Disclaimer: Los personajes de esta historia no son propiedad mia, sino de J.K Rowling. Yo solo los tomo prestados...
Esta historia la había comenzado a subir hace eones pero por un millar de cosas la deje, cuando la iba a retomar donde la deje note que había algunos errores así que la estoy cargando de nuevo desde el inicio, espero que les guste sin mas aquí el primer capítulo.
Besos... y gracias.
Marcas.
Prólogo
Todo era oscuridad, hasta que un travieso rayo de luna logró colarse entre las ramas de los frondosos árboles que rodeaban uno de los tantos claros del Bosque de los Lamentos.
Gracias a esta pequeña luz, se pudo distinguir a dos personas en el centro del claro. Cada una cargaba un pequeño bulto; parecían estar huyendo de algo, algo muy grande y peligroso. Ahí, al centro del claro, se detuvieron.
Lo que parecía ser un hombre joven y de buen porte, colocó su mano sobre el bulto que sostenía y una resplandeciente luz rodeo el bulto. Seguidamente, colocó su mano de la misma forma sobre el otro bulto que cargaba la otra persona, que por su complexión podría ser una mujer, e hizo lo mismo. Al terminar, ambos se miraron antes de continuar con su huida, pero un intenso rayo se los impidió. El hombre le pasó el bulto que cargaba a la mujer y giró hacia donde había provenido el rayo.
Todo era tétrico, el ambiente se sentía denso y pesado. Se escuchó una estridente risa que cortaba la respiración y enmudecería a cualquiera. El silencio en el que estaba sumido el bosque lo hacía todo más tenebroso… Se escucho otra risa, más fuerte, más cerca; ahora se mezclaban con los sollozos casi imperceptibles de la mujer. Una explosión. Una luz cegadora…
Un grito cortó el silencio de la noche. Una joven castaña se incorporó de la cama, sudaba frió. No sabía lo que ese sueño significaba, pero cada que lo tenía despertaba de la misma manera: alterada, asustada, sudorosa y gritando. Pero más importante, no entendía de que se trataba, no conocía a esa pareja, ni ese bosque, no comprendía que tenía que ver con ella o si es que tenía algo que ver con ella; aun así todo le resultaba tan familiar.
Era una calurosa noche de verano, pero eso era algo normal en Atenas. Hermione había viajado ahí junto con sus padres, ya que el hermano menor de Jane, su madre, vivía ahí con su familia y fueron a visitarlos.
Se levantó con cuidado de la cama colocándose las zapatillas de noche, para dirigirse a la mesita en la esquina de su habitación. Tomó el vaso junto a la jarra de agua y procedió a llenarlo, para después tomarlo y dirigirse de nuevo a la cama e intentar dormir un poco más, ya que el reloj despertador que se encontraba junto a su cama anunciaba que eran apenas las 3:00 de la mañana. Antes de volver a dormir, dirigió su mirada hacia el cielo aun estrellado de Atenas, para después caer dormida con una sonrisa en el rostro.
Lo que Hermione no sabía es que a miles de kilómetros de ahí, otra persona se levantaba sobresaltada y tratando de controlar su agitada respiración.
Eso es todo, espero les haya gustado. Se que es cortito pero solo es el prólogo, una pincelada de lo que esta historia tratara.
Agradecería mucho que dejaran Review diciendome que les pareció.