La verdad es que esta historia iba a ser originalmente el Drabble 11 de Drabbles para llevar pero pensé que sería un desperdicio dejarla como una historia tan corta y al final intenté escribirla, volviéndose así una cosa más crack de lo que ya era XD.

MAGIA

CAPÍTULO 01: PROBLEMA

¿Estás seguro de esto, Shinra…? – Un hombre rubio hablaba por una cabina telefónica completamente dudoso de lo que le estaba diciendo la persona llamada Shinra.

¿Por qué tantas dudas? Me pediste alguna cosa que pudiera darte dinero rápido. No es algo muy difícil. ¿Sabes? – Respondió Shinra con un suspiro, su novia lo estaba apurando con la mirada sin saber que el asunto que lo mantenía ocupado era concerniente a Shizuo. Para ser exactos, esta conversación era algo que debían mantener Shizuo y él como un secreto de Celty.

Sí, pero… No sé si me sienta cómodo con esto. ¿Has venido alguna vez? ¿Sabes cómo es…? – Dijo el hombre no muy seguro. Y pensar que el día anterior le parecía algo muy sencillo, pero al llegar a la clínica su seguridad se esfumó como los pétalos de un diente de león frente al viento.

Celty, cariño. Solo será un momento, es un paciente molesto. – Shinra pidió permiso para ir a hablar en privado en el balcón.

Está bien, pero apresúrate. El concierto de Ruri-chan empieza en una hora y nosotros aún estamos aquí. – La hermosa irlandesa puso un límite silencioso en lo que podía tardarse en hablar con este "paciente".

Awww, te vez tan linda cuando estás disimuladamente molesta~. – Shinra tomó una foto rápida con la cámara digital que tenía preparada para llevar al gran evento.

¡Date prisa! – Celty estaba por golpearlo si no se movía de una vez.

Está bien. Está bien… - El hombre de lentes cerró la puerta del balcón y regresó su atención a la persona con quien había estado hablando antes.

Bien, Shizuo-kun… Dime exactamente cuál es el problema. No es como si no pudieras agarrar una revista de mujeres mayores y hacer lo tuyo. Biológicamente es algo sencillo y no veo porque deba ser un impedimento. Te pagarán bien por el producto que saques de todo esto. – Manifestó Shinra apoyándose del balcón para hablar con aburrimiento.

¿Problema dices…? Pues la persona que se supone que me atiende es una mujer mayor. Es vergonzoso. – Shizuo dijo completamente rojo.

Ah, ya veo… Ese es el problema. Te diré algo entonces. Piensa que esto es de vida o muerte para ti, aunque la verdad no es como si no fuera así. Si no consigues el dinero dentro de dos días, tu casero tirará todas tus cosas a la calle y no tendrás donde vivir. De paso, cómo eres completamente testarudo para pedirle cosas a tu familia, ni siquiera hablarás con Kasuka o tus padres y decidirás vivir debajo de un puente al final. Así que si no quieres que todo eso pase, es mejor que hagas esto porque no tienes otra opción. – Explicó Shinra de manera sencilla.

Ok, ok, ok… Entiendo. La vergüenza y todo lo demás, no tiene cabida aquí. – Sentenció Shizuo a si mismo con bochorno. Era como decía Shinra, él no tenía ninguna otra opción, la manera más fácil para conseguir dinero era esa. No podía creer que hubiera estado una hora entera mirando desde afuera de la clínica de una manera que bien podría ser perturbadora para quien la detectara.

Me alegra que lo entiendas. Ahora si me disculpas, tengo que ir a un concierto. Haz trabajar esa mano por tu futuro jajajajajaja. – Bromeó el de lentes.

Shinra. Cuando te vea, te mataré. – Informó Shizuo antes de colgar.

Solo era una broma… - El joven guardó su celular y volvió a la sala en donde su novia ahora lo miraba interrogante.

No me estás engañando. ¿Verdad? – Celty estaba un poco maliciosa, era extraño que Shinra sonriera en una conversación con un paciente a menos que fuera alguien familiar para él.

¡Me cortaría un brazo antes de hacer tal cosa! – Shinra expresó dramáticamente.

Ok… Andando. – La chica de cabello marrón claro prefirió ignorar la declaración gore de Shinra para caminar hacia la puerta con ansiedad. Había esperado meses por este concierto y no había forma de que se lo perdiera.

~8u8~

Ahora que Shizuo había sido puesto nuevamente en el carril de la realidad, él debía ejecutar su labor en aquella clínica que le provocaba bastante bochorno. Desde su posición podía leer el gran cartel de "Clínica de donación de esperma" que le hacía sentirse nuevamente avergonzado.

Recuerda que te quedarás sin casa si no haces esto, Shizuo. – Se dijo a sí mismo mientras pasaba por las puertas automáticas. Shizuo caminó con decisión hasta la recepción en donde la mujer, que podía decirse que pasaba los treinta años, lo saludó amablemente aunque notaba algo extraño en ella.

Quizás era idea suya…

Buenas tardes. ¿E-En qué puedo ayudarlo? – La mujer preguntó tartamudeando un poco en el proceso.

Y-Yo… P-Pues… Vengo a d-donar. Ya sabe… Eso… - Shizuo sentía que hablaba como un idiota, pero no lo podía evitar.

A-Ah, ya veo… Puede esperar en esos sillones de allá mientras llena estas formas. Lo llamaré en un rato. – Ella le dio unos papeles y bolígrafo para que fuera adelantando el trámite.

Est-Está bien… Jaja… - Él tomó los papeles y se fue lo más rápido que sus pies le permitieron. Trabajar en el Sushi Ruso le parecía ahora menos problemático, pero ya estaba ahí y no podía echarse para atrás.

~8u8~

Izaya-san… - La mujer que se había encargado de atender a Shizuo fue directamente a la oficina del personal para buscar a alguien que pudiera ayudarle.

¿Qué pasa…? Pareciera que hubieras visto algo aterrador. – Contestó el hombre llamado Izaya quien leía una revista mientras esperaba que pasara su hora de descanso.

¡El hombre que te dije que daba miedo entró al local! ¡Me da mucho temor atenderlo…! – Dijo la mujer asustada, no sabía a quién más podía pedirle ayuda ya que solo estaban ellos dos de turno. Además de que su hora de salida estaba muy cerca y no podía perder el tiempo tratando con un tipo raro cuando debía llegar a su casa con prontitud.

¿El que decías que parecía un acosador? ¡Qué miedo! – Izaya sonrió al ver la expresión de su compañera.

Izaya-san… Por favor, encárgate tú de la entrevista… - Le pidió ella.

Ok, pero tendrás que traerme sushi mañana~. – Izaya exigió a cambio.

¡Todo el sushi que quieras, pero sálvame de esto! – Manifestó ella suplicante.

~8u8~

"Veamos qué tan aterrador es este sujeto." – Izaya caminó de lo más tranquilo hacia la parte frontal de la clínica en donde vio a un rubio que revisaba lo que había escrito en sus papeles.

Disculpe. ¿Es usted el donante? – El pelinegro pudo ver que esa palabra erizaba al rubio como si se tratara de un gato asustado. Esto quería decir que era la primera vez que Shizuo venía a un sitio como este, lo cual le indicaba que esto podía ser interesante.

S-Si… - Respondió Shizuo.

Pase a la oficina para proceder con la entrevista inicial entonces. – Izaya le indicó con la mano que le siguiera por el intrincado pasillo.

~8u8~

Heiwajima Shizuo. ¿No? 26 años eh... – Izaya leía las formas con curiosidad.

Exacto… - Contestó Shizuo un poco más aliviado, si la entrevista era llevada por otro hombre al menos podía sentirse menos incómodo.

¿Tienes alguna una enfermedad de transmisión sexual o alguna enfermedad genética de la que tengas conocimiento? – Siguió el interrogatorio con preguntas aún más personales.

Ninguna de las dos. En mi familia nadie sufre de algún problema genético. – El rubio hizo memoria pero no podía recordar que su madre le hubiera dicho algo de lo segundo. Y obviamente de la primera cosa no había nada de qué preocuparse.

¿Y por qué decidió convertirse en donante? – Interrogó Izaya mirando fijamente a Shizuo.

¿Por qué…? – Shizuo había decidido no llenar ese espacio en la forma, porque él no creía poder dar una buena razón que no fuera por problemas de dinero.

¿Shizuo-san? ¿Pasa algo? – Izaya sonrió ante esto. Él hacia apuestas internas para ver si lograba sacar la verdad de este manojo de nervios que correspondía al nombre de Heiwajima Shizuo.

"Piensa, Shizuo. Dile algo que sea útil." – Se dijo mentalmente él mismo. No podía decirle que estaba ahí porque lo iban a tirar a la calle y que en una circunstancia normal siquiera se hubiera acercado ahí. Él puso su cabeza a pensar en una buena excusa que pareciera altruista para este sujeto que le daba la impresión que leía su mente.

Quiero ayudar a las parejas infértiles a tener hijos. – Dijo Shizuo con una sonrisa ligera.

¿Ah, sí? ¿No será que estás leyendo el letrero que está detrás de mí de casualidad~? – Izaya suspiró con desgano, aguantando la risa.

Está bien. Estoy aquí porque necesito el dinero y si no lo consigo estaré en la calle en 24 horas. – Admitió el rubio al verse atrapado.

Así está mejor~. ¿En serio te dejarán en la calle? ¿Por qué va a pasar eso? – No parecía mala idea ponerse a conversar con el pobre desesperado que tenía en frente. Aún tenía que quedarse una hora más trabajando en la clínica.

Porque… Porque debo todo el mes de renta y mi casero es muy estricto. Una vez me echó por un día entero. Fue horrible... – Contó Shizuo.

¿E-En serio? ¿Y por qué no buscas departamento en otra parte? – Cuestionó el pelinegro con incredulidad.

Porque solo él me cobra 20,000 yenes al mes… Es relativamente barato en comparación a otros lados. – Suspiró Shizuo.

Ya veo. Es cierto, normalmente te cobran 100,000 por mes y qué decir cuando compras un departamento. Está bien, inventaré algo decente en la forma. Por ahora ve y haz lo tuyo allá. ¿Ves esa habitación de ahí? Tienes que dejar una muestra. – Indicó Izaya levantándose de su asiento.

¿Así nada más? Hablas como alguien que conozco… - Era como escuchar a Shinra hace poco por el teléfono.

No es algo difícil, tienes revistas allá de todos los tipos para tus exigencias. – Izaya se quedó curioso al escuchar lo segundo que había dicho Shizuo, pero optó por no preguntar y pasar su atención a ingresar los datos del nuevo donante en el sistema.

Entiendo… - Shizuo caminó hacia la habitación y se encerró sin decir nada más.

Esta historia tendrá de cinco a seis capítulos 8D.