Capítulo 1: Inicio

Era el primer día de clases para Tori en Hollywood Arts, gracias a que en la gran presentación de dicha escuela suplanto a su hermana, así se dio a conocer su nuevo talento como cantante. Era extraño que un estudiante entrará a mitad del segundo semestre pero como era Hollywood Arts nadie le prestó atención. La morena estaba nerviosa era su primer día en una escuela donde todo era diferente a simple vista. Pero eso no la preocupaba mucho ella ya era rara de naturaleza.

-Calma Tori- dijo Trina buscando la manera calmar los nervios de su hermana

-Es normal soy nueva- dijo Tori

-Lo sé pero hasta yo puedo sentir tus nervios- dijo la morena mayor

Tori se disculpó con su hermana sabía que a pesar de todo Trina sabía cómo se sentía. Lentamente entró en la nueva escuela de artes escénicas, pasó a su casillero depósito algunas cosas y luego se dirigió a buscar su salón de clases. En el transcurso de su búsqueda se había encontrado con un ventrílocuo el cual era golpeado por su títere y una pelirroja risueña, los dos eran amigables por lo menos había empezado bien su primer día o eso pensaba. Al entrar en el salón debido a sus nervios chocó contra un chico lindo derramando un poco de café sobre él, ella trató de disculparse pero solo lo estaba empeorando.

-Aléjate de MI novio- le gritó una pelinegra que estaba entrando al salón, Tori se asustó ante el grito, sus oídos eran muy sensibles pero olvido eso al sentir el aroma de café con frutas del bosque que emanaba el cuerpo de la chica gótica

-Lo siento, fue un accidente- se disculpó la morena avergonzada, la pelinegra la había puesto más nerviosa de lo que ya estaba y eso no le estaba gustando en lo absoluto.

Entre peleas el maestro loco amante de los cocos llegó al salón poniendo por un poquito de orden. Comenzó con la clase diciendo algunas cosas sobre actuación improvisada pero la morena no se podía concentrar el aroma de la pelinegra llegaba a sus fosas nasales aturdiendo su mente. Salió de su trance cuando escucho que la pelinegra decía su apellido y esperar más subió al escenario para hacer lo que fueran hacer no había prestado nada de atención.

Se tensó al sentir como la gótica la tomaba del brazo y la sacaba del salón amablemente para después pedirle que esperara ahí hasta que ella le llamará. Hizo caso a lo que la gótica le había pedido espero y espero hasta que Jade llegó y le dijo que ya podía pasar, se sorprendió cuando la presentó como un perro ante la clase pero lo que la enojó fue cuando la llamo pulgosa y le vació el café encima, la furia en la morena era evidente segundos después, a todos les pareció más raro que Trina llegará un poco agitada.

-Tori- llamo Trina en tono demandante

Trina había sentido los cambios en el humor de su hermana eso era posible sentir algunos cambios por vínculo de sangre, al ser hermanas siempre iban a estar conectadas.

-Yo no hice nada- le respondió Tori rápidamente, Trina noto el olor a café en el cuerpo de su hermana

-Sikowitz permite que Tori venga conmigo para que se cambie por favor- pidió Trina amablemente lo cual descolocó a todos en el salón la morena mayor jamás se portaba tan amable pero quizás se portaba de esa manera por su hermana.

-Está bien- respondió el amante de los cocos con confusión, una Tori empapada de café, una Jade con una sonrisa malvada en el rostro y una Trina amable era mucho para el.

Las hermanas Vega salieron del salón.

-Que paso- preguntó Trina con seriedad

-Por accidente derrame un poco café sobre un chico al parecer es novio de la chica que se llama Jade, se enojo conmigo, el maestro nos dijo que hiciéramos una actuación ella me presentó como un perro frente a todos, me llamo pulgosa y derramó café sobre mi- explicó Tori irritada

-Mmm no esperaba menos de la Bruja del Oeste-

-Trina- dijo Tori molesta

-Ya no te enojes ella es así, trata de no ponerle importancia a lo que ella te dice así te evitarás enojos innecesarios y a mí salir de clases para evitar que hagas una estupidez-

Tori asintió pero a veces sus instintos y enojo le ganaban así que le costaba tranquilizarse, después de unos minutos la mitad-latina regresó a la clase, ya con sus ropas cambiadas y como era de esperarse había cierta tensión en el aire debido a lo ocurrido anteriormente.

Las clases fueron pasando tranquilamente mientras la morena se adaptaba a su nueva escuela aunque eso iba a ser difícil todo en ese lugar era muy pero muy diferente a su vieja escuela Sherwood. Pronto llegó la hora del almuerzo la mitad-latina se dirigió hacia el Asfalto Café, tomó su almuerzo y empezó a buscar una mesa libre pero escucho que André le llamaba y le invitaba a sentarse con ellos. Ahí estaban Cat, Robbie y André, la morena sin más que decir aceptó la oferta puesto que no conocía a nadie más, pocos minutos más tarde Jade y Beck se sentaron frente a la morena esta parecía un poco inquieta.

-Pasa algo Tori- preguntó André

-Mmm no nada porque-

-Pareces bastante inquieta-

-Solo estoy un poco abrumada hay mucho ruido- se quejó la morena con cara de hastío

-Es normal es el almuerzo- dijo Beck sonriéndole a la morena, está solo asintió ante lo dicho por el chico canadiense

Jade le dio una mirada fulminante a la morena la cual no se inmuto como le había dicho Trina entre menos caso le hiciera más problemas se evitaría y así lo haría. El día se fue rápido cada quien se dirigía hacia su casa.

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Dos meses después del ingreso de Tori el grupo la había aceptado aunque a Jade no le caía nada bien la morena pero por lo menos podían estar sentadas en la misma mesa durante todo el almuerzo.

Esa estupida de Vega parece no tener miedo de mi pensaba Jade recostada en su cama, desde el primer día que había visto a la morena le había llamado la atención, sus ojos café que quizás a la luz del sol o la luna pasarían a ser color miel. Su piel canela, por un momento Jade se reprendió por el simple hecho de estar pensando en la morena pero no lo podía evitar desde el principio no hacia mas que pensar en la mitad-latina y eso la estaba molestando. Había optado por llamar a la mitad-latina por su apellido ya que todo pero todo el mundo le llamaba Tori y ella quería hacer la excepción ante ese simple hecho, quería tener un toque único, ser diferente como siempre lo era. Durante las clases que tenían juntas se había dado cuenta de que la morena la observaba pero no de mala manera, no con miedo ni mucho menos con rencor por lo que le había hecho el primer dia más bien era una mirada curiosa y quizás nerviosa.

Jade se aburrió de estar pensando en la mitad-latina, quería despejar su mente así que sacó su cámara, unos lápices desde el 2H hasta el 6B, unas páginas blancas, metió todo eso en su mochila, bajo las escaleras y como era de esperarse su padre no estaba en casa, no le importó saber donde estaba su progenitor pues a este no le importaba donde estaba ella, salió y sin más se subió a su auto, manejó hasta las afueras del bosque que había cerca del lugar. Sacó su mochila y comenzó a caminar, la luz de la luna se reflejaba en la oscuridad del bosque dando el un toque tranquilo, la pelinegra no tenía miedo de estar sola en un lugar tan solitario como ese, al contrario le encantaba le hacía sentir en paz consigo misma, después de pasar todo el dia peleando con personas a su alrededor que la sacaban de sus casillas, en ese lugar se sentia mas libre que nunca, ahi no tenia que fingir que estaba bien, ahi no tenia que fingir que era fuerte, ahi no tenia que mostrar su rostro de odio, ahí solo era ella misma. Nadie sabía de los hobbies de la gótica ni siquiera su novio por el simple hecho de que no quería que nadie invadiera su espacio, que nadie le quitara ese momento donde dejaba de fingir.

Camino tomando foto a ciertos lugares los cuales parecían los más tétricos para su gusto, los cuales harían contraste con las paredes negras de si habitación, caminó hasta que llegar a un río, se sentó en una de las enormes rocas que adornaba el lugar. Saco las hojas en blanco y los lápices, sin más se dispuso a dibujar. La luna se reflejaba en el agua, lugares como ese la inspiraban no sólo a dibujar sino también a escribir alguno que otro de sus guiones de terror o suspenso. Se había centrado tanto en eso ver el reflejo de luna y la página de papel blanco que todo lo que había a su alrededor había dejado de existir.

No se detuvo a ver a su alrededor en ningún momento pero cierto ruido la hizo salir de su trance. Jade miro a todos los lados posibles pero nada suspiro quizás algún animal estaba cerca así que no le puso importancia, siguió con su dibujo hasta que al momento de mirar el reflejo del agua su mirada tomó otro rumbo, se asustó cerca de ella había un oso si hacía algún ruido probablemente la atacaría, así que busco la manera de alejarse un poco pero en eso una rama hizo ruido y el oso se iba acercando hacia ella.

Jade pensó que quizás ese sería su final pero más se sorprendió al ver un enorme pelaje café frente a ella y no era precisamente del oso, más bien parecía un lobo. Se sorprendió al ver a ese animal era poco común verlos salir pero lo que la saco mas de su ensimismamiento fue el gran tamaño del lobo al parecer no era un lobo común pero a quién le importa el tamaño, estoy a punto de morir. Si lo hubiera sabido me traigo una camara de video pensó Jade un tanto divertida solo al pensar verse grabada a la hora de su muerte pero sabía que no era hora para pensar en esas cosas tenía que salir del lugar rápido aunque sabía que no tenía muchas esperanzas. Ahora la cosa se había puesto peor según Jade un oso y un lobo fuera lo que fuera sintió que esa noche era su última noche.

Retrocedió un poco pero cayó de espaldas, vio como el lobo le gruñía al oso, posicionándose en forma de ataque entre más y más iba intimidando al oso con gruñidos fuertes, ladridos y señas de que iba a atacar, hasta que el oso se fue del lugar. Jade suspiro no porque estuviera a salvo. El enorme lobo se dio la vuelta mirando a Jade, esta sacó sus tijeras no iba a morir sin dar pelea antes, pero el lobo solo agacho la cabeza, Jade se le quedo viendo sorprendida.

-Gracias-- dijo la pelinegra no muy segura, el lobo levantó la cabeza mirándola a los ojos--supongo que eres de lo buenos- dijo después para proceder a guardar sus tijeras en su cintura, el lobo al ver eso se fue acercando a la gótica con sumo cuidado.

Ya cerca de Jade, el lobo se sentó a su lado olfateando su mano. La pelinegra se sentía un poco rara bueno mas de lo que ya era, jamás en su vida pensó que un lobo salvaje le salvará de ser comida por un oso. Sin miedo levantó la mano para acariciar a la bestia que tenía cerca de ella, por su parte la enorme mancha café bajó más la cabeza para ser acariciada mejor, Jade sonrió

-Al parecer te gusta ser acariciado- dijo Jade más tranquila, solo recibió un gruñido de parte de su nuevo amigo o amiga. Jade busco la manera de saber el sexo de su peludo amigo pero no pudo eso le pareció raro. Ya con todo lo que había la pelinegra decidió que era momento de regresar pero cuando se puso de pie casi vuelve a dar con el suelo de no por el lobo que la detuvo.

-Gracias- repitió Jade-- parecer ser la noche de salva a Jade- se burló de sí misma, miró a su peludo amigo el cual con señas le indicó que se subiera a su espalda. La gótica lo dudo un poco pero después de saber que no iba a logra salir del bosque sin ayuda subió en la espalda de este -- espero no caerme- comentó solo recibió otro gruñido, al parecer el lobo había entendido porqué iba a un ritmo lento, la pelinegra pensó que quizás resonaba mejor que un humano porque hacía caso a lo que ella le pedía.

Pocos minutos Jade ya estaba fuera del bosque quiso bajar pero el lobo no la dejo, Jade no se quejó pero el punto era cómo iba a llegar a su casa si el animal no sabía nada de ella pero se equivocaba en medio de la noche el lobo la llevó hasta su casa, la pelinegra quedó sorprendida.

-Esto es raro--comentó Jade mirando a su peludo amigo o amiga- como sabes donde vivió- preguntó después la enorme mancha café solo se recostó sobre el suelo tapándose la cara con las patas, esa acción provocó que Jade riera con sinceridad después de mucho tiempo--bien gracias por salvarme y traerme a casa- se despidió la pelinegra, abrió la puerta de su casa olvidando por completo donde había dejado su auto, se dio la vuelta y vio que el lobo seguía ahí sentado esperando a que ella entrará, sonrío para sus adentros un lobo que apenas conocía hace poco de menos de media hora la cuidaba más que su familia y su novio.

Dentro en la casa se asomó a la ventana viendo como el lobo se alejaba de su casa, la gótica se quedó pensando en qué demonios había sido eso, recapitulo todo lo que le había sucedido esa noche y espero volver a ver a su nuevo amigo, no sabia porque pero sintió que ya conocía al lobo de antes. Subió a su habitación no le importó si su padre estaba ahí pues casi nunca lo hacia asi que ella ya estaba acostumbrada a estar sola.

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Tori iba llegando a su casa había salido a pasear después de un largo dia de escuela.

-Donde andabas- pregunto Trina desde la cocina

-Dando un paseo-

-Mmm-- pujo Trina ya que estaba sacando el pan de uno de los gabinetes-- quieres algo de comer- preguntó después

-Si- contestó Tori rápidamente, se fue a la cocina, eran pocas las veces en que Trina le ofrecía algo y cuando lo hacía la morena menor aprovechaba porque en esas ocasiones podían tener conversaciones fuera de que la escuela y esas cosas.

-Tori, tu eres amiga de Cat- pregunto Trina mientras hacía unos emparedados

-Si porque-

-Ella es bonita- comentó la morena mayor, Tori miro a su hermana con curiosidad pero ahí estaba la conversación

-Te gusta la Gatito Rojo- aseguró la morena menor

-Me llama la atención- dejó salir Trina, hacía mucho que la pelirroja había llamado su atención más bien le había llamado la atención desde el primer dia que ingreso a HA pero había preferido ignorarlo pero se dio cuenta de que no podía sacar a esa chica de su cabeza así que había decidido intentar algo y ver qué era lo que pasaba, muchas personas creían que a ella le gustaban los hombres pero no era así. Una porque desde pequeña siempre sintió mas atracción por las mujeres que por los hombres y dos porque tenía el aparato reproductor masculino, al igual que Tori ambas habian nacido con una complicacion genetica.

-Quieres hablar con ella- preguntó Tori

-Crees que me haga caso-

-Si porque no-

-Pues no tengo muy buena fama en la escuela ya sabes cuando dicen Trina Vega todos salen corriendo al igual que cuando dicen Jade West-

-Solo deja que ella conozca lo que yo se de ti-- comenzó a decir la mitad-latina menor-- todos hablan por lo que tu les muestras sólo para que no te hagan daño pero se que Cat no lo hará solo muestrate tal y como eres y veras que ella no te va a ignorar- Trina sonrió ante lo dicho por su hermana era cierto toda esa fama era para que nadie lograra pasar la capa que ella misma se había creado para no salir lastimada. Anteriormente la Vega mayor había confiado en alguien y esta persona la había lastimado demasiado al punto de que ella ya no confiaba en nadie pero ahora que escuchaba a su hermana decir eso penso que quizas no todas las personas eran iguales y quizás era el momento de darse una nueva oportunidad, darse una oportunidad con Cat si es que la pelirroja le prestaba atención y la aceptaba tal y como era.

-Lo intentare- suspiro Trina

-Buena suerte- deseo Tori - hablar con Cat no es dificil solo tienes que ser buena con ella así como lo eres conmigo pero recuerda la diferencia yo soy tu hermana y ella la chica que te gusta- agrego después la morena menor

-Eso no se me olvida-

-Siempre tenlo en cuenta y por favor no la hagas llorar-

-No lo haré- dijo Trina sonriendo

-Por cierto le gustan los dulces- dijo la morena subiendo las escaleras, Trina sonrió a pesar de que en la escuela todos pensaban que no se llevaban bien entre ellas las cosas eran muy diferentes cuando estaban en casa.

-Tori ten cuidado con Jade, ella no va a ser tu amiga tan fácil muchas personas han jugado con sus sentimientos- dejo salir la morena mayor, Tori asintió ante lo dicho por su hermana-- y no le digas que eres un lobo- agrego Trina, esta había sentido el olor de Jade impregnado en el cuerpo de su hermana sabía que no había pasado nada más allá de un roce o quizás un abrazo aunque duda que la gran Bruja del Oeste hubiera abrazado a su hermana el odio que supuestamente le tenía y el orgullo no le permitían mostrar sus verdaderos sentimientos pero en lo que la morena mayor se sentía muy segura era en que su hermana y la gótica habian estado juntas.

-No lo hare aun- dijo Tori antes de seguir su camino hacia su habitación