodada me daba todo lo que pedía, era popular en la escuela, tenía buenas notas y maravillosos amigos.

Amor

Fue durante esa primavera cuando él apareció en nuestras vidas. Llegó desde Londres, Inglaterra, para unirse a nuestra clase. Su nombre era Eriol Hiragisawa, un joven japonés-ingles que cautivó mi corazón y no lo dejo libre nunca más.

Decepción…

Amaba a otra… y me di cuenta rápidamente, así que no tuve tiempo, siquiera de acercarme con mis sentimientos. Ella era una mujer mayor, pero se veía fuertemente atraída por él… ¿Y quién no? pensaba yo.

Cobardía…

Sabía que me rechazaría… y por no sufrir el rechazo directo nunca me atreví a decirle mis sentimientos.

Arrepentimiento…

Después de diez años y aun siento el dolor asfixiante en el pecho que me carcome con fuerza.

Miedo…

Hoy, después de tres años… de un completo anonimato con los seres amados, volveré a encontrarme con él… y espero tener la fuerza necesaria, y el apoyo de los que me aman, para poder expresar por primera vez lo que mi corazón grita desde mi niñez.

Tengo miedo ¿Quién no lo tendría? Sé que la desilusión será obvia ¿Quién amaría a una persona sin verla después de tres años? sin tomarla en cuenta como una mujer, como una compañera; solo como una amiga a quien contarle sus problemas y tenerla cerca para servirle de consejera.

Crueldad…

Así es mi vida, así la encuentro… cruel. ¿Por qué era yo la persona en que él confiaba para contarme sus penas? ¿Por qué fui… tan tonta… que lo hice llorar sobre mi hombro, cuando era yo la que tenía el derecho de soltar mi pena sobre él? Y en vez de eso, lloraba en silencio en mi corazón.

Apoyo…

Fue cuando lo conocí, Mathew, mi único amigo, mi bondadoso y carismático amigo, que ha sufrido bajo mi mano los mismos latigazos de dolor que me fueron ocasionados. Él me ama… y yo lo amo, pero mi corazón no ha abandonado por completo el tierno y sincero sentimiento que le profeso a mi primer amor.

Confesión…

Por eso… he decidido decírselo a toda costa. Sé que al decirle mis sentimientos aliviara mi carga y me liberara de una agonía irrefutable y silenciosa… como es el amor.

Y me visto para celebrar, como se había acordado con los amigos, la navidad. Una época para pasar con la familia, con los amigos, con… las personas especiales para tu corazón. Y vuelvo a caer…

Desesperanza…

Y aunque me miró en el espejó y sé que mi cuerpo no lo atraerá. Sé que él me ve solo como una persona más, un integrante más entre sus compañeros de clases.

Revelaciones…

Conclusión, la hermosura y la tentación no es un medio para el amor.

Terminó de vestirme y vuelvo a mirarme en el espejo, y veo a la Tomoyo de siempre, con su ropa costosa, con su peinado simple, con su escaso maquillaje y la máscara invisible que le ayudara en momentos difíciles.

Escusas…

La tos y el cansancio físico y mental, me dan el motivo perfecto para no presentarme en el encuentro, pero no, necesito…

…Valor…

El camino que he recorrido sobre el continente, las noches de llanto y la opresión de mi pecho son la fuerza que necesito para dar el segundo paso.

Salgó de la habitación de mi hotel, protegía contra el cruel frio que amenaza con acabar las pocas defensas que me quedan, pero mi hermoso abrigo me protege contra los vientos, llevándome hasta mi destino.

Veo la luz de la casa y respiro profundamente, tan solo un tramo me separa de él, y no es ahora cuando me arrepienta. Bajo del auto y caminó con rapidez hasta la puerta; la nieve y el viento golpean mi rostro y seguramente sonrosaran mis mejillas, pero que importa si ya no estoy… para él.

El rostro sonrojado de Sakura por el calor humilde y familiar de la casa, me da una alegría que no había experimentado en años. Mi amiga, mi compañera, mi familiar, uno de los más querido, me abraza con fuerza y por poco me besa la mejilla helada, dándome una afectuosa bienvenida. No solo ella, sino también su esposo, Li Shaoran, un joven chino que se enamoró perdidamente de la ojiverde desde que piso suelo nipón y un amigo ejemplar, que ha estado al tanto de la secreta tragedia amorosa.

Después de quitarme el abrigo Sakura me conduce por el corto pasillo hasta la sala de estar. Siento que mi corazón late con fuerza, con tanta fuerza que creo que mis compañeros lo escucharan. Y termina el pasillo para entrar a la sala y encontrar la mayoría de las miradas sobre mí.

Encuentro…

Y ahí está él, con sus ojos zafiros detrás de los lentes, mirándome con una expresión única, con una ternura que se le da a una hermana, con una sonrisa de dicha que creo que me hará llorar… y tiemblo…

… Es el primero en acercarse a mí para saludarme, pero los demás se interponen en su camino y todos llegan a mí, abrazándome, felicitándome por mi éxito personal y deseándome una feliz navidad. Finalmente, al último queda mi encuentro, pasando a otro plano, en el que llegamos hasta el otro y nos abrazamos con fuerza diciéndonos lo tanto que nos extrañábamos…

Debilidad…

…se presenta en mi mente. Y las lagrimas fluyen sin poder detenerse, mientras le hecho la culpa a lo mucho que los extrañaba.

Mentiras…

…Eso es lo que digo, solo mentiras. Porque el único que realmente me hizo falta fue él, el único en el que pensé, y el único que ahora ocupa mi total atención… Y siento sus brazos alrededor de mi cuerpo abrazándome con fuerza y siento su perfume, mientras me hundo otra vez en mi miedo.

.—.— Eriol

La idea de un encuentro era buena, más que buena. La oportunidad perfecta para… para verla. Sé que también ha confirmado asistencia y sé que nunca falta a una de sus promesas, por eso he volado desde lejos para ella. Y no tengo miedo de encontrarme con ella, no tengo temor de contarle mi situación en una forma privada, pero tengo un impedimento.

El viaje y los días pasan rápidos y siento que desean que llegue nuestro encuentro.

Y finalmente… ahí estoy, alerta, atento, deseoso de que aparezca en cualquier momento.

Siento los pasos sobre el pasillo y cuando la veo entrar con sus mejillas sonrojadas y sus labios levemente morados,

Celos…

…Es lo que siento por el frio que la besado y tocado sin pedir siquiera autorización.

Y Dicha…

La veo, con su hermoso rostro que no necesita nada para resaltar, porque sé que ella es diferente a las demás, que no hace nada por resaltar… no hace nada por gustar, solo es ella. Su cabello azabache amarrado en una simple coleta y sus joyas amatistas, que no me quitan la vista de encima, siempre han sido mi debilidad, que me hacen caminar hasta ella sin prestar atención a mí alrededor.

Desilusión…

Todos parecen anhelarla tanto como yo o el destino me juega una broma, pero como si tuvieran resortes se levantan y se le acercan para abrazarla y tocarla.

Ilusión…

…cuando ella me mira y me sonríe, y me dice que quiere que sea yo el que la abrace con pasión.

Y no puedo aguantar las ganas extremas de besarla, de abrazarla, y de confesarle mi amor… y cruzando a los impertinentes la estrecho contra mi cuerpo como tanto había solicitado.

Y siento sus lágrimas, las lagrimas que se unen a mi silencioso tormento, que caen y humedecen mi camisa, que se muestran con la pureza única de su dueña… y siento que en este momento he sido feliz, eternamente feliz.

.—.— Tomoyo

—Como les comentaba, antes de que llegara Tomoyo…— dijo una voz que me resultó familiar, y me hizo secar mis traicioneras lagrimas para enfocar la vista, mientras sentía las manos de Eriol alejarse levemente —… ¡Voy a casarme con Eriol!—

Y ya no hubo más lágrimas, no hubo reacción, no hubo sentimientos. Me separé de mi compañero y observe a la pelirroja mujer que estaba sentada sobre el sillón, con una sonrisa que no me resultó muy sincera.

¿Qué es la felicidad?— me pregunto —La felicidad es un momento pasajero que se ve interrumpida por diferentes situaciones… diferentes situaciones… que algunas veces… pueden llegar a ser muy crueles.

Continuara…