Disclaimer: Los personajes no me pertencen son de Stephanie Meyer, solo comparto una historia loca con el mundo.
Hola chicas y chicos con este capitulo empieza una buena parte de la historia que ya conocemos... espero y su dudas queden resueltas poco a poco...sin no pues ne preguntan y yo lo resolvere...
Lamento haberme tardado tanto en subir pero la verdad es que se me presentaron vastantes contratiempos, me cambie de cd... y despues de mucho batallar entre a la uni y tmb por eso les pido paciencia por que salgo a las cuatro de mi casa y regreso hasta la seis no me queda mucho tiempo para escribir y continuar, pero aun asi hago lo posible por no defraudarlos...
Bueno ya los dejo leer cuidensen y espero y les guste besos y nos estamos leyendo.
I "El viaje de los recuerdos"
-Bella-
-Ya está todo listo-declaro Jake entrando al cuarto.
-Ok ya voy-dije terminando de empacar en mi mochila de viaje-¿seguro que arreglaste todo? ¿y mi pequeño?-
-Sí, estoy seguro; ya vinieron por los autos, ya cerré todo y desconecte lo que no se usa. A Derek lo mandara tu mama mañana a Forks; creo que es todo-dijo enlistando con su dedos.
-Lo mismo digo, por eso me encantas-dije dándole un cariñoso golpe en el torso antes de tomar mi casco y salir.
El se encargo de cerrar la casa y después de que ambos tomáramos las mochila me subí a mi sensacional moto BMW S1000RR color cromo, me puse el casco y después de abrocharme la chaqueta de piel le hice una señal a Jake de que me siguiera; a él no le tomo mucho tiempo acelerar su S100RR negra y darme alcance.
El cruzar las calles de Seattle fue extrañamente raro ya que eran las cinco de la mañana y el tráfico apenas empezaba afluir.
Y como todo sentí dejar atrás un pedazo de mí en aquella mi amada ciudad.
Como era de esperarse el destino aún me tenía preparadas muchas cosas y como si se empeñara en golpearme, ahora me hacia levantarme y enfrentar mi pasado.
Hoy Jake y yo nos dirigimos rápidamente a Forks, gracias a una oferta muy amable y cuantiosa de mi medico favorito Carslie Cullen; que después de que uno de sus mejores pediatras se jubilara no dudo en investigar entre sus amigos de un pediatra joven y talentoso, así es como dio conmigo; él no dudo en hablarme y ofrecerme el puesto como jefa de pediatría. Momentáneamente me negué hasta que el recordó que últimamente Jake era mi talón de Aquiles, así que astutamente me ofreció un puesto también para él, le dije que tendría que hablarlo con él y el resto es historia.
Jake estaba más que alegre que nunca, él me había apoyado incondicionalmente durante los últimos nueve años de mi vida y había llegado el momento de regresarle el favor.
El andar en carretera me dejaba mucho tiempo para pensar y recordar.
¿Qué era lo bueno que dejaba esto? ¿por qué pasaba? ¿qué es lo que dejaba en Seattle? Todo tipo de preguntas bombardeaban mi mente; algunas con respuesta lógica, otras sin respuesta aparente, pero todas aquellas preguntas y respuestas tenían algo en común; todas ellas marcaban algo en mi vida y en mi futuro.
Al ver pasar un carro con una familia recordé la mía y lo cambiada que estaba.
Charlie y Sue se cazaron en lo que pareció la sensación, fue la boda más asistida en el año, a la que por cierto no pude asistir por estar en exámenes y trabajando. Mis hermanos se molestaron bastantes, tanto que dejaron de hablarme un par de meses y de eso ya cinco años.
Seth fue a la universidad y ahora es un reconocido Astrónomo y Astronauta de la comunidad científica. De Leah no se mucho, lo que sé es que estudio comunicaciones y trabaja para una televisora. Emmett termino la carrera de fisioterapeuta y educación física. Puso un gimnasio muy grande con aparatos y toda la cosa. Actualmente da clases de spinning, karate, zumba, yoga, kit boxing, Pilates, esgrima y no sé que mas; tiene varios entrenadores a su cargo y hace cuatro años se caso con Rose; boda a la que asistí forzosamente.
-Flash Back-
-Ring...Ring…Ring…-
-Jake contesta el maldito teléfono, estoy ocupada-grite agitando la cuchara mientras cocinaba.
-Es para ti, es Rose y parece estar muy molesta-dijo Jake después de varios momentos al aparecer en la cocina, tome el teléfono y logre acomodarlo de tal forma que me permitiera mover la sopa y hablar.
-Hola-
-¿Cómo que hola? ¿Isabella Swan por qué carajos no estás aquí?-vociferaba Rose del otro lado de la línea.
-¿Ahora qué tienes?-
-¿Cómo qué, que tengo? Me caso mañana y tú deberías estar aquí-
-¿Qué? ¿Cómo que te cazas mañana?-
-Bella llevo meses intentando comunicarme, pero nadie contesta el teléfono y parece ser que nunca escuchan la contestadora-
-Lo siento-
-No lo sientas mueve tu estúpido trasero y ven a Forks-
-No puedo Rose mañana tengo una práctica importante-me excuse.
-Por eso en cuanto puse la fecha te llame, se supone que todo debería estar listo ya; además ¿dónde chingados esta tu celular? ¿para qué lo tienes si no lo contestas?-
-Lo perdí-dije apenada.
-Bonito asunto-
-Lo siento-dije aún moviendo la comida.
-Nada que; pon el altavoz-ordeno, yo lo hice -Jacob Black se que estas ahí ¿qué razón me das para no contestar el chingado celular?-
-Hola Rose-
-No empieces de lambiscón, contesta mi pregunta-
-Lo tuve que cambiar-
-Con una chingada con ustedes, son un par de irresponsables. ¿qué tal? sí en vez de casarme se hubiera muerto alguien-
-¿Te vas a cazar?-dijo asombrado Jake.
-Es muy tarde para felicitaciones. Ahora escúchenme bien par de tarados, cómo vi que no llegaban compre un par de boletos de autobús; esté sale a las siete de la mañana, están al nombre de Rosalie Lilian Hale-
-Rose discúlpame, pero tenemos cosas importantes que hacer mañana-
-Me importa un sorbete, no sé cómo le van hacer, pero si no están mañana aquí a las dos de la tarde, tomo un avión y los traigo arrastras sin importarme atrasar la boda-
-Pero-
-Nada, me escucharon. Así que muévanse a arreglar las cosas… par de insensatos-dijo muy molesta antes de colgar el teléfono. En cuanto sonó la línea de nuevo Jake y yo nos volteamos a ver y corrimos a la contestadora. Y efectivamente había un mensaje de Rose en la que sonaba muy emotiva declarando que Emmett le había propuesto matrimonio; ése era uno de los cuantos mensajes que había, ya que la contestadora marcaba cerca de cien y eso, porque se le había acabado la cinta.
Luego de que Jake y yo agilizáramos las cosas, conseguimos que nos condonaran un día en el hospital y que el profesor nos pusiera la practica luego; estábamos arreglando la ropa para la fiesta cuando sonó el teléfono, yo corrí a contestarlo.
-Bueno-
-Por fin-dijo Emmett.
-Hola hermano, felicidades y lamento no haber llamado antes, pero he estado muy ocupada con la escuela y el servicio social-
-Tranquila, no te excuses, creo que fue suficiente con los gritos de Rose-dijo entre risas.
-No me jodas, casi nos degolló por teléfono-
-No era para menos-
-Lo sé, lo sé, pero en mi defensa puedo decir que hay estaré-
-Ay Bella, oye hablaba para avisarte que Rose tiene todo preparado, solo traigan puesta ropa cómoda y algo para no aburrirse en el autobús-
-Que bien que lo dices, estábamos por empacar algo-
-Bueno enana nos vemos-dijo muy feliz al colgar.
La mañana siguiente fue una locura tuve que ir a dejarle a Clara los trabajos y luego pasamos con Frank a dejar los de Jake y de ahí nos fuimos a la central.
El autobús salió puntual y para eso de las dos estábamos en Forks.
-Bella, Jake-nos recibieron muy alegre Alice y Rose.
-Ni creas que tan solo por estar aquí se me va a quitar lo molesto-declaro Rose después de saludarme.
-Eso lo veremos al final del día-
-Me parece lo mejor-
-¿Bien a dónde vamos?-
-A casa de Esme, ya sabes es como mi casa-
-Ok-dije no muy alegre.
-Tranquila todos los chicos están desde ayer en casa de Charlie-dijo Alice y después nos fuimos a la casa.
Después de comer nos fuimos al cuarto de Rose y ellas se pusieron a trabajar.
-Creo que el rosa no es mi color-dije al ver el color de sombra que me aplicaban.
-Cierto es el color de las damas de honor-dijo Rose.
-¿Qué?-grite
-¿Qué esperabas?-
-No sé qué tal vez me obligaras a venir porque soy la hermana del novio y tu mejor amiga-
-Pues algo por el estilo-dijo Alice saliendo del baño posando un vestido rosa pastel.
-No me digas que voy a tener que usar un vestido como ése-
-Más respeto, son de los primeros diseños de temporada de Alice-me regaño Rose, no sin antes darme un sopapo en la cabeza.
-Ok-refunfuñe.
Al terminar no pude evitar hacer muecas al espejo, sin dudar Alice hacia un buen trabajo, pero sencillamente no usaría ese vestido ni muerta. Al menos que me obligaran; tal es mi situación.
-¿Qué tienes?-cuestiono Jake rumbo a la iglesia.
-Me siento como niña mimada-
-Te vez linda-
-Si claro, como no. Ando en moto, practico kit boxing, karate y kung-fu y ni así pude evitar ponerme este ridículo vestido rosa-
-Me imagine que te quejarías, pero si te sirve de consuelo me siento igual de ridículo, solo mírame parezco pingüino-
-Qué bueno que se sientan así, eso les enseñara a contestar el teléfono y realizar su deberes-se defendió Rose. Luego de eso Jake y yo no nos quejamos más, pero esperábamos ansiosos quitarnos los trajes. Al llegar todo estaba listo y a las siete empezó la ceremonia en la iglesia.
Cuando empezó la ceremonia y la niña de las flores empezó a brincar por el pasillo, fue el turno de Alice de avanzar.
-Todo saldrá bien-prometí a Rose antes de desfilar por el largo corredor. Esa fue la primera vez que vi a mi hermano en todo el día; el estaba tan galán y yo tan sorprendida. Aún no podía creerlo, mi hermanote se casaba.
Supe el momento exacto en que Rose apareció detrás de mí porque a mi hermano se le llenaron los ojos se anhelo, eso y que toda la gente volteo como tarados.
Al llegar al final de ese pasillo seguí las instrucciones que me dieron y me senté a mi mano izquierda, para cuando había llegado a mi asiento ya había saludado con una sonrisa cómplice a toda mi familia.
Al empezar el discurso fui consciente de muchas cosas: Charlie sujetaba fuertemente a Sue con una mano y con la otra sujetaba a Reneé, ambas lloraban como magdalenas. El salón estaba arreglado al típico estilo Cullen tan pacifico y acogedor; aquellos arreglos de flores silvestres daban un toque pintoresco a toda esa opulencia que nos rodeaba y por ultimo Rose se veía más contenta y vulnerable que nunca.
La ceremonia fue un excito, el cura nos dirigió majestuosamente por los corredores del compromiso hasta dejarnos en los jardines del matrimonio. Los votos y promesas fueron especiales, todas ellas marcadas a piedra y lodo en los corazones de ambos y todos los ahí presentes; para cuando dio fin Rose no pudo evitar llorar y ante aquel simple gesto Emmett no dudo en entregarle el corazón en un beso.
Después de saludar a todos en el salón y sentarnos en nuestro lugar fuimos hacia Rose y Emmy.
-Enana no sabes el gusto que me da que hallas venido-
-A mí también me da gusto haber sido obligada a venir-hable por mi y por Jake.
-Es que no hubiera sido lo mismo sin ustedes-
-Si lo se, somos irremplazables-dije mientras abrazaba fuertemente a Jake.
-Bueno en realidad Bella y yo venimos a despedirnos-dijo Jake.
-¿Cómo?-se quejo Rose.
-Sí, no nos podemos quedar-
-¿Por qué?-
-Es que mañana a primera hora tenemos examen, trabajo y esas cosas-dije.
-Bueno que le vamos hacer-
-Pues si-
-Fin de Flash Back-
Ahora todo lucia tan diferente; con la vida de casados de mi hermano y Rose todo mejoro, ella se graduó de ingeniero en sistemas automotrices y puso un taller junto al gimnasio de Emmett, bueno en realidad era suyo también; consiguieron que Carslie les vendiera un pedacito de las cinco hectáreas que tiene en Forks e hicieron su casa.
Alice estudio diseño en interiores y textil, junto con Jasper estudio psiquiatría y él se especializo en psicología infantil, aunque es el médico encargado del psicología en el hospital.
Alice puso un taller de diseño y actualmente es una diseñadora reconocida y hasta donde sé ellos aún viven en casa de Esme.
En definitiva la vida había cambiado para todos, incluso para Esme, que al ver que sus niños crecían puso una florería y junto con Alice es encargan del negocio de organización para todo tipo de evento.
Estaba tan absorta en mis pensamientos que no fue hasta que Jake se me atravesó que note que tenía que detenerme.
-¿Qué paso?-dije preocupada.
-Tengo hambre y como estabas en la nube, creí que sería buena idea atravesarme-dijo cuando me detuve a la orilla de la carretera.
-Anda vamos a comer-dije entrando al local. Eran las ocho y media y aún estábamos a hora y media de camino, tal vez menos por los treinta y cinco minutos en el ferri que teníamos que tomar en Kinston; y para ser la hora que era había mucha gente.
-¿Qué es lo primero que vas hacer al llegar?-curioso Jake.
-Ver a Charlie y reportarme en el hospital-
-Yo iré a ver a Billy y después tal vez a saludar a Seth, sabía que vive en casa de Charlie-
-Lo sé, aún no se casa y es el consentido de mami-
-Lo sé siempre va ser el peque de Sue y Charlie-
-Sí, y más desde que Emmett se caso-
-Sí, la vida cambio desde que nos fuimos-
-Cierto, pero me gusta más así-dije mientras lo abrazaba y le besaba el cuello.
Después de terminar pagamos la cuenta y nos montamos en las motos. Llegar a Kinston nos tomo quince minutos, solo que tuvimos que esperar al ferri; este salió puntual y disfrutamos de treinta minutos de brisa. De ahí nos tomo cerca de veinte minutos más llegar a las afueras de Forks.
Jake me hizo una seña de despedida cuando la brecha se separo, él la siguió para ir a ver su papa y su nueva novia Clara.
-Hola- me saludo una muchacha alta y morena después de haber tocado el timbre en casa de Charlie.
-Hola, busco a Charlie-
-¿De parte de quién?-
-¿Leah quién es?-dijo una voz grave detrás de la muchacha, luego note que tendría mucho sentido que fuera Leah. La puerta se abrió más para revelar a un Seth mucho más alto de lo que recordaba -Bella-grito antes de tirarse a mi cuello abrazándome.
-Pequeño ¿cómo has estado?-
-Bien, pero quien lo dice, la enana-dijo aún apretándome. Cuando me soltó me volteé hacia Leah y la abrase.
-¿Qué tal has estado?-
-Bien ¿y tú?-
-Igual, no me pudo quejar-
-Pero pasa no te quedes afuera-al pasar reunidos en la sala estaban Charlie, Sue y un chico alto.
-Hija-grito Sue a levantarse al verme, con Charlie detrás de ella.
-¿Qué te trajo hasta acá?-curioso Charlie al soltarme.
-Voy a trabajar en el hospital-dije, a él se le iluminaron los ojos y volvió abrazarme.
-Es estupendo-dijo Seth.
-Sí, todos estaremos cerca de casa-exclamo aquel chico extraño, con fracciones francesas y ojos claros.
-Andrew tiene razón-dijo Sue.
-Disculpa que sea grosera, pero ¿quién eres tú?-
-Ay que descuidada soy, Bella este es Andrew mi prometido, ella es Bella mi hermana-dijo alegre.
-Mucho gusto-declare.
-El gusto es mío-
-Disculpa que me entrometa, pero hace un rato dijiste que estarás cerca de casa ¿tus padres son de Forks?-
-No, ellos son franceses, cuando tenía dos años nos mudamos a América, pero hace unos meses fallecieron en un accidente de tráfico, ahora Leah es lo único que tengo; cuando me case con ella ustedes serán mi familia-dijo anhelante y melancólico.
-Lo lamento-me disculpe.
-No te preocupes-
Estaba tan a gusto que no note el tiempo pasar; hace tanto que no pasaba tiempo en familia que no me importo olvidar el reloj; hablamos de tantas cosas, tantos recuerdos eran evocados entre aquellas paredes y todo era tan diferente estando rodeada de aquellas personas que amaba con todo el alma.
Cuando en un movimiento inconsciente volteé a ver el reloj, me pare alarmada.
-Rayos se me hace tarde, tengo que ir al hospital antes de las dos-dije poniéndome de pie, enfundándome la chaqueta y despidiéndome distraídamente de los presentes.
-¿Bella en dónde está tu auto?-pregunto Seth.
-Lo mande por paquetería, llega mañana a las nueve-
-¿Y entonces en qué vienes?-
-En la moto-dije subiéndome y poniéndome el casco.
-Wow en serio que pasar tanto tiempo con Jake te convirtió en toda una rebelde-
-Ja, eso dicen-dije encendiendo la moto.
-Ve con cuidado-
-Gracias, cuídalos-me despedí y eché a andar hasta el hospital.
-Disculpe no puede pasar-me dijo la secretaria de dirección, yo me acerque y leí distraídamente su nombre en el gafete.
-No te preocupes Deanely, Carslie ya me espera-trate de tranquilizarla.
-Pero-
-Tranquila-dije al sentarla en su lugar y entrar después al despacho de Carslie. Me apoye en un sillón y espere a que volteara; ya que pareció no haber oído mis tacones, cansada de esperar carraspee un poco.
-Deanely te dije que no quería que me molestaran, estoy esperando una llamada importante-dijo sin despegar la vista de sus papeles.
-Pues lo tomaría en cuenta si fuera Deanely-conteste y en ese instante él volvió la vista y en cuanto me vio fue a darme un abrazo.
-Bella que gusto tenerte aquí. Siéntate, pero creí que me llamaría en vez de venir-
-Bueno ya sabes, me encanta dejar todo claro-
-Lo sé, siempre has sido muy correcta-dijo mirándome con anhelo, como esperando que fuera una súper heroína y llegara a salvar el día -no sabes el gusto que me da que estés aquí-
-A mí también me gusta estar aquí, pero olvidemos eso, a lo que vine-
Después de un par de minutos dejando las cosas claras, el turno, las prestaciones y todo acerca del manejo de lo que sería mi nueva área decidí retirarme para ver a Jasper.
-Bueno Carslie creo que tengo que irme si pretendo alcanzar a nuestro psicólogo estrella antes de que se valla-dije como despedida.
-Si más vale que te des prisa Jasper es muy puntual-dijo, al salir pregunte por el consultorio del Dr. Hale y después de dar un paseo por el ascensor llegue a mi destino; toque aquella puerta.
-Adelante-dijo distraídamente mientras guardaba sus cosas en un maletín-espero y sea algo importante, estoy a punto de irme-
-¿Por que será que toda la gente está demasiado ocupada para darme u minuto?-pronuncie y en cuando escucho mi voz volteo y corrió a abrazarme.
-Bella que alegría verte, pero ¿qué te trae por aquí?-dijo al soltarme e invítame a tomar asiento mientras él se apoyaba en su escritorio esperando mi respuesta.
-¿Qué acaso aún no sabes?-dije haciéndome la tonta.
-Hmp, discúlpame pero no-
-Bueno, resulta que Jake y yo volvimos Forks a trabajar aquí-dije, no se hizo esperar la sonrisa de Jasper quien alegre volvió a abrazarme.
-Alice se va a volver loca cuando te vea ¿hace cuánto que no se ven? desde la boda de mi hermana-
-A si es, hace poco vi a mi hermano y a Rose, sabes que habló cada vez que puedo-me excuse.
-Yo diría cada vez que te acuerdas que tienes familia-se quejo.
-Tal vez, pero agradezco estar aquí ahora, soy una persona diferente-
-Se nota. Sólo mírate, ¿qué ahora eres una renegada?-dijo mientras veía mi aspecto un tanto rebelde como él decía.
-Eso parece, por cierto sabes en ¿dónde puedo encontrar a Esme?-
-Debe estar en la casa-
-Bien voy a saludarle y después con Jake; los cuartos en casa de Charlie están ocupados y tengo que conseguir en donde pasar la noche-dije sin darle oportunidad de brindarme ayuda, no la necesitaba.
Había pasado tanto tiempo con Jake, él y yo siempre solos, saliendo adelante, sin ayuda de nada ni nadie; ahora él y yo éramos personas reconocidas y no necesitábamos de la ayuda ni lastima de nadie.
-Puedes quedarte en casa de Esme y Carslie seguramente a ellos no les molestara, sabes que siempre hay un lugar en esa casa para ti-
-Gracias Jasper, pero yo sabré como arreglar las cosa, yo puedo sola-dije parándome para irme.
-Veo que eres más necia que nunca-
-Jasper soy autosuficiente, esa es la palabra-dije antes de salir de su despacho con la frente en alto.
El camino hacia la casa Cullen fue deprimente, sentía que el pecho se me oprimía como en antaño; sabía muy bien a que se debía, pero me negaba a flaquear delante de aquel hombre que sentí como el amor de mi vida.
Cuando detuve la moto frente aquella casa recapacite, jamás me dejaría vencer por el ego y palabras falsa de Edward Cullen. Y al levantar la vista lo vi, estaba cerrando la puerta con aquel aire sin vergüenza tan característico de él y recordando que no era la chiquilla que alguna vez pisoteo; si no la mujer que todos volteaban a ver al pasar, aquella de la que todo mundo esperaba mucho y que sin pensarlo pasaba por donde fuera contoneando su figura con seguridad; la misma que había obtenido después de pasar tanto tiempo con Jake.
Sabía que todos tenia la razón, ahora me parecía tanto a Jacob Black, que si alguien me lo habría dicho jamás lo hubiera creído.
Y con mi recién adquirida gracia me acerque hacia el-Hola Edward ¿está tu mamá?-dije, el solo se paralizo y sin disimulo alguno recorrió mi cuerpo-¿qué Edward te comió la lengua el ratón? o simplemente se te olvido como se tiene que hablar-me mofé en su cara.
-Ahh perdón ¿qué querías?-dijo pretendiendo reponerse de aquella impresión.
-Hombre tenias que ser-dije al ver que no despegaba su vista de mi cuerpo-¿qué si se encuentra Esme?-pronuncie lentamente enfatizando con un poco de burla en mi voz.
-A no, se encuentra en casa de Emmett-después de eso no me moleste en vánales despedidas e hipócritas intensiones, di la vuelta hacia mi moto.
-Ei, pero no sabes donde viven-dijo en un intento de tener el control, para su desgracia yo sabía perfectamente en donde vivían. De las pocas veces que había venido a Forks solo había pasado a visitar a mis padres y al recién formado matrimonio Swan.
-Claro que lo sé, del lado oeste de la casa, cruzando el rio-dije antes de ponerme el casco y haciendo gala de mis facultades di una vuelta y desaparecí a gran velocidad por el bosque.
Toque la puerta de la gran casa conocida hace un par de meses y espere a ser atendida, lo que nunca espere fue que me abriera mi pequeña sobrina.
-Tía Bella-se echo a mis brazos y tras ella venia Esme un tanto agitada de seguirle el paso a la pequeña traviesa.
¿Como ven a Bella? Pues creo que Bella me encanta esta segura y no tiene miedo, tal vez sea un poco agresiva sobre todo con Edward, pero creo que la mayoria actuaria asi si le hicieran algo parecido...las cosas realmente han cambiado mucho ya lo veran eee
Bien cuidense besos...