Hola! Cualquier ayuda será aceptada siempre y cuando no sean comentarios ofensivos, saludos y espero que lo disfruten. Espero que les guste..
Los personajes no me pertenecen, son de Rumiko Takahashi, pero esta historia si.
Junto a mí
En la época sengoku…
Una chica caminaba entre los árboles de un gran bosque. Era alta, de figura esbelta, pelo largo color azabache en el que al final caían unos graciosos rizos y con un par de ojos color chocolate en los que cualquiera se perdería. Vestía una hermosa yucata corta color blanca y como toque final, tenía unas perlas decorativas.
Al llegar a un claro, se sentó en una gran roca y observó el oscuro cielo por un momento. De su ojo brotó una fina lagrima, rodó por su tersa mejilla y luego se la secó. Las estrellas titilaban como si compartieran un secreto con ella. Miró al cielo una vez más y se dejó llevar por el cansancio al eterno paraíso de los sueños.
...
-La chica ya llegó.- Dijo Urasue, una vieja oráculo. Hace ya varios años se conoce sobre una profecía. La anciana pronunció unas palabras en una extraña lengua, luego la luz se fue..
...
Mientras tanto, en el castillo del este..
Se podía divisar, en un amplio jardín, a un joven de cabellos largos platinados en el que arriba se encontraban dos tiernas orejitas de perro, con unos raros ojos ámbar. Su cuerpo era delgado pero tenía la musculatura necesaria para hacerlo ver muy sexi. Llevaba un hakama (pantalones) blusados en los tobillos, una chaqueta con mangas "separadas", un kosode (camisa), y un obi (cinturón) color rojo. Este era de una personalidad muy aspera, jamás usa honorificos y se puede decir que solo hace lo que él quiere.
Él estaba practicando con Tessaiga, la espada que su padre le había regalado por su cumplimiento de su mayoría de edad. Este le advirtió que solo la tendría que usar para casos de emergencia y que, ya que le había dado tan preciado obsequio, tendría que, por lo menos, mejorar su actitud aunque sea, un poco. Pero, como siempre, este hiso oídos sordos a las reglas de su padre, el gran Inu No Taisho.
Y si, de quien estoy hablando es justo de la persona que te estás imaginando, Inuyasha.
-Hijo, prepárate que mañana viajaremos al castillo del Sur a visitar a mis amigos.-
-Miroku vendrá conmigo, de otra forma, estaré muy aburrido-
-De acuerdo, el vendrá, con la condición de que no sea tan libidinoso con las jóvenes de allí.-
-Feh, yo me encargo de eso.-
Miroku era el mejor amigo de Inuyasha desde niños. Era un plebeyo, ya que Inuyasha era el príncipe de las tierras del Este. Como ya sabrán, es un libidinoso que, a la primera chica que se le cruza, le pide tener un hijo o, su mano atrevida tocara, bueno, este.. ya saben que parte de ella.
Inuyasha sabía que el viaje al castillo de los amigos de su padre era, para arreglar el compromiso entre él y la hija de ellos. De su nombre, no se acordaba, solo sabía que, de pequeños, ni se podían ver. Él siempre dijo,-esa niña es una malcriada, caprichosa, fea e insoportable que jamás e visto.- y con eso, ya les resumí todo. Pero hace ya bastantes años, demasiados si se podría decir, que no sabe nada sobre ella, aunque eso es lo menos que le importaba en este momento.
Su viaje empezaría mañana por la mañana….
Continuara…
Espero con ansias, los reviews con sus opiniones. Si quieren, pásense por mi perfil para que me conozcan un poquito más. Saludos a todos y, espero encontrarlos en otros fics.