Dreaming of bumping into you.
"Entrar en el mundo de la actuación es como pedir la admisión en un manicomio. Cualquier persona puede solicitarlo, pero sólo el loco certificable es admitido. En mi fichero de actores hay cincuenta mil nombres. Me atrevería a decir que tan sólo quinientos de ellos se ganan la vida actuando. Y una gran parte de sus ingresos proviene de hacer publicidad, que no es actuación exactamente, ¿no?. Así que está claro, desde cualquier punto de vista racional, que convertirse en un actor es un acto de insanidad. ¿Por qué uno entrar en una profesión en la que es cercano a imposible ganarse la vida?
La profesión de la actuación está llena de ironías. La mayoría de la gente se mete en la actuación para salir de sí mismos, para alejarse de sus rutinas diarias y convertirse en alguien que es atractivo, romántico, original, diferente. ¿Y qué termina siendo la actuación? Usarte a ti mismo. Trabajar a partir de lo que hay dentro de ti. No ser otra persona, sino ser tú en diferentes situaciones y contextos. No escapar de ti, sino usarte a ti mismo desnudo y expuesto allí en el escenario, o en la pantalla grande.
Siempre he pensado que es mejor renunciar a la cordura. Resignarse y admitir que estás loco o no querrías actuar. Cuando te enteras de lo que es actuar, y cuáles son las probabilidades de hallar suceso, y todavía persistes, la prueba de tu propia locura es inevitable. Acéptalo. La mayoría de los actores se hacen infelices en la búsqueda de la cordura, al insistir en su normalidad. Ese es un grave error. La vida de un actor es un poco más fácil de sobrellevar si admites que estás loco."
Mis ojos permanecieron sobre el e-book, mientras las palabras resonaban densas en mi cabeza, hasta que la pantalla del iPad se apagó por completo. Y recién entonces moví mi foco de atención hacia la ventanilla que se hallaba a mi derecha, reconociendo el familiar paisaje a mí alrededor. Y sonriendo suavemente al pensar en cómo cuando hablase con Rachel, no iba a perder tiempo en recomendarle mi actual lectura.
Pero...no, basta de Rachel. No podía seguir permitiendo que mi cabeza se empeñase en asociar todo con ella. Ni siquiera aun cuando se tratase de un libro que bien podría ser de su grado, dado que se encarga de abordar un tema que nos interesa a las dos.
Aunque no creía que Rachel lo necesitase. Si bien en su acelerada cabeza, sitiada por la ansiedad, el trabajo que ya tenía en su curriculum era poco atractivo, yo estaba segura de que no estaba nada mal ya haber sido parte del reparto de una obra en Broadway y además haber protagonizar otra, muy exitosa, Off Broadway.
No, Quinn. Basta de Rachel.
Agité la cabeza para quitarla de mis pensamientos y me quedé nuevamente con lo que la lectura del texto me habia dejado.
Supongo que no voy a tener problemas en admitir que estoy loca. De hecho creo que cualquier persona que me conozca va a estar predispuesta a testificar acerca de mi locura en caso de que alguien tenga dudas. Pensé interiormente, cerrando la aplicación y guardando el dispositivo en mi mochila.
Los viajes entre New Haven y Nueva York eran prácticamente semanales. La utilización del tiempo que pasaba sentada en el tren en lecturas, una constante. Y la compañía de mi mochila Herschel azul en el asiento lindante, una cotidianidad
Audition de Michael Scurtleff era el libro que me habia acompañado en esta ocasión, mismo que habia empezado a leer la noche anterior tras recibir la recomendación por parte de uno de mis profesores. Y sinceramente me habia sido difícil desprenderse del texto tan pronto me sumergí en él por primera vez.
Recordaba haberme reído cuando me lo presentó como la biblia de los actores, claramente después de leer los primeros párrafos la risa desapareció y fue instaurado el respeto hacía su autor.
Era una lectura ligera al mismo tiempo en que profunda, y la clase de motivación que necesitaba en un momento en el cual tenía cuatro castings fallidos, y tan sólo tres cortos en mi pasado. Y la graduación y mudanza a Nueva York en mi futuro más cercano, a tan solo unos meses de distancia.
Pero el presente se mostraba en forma de Viernes y en el instante en que el tren se detuvo en uno de los andenes de Grand Central Terminal, y descendí del mismo junto a Stacy, listas para dirigirnos a su departamento y para comenzar a disfrutar del fin de semana, el estudio y el trabajo (o más bien la falta del mismo, y la simple oportunidad de protagonizar como escenografía ya que nada se requería de mi más que lucir atractiva), quedaron puestos en stand by.
[o][O][o]
"Q, se está haciendo tarde!" protestó Stacy emergiendo del dormitorio y encontrándome recostada en el sofá.
"Ughh, cortala!. Me baño en diez minutos, y todavía falta una hora así que..." argumenté sin mover mis ojos de la pantalla del celular.
"Te bañas en diez minutos, pero tardas una hora en arreglarte!" insistió arrojándome un almohadón para hacerme reaccionar.
"Estas exagerando"
"No estoy exagerando, Fabray! Vivir con vos por tres años es tiempo suficiente para conocer todos y cada uno de tus horribles hábitos" masculló arrojándome otro almohadón. "A bañarte, ya" enfatizó señalando la dirección del baño.
"Vivir tres años con vos es tiempo suficiente para saber que sos la reencarnación de mi madre" remarqué tomando uno de los almohadones, y lanzándoselo con fuerza.
"Okay, sabes qué?" preguntó retóricamente sin esperar a que yo respondiese. "Hace lo que quieras, pero olvidate de esto" enfatizó con risa victoriosa, agitando en su mano una bolsita ziploc que contenía marihuana. "...si no estás lista a las 10 en punto"
"Hey!" me incorporé rápidamente para acercarme. "La mitad de eso es mío, dámelo" increpé intentando acercarme a ella, pero sólo vi la bolsita desapareciendo bajo su remera. "Oh, me estas jodiendo? Que madura que sos, eh!"
"Muy"
"Ugh! Te detesto" mascullé, pero dándome por vencida y caminando en dirección al baño.
"Y yo te adoro... Siempre y cuando seas puntual" la escuché decir y mi respuesta fue seguir caminando en silencio, alzando mi mano para que tuviese una perfecta vista de mi dedo medio y luego ingresando y cerrando la puerta tras de mi con un sonoro portazo.
No estaba molesta. No estaba enojada. De hecho disfrutaba esas discusiones inmaduras que protagonizábamos y que sólo evidenciaban la confianza que se habia creado entre ambas con el paso del tiempo.
Stacy se habia convertido en una de mis mejores amigas, tras los tres años compartiendo cuarto en Yale. Tenía mi misma edad, estudiaba Marketing y era oriunda de New York, en donde sus padres tenían un negocio inmobiliario. Hecho que explicaba porque ella tenía la facilidad de estudiar y vivir en New Haven, y aun así conservar su departamento en East Village. Lugar al que regresaba casi todos los fines de semana, y en la gran mayoría de las ocasiones, conmigo acompañándola.
[o][O][o]
Miré el reloj y fruncí el ceño al observar la hora, dándome cuenta como lo que en mi mente se habían percibido como unos meros quince minutos, en realidad eran más de noventa.
Evidenciando cuánta razón tenía Stacy, y cuán poca tenía yo.
Mi celular estaba sobre la cama, y la pantalla del mismo encendida continuamente con nuevas notificaciones colmó mi paciencia, forzándome a caminar hacía el mismo.
Ciento setenta y dos mensajes nuevos era lo que marcaba el icono de iMessage, y sin ánimo de provocar con mi ausencia una nueva andanada de mensajes, inspeccioné los mismos para responder, ya que tal cual siempre sucedía, seguramente era mi comentario el que faltaba dentro del grupo para poner fin al intercambio.
08:35pm: San López: Necesito masajes!
08:37pm: Rachel Berry: ¡Y yo también necesito masajes!
08:40pm: Britt SPierce: Ey pq no bienen aora y yo les ago
08:41pm: Rachel Berry: "¡Hey! Por qué no vienen ahora y yo les hago?"*
08:41pm: Britt SPierce: Rachie Rach! Keres q ballamos denserio? Pq yo super iria pero no tengo pasajes y aunq super iria caminando tbia estoy muerta x la ultima clase
08:42pm: Rachel Berry: No importa Britt, ya fue. Mejor yo voy a donde vos estas :)
08:42pm: Rachel Berry: De hecho... ¡Me dispongo a iniciar un viaje hacia allí tan pronto me sea posible!.
08:43pm: Blaine Anderson: Voy corriendo así llegó antes! O mejor dicho nadando. Ustedes creen que estará frio el Atlántico?
08:44pm: San López: Ni se les ocurra, losers! Las manos mágicas de Britt Britt son sólo mías!
08:49pm: Kurt Hummel: Error López! Stephanie no piensa igual ;)
08:50pm: Blaine Anderson: Santana, no tenías novia?
08:50pm: Britt SPierce: No s berdad
08:50pm: San López: Despedite de tu último Alexander McQueen, Hummel
08:50pm: Rachel Berry: Santana! Que dijimos de las amenazas involucrando artículos personales de por medio?.
08:50pm: Britt SPierce: Steph kiere repetir el 3 ;)
08:51pm: Sam Evans: Chicos cálmense, me asustan. Entre ustedes dos hay más violencia que en la última edición de Call of Duty!
08:51pm: Kurt Hummel: NO!
08:51pm: Mercedes Jones: Paren un poco! Algunos estamos intentando concentrarnos en nuestro trabajo!
Leí los primeros mensajes que figuraban en el grupo y rodé los ojos ante lo bizarro de los mismos, y lo bizarro que aún me parecía mantener mi nombre dentro de un grupo con todos ellos. Un par de años atrás me hubiese resultado hilarante si alguien me decía que en un mismo grupo íbamos a estar conversando todos como si fuésemos mejores amigos. En especial habiendo tantos exes dentro del mismo. Como era el caso de Mike y Tina, o Blaine y Kurt (porque sin lugar a dudas la relación, o falta de relación, entre Brittany y Santana era demasiado compleja como para catalogarla dentro de los exes). Pero al parecer la maduración nos habia permitido mantenernos unidos. No, no unidos, creo que la palabra acertada a usar sería conectados.
Aunque a decir verdad, nada, absolutamente nada, podía superar mi asombro al ver a Santana y Rachel interactuando de un modo tan enemigable, como habia decidido denominar su relación. Okay no, eso era mentira. El hecho de saber que ambas aun vivían juntas si lograba sobrepasar cualquier otro shock que el actual presente representase.
Pero antes de que la nostalgia y los celos por ver la relación de ambas se instaurase en mi cabeza, me deslicé sobre los mensajes para llegar al final de los mismos.
09:21pm: San López: Entonces mañana todos a las 9pm acá.
09:21pm: San López: Traigan algo para tomar pq no trabajo diez horas al día para alimentar sus vicios.
09:21pm: San López: Y además es mi cumpleaños, losers!
09:24pm: Blaine Anderson: Si no llegó arranquen sin mí.
09:27pm: Kurt Hummel: Por favor esfuércense con algo más que cerveza barata.
09:31pm: Noah Puckerman: Desde lima me voi a bajar un barril de cervesa en tu honor ;);) :p
09:32pm: Rachel Berry: Yo regresó temprano así podemos ir a comprar juntas. Te parece?
09:41pm: San López: Quinn?
09:42pm: San López: Te conviene aparecer y con buen vino bajo el brazo si queres que sigamos siendo amigas.
09:44pm: Britt SPierce: Q
09:44pm: Britt SPierce: U
09:45pm: Britt SPierce: N
09:47pm: Rachel Berry: Qué es eso Britt?
09:52pm: Rachel Berry: Brittany, estas bien?
09:53pm: San López: QUINNDIOTA!
09:53pm: Rachel Berry: Consulta:
09:53pm: Rachel Berry: Podemos comprar los snacks en The Whole Foods?
09:54pm: San López: Si pagás vos, sí.
09:55pm: Hey gente, cómo va?
09:55pm: Ya estoy en NYC, Satan!.
09:55pm: San López: Ah sí?, y pq no te veo acá?
09:56pm: Porque estoy en lo de Stacy, hoy vamos a una fiesta de uno de sus amigos...
09:56pm: En un rato le pregunto bien donde es y te mando la dirección por si quieren unirse, si?
09:56pm: Ahora me tengo que ir!.
09:57pm: San López: Ya tengo una invitación, y dudo que vos me puedas ofrecer lo que esa chica ya me ofreció ;)
09:57pm: No, ni hablar! Ni lo dudes, San! jaja. Elegila a ella. Todos merecen un buen orgasmo, incluso vos ;)
09:57pm: Nos vemos! X
Y el celular casi se deslizó de mis manos al oír la voz de Stacy detrás mío diciendo, "Me podrías haber dicho que ya estabas lista!"
"Y vos me podrías haber preguntado si lo estaba" me encogí de hombros, silenciando mi teléfono y guardándolo para evitar tentarme a seguir mirando lo que seguramente serian una nueva andanada de mensajes. Y forzándome a obviar el hecho de que Rachel habia evitado interferir en la conversación, una vez que mi nombre apareció en la pantalla.
"Recordame de nuevo, como hiciste para caerme bien?"
"Te conseguí marihuana después de que llegaste a New Haven y pagaste 50 dólares a alguien que te dio una bolsa con brócoli" recordé con sonrisa divertida.
"Cierto" asintió pensativo, rememorando el momento. "En fin, estas lista?"
"No lo sé, estoy bien así?" inquirí dando una vuelta delante de ella. Exhibiendo zapatos negros, mismo que las medias y falda; y un sweater color marfil.
"Estas tan bien, que haces que me siga preguntando qué hiciste tan mal par que Dree te dejase" bromeó y luego de dos meses sin nombrarla, por fin el nombre de mi ex novia no sonaba tan pesado en medio de un comentario aleatorio. "Hoy es tu día, vamos a encontrarte una nueva novia!" sonrió tomándome del brazo y arrastrándome hacia la puerta.
Las dos sabíamos que habia hecho mal, pero ninguna lo señaló en voz alta.
Y las dos sabíamos que esa noche podía encontrarme una nueva chica, pero no una nueva novia.
No otra vez.
[o][O][o]
"Hey, S! No te puedo escuchar, pero estamos en una fiesta en..." me detuve haciendo memoria, con una mano sosteniendo el celular y con la otra tapando mi otra oreja, en lo que era un fallido intento por bloquear la música. "En Brooklyn, una fiesta en la terraza de Night of Joy. Vengan si quieren!" exclamé antes de cortar, dado que era inútil intentar discernir qué era lo que Santana decía.
"Una para vos," sonrió Stacy acercándose a mí para entregarme una cerveza. "Y otra para mi" rio chocando la suya con la mía y luego bebiendo un sorbo. Mismo gesto que yo lleve a cabo luego. "Y? Ya encontraste a quien romperle el corazón esta noche?" inquirió y la fulminé con la mirada. "Dale, Quinn! Aprovecha vos que podes, recorda que otras tenemos a nuestro novio a seis mil kilómetros de distancia y no nos podemos dar ese lujo"
"Vuelve en dos días!" recalqué rodando los ojos y luego me dispuse a chequear mi celular, observando el mensaje que Santana me acaba de enviar, y en el cual me decía que no tenía ganas de trasladarse hasta Brooklyn y que nos veíamos el día siguiente.
"Más le vale!" rió tomándome del brazo y arrastrándome con ella entre el gente que se daba cita en la terraza de aquel bar. Donde la música dictaminaba el ritmo. Y el alcohol, la intensidad.
[o][O][o]
"Quiiiiiin!" exclamaba Stacy, colgada de mi cuello, evidenciando los estragos del alcohol en su conducta. "Dree está detrás tuyo!" agregó, risueña, un segundo después. Pero pese a su estado, el nombre expulsado fuera de sus labios fue lo suficientemente claro como para hacerme girar sobre mi misma.
Y fue impulsivo, y sin esfuerzo alguno, el momento en que mis ojos la divisaron, propiciando que mi mirada se cruzase con la de ella. Haciéndome sentir como algo dentro mio se revolvía al ver el dolor con el que me miraba previo a dar media vuelta y caminar en dirección contraria a donde nosotras nos hallábamos.
"No puede ser, no puedo creer que este acá!" gruñí histérica.
"Por qué no? Es la prima del cumpleañero, que oh casualidad! Es el hermano de mi novio!"
"Porque me dijiste que estaba de viaje, idiota!" mascullé luchando por controlar mi enojo, replanteándome si seguir en la fiesta o salir de ahí de inmediato.
"Mentirita piadosa," me sonrió con inocencia. "Si te decía que venía, no me ibas a querer acompañar y no quería venir sola"
"Stacy!" escuché la voz de un chico acercándose y vi en eso el escape ideal para encontrar un poco de aire y calmar mis nervios.
Caminé entre la gente hasta la barra, compré una cerveza y me dirigí hacia una de las esquinas del lugar, en donde tome asiento en una mesa que estaba desocupada.
El primer intento por buscar algo dentro de mi bolso, me hizo notar como mi estado no estaba muy lejos del de Stacy. Ya que la simple tarea de sacar mi paquete de cigarrillos parecía demandar más concentración, y coordinación, de lo normal.
Y no fue un paquete de Lucky Strike lo primero que saqué, sino mi celular, el cual en un instante acaparó toda mi atención.
La tentación era grande, e intente resistirla, pero me bastó alzar la vista y ver la infinidad de parejas que me rodeaban. Besándose. Abrazándose. Sonriendo mientras se hablaban al oído. Y otros tantos estúpidos comportamientos que me violentaban internamente. Y era imposible no verlas ya que las mismas parecían estar bajo la mira de un reflector, imposibilitándome evadirlas. Y el súmmum de situaciones ante mis ojos doblegó mi voluntad de resistirme a desear lo mismo.
Alguien a mi lado... riendo, abrazándome, besándome.
Y mis reflejos estaban lentos, pero no mis acciones. Y fue por eso que primero envié el mensaje y luego fui consciente de lo que habia hecho.
02:15am: Hey, Rach! Cómo estás?
Uno, dos, tres, cuatro, cinco... quinientos veinte mil novecientos setenta y dos.
02:21am: Me escribió Santana, pero no me puedo comunicar con ella. Están juntas?
Uno, dos, tres, cuatro... ciento veintiséis.
02:22am: Estoy en BK. En Night of Joy, quieren venir? Mandame un mensaje para confirmar! Stacy y yo vamos a estar un par de horas más.:)
Y si bien todo lo que quería era chocar mi cabeza contra la pared, mi fastidio lo descargué arrojando el celular sobre la mesa.
El segundo intento por encontrar el paquete de cigarrillos fue exitoso, pero cuando lo abrí para retirar uno, mi mirada se fue al rincón y luego de vacilar por un momento decidí sacar el porro que habia olvidado que estaba ahí, y encenderlo inmediatamente. Sin preocuparme por la reprimenda de Stacy, ni la inexistente respuesta de Rachel.
[o][O][o]
El alerta se desató desenfadado en mi cabeza, en un abrir y cerrar de ojos. Difícilmente pueda poner en orden si lo primero que lo desató fue la mano de Karlie (a quien habia conocido hacia poco más de 10 minutos) apretándome el trasero. Si los labios de esa misma chica rozando mi oreja. O si la mirada de Dree a lo lejos, encontrando la mía por segunda vez en la noche. Y por segunda vez en la noche dando media vuelta y desapareciendo entre la gente.
Dios! Que estoy haciendo?, me pregunté a mi misma, y como era de esperarse no obtuve una respuesta contundente.
En que estaba pensando cuando me decidí a participar en un juego de seducción como ese, sabiendo que Dree, mi novia de dos años, con la cual habia cortado hacía pocos meses, estaba en la misma fiesta?.
Frente a mi tenia a una de las chicas más lindas del lugar, con unos ojos celestes penetrantes con habilidades hipnóticas. Karlie era preciosa, poseedora de esa clase de belleza que logra que todos se giren a mirarla cuando pasa caminando. Y de más estaba decir que estaba interesada en mí, lo cual quedo claro luego de la simpatía con la que entablo una conversación conmigo a través de roces lánguidos y diálogos impregnadas por el alcohol. Conversación que abrí con una de las peores líneas en mi historial. Disculpame, pero te conozco de algún lado? Estudias en Yale?.
Y como dije, Karlie estaba frente a mí, y con un roce revolucionaba todas mis hormonas, y no es como si pensase en enamorarme, simplemente pensaba en pedirle que use sus más sucios artilugios conmigo, y todo parecía indicar que ella lo podía hacer. Que lo quería hacer.
Pero detrás de mí tenía a Dree, con quien no hablaba desde hacía ya 4 meses, cuando había decidido dar un portazo y dejarme a la deriva, en el medio del huracán que azotaba mi cabeza. Dree que sin dudas es la chica más linda y más interesante del lugar. Por quien me había preocupado más que por ninguna de mis otras parejas. Quien, pese a lo que todos pensaban, me había roto el corazón cuando decidió salir de mi vida sin previo aviso. Aunque a decir verdad, los avisos posiblemente habían estado presentes durante el último tiempo, y habia sido yo quien no habia estado lo suficientemente atenta como para percibirlos.
Pero la verdad es que no importaba realmente quien tenía delante de mí o quien tenía detrás, si mi cabeza se empeñaba en estar en otro lugar. Más precisamente en Manhattan, siguiendo imaginariamente todos y cada uno de los movimientos que Rachel podría estar llevando a cabo en ese momento.
"Necesito ir al baño," exclamé separándome de golpe, y en un brusco movimiento chocándome con la persona que estaba detrás de mí, aunque agradeciendo el accidente puesto que eso evito que terminase en el piso por perder el equilibrio.
Sin pensarlo me giré y caminé para alejarme de ahí, silenciando las palabras de la chica, quien seguramente se quedaba confusa por mi drástico cambio.
Con lentitud me abrí paso hacia la zona de los baños, buscando mi celular en el bolso para chequear nuevamente el mismo y tal cual habia sucedido anteriormente, encontrar que no tenía ningún mensaje sin leer.
03:26am: Hey Rach! Saliste? Por dónde andas?
Y cuando estaba por enviar un segundo mensaje, porque así de patética me comportaba entrada la madrugada, la puerta de uno de los habitáculos del baño se abrió ante mí y pude divisar a dos chicas dentro. Aunque quizás todo fue producto de mi imaginación y mi estado de alucinación.
Lo que era seguro fue que cuando me esforcé por hacer foco con mi mirada, la puerta ya estaba cerrada y yo volvía a estar sola en el lugar.
Me giré nuevamente, y observé mi reflejo.
Mis parpados se sentían cansados, y dado la imagen que devolvía el espejo, deduje que todo mi cuerpo lo hacía.
Mis sentidos estaban lánguidos, mi humor irritado y mi apetito en constante crecimiento, tanto el sexual como el que me pedía a gritos algo dulce.
Un nuevo golpe en la puerta del habitáculo detrás de mí captó mi atención, y mi mirada se enfocó ahí, a través del espejo, pero nadie salió. Aunque la presencia de personas dentro del mismo fue obvia desde el momento en que comenzaron a sentirse gemidos ahogados provenientes del mismo.
Necesitaba muchas cosas en ese momento, como por ejemplo algo frio, o las piernas de Rachel alrededor de mi cabeza, sus labios en mi piel, o el waffle más grande del mundo cubierto por Nutella y helado.
Necesitaba muchas cosas, pero si habia algo que no necesitaba era escuchar como dos personas tenían sexo en el baño del bar, mientras yo me debatía entre enviar patéticos mensajes de texto a quien no tenía intenciones de responderme, esconderme de mi ex novia, o escabullirme fuera del alcancé de una chica que habia conocido hacia diez minutos.
Así que, luego de un rápido análisis y de descartar la mayoría de las opciones, me convencí de que lo que necesitaba, y estaba a mi alcance, era conseguir una cerveza para despertarme un poco, buscar a Stacy para pedirle las llaves, y luego un taxi para volver al departamento y dormir sin despertador por primera vez en las últimas dos semanas.
[o][O][o]
03:32am: Dnd esta s Rach?
03:39am: P q no contestar?
[o][O][o]
"Te lo fumaste sin mí?" increpó Stacy cuando por fin la pude localizar. "Por qué?"
"Qué?" pregunté distraída, con mi atención puesta en la realización de una llamada perdida a Rachel, con la esperanza de que así escuchase su teléfono y por fin diese señales de vida. "Porque vos no estabas" respondí luego cuando reconocí a lo que hacía referencia. "Dale, me das tus llaves? Quiero ir a dormir"
"Espera media hora más y nos vamos juntas. Es temprano, Q!" sugirió.
Y por un momento considere la idea de aguantar un rato más, no habia nada que quisiese menos que irme sola de ahí. Pero la duda desaparecía al recorrer el lugar con mi mirada y encontrar dos personas comiéndose a besos a apenas unos metros de mi posición. "Nah, me quiero ir ahora, no doy más" sentencié decidida.
No habia absolutamente ninguna posibilidad de encontrar satisfacción alguna en aquel lugar, y me estaba volviendo loca la idea de seguir ahí, cuando todo lo que quería era estar en cualquier otro lugar.
"Okay, tomá" accedió buscando el manojo de llaves en su bolso y depositándolos en la mano que yo ya tenía extendida. "Segura estas bien? Si queres-"
"Rach?" pregunté divisando a una morocha a lo lejos, y olvidándome por completo de Stacy comencé a caminar hacia ella. "Rachel?" inquirí sonriente, posando mi mano en su hombro para hacer que se girase, pero al quedar cara a cara con la chica sentí la decepción de descubrir que no se parecía en nada a Rachel. "Perdón, te confundí con otra persona" ofrecí a modo de disculpa, y al menos el gesto molesto de la chica se suavizo.
Como si algo le faltase a mi noche, ahora despertaba la lastima en desconocidos.
Bien, Quinn... genial!.
N/A: En mi caso, la música siempre representa el mejor prompt para ideas de fics. Esta historia es un four-shot (1 y 2 Quinn P.O.V. / 2 y 3 Rachel P.O.V.)que escribí mientras escuchaba A.M de Arctic Monkeys. Diganme que piensan, si vale la pena voy a ir subiendo los otros tres capítulos. Saludos! X
