COMO ANTES
Disclaimer: Inuyasha y todos sus personajes le pertenecen a la grandiosa Rumiko Takahashi.
La luna se veía hermosa desde la ventana de la cabaña. Probablemente ya había pasado la medianoche, pero no me podía dormir ¡Era algo imposible! Otra vez había tenido una de mis horribles pesadillas.
Desde hacía un par de años solía soñar con ella, Kagome. Luego de haber perdido a mis padres y quedar solo en el mundo, había aparecido ella… bueno, también el resto del grupo, pero Kagome siempre me supo transmitir un cariño especial que no todos eran capaces de dar.
Lamentablemente, ella se tuvo que ir… ¡Largo tiempo de agonía! Se podría decir que ahí comenzaron los sueños...
La mayoría siguió con su vida y aunque al principio no logré comprenderlos, también terminé continuando con la mía, pero claro, todos seguíamos extrañándola.
—¡Agh!—Susurré frustrado, no debía seguir pensando en eso, ¿Cómo podía quitarme el sueño una pesadilla absurda?
—¿Shippo?—Llamó una somnolienta pero melodiosa voz a través de la oscuridad.
No debía deprimirme, ¡Ella había vuelto! A pesar de haber demorado tres años, lo había hecho y eso era lo único que importaba.
—¿Qué haces despierto? —Me preguntó mientras se incorporaba un poco.—Es muy tarde…
Ella siempre había sido preocupada por todos y a pesar del tiempo transcurrido, aquella virtud perduraba. De hecho, casi no había cambiado, solo algunos rasgos de su cara que la hacían ver más madura, pero fuera de eso, nada más. Sus ojitos seguían teniendo el mismo dulce brillo.
—No es nada, Kagome, no te preocupes,—contesté en voz baja para no despertar a los demás, pero me miró con escepticismo.
¡Yo ya no era un niño! Antes solía acudir a ella cuando me desvelaba o tenía algún mal sueño, pero ahora era un demonio zorro, fuerte y con un alto nivel en encantamientos. Demonios así no van a dormir con su semi-mamá por una estúpida pesadilla… ¿O sí?
Los ojos de Kagome me miraban con ternura ¿A quién engañaba? ¡La había extrañado tanto!
Ella abrió los brazos en mi dirección y me acerqué lentamente a ellos. Finalmente me abrazó y, por supuesto, le correspondí. Sentí una sensación cálida recorriéndome por dentro. Hace mucho que Kagome no me abrazaba así. Apoyó su mejilla en mi cabeza y me acarició el cabello con una mano.
Yo creía que ya me había convertido en un youkai grande y fuerte, pero al parecer seguía encajando, tal como hace tres años, en los brazos de Kagome.
—¿Quieres hablar de algo?
—Promete que no vas a volver a dejarnos, Kagome.
Ella dejó de acariciar mi cabello sorprendida, o eso supuse, pero luego rió por lo bajo.
—Lo prometo.
Me besó en la mejilla y nos arropó a ambos. Inmediatamente me relajé y comencé a cerrar los ojos. ¿Y qué si me gustaba buscar refugio y consuelo en Kagome?
Yo ya no era un niño… pero siempre sería el niño de Kagome. Ahora, para siempre y como antes.
FIN
¡Hola hola!
Espero que les haya gustado, es cortito y simple pero lo hice con amor jaja.
Porfis denme su opinión ¡Me es muy valiosa! ^.^
Gracias por leer :)
Se despide
Fresita-chan
P.D: ¡No olviden pasar por el foro InuKag 犬夜叉 & 日暮かごめ! Todos están invitados y se la pasarán genial... (Link en mi perfil)
