Primeramente vamos a hacer unas aclaraciones.

Aclaración nº 1: Metemanus Maximus es una cuenta compartida, es decir, que somos dos personas las que publicamos en ella, aunque de momento sólo tenemos una historia.

Aclaración nº 2: Dichas "publicadoras" puede que os suenen de otra página de fan ficus, somos Princess_nina y Anastassia, de Potterficts, de ese modo llegamos a la aclaración nº 3.

Aclaración nº 3: NO estamos plagiando la historia de potterficts puesto que somos las autoras originales de dicho fict.

Aclaración nº 4: Consiguientemente NO somos JK Rowling, simplemente jugamos con el mundo y algunos de los personajes que ella creó en su momento.

Dicho esto ya os dejamos con el primer capítulo de la saga.

Sin ton ni son.

-capítulo 1: No se debe despertar a las fieras dormidas.

6:30 AM, Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería, torre de Gryffindor, escalerilla que conduce al dormitorio de las chicas de 7º.

-¿Sabes? Colega, creo que esto no es una buena idea.

-¿Y por qué no?

-James, tío, sabes que te apoyo en todas tus ideas o casi pero esta vez estoy de acuerdo con Remus, esto que vamos a hacer... es que... no sé... me da... grima.

-Tenéis miedo, es eso, no me lo puedo creer. MIE-DI-CAS. Peter no se está quejando, de Remus lo entiendo un poco pero tú, Sirius, me decepcionas.

-Peter te tiene miedo, James, pero yo lo único que temo es entrar ahí ahora y encontrarme con Evans y sus "amigas" con cara de zombis.

-A demás es un suicidio, sabes tan bien como yo y Sirius que entrar ahora ahí dentro es una muerte segura, dolorosa Y lenta.

-Eso es, Lunático. ¿Por qué leches no entras tú solo maldita sea?

-Peter no tiene miedo de 5 chicas indefensas...

-¡INDEFENSAS! Venga James, por el amor de Merlín... puede que estén buenas, delgadas, tremendas, amargadas o incluso flojuchas pero nunca, NUNCA estarán indefensas, piensa en lo que le pasó a Jason Smith* cuando fue a despertar a su novia, y eso que era Ravenclaw... secadores volando, tijerillas, pinzas, botes de colonia, zapatos de tacón... volando. Nunca volvió a ser el mismo. Y deja de ponerle voz a la maldita boca de Peter, ¿quieres?

-Pero es que eso no va a pasar.

-¿Cómo lo sabes? Puede que yo no sea tan sumamente atractivo como tú o Sirius, oh, venga, bajad esos humos de vuestras caras de superioridad, pero aprecio mi cara tal y como está ahora y no tengo garantía alguna de poder salir de esta torre sin pestañas postizas, uñas rojo pasión, la permanente y pintalabios, eso siempre y cuando logre salir con vida cosa que dudo seriamente....

-Sigo diciendo que Peter no tiene miedo.

-James, Peter se ha esfumado en cuanto ha recordado el estado de Jason Smith, lo cual me parece sorprendente porque no ocupa poco que digamos para escabullirse como lo ha hecho, de hecho creo que deberíamos hablar con él acerca de su físico, perjudica nuestra perfecta imagen hacia el mundo. Y, tío, aprecio mi atractiva vida demasiado como para entrar ahí dentro ahora.

-Pues a mi Evans y sus camaradas no me dan miedo alguno...- Le tiembla la voz.-Y voy a matar a Colagusano.

-Remus, ¿qué hacemos...? No me hagas pucheros James.

-Yo... no voy. No quiero morir aún. James, ¿qué haces?, ¿donde te crees que vas? No, no, ¡¡NO, QUIETO!! James Potter no abra esa...-James abre la puerta del dormitorio sin llamar.

-Puerta, va, pasad, leñe.

-Por qué cojones no hablas TÚ SOLO con Evans me cagoentodo?

-Porque como entre yo solo esto va a ser peor que Salvar al soldado Ryan.

-Te odio.

-Opino lo mismo.

-Adelante, va, no seáis cobardes... ¿Qué puede pasarnos?-James traspasó el umbral de la peligrosa puerta del dormitorio de su damisela por conquistar.

-Voy a arrepentirme de esto toda mi vida, lo sé.

-Merlín nuestro que estás en el celo, hechizado sea tu nombre, venga a nosotros Camelot, cúmplanse tus órdenes aquí en la tierra como en el cielo...

-No reces estupideces Remus, que pareces tonto, no va a pasarnos na...-En escena, unas tijerillas aparecen volando a ran de la cabeza de James-..da.

-JAMES POTTER! ¡TÚ, MISERABLE SER INMUNDO! ¡¿QUÉ COÑO HACES AQUÍ?!

-Oh, mierda.

-...nuestra magia de cada día concédenos señor el día de hoy y perdona nuestros deslices así como nosotros perdonamos a los amargados de Slytherin a veces, no permitáis que Evans y sus amigas nos maten y líbranos de ellas, amén.

-¡AMÉN!-Dijo un Sirius con cara de pánico.

- Ya podéis tener una buena excusa para esto, Potter, o te juro por el secador con el que te amenazo que te electrocuto tanto que ni un enérvate te recupera.

-E...Evans, preciosa mía, deja que me explique, baja eso, cielo, que no hay electricidad en el castillo pero me das miedo, aunque estás preciosa igual, por supuesto...-La preciosa, maravillosa y tremendamente furiosa Lily Evans hace ademán de encender el secador cerca de la oreja de su interlocutor.- Ah... (aún vivo, eso es buena señal...) verás, aquí mis amigos, Sirius y Remus han tenido la idea de venir a despertaros porque...

-¡Pero serás cabrón!

-Hijo de banshee!! Es mentira, ¡Remus y yo no tenemos nada que ver en esto! Evans ten piedad... no somos mala gente, de verdad... este desvergonzado gafudo sí lo es, sí, quería despertaros, ¡por favor! A vosotras, las más bellas, las más bonitas, las diosas de esta escuela... matadlo a él.

-Tener amigos para esto... Lily, puedo llamarte Lily, ¿no? nos conocemos desde hace 6 años...

-¡NO! Y más te vale darme la explicación que quiero antes de que cuente 10.

-Vale, vale... verás, nosotros, bueno, yo me preguntaba que si... bueno er... eh...

-8, 7, 6...

-Que si yo te besaba estando dormida te enamorarías de mi, se ve que es una cosa que funciona en un mundo de colores llamado Disney y solo quería probar, puesto que no dejas que te bese despierta.-Se produjo un momento de silencio incómodo, luego, de repente, desde el fondo de la habitación se oyen 4 gritos perfectamente sincronizados.

-¡A LA HOGUERA CON ÉL!

-NOOO!!! Sirius, Sirius diles que me suelten, Canuto buen amigo, te pagaré, lo juro!-empiezan a alzarlo cuatro pares de manos que se lo van llevando hacia lo oscuro de la habitación-Remus, Lunático colega, por favor, no te pediré los trabajos de Historia de la Magia nunca más, lo prometo, no me dejéis AMIGOS!

-No... nosotros... eh... ¡Corre, Remus, no mires atrás!

-¡Siempre te recordaremos, tío! ¡Qué grande eres!

-¡Malditoooooos volveeeeed! Traidores de...

Pero los dos traidores de... se alejaban corriendo de la escena del crimen.

-Oye, Lunático, ¿tú crees que sobrevivirá?

-No.

-Ya, eso me pensaba yo. Y en caso de que sobreviva no lo haremos nosotros.

-Ya.

-Somos lo peor tío.

-Sí.

-¿Se puede saber qué te pasa?

-No.

-Ah....vale... (hombres lobo, raros como ellos solos) busquemos a Peter... ¡Peter! Ya puedes salir, roedor cobarde, tienen a James pero suponemos que no le harán sufrir demasiado...-Se oyeron ruiditos debajo de un sofá de la acogedora sala común de Gryffindor, a esa hora desierta.

-Se... ¿seguro que no me han visto?

-Gallina. No te han visto, joder macho a veces pienso que por miedo serías capaz de cualquier cosa, mira lo que te digo.

-Yo no he abandonado a James con las 5 salvajes.

-No, tienes razón, nos has abandonado a los tres antes de poner tu peludo culo en peligro.

-Estaba dispuesto a entrar en acción en cualquier momento...

-Déjalo, Sirius, de todas formas deberíamos ir pensando en cómo explicar su muerte a Dumbledore...

-Sí. ¿Sabes lo que más me duele?

-No, di.

-Haberme levantado a las 6 de la mañana, no está puesto ni el calamar gigante, qué te juegas.

-Bajemos a desayunar.

-Sí, mejor, vamos ratita miedica.

---------------------

*La cruel y terrible historia de Jason Smith.

Era una mañana, si es que se puede decir mañana de las 6 de la madrugada... En la sala común de Ravenclaw reinaba un silencio silencioso propio de un cementerio que fue interrumpido por unos pasos temerosos pero decididos que se dirigían a uno de los dormitorios femeninos de la casa. "No veas lo contenta que se pondrá Evelyn cuando me vea aparecer entre sus cortinas, me querrá tanto que me hará el amor 3 veces, mínimo" Pensaba el inocente Jason sin tener consciencia de que él sería el representante futuro de la gran regla de oro: NUNCA entres en el dormitorio de las chicas 1, sin llamar y 2, si no son más de las 8 de la mañana, él no sabía que en adelante los chicos hablarían de él como el pobre desgraciado que intentó despertar a su novia y enloqueció en el intento. Y es que cuando Jason Smith llegó a la puerta, la abrió y dio 3 pasos, se encontró con 4 caras desencajadas por el sueño cuyos brazos cogieron y ataron a una silla mientras no dejaban de volar objetos tales como tijerillas de las uñas, pinzas, secadores de pelo, colonia y zapatos de tacón algo peligrosos a ran de su cabeza asombrada y asustada. Y lo que una vez entró como Jason Smith... Salió como Jasina Smith, una joven de pelo permanentado, uñas rojo pasión, labios carmesí y unas pestañas artificialmente largas. Dicha chica se volvió tremendamente callada y tímida, nadie sabe del cierto qué debió pasar en ese dormitorio, pero una cosa está clara: Jasina, digo Jason Smith, no volvió a ser el mismo nunca más y su historia es colegialmente conocida entre los chicos de todas las casas: él/ella se ha convertido en leyenda.