Hola, esta es mi primer historia, parte de mi esta en ella, espero que la tomen bien y que les guste.

Disclaimer: Los personajes obviamente no son mios, pertenecen a JK.

Capítulo #1

Ella estaba sentada en su escritorio pensando en todo lo que había pasado en los últimos dos años, porque él ya no quiso compartir su vida con ella y su hijo.

FLASH BACK

Eran finales de abril y después de un día largo entre el trabajo y el niño, estaba muy cansada, pero eso no significaba que no esperara a su esposo como todas las noches, que últimamente era más tarde cada vez, como si no quisiera llegar a su casa, ella sabía que las cosas no estaban bien y que algo estaba pasando entre ellos.

Después de un rato, escucho un ruido en la ventana y era una lechuza con un mensaje de su esposo, diciendo que no lo esperara que iba a salir con su amigo Blaise a tomarse unas copas, Blaise era amigo de su esposo desde que eran niños, además de que estudiaron en la misma casa cuando estudiaban en Hogwarts.

Ella guardo el mensaje y subió a su recámara y como era su costumbre tomo un libro y sentó en un silloncito que tenía ahí y empezó a leer y sin darse cuenta se quedo profundamente dormida, estaba muy cansada, además tendría un día muy pesado, le esperaba una recepción en casa de sus suegros, que aunque no aceptaron muy bien el que su hijo se casara con ella, después de que la conocieron tuvieron que aceptar que era un buena mujer y cuando nacio Fausto, fueron mucho mas felices y se llevaban bien.

Cuando el llego a su casa, llegó con mucho sigilo y muy despacio, entro a su habitación y vio con sorpresa a su esposa dormida en el sillón, el solo sonrió y la llevo hasta la cama, el llevaba su rubio cabello un poco despeinado, no era normal en el, ya que el siempre lo traía impecable y tambien traia cara de preocupado, ella desperto en los brazos de su esposo.

- Hola mi vida como te fue con Blaise?

- Bien Mia muy bien, ya sabes como es Blaise.

- Vamos a dormir mañana nos esperan tus padres muy temprano para la recepción de su aniversario.

- Es verdad no me acordaba, vamos a dormir.

El se quito la ropa y se puso un pantalón de seda verde que usaba como pijama y se recostó junto a su esposa.

Al otro día despertaron tarde, ya que el despertador se había apagado, a pesar de que eran magos usaban algunas cosas muggles que ella había incorporado a su vida, Fausto ya estaba despierto por lo que lo metieron a bañar y se apresuraron a irse a la mansión Malfoy, la casa de los padres de él.

Cuando llegaron a la mansión Malfoy lo hicieron por la red flu, ya los estaban esperando, los preparativos estaban muy avanzados y todos estaban corriendo. Ese día no iba a ser un día normal para nadie, ella lo descubriría mas tarde.

FIN DE FLASHBACK

Ella seguía con sus pensamientos en ese fatídico día cuando escucho ruidos en la ventana, para darse cuenta de que era la lechuza de su mejor amigo Harry, Hedwig, que le traía una carta de él, se la quito y la empezó a leer.

Herms:

Te envío este mensaje para recordarte que mi fiesta de compromiso con Ginny, es este sábado y me encantaría verte ahí, recuerda que es en La Madriguera a las 5 de la tarde y no te olvides de mi ahijado, me gustaría mucho verlo.

Un beso

Harry

Ella sonrió y escribió la contestación, ya que suponía que esperaba una, ya que Hedwig no se movió de ahí.

Hary:

Claro que no se me ha olvidado, no me has hablado de otra cosa en semanas, ahí estaré sin falta.

Con cariño

Hermione.

Aunque ella no tenía ganas de de ninguna fiesta, no le podía fallar a su amigo y menos tratándose de su fiesta de compromiso, le entregó la carta a Hedwig, la cual salió por la ventana alejándose de ahí.

No tenía ánimos de nada, extrañaba mucho a su aún esposo, después de esos dos años no se había decidido a pedirle el divorcio a pesar de que ya no vivían juntos, ella tenía la esperanza de que volverían a ser la familia que siempre espero. Aunque se veían de vez en cuando nunca platicaban, ya que él solo iba por su hijo para llevarlo a pasear, precisamente ese día Fausto estaba con su papá. Ella regreso a sus recuerdos.

FLASHBACK

Narcisa fue la primera en recibirlos, Fausto corrió y le dio un gran abrazo a su abuela, el niño era igualito a su padre, cabello rubio, casi amarillo, sus ojos eran una combinación entre el gris de él y el ámbar de ella, gris en el centro y ámbar alrededor.

- Como esta mi nieto preferido – le dijo Narcissa dándole un gran abrazo al niño.

- Ay abuela soy el único – le contesto el niño y le dio un beso en la mejilla.

- Llegan a tiempo tenemos que terminar de preparar la casa, aunque tenemos mucha ayuda, nunca esta de mas un poco. Hola Herms, como estas? Te ves muy bien – dijo Narcissa, abrazando a su nuera.

- Muy bien Narcissa muchas gracias – contesto la castaña regresándole el abrazo a su suegra.

- Que para mi no hay un saludo? – intervino el rubio.

- Hola Draco hijo como estas? – a él solo le dio un beso en la mejilla y se separo, entre ellos no eran muy comunes las demostraciones de cariño.

Estaban en los saludos cuando entró por la puerto un muy nervioso Lucius con un traje negro de gala impecable, pero la corbata a medio hacer.

- Cissy, donde estabas, te he estado buscando por toda la casa, necesito ayuda con esto – se dirigió a su esposa y le señalo la corbata, sin percatarse de que su hijo y familia estaban ahí.

- Lucius, cariño, tu hijo esta aquí, van a decir que eres un grosero – le contestó Narcissa acercándose a su esposo y arreglándole la corbata.

- Draco, Hermione, como están? Llegan tarde, ya saben que no me gusta la impuntualidad, además todavía no están arreglados, vamos suban a su habitación a vestirse. – alcanzó a decir Lucius.

- Lo sentimos padre, ahora mismo vamos a arreglarnos – contestó Draco dirigiéndose a la segunda planta donde tenían su habitación cuando visitaban la Mansión, quiñándole el ojo a su mamá.

Fausto ya se había ido a arreglar, ya que como una familia de recursos, el tenía una persona que lo ayudaba en todo y lo cuidaba, Violeta, por lo que Hermione solo tenía que preocuparse por ella y su esposo en ese momento.

Cuando bajaron la gente ya empezaba a llegar, así que juntos se acercaron a saludar a varios amigos de la familia. Entre esas personas se encontraban personalidades muy importantes dentro del Mundo Mágico, también ex-compañeros de Hogwarts, entre ellos Blaise, por lo que se acercaron hasta donde estaba el acompañado por su prometida.

- Hola Blaise te diviertes? Pregunto Draco en un tono sarcástico.

- Si mucho amigo, no sabes cuanto – contesto Blaise en el mismo tono – Hola Hermione que guapa te ves esta noche - volteo a verla la saludo con un beso en la mejilla.

En eso estaban cuando oyeron una voz bastante chillona que identificaron bastante bien, era Pansy Parkinson, ex-compañera de Draco en Hogwarts y eterna enamorada de él.

A Hermione no le gusto nada que ella estuviera ahí, pero tomando en cuenta que los papas de ella eran muy amigos de los papas de Draco no dijo nada mas.

- Hola Draquito como estas? – dijo ella con una voz muy melosa que a Hermione le saco de quicio.

- Hola Parkinson, cuantas veces te he dicho que soy Draco, Draco – le contesto él bastante molesto.

- Nos vamos mi vida, creo que tus padres nos están buscando, con permiso – dijo Hermione, con un tono bastante calmado para como se sentía.

- No la soporto, te juro que por mas que trato de aguantarla, nunca he podido, no me da buena espina como se te acerca. – le comentó Hermione a su esposo, mientras se alejaban hacia el otro lado del salón donde se estaba llevando a cabo la fiesta.

El solo sonrió y le dio un tierno beso en los labios y le dijo que no se preocupara que él solo tenía ojos para ella y que la amaba demasiado como para fijarse en alguien mas.

Ella le devolvió el beso y caminaron hasta la pista de baile ya que los músicos habían empezado a tocar y todos comenzaban a bailar.

FIN DE FLASHBACK

El sábado llego muy rápido y ya se estaba alistando para ir a La Madriguera para la fiesta de compromiso de dos de sus mejores amigos, Harry y Ginny, ya estaba lista y bajando las escaleras cuando sonó el timbre, ella grito que abría la puerta, así que fue hacía ella y cuando abrió se llevo una gran sorpresa.

Era Draco.

Parado ahí en el marco con su cabello peinado hacia atrás, esos ojos gris que tanto le gustaban y ese porte elegante que lo caracterizaba, cuando vio que era su esposa la que abría la puerta solo le sonrío.

- Hola Draco, si vienes por Fausto, te dije que hoy no lo podrías ver, porque tenemos un compromiso, así que te pido que te retires – le dijo la castaña antes de que el pudiera decir algo.

- No Mia, no vengo por Fausto, de hecho vengo a platicar contigo, puedo pasar?- le contesto el rubio.

- Pues no creo que tengamos nada de que hablar tu y yo, creo que ya nos dijimos todo lo que teníamos que decirnos y claro que no puedes pasar – le contesto ella, con un tono agresivo.

Cuando el le iba a contestar, escucho a su hijo quien ya se había dado cuenta de que el estaba ahí, por lo que ella tuvo que hacerse a un lado para dejar pasar a Draco.

- Papi, Papi, que bueno que estas aquí, llegas a tiempo, ya nos vamos a casa de tío Ron y tía Ginny para una fiesta, vas a ir con nosotros? – pregunto el niño con una carita de ilusión.

- No hijo, no los voy a poder acompañar, solo pase a saludarlos, como estas campeón? – le dijo Draco con un tono triste en su voz.

- Bueno, pues ya vámonos, despídete de papi y ve por tus juguetes y tu capa, dile a Violeta que ya este lista, ya nos vamos. – dijo Hermione volteando a ver a su hijo y después le lanzo una mirada asesina a Draco – para otra vez que vengas deberías de avisarnos para poder atenderte como se debe – le dijo a su esposo, dándose la vuelta y dejando a Draco ahí parado.

- Mione, le habló Draco – por favor ya no estes enojada conmigo –

Ella que no había volteado cuando escucho su nombre pero si se detuvo mientras el seguía hablando.

- Necesito que me perdones, ya te explique lo que paso, por favor que puedo hacer para que me perdones- preguntó el rubio.

Después de esas palabras, ella se volteo lentamente y con todo el coraje que se había guardado le grito a Draco.

- Solo déjame en paz, no quiero saber nada mas de ti, para lo único que tienes que venir a esta casa es por Fausto, por lo que de hoy en adelante Violeta te lo llevará a tu departamento para que ya ni para eso tengas que venir, así que con permiso tengo un compromiso.

Ella se alejo con los ojos llorosos, dejando a Draco en la puerta. Draco se dio la vuelta y salió de la que alguna vez fuera su casa, ahí había pasado los mejores momentos con la mujer a la que amaba, a la que ahora estaba perdiendo por una estupidez, por una aventura, que ni siquiera tuvo que haber pasado. Y se fue se alejo con los ojos llenos de lágrimas al departamento donde vivía solo a llorar la ausencia de su amada y a pensar lo que iba a hacer para recuperar a su esposa, a su mujer.

Después de que escucho la puerta cerrarse, se soltó llorando porque lo extrañaba, porque lo necesitaba, porque le hubiera gustado decirle que si lo perdonaba, que regresara, que fueran la familia que eran, pero su dignidad se lo prohibió, después de lo que vio esa noche, no lo podía perdonar y no lo iba a hacer.

Llamo a Violeta y a Fausto para irse, aunque no tenía ganas de ir, tampoco se iba a quedar a deprimirse ahí.

Cuando llegaron a La Madriguera, vieron que ya todos estaban ahí, al parecer solo los esperaban a ellos, Harry fue el primero que la vio y corrió a saludarla.

- Herms, que te paso, donde estabas ya hace rato que te esperábamos - le dijo Harry, mientras le daba un abrazo, el se dio cuenta que algo le pasaba y que tenía los ojos llorosos, pero no le preguntó, porque se imaginaba porque estaba así.

- Lo siento Harry, pero tuvimos visitas de último momento – le contesto Hermione, en ese momento entraba Fausto por lo que Harry ya no le pregunto nada mas.

- Hola padrino – dijo Fausto, mientras corría a los brazos de su padrino.

- Fausto, cuanto tiempo sin verte, estas enorme – le dijo Harry mientras lo cargaba y lo llevaba al jardín donde estaban todos los demás.

Hermione camino atrás de ellos y también salió al jardín y vio como Fausto se acercaba a jugar con los demás niños, Molly Weasley se acerco a ella y la saludo como siempre, muy efusiva y amorosamente. La castaña solo sonrió y fue a sentarse junto a Ginny, quien estaba muy nerviosa por la fiesta de compromiso.

- Hola Herms, te estábamos esperando, mi novio no quería empezar si tú no llegabas, dice que eres su única familia y que tenías que estar aquí. – le dijo Ginny al oído.

- Gracias por esperarnos Ginny, tuve un contratiempo en casa que hizo que me retrasara, pero ya estoy aquí – le contesto la castaña con una mirada triste.

- Draco verdad?, aún te sigue buscando, después de todo lo que paso? – preguntó su amiga.

- Si, Ginny, todavía me busca y creo que me esta convenciendo de regresar con el, pero todavía lo tengo que pensar, de hecho estoy pensando en tomarme unas vacaciones para pensar las cosas- fue lo único que alcanzó a contestar las castaña, ya que en ese momento tomaba la palabra Harry.

- Atención amigos, los hemos reunido esta tarde – dijo Harry mientras estiraba la mano para llamarle a su novia – para decirles que Ginny y yo finalmente nos vamos a casar, supongo que todos ya estaban esperando la noticia, pero creo que ahora es el momento de hacerlo, el Mundo Mágico ya no esta en peligro y nuestras vidas son mas tranquilas ahora, por lo que – dijo Harry volteando a ver a Ginny, - Quieres ser mi esposa - Ginny se quedo callada unos segundos antes de responder y Harry se puso mas nervioso de lo estaba – Por favor – suplico Harry.

Ginny sonrio y abrazo a su novio – Claro que quiero casarme contigo Harry Potter y estar contigo por el resto de mis días. – contesto la pelirroja, antes de darle un beso apasionado a su ahora prometido.

La fiesta paso sin mas percances, Hermione se sentía tranquila, escuchando las historias que tenían que contar los gemelos y viendo como su hijo se divertía con los sobrinos de Ginny, que para ese entonces ya eran bastantes, se puso a recordar a Draco y ese horrible día, como le recordaba su hijo a su esposo, eran como dos gotas de agua.

FLASHBACK

Ya estando en la pista de baile, Pansy se acerco a Draco y le dijo algo en el oído, que solo él escucho y siguió de largo.

- Y ahora que quiere, que no ves que estas conmigo, que ni eso respeta la muy … - alcanzó a decir la castaña antes de que Draco la callara con un beso apasionado.

- Te Amo – le dijo él después de que corto el beso.

Así transcurrieron algunas horas en las cuales estuvieron bailando y bebiendo y conviviendo con todos en la fiesta, llegó un momento en el que se separaron y cada uno estuvo por su lado. Hermione estuvo buscando por todo el salón a su esposo sin éxito, cuando se encontró a Blaise y se puso a platicar con él mientras esperaba a su esposo.

- Que tal va todo Hermione – preguntó Blaise.

- Bien Blaise, todo bien, que tal ustedes ayer? A donde fueron, ya no tuve tiempo de platicar con Draco – dijo la castaña como si nada pasara.

- Anoche? – pregunto extrañado Blaise.

- No salieron anoche? Draco me dijo que iban a tomar unas copas y llego bastante tarde. – pregunto extrañada Hermione.

- Este, la verdad es que no Hermione – contesto Blaise muy nervioso y temiendo el castigo que le daría su amigo cuando se enterará.

- Entonces con quien estuvo anoche Draco?, gracias Blaise muchas gracias, me retiro.

Blaise le iba a contestar algo, pero ella ya iba muy lejos, de hecho se dirigía hacia la segunda planta a su habitación, no queria que nadie la viera así, se sentía decepcionada y quería saber porque Draco le había mentido y que es lo que realmente estuvo haciendo esa noche, pero eso se lo preguntaría en cuanto apareciera por la puerta de la habitación.

Paso por la habitación de Fausto para darle las buenas noches, se acerco a su camita y lo vio ahí dormido como un angelito, se acerco y le dio un beso en la mejilla para después dirigirse a su habitación que se encontraba en el otro pasillo.

Iba hacia su habitación cuando escucho ruidos muy extraños en otra de las habitaciones del ala donde estaba la recámara de Fausto, se acerco y sin hacer ruido abrió la puerta y entro casi de puntitas, pero no esperaba ver lo que encontró, era Draco, su Draco en la cama con la mujer que mas odiaba, si con Pansy Parkinson, ellos no se habían dado cuenta de que Hermione por lo que seguían, Pansy gemía y gritaba el nombre de Draco, Hermione se quedo paralizada al ver esa escena, no se podía mover y mucho menos hablar, quería gritar, decirle a Draco que era un estupido, que como era capaz de haberle dicho un par de horas antes que la amaba y que nunca se fijaría en nadie mas.

Quiso salir de ahí, pero cuando se acercaba a la puerta Pansy escucho un ruido y volteo y entre gemidos grito.

- Bienvenida sangre-sucia, finalmente te enteraste de lo nuestro.

- Que? – dijo Draco volteando también a la puerta y viendo que su esposa estaba parada ahí viéndolo con decepción, tristeza, coraje. Él se quito de encima de Pansy y quiso alcanzar a Hermione, pero ella fue mas rápida porque ya había salido de ahí yendose a la recámara de Fausto donde se encerró para que el no pudiera decirle nada, al otro día se irían ella y su hijo muy temprano sin dar explicaciones.

FIN DE FLASHBACK

Hermione estaba absorta en sus pensamientos y no se dio cuenta que alguien se acercaba hacia ella.

- Hola Herms, cuanto tiempo sin verte – le dijeron

- Hola Ron, no te vi. llegar, como estas?, como esta Luna y los niños? – dijo la castaña sonriéndole y dándole un fuerte abrazo a su amigo.

El pelirrojo le devolvió el abrazo y le dio un beso en la mejilla.

- Todos están muy bien, gracias, pero ven a verlos por ti misma, ellos también te extrañan mucho. – le contesto su amigo.

- Vamos, los gemelos deben de estar enormes. – dijo la castaña, caminando junto a Ron hacía el jardín donde se estaba llevando a cabo la reunión.

Hermione, pasó el resto de la tarde, platicando con sus amigas Luna y Ginny y se olvido por unos momentos de lo triste que se sentía.

Los asistentes a la fiesta se fueron retirando poco a poco hasta que solo quedaron Harry, Ginny Ron, Luna y Hermione, los niños ya se habían dormido y decidieron que los dejarían dormir y se irían temprano al día, por lo que se disponían a dormir, Hermione y Ginny se quedarían en la habitación de esta, Ron y Luna en la que había sido la habitación de Ron y Harry, se quedaría en el sillón, ya que el cuarto que estaba disponible que era el de los gemelos, estaba ocupado por los niños.

Ya en la recámara de Ginny estaban muy calladas, pero Ginny no podía quedarse así con la duda de que le pasaba a su amiga, a la que siempre había sido su compañía.

- Herms, que te pasa? Te he notado muy ausente - preguntó la pelirroja.

- Ay Ginny, no se que voy a hacer, extraño mucho a Draco, no puedo estar mucho tiempo sin él, además para colmo hoy antes de venir para acá, fue a la casa con el pretexto de que quería ver a Fausto, pero no lo deje hablar, me cuesta mucho trabajo perdonarlo, si no lo hubiera visto, talvez todo sería diferente.

- Amiga, debes de darle tiempo, se que esto que pasó ya tiene casi dos años, además en este tiempo, el te ha demostrado que ya no esta con Pansy y eso debería de darle puntos, ni siquiera le has dado la oportunidad de explicarte, simplemente lo has estado evitando y perdón que te lo diga, pero tu has sido muy injusta con él.

- Injusta dices?, y yo que? Donde quedo, se supone que él fue el que me engaño y todavía me dices que soy injusta – contestó la castaña bastante moleta.

- No digo que todo este a su favor, pero algo tuvo que haber pasado para que pasara lo de él y Pansy, tu sabes como se las juega ella y además que casualidad que justamente el día que están ahí, casualmente los encuentras, yo no creo que Draco sea tan estúpido como para hacer eso. – dijo Ginny con cara de estar analizando las cosas.

- Pues si en eso tienes razón Ginny, pero que debo hacer, siento que debo de darle la oportunidad para hablar, pero también recuerda que Pansy me busco y me dijo que ya tenían mucho tiempo con esa relación – contesto Hermione.

- Si, pero tu sabes como es esa mujer, todo lo cambia y puede inventar muchas cosas con tal de salirse con la suya, ella siempre quizo a Draco para ella y cuando él decidió estar contigo, ella no se quedo nada bien, aparentemente acepto su relación y busco la manera de separarlos y por lo que veo lo esta logrando, porque ya no están juntos, aunque se amen y se adoren, piénsalo Herms no es normal eso que paso. – dijo la pelirroja antes de darse la vuelta para ya dormirse.

- Creo que eso será lo mejor pensarlo y como tu dices, descartar todas las posibilidades, ahora a dormir, buenas noches – dijo la castaña bostezando

Diciendo esto se quedaron dormidas, Hermione estaba durmiendo como hacía mucho tiempo no lo hacía, después de haberse desahogado con su mejor amiga.