Se veía por las desiertas calles una figura corriendo velozmente, la lluvia azotaba fuertemente a la figura, que se notaba traía una gabardina en tonos azulados que le llegaba hasta la rodilla. Como estaba tan oscuro la figura no se dio cuenta de una poza, que cuando pisó resbaló y se tumbó contra el suelo.
Se hincó en el suelo, unos mechones de cabello castaño claro indicaban que era una mujer, que con sus manos cubría su rostro empapado. Agradeciendo que nadie estuviera allí para verla llorar incansablemente. Se paró lentamente y comenzó a caminar hacia ningún rumbo en especial.
Pronto se encontró al frente de un departamento que conocía muy bien, dudosa, entró, y pronto se encontraba en el ascensor esperando para el 8º piso, donde se encontraría supuestamente su prima y amiga, que siempre que contaba con ella, esta la escuchaba para todo. El ascensor paró en el 5º piso, donde entró un hombre alto, muy buen físico, el cabello que le caía en los ojos de un color marrón, y ojos del mismo color, aunque un poco más miel que el cabello. Llevaba, al igual que ella, una gabardina, pero negra.
Ella solo estaba con la mirada baja, y él miraba la puerta del ascensor esperando llegar (luego de haber apretado el botón) al 11º piso (el edificio constaba de 15 pisos), de pronto un apagón por causa de la tormenta paró al ascensor, asiendo que la mujer se asustara enormemente, escuchó un leve "diablos" que provenía de su acompañante. Ninguno decía nada, hasta que ella comenzó a temblar recordando los eventos pasados. Se resbaló lentamente hasta el suelo, y quedó sentada con nuevas lágrimas que amenazaban con salir, y sin evitarlo unos murmullos alían de sus labios
Por favor…no por favor…no quiero…- ante esta actitud su acompañante se agachó a su lado, e intentaba sacarla de su estado
¿se encuentra bien?- le preguntó agachándose
No, por favor, no, no quiero…-las lágrimas salían de sus ojos, el hombre la zarandeó haciéndola despertar de su trance
¿se encuentra bien?- ella lo miró y asintió, pero luego agregó al saber que la luz no había vuelto
Sí, lo siento mucho- dijo limpiándose y parándose. Él la ayudó, y luego ella vio por la escasa luz que él le tendía un pañuelo, lo aceptó y murmuró un bajo "gracias"
No hay por qué- el extraño vio que ella extendía su mano
Sakura Kinomoto- dijo ella, él aceptó su mano, y contestó
Azoran Li- dijo quedamente, en ese momento la luz volvió, y ambos pudieron apreciar sus rostros más definidamente. Ella tenía el rostro más hermoso que hubiera visto en su vida. Unos mechones caían en su rostro hasta sus hombros, pero se notaba que su cabello era largo y sedoso, y se ondulaba en las puntas. L que más le impresionó fueron sus bellos ojos verdes, tan o más hermosos que puras esmeraldas.
Él era, para todas las chicas, un sueño de hombre. Sus cabellos alborotados y algo mojados por la lluvia era marrón, su expresión dura lo hacía ver maduro y más guapo aún. Sus profundos ojos color chocolate combinado con miel fueron lo que más llamó la atención de la joven. Ella salió de su letargo cuando el ascensor anunció su 1º parada en el 8º piso. Ella desvió la mirada y se encaminó hasta su bolso que se hallaba a unos pasos de ella. Lo tomó y se encaminó hasta la puerta
Hasta pronto- le dijo a él, quien asintió con la cabeza, y luego el ascensor siguió su curso hasta la siguiente parada.
Ojala que pueda recibirme- murmuró Sakura caminando hacia una puerta, apenas aguantando las lágrimas. Tocó la puerta 703 y esperó a que abrieran. Se oyó un "enseguida voy" desde dentro del departamento. Mientras esperaba los recuerdos inundaban dolorosamente su mente….
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Ya eran las 01:26 a.m., estaba feliz hablando con su hablando con su abuelo aquella noche, y aunque tenía sueño, se negaba a dejar solo a su abuelo.
Ambos estaban sonrientes conversando amenamente, ya que rara vez se juntaban para hablar, por diferentes motivos. Él estaba ocupado últimamente puesto que estaba en Inglaterra haciendo algo desconocido para la muchacha.
Hablaban de cualquiera tontera que se les cruzara por la mente, hasta que un ruido desconocido se escuchó en la ventana, de inmediato su abuelo se paró y la escondió en un closet, mientras ella observaba por un agujero todo lo que ocurría en la sala de aquella casa que su abuelo arrendaría mientras estuviera en Japón. Observó cada horrible escena que se proyectaba cruelmente ante sus ojos……
--------------------------------------------FIN FLASH BACK-------------------------------------------------------
La puerta se abrió sacándola de sus recuerdos, allí se encontraba una muchacha muy poco más baja que ella, muy bonita. Tenía el pelo negro azabache que caía como cascada por su espalda, más largo que el de Sakura, y unos preciosos ojos amatistas. Estaba con una sonrisa, que desapareció por completo al ver la cara de su amiga y prima
¿Saku?- preguntó extrañada, luego Sakura se lanzó a sus brazos soltando todas las lágrimas que contenía desde hace más o menos 1 hora- ¿¡qué te pasa?- preguntó asustada mientras cerraba la puerta abrazándola y la llevaba a un sillón mientras trataba de consolarla
Tomollo…lo vi todo Tomo…-así era como ella la apodaba, pero ahora le importaba más porqué sakura estaría así
Sakura, por favor cálmate y dime, ¿qué paso?- Tomollo vio la gran tristeza que emanaba de los normalmente alegres ojos de Sakura, miedo, dolor, angustia, y tristeza
Estaba con él…- comenzó sollozando, pero Tomollo la interrumpió
¿con quién?-
Con nuestro abuelo- el asombro se dejó ver en el rostro de Tomollo, pero la dejó continuar
Entraron por la ventana, él me escondió en el armario…no sabía que hacer Tomo…-luego dejó de hablar porque las lágrimas se lo impidieron
¿Quién, ¿Quién entró por la ventana Saku?- esto ya la estaba asustando mucho
No lo sé…unos hambres que dijeron algo acerca de…no sé que era…intenté salir sin que me vieran, pero cuando me miraron, me sonrieron de forma tan…malvada…y me dijeron que me buscarían a mi y a el elegido…- todo esto lo decía llorando, pero ahora ni hablar podía, mientras recordaba todo.
Luego de lo que le pareció eterno, Sakura se quedó dormida llorando en sus brazos, ella la recostó en la cama de la pieza de visitas, la recostó preguntándose que le causaría tal conmoción a su amiga, y se fue a meditarlo a la sala. Pronto el teléfono la sacó de su letargo, y fue a atender
Diga- contestó- Dpto. Daidogi-
Buenas noches srta. Daidogi, habla en detective Hardwif, Jean Hardwif. 1º oficial de el departamento de homicidios de la policía de Tokio- escuchó una voz grave
¿qué necesita?- su tención iba en aumento cada segundo, asustada porque fuera algo relacionado con su abuelo y por lo que vino Sakura
Quisiéramos preguntarle si Uds. conoce (no me sé el nombre del abuelo de Sakura, si alguien lo sabe, plz me lo diga, hagan cuenta como si lo escribí, ok?)-
Sí, es mi abuelo, ¿porqué?-
Lamento mucho tener que decirlo por teléfono, pero…ha sufrido un ataque a la casa que estaba arrendando-
¿¡qué le paso, ¿¡está bien?- a esas alturas ya estaba histérica hablando por teléfono
Lo sentimos mucho, el…ha muerto hace unos segundos en la clínica central (hagan cuenta de que hay una clínica central ¬¬) y necesitamos la declaración de su prima, que estuvo presente (y todas esas cosas q piden los policías, datos, declaraciones, y todo eso) ¿podría venir mañana a la clínica con su prima?- Tomollo estaba choqueada, las lágrimas corrían libremente por sus mejillas, pero pudo hablar
Claro, n-no se preocupe- luego de despedirse calló sentada al sillón, llorando desconsoladamente, ahora entendía a Sakura- "por eso estaba tan mal… ¡ella lo vio todo!"- pensaba mientras lloraba. Llevaba en esa misma posición unos 10 minutos, cuando la sobresaltó el timbre, se limpió como pudo-"¿quién podrá ser?"- abrió la puerta aún con marcas de llanto en su rostro, y se sorprendió de ver a su mejor amigo y amado en la puerta. Un muchacho alto, musculoso, pero no exageradamente, cabellos que se le acercaban a los ojos, de color azul profundo, el mismo color del mar inútilmente ocultados bajo unos lentes que lo hacían ver más apuesto e interesante, traía una sonrisa, pero al ver la cara de su amigo tiró su bolso y se agachó un poco hasta estar a su altura, le cogió el rostro con ambas manos haciéndola sonrojar, pero por las situaciones que ocurrieron esta vez no le importó y se lanzó a sus brazos llorando nuevamente
¡Eriol!- decía ella, él cerró la puerta y la abrazó consoladoramente
¿qué pasa Tomollo?- preguntó asustado
Ho Eriol, es horrible…-decía ella llorando. El muchacho la sentó y luego de unos minutos ya estuvo más calmada
¿qué pasa?- volvió a preguntar suavemente
Mi abuelo… murió hoy…hace un rato…y Sakura lo vio todo…-terminó de decir, Eriol solo atinó a abrasarla mientras ella lloraba
¿ella está muy mal?- preguntó suavemente entendiendo el estado de Tomollo
Sí…llegó a mi puerta, y cuando abrí estaba empapada y llorando. Estuvo llorando mucho tiempo, así que se alcanzó a secar. La acosté en la cama de la pieza de visitas. Mañana tenemos que ir a hacer los tramites de la muerte de nuestro abuelo- decía tristemente
Si quieres yo te puedo acompañar- le ofreció, pero ella negaba con la cabeza
D-de seguro t-tienes algo m-más i-importante que hacer- decía tartamudeando por culpa del hipo que le causó el llanto
Nada es más importante pata mí que mis queridas amigas, y eso deberías saberlo muy bien ya- se levantó invitándola a acompañarlo por el amplio departamento hasta la amplia cocina- ven, voy a hacerte un té, eso te ara mejor- ella no se opuso ni acepto, se sentó en una silla de la cocina, y esperó a que el té estuviera listo. Cuando este ya lo hubo estado, lo tomó sin prisa, hasta que el sueño la estaba venciendo, y sin darse cuenta se durmió en la silla, Eriol la llevó a su habitación, y como había una tormenta, decidió quedarse en la 2º habitación de invitados, seguro de que ha Tomollo no le importaba, porque ya lo había hecho bastantes veces, para trabajos que debían realizar en la universidad, o en sus actuales trabajos, ya que trabajaban juntos.
Sentía dolor en su alma, estaba triste, lo sabía, el dolor de saber que a su abuelo lo habían asesinado en frente suyo no era muy favorable, sentía aún húmedas sus mejillas, había llorado toda la noche. Se movió y se fijó que le dolía todo el cuerpo, haber estado corriendo 45 minutos bajo la lluvia no era muy bueno que se diga. Se fue al baño, se metió en la tina llena de agua caliente, y las lágrimas salinas se combinaron con en agua tibia. Borró todo recuerdo de su mente, excepto las últimas palabras de su abuelo…….
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Estaba asustada, su abuelo la miraba mientras la guiaba hasta el armario, y sus palabras quedaron grabadas en su mente
Sakura, ya no hay tiempo, me gustaría haber estado más tiempo contigo, pero no pude, lo siento- su voz sonaba angustiada, pero luego se tornó más urgida- escúchame bien: no te culpes, nadie sabe mi secreto, te lo diré a ti, la verdad. Busca en tu corazón y no te rindas, cuando menos lo esperes, encontrarás lo que buscas con tanto anhelo si lo propones, TÚ eres la…- pero un retumbo no lo dejó continuar
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Los golpes en la puerta la sacaron de sus crueles recuerdos, escuchaba la melodiosa voz de su prima hablarle
Sakura, apresúrate- le decía
En seguida voy- dijo ella. Se vistió y salió, para encontrarse a Eriol, quien al verla le sonrió tristemente, ella comprendió entonces que lo sabía, él y su prima, y los tres se abrasaron, un silencioso pero lleno de sentimientos abraso, el más sincero de todos.
Iban los tres en el auto de Eriol, un turise BWM negro. Todos estaban callados, Sakura de alguna manera agradecía este silencio. Tardaron unos 7 minutos en llegar al hospital. Apenas entraron un hombre se acercó a ellos. Alto, cabello muy corto y negro, y ojos del mismo color que reflejaban confianza
¿srta. Daidogi, ¿srta. Kinomoto?- preguntó llegando hasta ellas. Tomollo y Sakura asintieron, y él sonrió un poco- me presento, soy Hardwif, Jean Hardwif. 1º oficial del departamento de homicidios de la policía de Tokio- su voz era grave, que infundía cierto respeto
Él es Eriol Hiragisawa, amigo nuestro- explicó Tomollo en vos un tanto baja
Un gusto conocerlos- todos le dieron una reverencia al mismo tiempo que él se las devolvía
Bien, srta. Kinomoto, no sabe cuanto me gustaría evitar esta parte, pero necesitamos su declaración de los hechos ocurridos la noche del 23 de Octubre- dijo tristemente
Cl-claro, no se preocupe. Entiendo que es su trabajo. Y…cooperaré en lo que pueda- dijo Sakura débilmente, el oficial Hardwif le hizo nuevamente una reverencia y respondió
Me halaga srta., espero que no sea tan malo recordar para Ud.- luego, mirando a los demás- srta. Daidogi, ¿me haría el favor de hacer todos los trámites de la clínica?-
Claro, no se preocupe, y gracias- luego Tomollo se fue con Eriol y Sakura a una oficina con el oficial Hardwif.
Dígame, ¿qué estaba haciendo Ud. Y su abuelo antes de que entraran por la ventana esos bandidos?-
Dígame Sakura- tras un asentimiento de él, continuó- estábamos hablando- a medida que hablaba, la voz se le quebraba- como hace tiempo que no nos veíamos, n-nos juntamos, y-y de pronto alguien e-entró por la ventana…y…mi abuelo me escondió en e-el armario, vi todo…fue..con una pistola, al parecer traía un e-especie de silenciador, l-le dispararon…-un solitaria lágrima recorrió su mejilla, y el oficial la interrumpió
No tienes porqué continuar si no quieres, Sakura- pero ella negó
S-sé que debo continuar- se limpió esa lágrima, y continuó- cuando recibió el b-balazo, calló al instante- en ese momento se tapó el rostro con una mano, pero continuaba- cuando se fueron de esa habitación, no pude aguantar, y…me salí, pero voté una mesa, volvieron, pero me dejaron escapar…- luego de eso ninguna otra lágrima salió de sus ojos
Muchas gracias, tu declaración nos servirá, te lo prometo- luego de eso ella sacó un pañuelo verde de su cartera, era aquel pañuelo que el extraño del ascensor le había dado. Aún lo conservaba. Se limpió con dicho objeto, y luego miró a Hardwif
Me falta algo…-
¿qué?-
Me dijeron…que me buscarían…-un escalofrío recorrió la espalda de ambos….
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Aterrada, después de votar aquella mesa, vio como esos sujetos, uno muy alto, cabello rubio y ojos negros, otro mediano y ojos azules, pero pelo negro. Ambos irradiaban maldad, y el más bajo le sonrió malévolamente
Te encontraré…no importa donde…cuando…con quién estés…sufrirás el mismo destino…- ella se fue corriendo mientras que un creciente dolor se acumulaba en su pecho, y las lágrimas salían libremente de sus ojos….
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Entonces te hayas en peligro- dijo Hardwif decidido
Supongo…-dijo ella con una triste sonrisa
Te propongo algo-
¿qué?-
Vete de aquí- al ver la mirada confundida de Sakura agregó- vete a otro país, vete y no vuelvas. Si te buscan, informa a la policía de ese lugar y listo- ella sonrió
Es una buena posibilidad- se levantó lentamente cuando ya todo terminó
Espero que tomes en cuenta mi solución- le dijo Hardwif cuando se despedían
Lo haré, adiós- luego se fue en busca de su prima, que ya tenía todo listo, el funeral, la iglesia, las flores, solo faltaban las invitaciones, que no serían demasiadas, solo familiares y amigos de confianza, que cabía recordar que no eran muchos- gracias por todo Tomollo, Eriol, pero he tomado una decisión- les dijo Sakura al llegar a su lado
¿cuál?- preguntó Eriol curioso
Me iré de Japón- al ver la cara de asombro de ellos, les contó lo que le contó al oficial Hardwif (la última parte)
¿a dónde?- preguntaba Tomollo triste, porque no quería separarse de su mejor amiga y prima (en las próximas veces no lo pienso repetir) en estos momentos
No lo sé- dijo ella triste
Ya sé a donde nos podemos ir- dijo de pronto Eriol, en medio de todo ese silencio. Las dos lo vieron con cara rara por lo que había dicho
¿tú también te vas?- le preguntó Sakura
¡me extraña que lo preguntes!- ahí Tomollo sí que se entristeció, primero Sakura y ahora ¿Eriol, no podía ser
Que bien- dijo Sakura sonriéndole
¿y cuando tenías planeado decírnoslo?- preguntó Tomollo triste
Pero solo ahora se me ocurrió esa idea- explicó
Y, ¿Cuándo se van?- preguntó Tomollo, asiendo como si no le importara demasiado
