El humor no es lo mío y los drabbles menos, pero ahí va.

Aclaraciones:

Narración.

— Diálogo —

Advertencias:

Ninguna.

Clasificación: K.

Género: Humor.

Personajes: Sasuke | Kakashi.


Entrenamiento furtivo.

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Cansado, fatigado y con una sed de los mil demonios, ¡¿Qué clase de entrenamiento era ese?! ¡Mandarlo a aventurarse en el bosque sin siquiera usar chakra! ¡¿Qué carajos le pasaba a Kakashi?!

Búsqueda del tesoro, si como no. ¿Cuál tesoro? Un maldito collar que ni chiste tenía, aunque claro, tenía que encontrar ese susodicho collar para que su sensei le dijera el secreto de su técnica… Como siempre la ambición movía su mundo.

Aporreó ramas, metió los pies un charco de lodo, su ropa estaba hecha jirones por escapar de un puma, su cabello lleno de telas de araña, polvo y tierra. Estaba grasoso, ¡su cabello tenía más grasa que un chorizo!

Ah, carajo…, comida…, no había comido desde… ¡Ya no recordaba desde cuando! Pero valía la pena, había llegado al final y ahí estaba su sensei, en la cima de esa montaña…

Arrugó el entrecejo al verlo sumergido como siempre en esa maldita lectura, ese estúpido libro lleno de perversiones… No sabía que le encontraba de interesante.

— Oh, Sasuke. — profirió el peligris repentinamente al ver la figura jadeante y maltrecha del Uchiha.

— Y bien… — manifestó el Uchiha jadeante mostrándole el horrible collar que llevaba en la mano, que más bien era un par de cuerdas y una piedra mal cortada —… me dirás, cual es el secreto de tu técnica…

— ¿Huh? — emitió de lo más extrañado Kakashi — ¿El secreto de mi técnica? ¿Cuándo dije eso? — le preguntó rascándose la cabeza de lo más perdido.

Sasuke frunció el ceño y dio un paso amenazante, bueno, todo lo amenazador que podía con las articulaciones y músculos entumecidos.

— Tú nos mandaste este entrenamiento, mandaste a Naruto a… — se calló de golpe, lo fruncido de su ceño se pronunció y apretó la mandíbula.

— Ah… No, te equivocas, Sasuke. — habló de nuevo Kakashi —. No los mandé a ningún entrenamiento, solo les pedí que vinieran aquí para que vieran esto. — dijo caminando hacia él y mirando al frente.

El Uchiha se dio la vuelta desganado y se percató de que la altitud daba la vista hacia toda la ciudad.

— Mira, desde aquí se ve tu casa. — señaló el peligris con el ojito arqueado, se adivinaba una sonrisa debajo de su máscara.

El azabache rechinó los dientes, ya comprendía…, por esa razón Naruto no quiso que le preguntara nada…

— Creo que te jugaron una mala broma. — informó su sensei.

— Na-ru-to… — siseó amenazante el Uchiha apretando el collar haciéndolo añicos.

— Si sigues gruñendo no lo alcanzarás. — canturreó Hatake señalándole un pequeño punto naranja que corría despavorido por las calles de la ciudad, el Uchiha gruño y desapareció de ahí a la velocidad del rayo, olvidando sus heridas y lo agotado que estaba — ¡Feliz día de los inocentes! — profirió con una sonrisa divertida bajo su máscara al verlo correr tras un despavorido rubio que chillaba por su vida.