Disclaimer: Todos los personajes son de J.K Rowling


Fred. Su nombre se siente extraño en sus labios cuando lo pronuncian de ese modo, en ese tono de incredulidad y dolor, mayormente de dolor. No es verdad, es una pesadilla, por que él era Fred, su hermano, su amigo, su gemelo, y él tenia que saber que debían estar juntos por todo el tiempo de su vida, hasta el fin de los tiempos, eran los dos o nada, venían en un mismo paquete, en la misma tanda, eran fred y George, George y Fred. No existía otro resultado a la ecuación mas el que iban a estar juntos por siempre. Nacieron juntos, pasaron toda su vida juntos, disfrutaron de todas las experiencias de esta juntos y aun debían experimentar mas y claro, ellos iban a morir juntos.

Y al verlo allí sonriendo con los ojos abiertos mirando el vacío quería imitar su sonrisa, contagiarse de su alegría como siempre había hecho desde los primeros meses de vida, y cuando su sonrisa solo fue una mueca rota y extraña se dio cuenta de que era real, de que Fred ya no estaba con el, se había ido, lo había dejado, ya no eran dos el estaba solo, ya no podría hacer bromas por que no habría con quien planearlas, ya no podía reír por que nada lo haria reír, veía el mundo en blanco y negro, sin color y sin animo, su pecho dolía como si el globo hubiera estado allí toda su vida inflándose de alegría y felicidad ahora hubiera explotado dejando una corriente de aire fría y extraña. Y sinceramente no le gustaba lo que sentía, tampoco ese sentimiento de querer llenar el vacío de su compañero con el de otras personas, por que todo daba igual si al final del día seguía sintiendo esa amarga sensación en su pecho.

No quería superarlo, no podía, dolía demasiado, entonces tiempo después cuando creía que lo aceptaba tan solo el verse en el espejo hacia que sus fuerzas flaquearan y deseara morir como su gemelo, como su amigo, su hermano. Intentó con todas sus fuerzas atarse al mundo que le quedaba, llenar el hueco de su pecho con otras personas pero no podía, recordaba como animaban las fiestas a los diez años implemente molestando a su tía Muriel, lanzando bombas fétidas en las reuniones familiares, aquello les había costado la indignación de su Tía abuela, pero todo valía la pena si Fred estaba feliz, si el reía, si el lo acompañaba, siempre supo que Fred era el mas valiente, el mas fuerte, el mas querido, y por eso lloraba y gritaba diciendo que era un error, él debía morir, no Fred, el podía ser reemplazado Fred no.

Quería conservar su recuerdo, su risa, el momento del día cuando sus brazos lo rodeaban en un calido abrazo de esos que solo compartes con tu persona, con aquella que quieres y por la que darías tu vida, no de un modo romántico sino un abrazo de apoyo y que conlleva la promesa del "estaré a tu lado cada vez que me necesites, pase lo que pase". Y lo hiere pensar que no será así, porque ya no está, que ya no puede, que el tendría que haber estado a su lado e interceptado aquel ataque, entonces Fred estaría aquí a su lado, pero no era posible, porque cuando su hermano mas lo necesitaba el no estuvo y eso lo perseguirá hasta el fin de los tiempos y mas allá, nunca olvidará aquello y eso lo hace gritar aun más fuerte, desgarrándose la garganta en un esfuerzo de traerlo de vuelta, de despertarlo de ese sueño al que esta sometido, de retroceder el tiempo y volver a disfrutar de él, de todos sus momentos en que estaban juntos.

Ya nada era igual, el mundo era distinto para George, no lo entendía todo como antes, las cosas costaban el doble de esfuerzo, simplemente se sentía perdido en un lugar extraño que no parecía haber visto antes. Por que Fred había muerto. Por que ahora solo era George.