Disclaimer: South Park no me pertenece.
Summary: Tweek es animado a declarar por fin su amor por el pelinegro durante su, ya tradicional, escape de verano.
Dime lo que sientes
Aire fresco, relucientes estrellas, tranquilidad absoluta y la compañía de mis mejores amigos. Era todo lo que necesitaba para sentirme pleno. Así, como ya era tradición, viajamos a un pequeño bosque apartado de la ya gran y ruidosa South Park. Desde que el pueblo comenzó un crecimiento acelerado hace unos años, ya nada fue lo mismo, en realidad…de pueblo no quedó nada. Por esto y disfrutar de una salida únicamente de amigos, es que hacíamos un escape cada verano. Viajábamos en la vieja camioneta de Clyde, a pesar de tener disponibles los lujosos vehículos de Token, preferíamos hacerlo de la forma más sencilla posible. Nos quedábamos en el lugar un fin de semana entero, para relajarnos, recordar, añorar y ser felices a nuestra manera.
Nos encontrábamos disfrutando de la segunda noche alejados de todo. Estábamos los cuatro sentados en la parte trasera de la vieja camioneta, observando el sin igual espectáculo de luces que nos ofrecía la naturaleza.
-¿No creen que es genial?- Preguntó el chico castaño, que se encontraba sentado frente a mí, sin alejar su vista del cielo.
-¿Qué cosa?-Pregunté fluidamente. Con el paso de los años, al hallar y asumir el origen de mis problemas nerviosos, comencé a erradicarlo poco a poco, no obstante, no fui capaz de abandonarlo por completo, simplemente me detuve en un punto "sano". Seguía con algunas expresiones involuntarias en momento de estrés, no obstante, los temblores constante habían desaparecido, podía abotonar correctamente mi camisa y ordenar mejor mi alborotado cabello en una pequeña coleta.
-Aun estar los cuatro junto a pesar de todos estos años-Respondió Clyde sumido en su propio mundo. Ante su afirmación se formó una pequeña sonrisa en mi rostro. Tenía razón. La nostalgia siempre nos invadía al venir a este lugar.
-Lo es-Respondió serenamente Token, como de costumbre.
-Maricas-Interrumpió secamente el pelinegro, acabando con la atmosfera.
-Siempre jodes los momentos- Comentó riendo Token.
-Es parte de todo esto-Habló aun embobado el castaño. Estaba tan hipnotizado por las brillantes estrellas que ni siquiera se inmutaba por el insulto.
-Yo también creo que es genial…estar junto a ustedes-Apoyé, tímidamente, volviendo al tema, simultáneamente abracé mis rodillas. La penétrate mirada que Craig me dirigía solo lograba intimidarme más. - ¿Q-que sucede?- Cuestioné enfocando mi vista en mis inquietas manos.
-Yo también lo creo-Respondió suavemente el pelinegro, mientras posaba su mano izquierda sobre la mías. Al instante dirigí mi mirada hacia sus profundos ojos azules, aquellos que me sacan de la realidad y hacen que me pierda en un mundo perfecto.
-¿Ahora quién es el marica?- Se burló el ya incorporado Clyde. Al escucharlo terminé bruscamente el contacto con el ojiazul. A pesar de llevar años enamorado del pelinegro, aún sentía muchas inseguridades. Me era casi imposible dejarme llevar, además nunca había compartido el tema con nadie. Todo resultaba ser, como diría en antaño, demasiada presión.
-Tú- Se dirigió Craig al castaño casi en un gruñido.
-Tranquilo hombre-Habló Clyde a la vez que alzaba sus manos a la altura de sus hombros.
- Voy a dar una vuelta- Notificó secamente el pelinegro mientras se ponía de pie.
-No, podrías perderte-Lo detuve jalando la manga de su chaqueta azul. Sabía que escapaba por mi reciente reacción, jodía cada oportunidad, no podía evitar comportarme como un imbécil ante él.
-Es imposible, todos conocemos demasiado bien este lugar-Rebatió el pelinegro librándose suavemente de mi agarre.
-Además, sería demasiada presión-Añadió Clyde burlándose de mi pasado. Al instante Craig le dedico su típica seña para luego bajar del vehículo y alejarse por el frondoso bosque.
-Ten cuidado-Pedí antes de que el chico del chullo desapareciera de nuestra vista.
-No te preocupes, ese cabrón podría pelear con un oso y salir ileso-Me tranquilizó Token mientras abría una soda.
-Tienes razón-Afirmé cabizbajo. Me sentía culpable, evidentemente Craig se había cansado de mis actitudes esquivas, hemos pasado años en un ir y venir de emociones, sin lograr que ninguno logre declararse abiertamente lo cual solo produce más inseguridades que poco a poco nos han ido alejando. Quisiera tener de una vez el valor para enfrentar la situación, antes de que sea demasiado tarde para nosotros.
-Ya cambia esa cara hombre, solo ve a buscarlo y ya-Dijo Clyde sentándose a mi lado con una gran sonrisa.
-¿Qu-qué?-Pregunté reflejando sorpresa en mi rostro.
-Dios…ya estamos cansados de todo esto, declárense de una vez, sean gays y enorgullézcanos-Agregó Clyde posando su mano empuñada sobre su corazón acompañado de una expresión de orgullo en su rostro. Le di una sonrisa tímida en respuesta, el castaño era capaz de animar hasta al ser más deprimido.
-¿A que le temes Tweek?- Intervino Token ante mi silencio.
-Si ¿a qué le temes?- Repitió Clyde con un fingido tono serio. Me tomé unos segundos antes de responder.
-Soy un fenómeno, como todos decían cuando niños, a pesar de haber mejorado con los años sigo teniendo comportamientos extraños de vez en cuando y esos jodidos gnomos aun no me dejan-Confesé frunciendo el ceño en las últimas palabras. Esos cabrones- No quiero joder mi amistad con Craig, dando un paso y luego arruinándolo con mis imbecilidades. Es demasiado importante para mí- Continué acompañado de un semblante triste. Ambos chucos se quedaron mirándome por unos momentos sin decir nada.
-Tweek, no eres un fenómeno- Intervino el castaño posando su mano izquierda por sobre mi hombro- y que nadie se atreva a decir lo contrario, hablo en serio- Añadió frunciendo levemente el ceño. Lo miré sorprendido, no era común ver a Clyde de esa forma.
-Yo…simplemente creo que él se cansará de mí y luego ni siquiera podremos estar juntos como amigos- Seguí confesando los miedos que me han atacado por años.
-Craig te ama Tweek, de eso no hay duda, haría y hará cualquier cosa por ti, lo sé- Volvió a intervenir Clyde- es como un jodido adicto a ti, jamás podría cansarse-Añadió acompañado de una amplia sonrisa.
-Tweek, si hasta el idiota de Clyde está seguro de eso, no veo que duda puede quedarte-Apoyó Token junto a una sonrisa paternal de esas que solo él sabe dar. Sentía como mis mejillas se sonrojaban. Nadie nos conocía mejor que ellos para poder hablar del tema. Quizás tantos años de silencio me hicieron agravar imaginariamente la situación haciéndome imposible avanzar.
-Hey, no me digas así- Se quejó el aludido- de todas formas, Tweek si aún te queda alguna duda…ve a resolverlo con el involucrado…quien mejor para ser jodidamente honesto y claro que Craig Tucker-Ánimo el de chaqueta roja mientras se ponía de pie, acto seguido, me ofreció su mano, la cual acepté dudoso- Ven vamos-Dijo dándome un impulso para ponerme de pie.
-Terminen esto de una vez, Craig lleva lloriqueando demasiado tiempo- Ánimo Token poniéndose de pie al igual que nosotros- No le quites lo poco que le queda de esperanza. Ambos se necesitan-Agregó seriamente, infundiéndome un extraño y momentáneo valor.
-Exacto…ve…sigue el camino amarillo-Añadió Clyde apuntando la dirección que el pelinegro siguió. En seguida Token se dio una pequeña palmadita en el rostro. Por mi parte seguía sin agregar palabra. Estaba totalmente descolocado…solo quizás…tenían razón.
-Ve al lago, te aseguro que estará ahí-Informó el chico de color dándome un pequeño empujoncito.
-Esta ngh bien-Acepté revelando mi nerviosismo con mis viejas costumbres- ¿Están se-seguros?- Pregunté una vez abajo de la camioneta. El miedo y la ansiedad comenzaban a envolverme al instante.
-Más seguro que nunca, ahora ve y no vuelvas hasta que ambos sean muuuuy gays-Exigió el castaño acompañado de una gran sonrisa.
-GAH- Grité como en los viejos tiempos mientras me alejaba del pequeño campamento. Maldita presión social. Caminé cuidadosamente, intentando no tropezar con las raíces de los árboles o arbustos. Sentía cada minuto más largo que el anterior, la ansiedad me consumía a cada paso más cerca de mi objetivo. Ni siquiera sabía que iba a hacer, solo estaba seguro de una cosa, es ahora o nunca, si desperdicio esta oportunidad quizás jamás sea capaz de revelarle claramente mis sentimientos al pelinegro. Estaba cansando de amarlo en silencio.
Cuando al fin visualice el lago frente a mí, el cual reflejaba a la perfección la enorme luna que nos acompañaba esta noche, sentí una leve tranquilidad. Ningún lugar podría ser más propició para mi recién adoptada misión. Caminé lentamente por la orilla del lago sin alejar mi vista del mismo, estaba sumido en mis pensamientos, en mis recuerdos, en una respuesta, en la seguridad para seguir adelante y por sobre todo, en el chico dueño de los sentimientos que jamás me creí capaz de tener hasta que se convirtieron en una realidad.
-¿Qué haces aquí?-Escuché una voz ronca a mis espaldas.
-¡GAH! no me mates- Grité inmediatamente cubriendo mi cabeza mientras volteaba rápidamente- Ngh Craig eres tú- Agregué posando mi mano derecha sobre mi corazón el cual latía frenéticamente.
-Tranquilo-Dijo acercándose lentamente a mí- ¿Qué haces aquí? No deberías haber salido solo-Me reprendió con su habitual expresión estoica.
-Te-te estaba buscando ngh- Los nervios me estaba consumiendo. Me sentía como un imbécil actuando de esta forma frente al pelinegro. Siempre ante él me veía más extraño de lo usual, lo cual, solo acrecentaba mi inseguridad.
-¿Por qué? sabes que puedo cuidarme solo-Añadió secamente.
-Lo sé…no se ngh trata de eso-Contradije intentando sonar tranquilo, lo cual, evidentemente, no conseguí.
-Entonces ¿qué?- Volvió a cuestionar mientras escondía sus manos en los bolsillos de sus jeans negros. Me quedé estático por varios segundos intentando ordenar mis ideas. No sabía cómo comenzar. Tal vez aún no estaba preparado para esto- Mejor regresemos de una vez- Sugirió al no recibir respuesta, acto seguido comenzó a caminar lentamente en dirección hacia el campamento.
-No, ¡espera! ngh- Lo detuve sujetando la espalda de su tradicional chaqueta azul marino. No podía seguir así, no debía…necesitaba un respuesta de mis propios sentimientos. De una vez por todas tenía que decidir si seguir adelante expresando mis sentimientos o asumir el rechazo y esforzarme por suprimir mí incondicional amor.
-¿Qué pasa?-Preguntó sin voltear. Sentía como las lágrimas comenzaban a acumularse en mis ojos. Tantas emociones juntas me volvían demasiado inestable. Apoyé mí frente en su espalda mientras con mis manos sujetaba fuertemente su chaqueta- ¿Tweek?- Me nombró. Seguía sin ser capaz de responder- Tweek…no te asustes, nada va a pasar en el camino de regreso.
-No es ngh eso- Logré formular aun si alejarme del ojiazul.
-¿Qué es entonces?-Cuestionó cuidadosamente. Me quedé nuevamente en silencio. Intentando armarme de valor. Simultáneamente comencé a extender lentamente mis brazos por la cintura del pelinegro, abrazándolo- Tweek…tu…
-¿No estas cansando de todo esto?-Lo interrumpí hablando rápida y fuertemente mientras las lágrimas comenzaban a escaparse de mis ojos.
-¿De qué?-Preguntó a la vez que posaba suavemente sus manos sobre las mías.
-De ngh ya sabes tú...yo…-Agregué perdiendo la fluidez que el impulso anterior me había brindado.
-Necesito que seas claro-Susurró, acto seguido, se libró de mi agarre y volteó lentamente hasta quedar frente a mí- Vamos…no llores- Añadió mientras secaba delicadamente las lágrimas que rodaban por mis mejillas- Ya no puedo seguir así Tweek- Confesó. Ante esa frase, sentí como el mundo se me venía abajo. Tenía razón.
-Lo ngh sabía…estas cansando de mi-Declaré dándole una falsa sonrisa- pero no te preocupes yo…
-Tweek te amo, jamás podría cansarme de ti, simplemente ya no puedo con la angustia de no saber si me correspondes o no, ya no puedo continuar así-Confesó claramente, sujetando mi rostro con ambas manos- Por favor termina con esto y dime lo que sientes- Completó. Estaba atónito, de un segundo a otro mis emociones dieron un vuelco inesperado…la felicidad comenzaba a invadirme como nunca antes lo había hecho. Por fin…por fin había llegado el momento que tanto anhele y a la vez tanto temí.
-Olvídalo…ya entendí-Añadió luego de unos segundos el pelinegro, terminando el contacto mientras retrocedía. Otra vez, con mi silencio, estaba dando la señal equivocada. Antes de que pudiera alejarse más, me acerqué rápidamente a él, posé mis manos en sus hombros y rosé bruscamente sus labios con los míos.
-No te ngh vayas-Pedí al finalizar nuestro efímero primer beso- yo también te amo- Agregué dándole una sincera sonrisa. La expresión de sorpresa que se formó en su rostro era única.
-Dios…tu disfrutas torturándome-Habló apoyando su frente contra la mía- pensé que todo había sido un mal entendido y que me estabas rechazando.
-Lamento…todo este tiempo, tenía miedo-Me disculpé. Nuevamente volvía a hablar fluido. La tensión por fin se había disipado y mi corazón se sentía más dichoso que nunca junto al pelinegro- No quiero perderte- Confesé.
-Nunca más te alejarás de mi Tweekers. Nunca- Aseguró seriamente mientras posaba sus manos en mi cintura, atrayéndome a él.
-¿Lo prometes?-Pregunté tímidamente.
-Por mi vida…no podría dejarte-Respondió, acto seguido comenzó a acercar lentamente nuestros rostros, hasta casi rozar nuestros labios…
-Al fiiiin-Escuchamos a nuestro costado acompañado de unos animados aplausos- oh mis bebés, crecieron tan lento. Creo que voy llorar- Interrumpió un muy emocionado Clyde con lágrimas en sus ojos.
-Lo siento, no pude contenerlo-Se disculpó avergonzado Token saliendo de su escondite tras un alejado arbusto.
-Tu, maldito imbécil-Insultó un muy irritado Craig, enseguida comenzó a caminar pesadamente hacia el castaño.
-Ven aquí y dame un abrazo, estoy muy orgulloso de ti hijo mío-Comentó el de chaqueta roja extendiendo sus brazos- ¿Craig? ¿Qué haces? – Preguntó al ver como el ojiazul se acercaba peligrosamente haciendo sonar sus nudillos- Espera…amigo ¡no!- Gritó antes de salir corriendo seguido por Craig.
-¡Gah!.- Grité al ver como Clyde se lanzaba al lago, nuevamente, seguido por el pelinegro- oh dios, se van a ahogar y…
-Deberíamos ir también- Me interrumpió Token, en seguida corrió a unirse a ellos. Me quedé estático contemplando la escena. Se veían tan, a su manera, felices. Craig intentado ahogar a Clyde mientras Token defendía al segundo, todo acompañado de sus singulares risas.
-¿Qué esperas?-Dijo luego de un rato Craig totalmente empapado mientras se acercaba a mí.
-Ah yo…-Intenté formular antes de ser interrumpido por el ojiazul.
-Ven aquí-Añadió alzándome en sus fuertes brazos- No será lo mismo sin ti- Dijo antes de depositar un suave beso en mis labios.
-No ngh me sueltes-Pedí aferrándome fuertemente a su cuello.
-Sería incapaz-Respondió susurrando a mi oído- Te amo Tweekers- Declaró antes de unir nuestros ansiosos labios. Había estado esperando este momento por años.
Ya no había vuelta atrás. Lo amaba más que nada y al fin era capaz de demostrarlo.
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Hola! Finalmente el "ratito más tarde" que dije se transformó en un día entero xD pero bueno, ando ocupada con otras cosas así que avanzaba muuuuuy lento En fin…Aquí un siempre fiel Creek xD hace tiempo tenía ganas de escribir desde la perspectiva de un Tweek más maduro, aunque amo sus tics –que igual se hicieron presentes- había que hacerlo alguna vez xd…sobre todo me encanta la idea de que su pelo alborotado sea atado en una coletita jaja le da un toque en mi imaginación :3.
Y bueno…como dije en el Style que subí ayer, ambos fics los hice para "celebrar" mi primer mes en fanfictión luego de mi regreso tras un mooooontón de años xD –ya ni siquiera recuerdo el nombre de mi otra cuenta- y como dije…este fic se lo dedico a todos los amantes del Creek sobre todo a quienes usualmente o siempre comenta mis historias de esta hermosa pareja *-* sí, yo los recuerdo a cada uno x,D! So: Miss Moka, pato 262, Kellyzelda 1000, valenfujoshi, Viany Yutaka, mermelada con tostadas .Quién sabe si todos lo leerán jaja pero bueno, sinceramente agradezco mucho sus lindos comentarios que suelen dejar ;w; y me fascina su amorsh por la pareja jaja es como no sé, me siento comprendida(¿? C: espero poder seguir escribiendo historias de su agrado :D!
En fin! Espero que les guste! Breve pero va al caso xD para enredos de días y días están los otros –jodidamente eternos- de mis fics. Muchos saludos a todos :3.
Pd: Esta historia se inspiró en una imagen hermosa que encontré una noche loca, donde el team Stan salía contemplando las estrellas todos sentaditos en una camioneta. La vi y fue un golpe de inspiración xD.
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