Los personajes no me pertenecen

Advertencias: Yaoi / Slash

N/A: Que esté aburrida cuenta como excusa? jaja

Saludos.

Enjoy

A ver quién parpadea primero.

Su respiración comenzó a ser trabajosa después de los primeros segundos.

Bien, que estaba al menos a medio metro de distancia del cuerpo de Potter pero su mirada siempre lo reducía a polvo. Odiaba cuando lo hacía vacilar.

Pero estaba allí siendo perfecto y mirándolo con esos ojos verdes que producían descargas eléctricas en su pecho.

Tragó saliva y con el rabillo del ojo notó como Harry humedecía sus labios y casi sin darse cuenta, el mordió los suyos.

El moreno esbozó una sonrisa y Draco sintió la necesidad de golpearlo. De verdad odiaba ponerse nervioso por su culpa.

"Esta noche no Draco, estoy cansado…"

Suspiró mientras el otro deshacía el nudo de la corbata, como si esta estuviera impidiéndole respirar. Posó sus manos, ahora temblorosas, sobre sus rodillas. Pero Potter seguía estando ahí, desabrochándose los primeros botones de su camisa.

―Hace calor.- se excusó.

Draco sonrió de medio lado forzosamente y alzó las cejas como diciendo "Ah sí, tienes toda la razón"

Lo hacía a propósito. Estaba seguro de eso. Seguramente Harry disfrutaba humillarlo así, y probablemente esa sonrisa de suficiencia era porque Draco no podía quitar la cara de tonto enamorado.

"Si pierdes, ¿prometes dejarme dormir?"

Harry pestañeó.

Draco rió unos segundos con la vista al suelo y añadió:

―Perdiste … otra vez.

Se levantó velozmente de la silla y empujó ferozmente a Harry hasta el sillón de la sala donde ambos cayeron a peso muerto.

"Si"

―Un día de estos terminarás por romperlo.

―Es culpa tuya-susurró mordiendo su oreja.

―¿Mi culpa?- ronroneó

―Siempre parpadeas primero.

―No, es que siempre llevas las de ganar.

―¿Yo? ¿Qué ventaja tengo?- preguntó levantando la vista con cierta inocencia

Harry rió y no pudo evitar darle un beso rápido.

"Pero si gano…"

―Vale, no tienes ninguna ventaja. -dijo- Ahora devuélveme mis lentes.

Draco sonrió mientras sacaba las gafas de su bolsillo.

No podía negar que jugar contra su novio era divertido, y claro que no tenía nada que ver con que nunca perdía.

Pero lo que más le gustaba de aquello,aparte de que por alguna razón Harry nunca se negaba a jugar, era que en esos momentos; justo cuando Harry clavaba su mirada esmeralda sobre él, sentía que lo tenía todo.

Todo.

Fin (:

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