CAPITULO 1

Un despertar como cualquiera...

Desperté aburrido de vivir, fui al trabajo de mi padre en la carpintería, otro día de trabajo forzado esta vez tenia que cortar cuarenta tablas para un encargo, nunca me imagine que ese día cambiaría mi vida para siempre.

Mi padre, el típico hombre que solo quería follar, y si, de ahí salí yo, desde aquel día lo único que hace es tomar, porque si sabe que si se va mi madre se lo llevara todo, de todas maneras no es mucho, una casa hecha de madera, un viejo televisor, ni siquiera un baño... mi madre de todas maneras es la típica ejecutiva de tercera con un salario miserable trabajando para un gordo de mierd que lo único que hace es atribuirse el crédito de todo el trabajo que mi madre ha hecho.

Ya iba por la tabla numero veinte cuando un pequeño error, un simple descuido, tenia sed...

Estaba mareado,por el olor de la carpintería, solo quise tomar un poco de agua, iba a usar mi brazo derecho, por el hecho de ser diestro, cuando me di cuenta de que nunca había tocado el vaso, así que mire donde estaba el vaso, en el mismo lugar donde lo deje, pero mi mano no estaba...

Pronto entre en desesperación, camine hacia afuera buscando a alguien que me llevara, sabia que si mi padre me estuviera viendo lo único que haría seria poner una curita sobre la herida, es lo único que sabe hacer a parte de la carpintería, un trabajo que heredo de mi abuelo.

Me desmalle en media acera, cuando deperte lo unico que vi fue una silueta de alguien que nunca habia visto, estabamos en un auto, a pesar de mi vista limitada por la perdida de sangre, pude notar que era un auto lujoso tenia un signo de mercedes-benz en la parte delantera y los asientos eran de cuero. En ese momento ame a ese hombre, pude ver que no le importo manchar sus asientos con sangre de un desconocido, que no le importo recogerme y salvarme la vida, incluso lo quise mas que a mi propio padre, el solo realizo una accion en quince minutos de mi vida que me han conmovido mas que todos mis 14 años de vida.