Red Succubus
Era una noche fría. La lluvia caía intensamente. Jane estaba en su habitación observando por la ventana. Estaba cansado. Había sido un largo día. Dos casos a la vez. Los dos resueltos. Sin duda eran un buen equipo. Sonrió en la ventana al recordar como hizo enojar a Lisbon en algunas ocasiones durante el día.
…
Lisbon: "Por qué tienes que hacerme pasar por tu pareja a veces? Y sin decírmelo con anterioridad? Eso molesta."
Jane: "Oh, vamos, Lisbon. Te divierte."
Lisbon: "Vete al diablo."
…
Se levantó de la orilla de la ventana, la cual es bastante ancha como para sentarse, apagó la lámpara que se encontraba en la mesita de noche y se acostó. Se arropó y se quedó dormido con una leve sonrisa en su rostro.
XXX
En plena madrugada, Jane se despertó porque sintió algo de frio. Miro a la ventana y notó que estaba abierta. Se levantó con curiosidad y la cerró. Sería el viento? Se encogió de hombros y volvió a la cama, pero luego vio algo como una silueta acercándose a él. Rápido encendió la lamparita de noche y la vio.
Una mujer de cabello negro azulado y algo alborotado estaba en frente de él. Tenía unos ojos azul añil penetrantes y sus labios eran algo carnosos, pero no exagerados y estaban pintados de negro. Su piel era blanca como la nieve. Su atuendo era gótico, pero sexy. Sus curvas eran perfectas. El se quedó pasmado ante su presencia. Era hermosa e interesante, pero a la vez, había algo en ella monstruoso. El lo notó rápidamente, sin embargo no podía reaccionar. Estaba impactado ante tanta belleza.
La mujer se acercó sensualmente hacia Jane con una muy leve sonrisa. Ahora solo estaba a centímetros de su cara. Podía sentir su aliento caliente sobre él. Sin decir ni una palabra, la mujer introdujo sus manos entre los rizos de él y lo atrajo hacia ella. Lo besó. Fue un beso lento, pero muy caliente. Algo que verdaderamente lo encendió. Los dos se besaban apasionadamente con los ojos cerrados. Hace cuanto que Jane no estaba en los brazos de una mujer? Le pareció todo tan extraño de momento, pero la excitación lo hizo olvidar y ser racional. La mujer desabotonó la camisa azul claro de Jane y acarició su pecho mientras lo besaba. El se decidió a abrazarla y tocarla. Trató de hacerlo, pero ella se lo impedía. Quería jugar con él? Eso lo excito mucho más.
Si hubiese sido por él, ya la hubiese desnudado y se le hubiese tirado encima en la cama, pero ella quería llevar total control de la situación y él obedeció sin decir ni una sola palabra. Ella lo hizo caer en la cama y caminó como gata hacia él. Mordió su labio inferior, para luego besarlo por su cuello. El estaba alucinando con sus besos. Se mordía los labios al sentir su boca sobre él. Ella bajó sensualmente por su pecho. Besó y pellizco suavemente sus tetillas y luego besó todo su torso. Mientras lo besaba, acariciaba el enorme bulto que se encontraba en el pantalón de Jane. El sacaba suspiros suaves y ella lo miraba con picardía. Se le reía en la cara.
Sacó su miembro de su pantalón y comenzó a hacerle caricias intensas lo que provocó algunos espasmos de placer en él.
"De donde saliste?" Preguntó Jane como un susurro con la cabeza completamente estirada hacia atrás de tanto placer, exponiendo su cuello. Ella miró su cuello y se mordió los labios, esto sin dejar de masturbarlo.
La misteriosa mujer besó la punta de su pene suavemente y luego lo introdujo por completo en su boca lo que lo hizo gemir suavemente. El trató de sentarse un poco, apoyándose en sus codos para observarla. Ella le devolvía esa mirada fría, pero caliente al mismo tiempo; excitante, pero demente. El no sabía ni cómo explicarlo.
El se hechó un poco hacia atrás para pegar su espalda pared. Agarró el cabello de la mujer y le hizo un moño con sus manos para poder observar mejor el acto. Sus manos bajaban y subían con el ritmo que ella llevaba. El estaba a punto de explotar. Ella se dio cuenta de ello y se detuvo. Lo miró intensamente. Gateó hacia él y luego se sentó encima de su miembro erecto. Lo besaba intensamente mientras hacía movimientos suaves con sus caderas. El gemía entre besos y ella simplemente sonreía.
El aprovechó el momento para acariciar sus pechos y llevarlos a su boca. Cuando los dos estaban a punto de llegar al clímax, ella apartó la cabeza de Jane de sus pechos con sus dos manos y comenzó a besar su cuello. El colocó sus manos la espalda de ella. De momento, Jane sintió un dolor intenso en su cuello y sacó un gemido de dolor mezclado con placer. La mujer había enterrado sus colmillos en él y ahora estaba succionando. También lastimaba su espalda con sus uñas haciéndolo sangrar un poco. Esto no estaba bien, pero él estaba como hipnotizado por ella y no hizo nada para impedir que lo lastimara, al contrario, se hecho ahora hacia el frente, agarró las caderas de esta e hizo la penetración mucho más intensa y los movimientos mucho más rápidos sin importarle que su cuello estaba sangrando y que la sangre estaba ya bajando por su pecho.
Comenzó a sentirse mareado, pero no dejó de moverse hasta que se vació por completo dentro de ella. Cuando terminaron, los dos estaban exhaustos, sudados, hiperventilados. Ella lo miró a los ojos intensamente. Su boca y sus manos estaban llenas de sangre. El se quedó mirándola pasmado. Ella volvió a besar su cuello y el no entendía por qué no se lo impedía. Lo hizo caer de espaldas nuevamente en la cama y lo siguió succionando. El volvió a sentir su pene erecto, pero estaba débil como para otro round. Esto era una locura. Su visión ahora era borrosa, pero podía sentir el cuerpo caliente de aquella mujer aun encima de él. No podía apartarla, no podía hacer nada. Ahora había caído en un profundo sueño.
XXX
Despertó a las 6 de la madrugada con la alarma de su radio. No estaba desnudo, estaba igual como se había acostado, pero con una diferencia. Había tenido un sueño erótico y la cama era testigo de ello. Estaba muy cansado, sudado y había eyaculado dormido. Aún así, tenía esa erección normal que tiene todo hombre cuando despierta por la mañana.
Se levantó de la cama y se hecho el pelo hacia atrás. Jamás había soñado algo así. Fue al baño. Se quitó la ropa dejándola en el suelo de una esquina del baño y tomó una ducha de agua fría. El pasar el jabón por su cuello y su espalda le ardió un poco. Salió de la ducha y se miró la espalda en el espejo. Qué extraño. Tenía rasguños. Se quedó observándolos por un momento con cara de intriga. Tomó el cepillo de dientes en sus manos y cuando comenzó a lavarse la boca, vio dos puntos color violeta en su cuello. Escupió la pasta de dientes, tomó un poco de agua y se enjuagó. Se miró el cuello en el espejo. Se tocó. Le dolía un poco. Estaba perplejo. Como era posible?
Me encantan las historias de vampiros, demonios y cosas así. Asi que decidí escribir esta. Se supone que es un one-shot, pero si se me ocurre algo más, creo que lo añadiré. xD
Espero que la disfruten y espero sus reviews claro. :)
Para las personas que no saben el porque del titulo...
Succubus (latin) = Súcubo
adj. [Espíritu o demonio] con apariencia de mujer que tiene relaciones sexuales con un hombre:
La brujería admite como verdaderos los tratos con los súcubos.
En general son mujeres de gran sensualidad, persuasión y carácter.
Este personaje es una de las bases de la figura del vampiro.
A menudo, simplemente aparecen en los sueños como una mujer atractiva y desnuda de la que la víctima no puede deshacerse de ella ni olvidarla, incluso después de despertar.
La versión más difundida es que los súcubos atacan a sus víctimas para absorber la sangre o energía vital del hombre y así alimentarse. A menudo, esto provoca en el hombre dolencias físicas y espirituales, y hasta la muerte.
