Disclaimer: Yu Yu Hakusho pertenece al gran Yoshihiro Togashi.
Este escrito es un reto express del foro El abrevadero.
Hada madrina
.
.
.
Era un extraño nombre. Le sorprendió al verlo. Sin embargo, luego de reflexionarlo un poco, Kurama le encontró todo el sentido del mundo. Shizuru era una esteticista, y era realmente buena en lo que hacía, entonces podría decirse que hacía milagros o cumplía deseos. Al menos eso había escuchado él de algunas jóvenes que salían del lugar.
Al poner un pie en el salón, ella se sorprendió. En realidad, ambos se sorprendieron. A la fémina le costaba creer que a Kurama le interesara embellecerse, y él casi ni se había dado cuenta que había terminado ahí. Es decir, su llegada había sido casi por inercia, algo lo había arrastrado hasta ese lugar.
Tal vez sus deseos más recónditos.
—Es tu cabello, ¿verdad? —habló ella.
Él parpadeó confundido.
Ella encendió un cigarrillo y exhaló.
—No puedo imaginar otra cosa —siguió hablando. Kurama no necesitaba ayuda con su apariencia, solo tal vez un baño de crema para sus puntas dañadas.
Kurama sonrió al entender.
—Así que Hada madrina.
—Así me dicen —declaró, no muy orgullosa del apodo que le habían puesto—, así que decidí ponerle ese nombre al salón. Ya sabes, me trae clientes.
—¿Será que puedes cumplir mi deseo?
Shizuru dio otra bocanada al cigarrillo.
—Tal vez.
—Una cita —dijo con una mirada más propia de Youko que de Kurama.
Ella se quedó un rato en silencio hasta que el cigarrillo terminó de consumirse.
—Con una condición —finalmente dijo—, vendrás al menos una vez por semana a mi salón para hacerte un baño de crema.
—Hecho —aceptó él de inmediato.
—Bien, te veo luego entonces.
Kurama estaba a punto de irse luego de un saludo con la mano, pero decidió dejar que Youko se apoderara un poco más de su personalidad.
Y el despreocupado semblante de Shizuru fue corrompido de repente.
—Adiós, Shizuru… —susurró el demonio zorro muy cerca de ella para luego marcharse con una sonrisa traviesa.
Los labios de Shizuru ardían.
