El regalo del aumento de años

Para la mejor hermana que pude haber pedido

StraySoul, ya sabes quién eres.

Este one-shot es especial… mucho, pues parte de esto lo escribí en mi recreo y por eso deje de lado la plática (y la comida) xD.

Bien, quiero decir que este FF es para mi hermana mayor, que gracias a ella (o por su culpa) empecé a leer libros de fantasía, luego a escribir y después llegar a FF.

Ella cumple años, y por eso le doy este pequeño regalo (tal vez algo mas) con mucho cariño.

Todo es de J.K. Rowling, lo que no reconozcan salió de mi alocada mente.

Canción recomendada: Hoy en tu cumpleaños, de Fernando Delgadillo.

¡Por Merlín! Espero te guste.


¡Dom! Tranquilízate y dime que sucede –suplico Rose por tercera vez.

Desde hacía una semana su prima se comportaba de un modo muy extraño (paranoico) y el menor ruido la llegaba a asustar.

Dominique camino de lado a lado por el departamento de su querida prima pensando si pedirle ayuda a no a Rose.

-Yo… -empezó Dominique asustada -¡Me preocupa no darle un buen regalo de cumpleaños a Victoire! –Soltó la Weasley, frustrada.

-Oh vamos Dominique, ¿Te preocupa no darle un buen regalo? ¿Desde cuándo te interesa eso? – dijo Rose divertida, "Oh Merlín, a Scorpius le encantaría ver esto" pensó.

- ¿Desde cuándo? ¿Desde cuándo? –Dijo Dominique aumentando su tono de voz - ¡Desde siempre! ¿Es que nunca me notabas nerviosa por estas fechas? Entonces soy la mejor actriz –ironizo Dominique - ¡Es mi hermana mayor! Y por mucho que la moleste o me moleste me importa y tú… ¡Tú tienes toda la culpa!

- ¿¡Que!? – Rose abrió los ojos como platos - ¿Cómo demonios va a ser mi culpa que ames a tu hermana?

- No, eso no Granger… Tú tienes la culpa de que no le he dado el mejor regalo de cumpleaños, y ahora… ¡Ahora pagaras por tus crímenes y me ayudaras a buscar el regalo para su aumento de años!


Rose miro de lado a lado la calle.

Ni rastro de Dominique. ¿Qué le pasaba a esa chica? La obligaba a ir a ayudarla a buscar el regalo de su hermana y encima llegaría tarde.

Rose camino enfurruñada hasta una banca y saco su teléfono celular y marco un número que ya se sabía de memoria.

-Hola –contesto una alegre voz.

-Hola, quería ver si podía venir para acá –dijo Rose distraídamente.

-¿Dónde estás? –pregunto la voz al otro lado de la línea telefónica.

- Frente a mi librería favorita- respondió Rose revisando sus uñas.

- Ya está, voy para allá – Y el tono de teléfono le indico a Rose que ya habían colgado.

-¡Rose! – Grito Dominique desde el otro lado de la calle.

Rose Lanzo un bufido de enfado "Hasta que se hizo presente" pensó Rose enojada.

-Por fin llegaste –Rose se cruzó de brazos preparándose para reclamarle de todo a su prima, pero al ver su aterrada mirada se calmó un tanto y fue directa al grano - ¿Qué le piensas dar a Victoire?

A Dominique se le descoloco el rostro.

-¡No lo sé! –Rose frunció el ceño.

-Bueno, ¿qué le gusta a tu hermana? –Dominique se pasó ambas manos por el pelo en señal de frustración.

-¿La naranjada? –Rose la miro y luego lanzo una carcajada.

-Estas bromeando ¿cierto? – Dominique dijo que no con la cabeza empezando a aterrarse – Intenta de nuevo.

-¿Las ligas para el cabello?- Rose negó con la cabeza asustando un poco a su alterada prima. Rose nunca había visto así a Dominique.

¿Los bolígrafos? – pregunto Dominique aterrada, nada se le lograba venir a la mente.

Rose no daba crédito a lo que oía. ¡Dominique no sabía que le agradaba a su hermana!.

-Le… ¿Le quieres regalar un bolígrafo a tu hermana para su cumpleaños? –pregunto sinceramente impresionada.

- Bueno, le deben de gustar… Los usa casi diario ¿no? – Rose movió la cabeza de lado a lado.

-Lo hace porque es parte de su trabajo… Dominique, tan siquiera esfuérzate… ¿puedes intentar pensar? – Dominique frunció el ceño.

-¡Claro que lo intento!

- No, no es así – Dijo una voz desconocida haciendo que Dominique diera un salto del susto.

Rose sonrío y se encamino al lado del recién llegado.

-Tú… ¿Lo invitaste? Oh por Merlín… ¿Cómo te atreviste a cometer tal osadía? –Rose rodo los ojos.

-Recuerda que me trajiste aquí en contra de mi voluntad… y para hacer menos fastidiosa mi estadía traje a mi novio –Dominique le enseño la lengua.

-Él te va a fastidiar más de lo que yo a ti –Rio Dominique mirando a Scorpius cambiando repentinamente de humor.

Rose frunció el ceño y volteo a ver a Scorpius.

-No es verdad ¿cierto amor? –Scorpius alzo sus hombros.

-La verdad es que no puedo prometerte nada.

Scorpius empezaba a sopesar la opción de huir desde hacía una hora.

Ya habían buscado por aproximadamente veinticinco tiendas y no habían encontrado nada, además por no decir que en cada una tardaban como once minutos.

-Rose…

-¿Qué te parece este sombrero?

-No… muy rosado – Dijo Dominique entornando los ojos.

Scorpius lanzo un bufido.

-Dominique…

-¿Y que tal esa blusa? Se ve bonita.

-No, parece un mantel muggle.

-¡Oigan! –grito Scorpius exasperado. –Ya basta, me quiero ir, los hombres guapos como yo no se hicieron para salir de compras mas de dos horas.

Rose rodo los ojos.

-No podemos irnos, aun no encuentro el regalo de Victoire –dijo Dominique asustada.

-Ya encontraras algo –dijo Rose sonriéndole a Scorpius. –Es hora de irnos ¿A dónde vamos a comer?

-Te lo presumiré, soy mejor cocinero que tu y todos los chefs de aquí, asi que propongo ir a comer a mi departamento –Rose sonrió.

-Oigan… -empezó a decir Dominique, pasmada.

-Te veo mañana en el cumpleaños de Victoire –dijo Rose divertida con la expresión de su prima.

-Hasta luego –dijo Scorpius burlón mientras salían de la tienda el y Rose

"¿Qué demonios acaba de pasar?" pensó Dominique sorprendida cuando se encontró sola en la tienda.

Sola.

Esa palabra retumbo varia veces en la mente de Dominique ¿Ahora qué haría?


Era el cumpleaños de Victoire, toda la familia estaba en la Madriguera: Harry, Ron, Teddy, Lily, Louis, incluso Scorpius… decir que era un bello momento en realidad bastaría, porque a Victoire le faltaba algo esencial, o más bien, alguien.

La mirada de la rubia se pasó por toda la salita si encontrar rastros de la Castaña-rubia-pelirroja.

Además, no se estaba distrayendo fácilmente porque Teddy estaba con sus primos varones platicando quien sabe que cosa.

Victoire camino hacia Rose algo intranquila.

-Rosie… ¿no has visto a Dominique? No la encuentro por ningún lado –Rose la volteo a ver desconcertada.

-A decir verdad yo tampoco la he…

-¡Llegue! –toda la familia Weasley se giró para ver a una despeinada Dominique en la puerta. Varias exclamaciones de sorpresa circularon la sala. Pero solo una expresión conto para Dominique.

-¡Dominique Weasley! ¡¿Dónde estabas?! –Victoire la miraba más sorprendida que enojada.

-Yo estaba preparando tu regalo –Mientras hablaba, Dominique le dirigió una mirada asida a Rose y Scorpius que no pudieron evitar lanzar una carcajada – Así que espero que esta vez sea el mejor de todos.

Victoire parpadeo varias veces mientras veía a su hermana menor rebuscar entre sus cosas hasta que al fin encontró una diminuta caja.

-Ten –dijo Dominique con su voz temblando.

Victoire tomo la cajita entre sus manos y, sin que nadie más lo viera, ella miro el bello contenido.

-Gracias –Musito Victoire –tu… lo hicis…

-Si –asintió Dominique más tranquila - ¿Te gusto tu regalo?

Victoire cerro la cajita con sumo cuidado y abrazo a su hermana como respuesta. Nadie osó preguntar que era el regalo hasta que ambas se habían dejado de abrazar.

-¿Y bien… que es? –pregunto Louis emocionado.

Victoire mostro un par de aretes hechos con botones que tenían dibujo de flores y leyó en voz alta la pequeña dedicatoria:

-Para la mejor hermana que pude pedir el mejor regalo que puede hacer.


Esto fue todo, espero les haya agradado (eso se demuestra con un review).

Te quiero mucho hermana, feliz aumento de años.