CROSS ANGE One Shot 1
Favor, leer las notas finales si tienen alguna duda, gracias.
Descargo de responsabilidad: Todos los personajes y situaciones mencionadas en esta historia Fic, son propiedad de Bandai y Estudios Sunrise y de sus respectivos creadores y propietarios.
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HILDA POV
A veces no podía creer lo que veían mis ojos, pero ver la expresión de felicidad en los ojos de la persona que más quiero, me hace remover el estómago y quebrar mi corazón. Ange, si supieras cuanto mi corazón se acelera con verte, cuanto anhelaba y suspiraba por tenerte cerca de nuevo, cuando creí perderte.
Pero tenías que regresar con ese hombre a tu lado, ¿no? Aquel que de seguro suspiras y anhelas sus caricias, que no es necesario que lo demuestres de forma directa, porque yo puedo verlo por tu mirada, sus toques, y tu tono de voz. Lo sé, porque es lo mismo que siento yo hacia ti.
Nunca había tenido sentimientos hacia los hombres más que de disgusto, como los pocos hombres con los que tuve contacto, solo llegaron a lastimarme. ¿Quizás tu relación con ese hombre Tusk sea distinta? ¿Quizás él sea distinto? No sé, porque no tuve tiempo de preguntártelo directamente. Ya que apenas volviste de nuevo a mi vida, por estar varada en otro mundo, en el mundo de los dragones, donde de forma inusual forjaste una alianza con los que fueron un día, nuestros peores enemigos. Curioso que hayas regresado algo cambiada, no solo físicamente como pude denotar, sino más seria, mas con un aire a líder, que quizás hiciste temblar a la misma comandante Jill, o Alektra María von Loewenherz, como se haga llamar esa perra desalmada.
Pero volviste a irte por culpa de esa mujer, no me extraña a causa de las cosas que hizo Jill, para obligarte a quedarte, como amenazar de muerte a tu criada Momoka, quizás querías irte con ese hombre que te ayudo y estuvo a tu lado; como si fuese un verdadero caballero de brillante armadura, de esos que leía Salia en sus ridículos cuentos, creyendo ella que nadie lo sabía. Sentí una gran envidia en eso, ¿un caballero de brillante armadura?
Solo eran partes de cuentos ridículos, que solo le podrían interesar a personas débiles como Salia, que no dudo en traicionarnos para irse con Embryo. Mismo caso creo que ahora ocurrirá con nuestra comandante Jill, si es que la mención del nombre del canalla que tanto daño nos ha hecho a las Normas, fue pronunciada de sus labios anoche mientras dormía, significan algo. Cuentos para personas débiles de un mundo regido por débiles, casi corderos dirigidos al matadero por un lobo. Aun así, la simple idea de tener un caballero, se extrapolaba a lo que vi cuando ese sujeto a quien primeramente vi son desagrado la primera vez, Tusk, salvaba a Ange de una Jill que quería usarla para sus fines, usando a Momoka de rehén. Luego vi, como después de que Ange derrotara a Jill, esta escapara junto con él, demostrándole cuanta confianza tenia ella en él.
Y de inmediato comencé a pensar, que quizás…esos cuentos de caballeros sean reales después de todo…Estúpida Hilda…Ya deberías saber que no es así. Después de toda la porquería que se te ha caído encima, ¿quieres seguir pensando de forma ingenua como esa tonta de Salia, Chris y Ersha, que fueron tan débiles de mente como para abandonarnos? Estupideces. Pero, aun así, sé que necesitare su ayuda.
Camino hasta las celdas de detención, donde se encontraban encerrados Tusk y Vivian, luego del 'heroico escape' del que los tres tuvieron, para poco después Ange fuese capturada por el enemigo. Tusk y Vivian habían vuelto por ayuda, después de ser derribados por causa de Salia y las demás traidoras. Solo para ser capturados por Jill; estúpidos. Pero sé que si necesitare ayuda para derrocar a Jill, de acuerdo a lo que ella pueda estar planeando, necesitare la ayuda de ellos, también para rescatar a Ange de las garras de ese maldito de Embryo. Pero primero necesito comprobar algo, necesito comprobar si es que la lealtad de Tusk hacia Ange es genuina, algo tonto al recordar todo lo que él ha hecho por ella; pero igualmente necesito hacerlo para estar segura.
Aunque dentro de mí, me pregunto en cuanto a estar segura acerca de qué. ¿Si de la lealtad de un hombre hacia una mujer, algo que vería por primera vez? ¿O para comprobarme a mí misma que…? Meneo la cabeza violentamente, no necesito pensar en eso. Solo tengo que hacer lo que tengo que hacer, que las acciones hablen más que las palabras.
Fue lo que pensé, como paso por la celda de Vivian y quedo justo frente a la de Tusk. El chico estaba dormido, nada raro considerando la hora tan tarde que debía de ser. Suspire, ¿en verdad tenía que hacer esto? Bueno en parte lo dije porque quiero como me decía a mí misma, antes de siquiera haber pensado en esto, el comprobar que tan lejos podría llegar ese hombre tonto, con tal de proteger a Ange, con tal de ver hasta dónde podría una persona ir, sobre todo hasta donde podría ser cierto que…
Meneo la cabeza por segunda vez con violencia, ya habrá tiempo para comprobar eso, ahora lo más importante es venir a lo que vinimos. Abrí la celda, pero no tuve que preocuparme de hacer ruido, pues al parecer el hombre estaba dormido profundamente, perfecto para mí. Pero tenía que apresurarme, le había dado a Rosalie media hora, antes de que viniera y pudiera liberar a Vivian por su cuenta, después de todo, no sabría lo que podría pasar adentro. Quizás ni fuese necesaria la presencia de Rosalie y pudiera encargarme yo misma de eso, sin necesidad de perder el tiempo en lo que vine a hacer aquí. Comencé a quitarme de inmediato la ropa apenas entre a la celda, no quería perder tiempo, y quería comprobar mis dudas de una vez. Después de unos momentos me quede en ropa interior de color rosada en su totalidad.
Me miré a mí misma antes de decidirme a ir a lo que vine a hacer aquí en primer lugar, recordándomelo con reproche. Bueno, a los hombres según se, las atrae las mujeres demasiado, y de ese punto es donde los dos follan sin parar, y crean los bebes, ¿cierto? Es la manera en la que venimos todos al mundo, hasta yo misma. Aunque de mi padre no podría hablar mucho, porque no recuerdo mucho de él, y no quiero recordar ahora. Solo vamos a ver y a comprobar, en caso de que el no demuestre la mínima lealtad hacia Ange, ¿Qué hare? Castrarle las bolas o… ¿seguir con eso? Nunca he estado con un hombre, y no es que quiera, pero… ¿Qué si se da, así sea por curiosidad?
Solo meneo la cabeza por última vez, creo que castrarlo sería mejor…en fin, me dirijo hacia donde está el hombre, quien duerme sin camisa solo con sus pantalones; no lo culpo, aquí abajo debe de hacer mucho calor, igualmente no pienso mucho como me inclino de rodillas sobre el hombre, y me agacho hasta quedar mi rostro cerca al de él.
Esperemos que esto funcione. Me dije a mi misma, como con una sonrisa traviesa, soplé hacia su lindo rostro 'angelical' para despertarlo y proceder…y entonces…
FIN DEL HILDA POV
Tusk despertó al sentir una corriente de aire en su rostro, lo cual le hizo despertar somnoliento; al percatarse de lo que había sido, no pudo más que jadear estupefacto por la vista que tenía en frente ahora. Era Hilda, en ropa interior y lencería de color rosa, que parecía fundirse con el color rojizo de su cabello.
"Hola, ¿quieres que te ayude a salir de aquí?"
Tusk comenzó a balbucear como Hilda solo le silencio con sus dedos sus labios, mientras le sonreía de una forma sensual, que hacía que el rostro del hombre se coloreara a rojo por el calor.
"A cambio de eso, quiero que me ayudes con una cosa. Ya que pareces que todavía no lo haces con Ange, ¿verdad?"
Tusk parecía replicar, pero siguió nuevamente siendo silenciado cuando Hilda presiono sus pechos encima de su rostro, haciendo callar cualquier intento de responder algo coherente.
"Si todo sale bien, yo puedo hacerlo por ti."
Decía de una manera muy sensual Hilda, como forzaba con sus manos la cabeza de Tusk más hacia sus senos, sin darle tiempo de un respiro. Fue cuando el hizo algo que no esperaba, y fue quitársela de encima.
"¡Ya basta!" Dijo el chico como se la quitó, aunque no violentamente, tratando de recobrar la respiración
Hilda se irguió algo contrariada ante la actitud del chico, como este procedía a explicarse de una forma que lo que hacía, sin tener que parecer entre ingenuo o estúpido.
"Yo soy el caballero de Ange, y mi primera vez tiene que ser con ella…No… ¡Espera no!" Decía retractándose en la última frase en lo que acaba de decir primero
Hilda solo puso una expresión confundida por el giro de los acontecimientos, Tusk intento explicarse, pero parecía que cada vez que lo hacía, decía algo bastante estúpido.
"Es que…hasta que termine con mi misión, no puedo tener nada de erotismo, o como un caballero no debo ser así."
"Escuche de Ange, que metías a cada rato tu cabeza entre sus piernas."
"¡Esos han sido mal entendidos!" Trataba de aclarar Tusk con la cara roja como un tomate
"Solo fueron accidentes, y no pretendía hacer nada." Decía el chico con la mano derecha en el pecho, en forma de sinceridad, aunque para Hilda lo vio de otro modo
"Entonces, ¿eso significa que eres un perdedor?"
Tusk solo volteo la cabeza apenado y algo molesto por lo dicho, a lo que Hilda no pudo evitar estallar en carcajadas ante el descubrimiento. Después de unos segundos de risa, y que Tusk volteara su cabeza molesto para no seguir observando su expresión burlona. Hilda fue calmándose hasta parar de reír, como solo puso una expresión melancólica y ¿feliz? Como decido hablar.
"ah, ¿el caballero de Ange?"
Hilda solo se dedicó a apoyarse de espaldas en la pared que estaba pegada a un lado de la cama. No pudo evitar reír de forma irónica como coloco una mano en su boca, para tratar de ahogar su desilusión.
"Entonces, así es como es."
"¿Hilda?" Tusk estaba confundido al darse la vuelta y ver la expresión de Hilda
"Realmente eres un caballero Tusk. Aun cuando tales cosas suenen ridículas hoy día."
"¿Eh? ¿Qué dices?" El chico estaba confundido respecto a lo que decía la chica
¿Acaso no le había dicho antes que él era? ¿Entonces, porque…?
"Hilda, ¿Qué sucede?" Pregunto Tusk teniendo curiosidad, algo le decía que no solo era por pedir un favor o comprobar que tan 'leal' pudiera ser el, cuando ya lo demostró
"Que supongo que lo que vine a demostrar, ya quedo demostrado. Eres leal a Ange, Tusk…pero…veraz…" dijo la chica como iba acercándose peligrosamente al chico peli marrón
El cual casi que asustado iba retrocediendo, hasta chocar su espalda a la pared.
"Yo no puedo dejar algo así, cuando me propongo algo, siempre lo consigo…además, nunca he estado con un hombre, si Ange ve en ti algo, quiero verlo también. ¿Nunca lo has hecho verdad? Yo puedo enseñarte, para cuando estés con Ange, puedas proporcionarle suficiente placer, gracias a ver tenido tan buena maestra."
Tusk no sabía qué hacer, ya que no hallaba lugar donde huir, Hilda lo presiono cerca, con sus pechos apretándose en contra el de él, provocándole espasmos al chico, hasta que, en un arrebato, ella con sus dos manos posicionadas a los lados de la cabeza del chico, lo obligo a besarla. En un primer momento Tusk quedo aturdido, sin embargo, muy profundo dentro de él, estaba despertando un instinto animal, diversos pensamientos se arremolinaron dentro de él, entre ellos, sus tiempos en soledad en la isla en su autoexilio, cuando el primer Libertus había fracasado.
Solo, aunque con un par de buenas revistas guarras para adultos que había guardado para sí mismo, en sus noches de soledad. Ahora, parecieran que esas diversas fantasías que había tenido durante esas noches solo, volvieran para adueñarse en ese mismo instante de sus acciones. Tusk rodeo con sus brazos a Hilda por la espalda, mientras se presionaba más hacia adelante, sorprendiendo en parte a la chica, como el chico se inclinaba más contra ella para profundizar el beso.
Terminado el beso, un hilo de baba fue lo que separaba a ambas bocas de seguir degustándose mutuamente. Hilda solo pudo más que lamerse ese rastro de saliva, como por fin una realización golpeo a ella, ella no vino hasta aquí para comprobar que tan 'leal' era Tusk, ella vino aquí por él. Quizás por deseo, satisfacer un hambre de curiosidad, lo que sea, no iban a contenerse ahora, tampoco Tusk.
Tusk bajó la cabeza para presionar sus labios en su frente, pero Hilda ladeó la cara hacia arriba y tiró de él hacia abajo por rodear su brazo derecho a su cuello, que lo guíe a los labios. Sus bocas se conectaron juntos de nuevo. Sus labios son tan suaves. Ella hizo un puño con su mano izquierda en sus cabellos, inclinando la cabeza hacia un lado para poder besarlo totalmente. Él respondió con entusiasmo, deslizando su brazo alrededor de su cintura, agarrándolo con fuerza, envolviendo su otra mano alrededor de la base del cuello, los dedos deslizándose en su cabello. Sus labios se movían juntos, empujar, tirar, encerrándose entre sí. Esta es la parte buena, Hilda pensó mientras sus labios se separaron. Tusk gimió en su boca y ella se aprovechó de estar abierta para deslizar su lengua en ella. Cuando se reunió con él, ella pudo saborear los distintos sabores en la boca de Tusk. Luego se echó hacia atrás, poniéndose de pie y apartándola de nuevo.
"Hilda, no podemos."
Ella también se levantó, mirando su cabello despeinado y sus labios hinchados, jadeando mientras trataba de ordenar sus pensamientos. Sus ojos eran aún más oscuros que antes, sus pupilas parecían estar 'en llamas' y su pecho subía y bajaba.
"¿No me quieres?" Preguntó con un hilo de voz.
Tusk solo trago saliva ante esto. "Sí, pero no debemos."
Hilda cerró la distancia entre ellos, presionando su cuerpo al ras contra el suyo y se quejó:
"…Debemos, Tusk por favor, te necesito." Hilda lo pronuncio con sus labios muy cerca de su odio, en un tono lo bastante sensual, lo cual le hizo enviar un escalofrío por la espalda al chico
Toda barrera mental que pudiera tener Tusk se derrumbaron con esas palabras, ya no podía ocultar su deseo ferviente, pareciera que toda racionalidad fuese abandonada, como dejaba que sus instintos y deseos se hicieran cargo de él, por una vez en su vida.
Tusk cedió, reuniéndose en sus brazos y besarla con fiereza. Se chupó el labio inferior entre los suyos y lo mordió a la ligera, y luego la lamió para calmar el escozor. Hilda le echó los dedos en su cabello, arrastrando sus uñas hasta el cuello. La lengua de Tusk pinchó otra vez los labios, haciendo una oferta de entrada. Ella abrió la boca, dándole la bienvenida, y chupó su lengua. Tusk gimió, agarrándose a ella con más fuerza. Continuaron así durante varios minutos, tratando desesperadamente de acercarse el uno al otro. Hilda arañó el pecho de Tusk mientras sentía su pene duro y presionando contra su vientre. Él gimió y sus manos viajó hasta su culo a continuación, haciendo gemir a Hilda, tirando de su rostro por unos momentos. Él deslizó sus manos abajo, agarrando la parte posterior de los muslos fuertemente para levantarla.
Ella cerró las piernas alrededor de su cintura y atacó su boca de nuevo mientras se sujetaba a él, con una mano en la parte baja de la espalda, y el otro entre los omóplatos. Las manos de Hilda volaron a la parte superior de su sostén, tirando de los cordones del corpiño y desplazándolos hasta que sus pechos se derramaron libremente sin sujeción. Tusk interrumpió el beso, desesperado por ver lo que estaba haciendo. Cuando tuvo a la vista las tetas desnudas, el bajó a ambos de ellos abajo, sentados de espaldas contra la cama con ella a horcajadas sobre él. Sus ojos se perdieron sobre sus pechos hasta los ojos, una mirada de adoración en su rostro.
"Eres tan hermosa," jadeó.
Hilda sintió un calor de difusión a través de su pecho y el vientre, y bajó la frente a la suya, con el pecho agitado. De repente, sus cálidas manos ásperas estaban en sus pechos, amasando suavemente. La besó en los labios, la mejilla, su mandíbula. Hilda maulló. La boca de Tusk se cerró sobre un punto directamente debajo de la oreja, chupando y lamiendo, como sus pulgares se posaron sobre sus pezones tiesos. Hilda echó la cabeza hacia atrás, cerrando los ojos. Oh, esto se siente bien, todo va bien. Zola no era tan buena como esto, nunca hizo esto de este modo. Solo preocupándose por su propio placer, que el de la otra persona. Pero el, ¿Dónde aprendió todo esto? ¿No que esta es su primera vez? Su boca se movió por su cuello, salpicando besos sobre su clavícula. Luego desapareció e Hilda abrió la boca para quejarse.
Ella no tuvo la oportunidad de hacerlo, cuando un mero instante después sintió que su pezón derecho y parte de su pecho siendo absorbidos entre su boca caliente y húmeda, mientras que él se mantuvo en masajear y acariciar su zona izquierda con la mano. Zola le había hecho esto docenas de veces, junto a sus antiguas compañeras Chris y Rosalie, aunque así debía de admitir que Tusk era bastante bueno, para ser la primera vez ella con un hombre. ¿En serio, en donde diablos aprendió esto? ¿De verdad es su primera vez o mintió acaso? Esta forma que parecía hecha por un experto, elmorder y chupar sus pezones, agarrando sus pechos con dureza en sus manos codiciosas. La forma de lo que Tusk estaba haciendo que no podría haber sido más diferente, sin embargo; Hilda sacudió sus caderas involuntariamente, sintiendo una vez más lo difícil que era. También sintió una familiar humedad entre sus muslos. Ella movió sus caderas de nuevo para verificar la sensación. Su movimiento presionó su centro contra su virilidad, lo que induce un sentido de presión dolorosamente agradable y peculiar entre sus piernas. Ella empezó a mecer sus caderas para perseguir la sensación. Tusk se quedó sin aliento y se separó de ella. Hilda bajó la vista, frente a él, pensando que la decepción se debe mostrar en su rostro.
"¿Qué estás haciendo?" Preguntó ella, sorprendiéndolo de lo enfadada que sonaba
"Espera, déjame hacer esto." Respondía Tusk en un extraño tono que se oía entre deseoso y desesperado, justo como ella
Ella dejó escapar un chillido de sorpresa, con los ojos abiertos cuando sintió a Tusk transportarse alrededor de sus caderas, tirando de ella hacia un lado de la cama. Tenía el mismo enfoque determinado en los ojos de antes, con el mando cuando se arrodilló delante de sus muslos extendidos y acercó la boca a su flor. Estaba demasiado aturdida al principio para hacer nada más que estar allí mientras Tusk deslizaba sus calzones fuera de ella, dejando al descubierto su preciosa zona y condición de mujer frente a él. Ella estaba alago nerviosa, ya que, si bien este tipo de cosas las había hecho antes con mujeres, una gran anticipación no pudo embargarla por saberse que esta sería su primera vez con un hombre y estaba preparada para experimentar tal sensación. Tusk sin esperar, separó sus pliegues con dos dedos. Cuando cerró sus labios alrededor de ese nudo y succionó, Hilda apretó los muslos alrededor de su cabeza, en el repentino placer agudo. Su mente comenzó a trabajar de nuevo y se empujó inútilmente contra la cabeza de Tusk.
Su tono de voz se sentía cortada cuando se quedó sin aliento ante la sensación de Tusk lamiendo su raja. Se quejaba de nuevo y gemía en voz alta. "El sabor de ti es tan bueno." Eran las palabras del chico
Movió la otra pierna por encima del hombro y deslizó sus manos por debajo de sus caderas, agarrando sus nalgas. Él bajó la cabeza de nuevo. La besó entre sus piernas como la había besado en la boca, con sus labios trabajando, lamiendo y chupando el coño. Él movió su lengua alrededor, arriba y abajo, las burlas en su entrada y lamiendo un punto sensible justo debajo de ella. En poco tiempo Hilda no podía decir exactamente dónde tenía la boca o lo que estaba haciendo. Esa extraña dolor que había sentido antes de que volviera, sólo es más urgente ahora.
Pero Tusk atrapado allí con sus muslos no le ofrece ningún alivio. Con suavidad, pero con insistencia el empujó sus rodillas hacia abajo hasta el borde del colchón. Ella siguió empujando contra la cabeza de Tusk, aliviado cuando salió de su pobre y palpitante raja tan solo para moverse de nuevo más abajo. Tan exquisito como la tortura, deteniéndolo sería aún peor. No se detuvo, sino que continuó a enterrar su cara dentro de ella. Esa lengua enloquecedora lamía sus pliegues, la nariz presionando contra su protuberancia que apenas había permitido a sí misma a explorar en sus propias camas o en el baño. Tusk devorado a ella como si tuviera hambre, los ruidos húmedos solo tenían lavando su cara y su sobrecalentamiento de la piel. Mientras que la lengua de Tusk se movía sobre sus labios inferiores y succionó, Hilda se retorció y maulló como el resto de su cuerpo en espiral más y más fuerte. Estaba ardiendo, que iba a sentir el desfallecer, ella era…
Como una chispa, el infierno creció y creció hasta que ella casi que estaba 'llorando' y apretándose contra él, sintiendo una hermosa explosión de ondas terribles barriendo sobre ella y todo su cuerpo, haciéndola gemir en voz alta, dejándola de nuevo tendida en la cama.
Tembló, respirando con dificultad y la sensación de que no había nada más que pudiera estar inclinado a hacer, sino sentarse aquí y sentir así. Sin embargo, Tusk continuó trabajando su boca sobre ella, su lengua con indolencia parecía estar burlándose de hasta el último espasmo de ella. Hilda parece que no puede detener el espasmo sin sentido de las caderas y peor, Tusk no parecía inclinado a detenerla tampoco.
Termino de hacerlo jadeando, tras probar de más el dulce sabor de la chica, colapsando sobre ella, tragando desesperadamente bocanadas de aire cuando apoyó la cabeza en su estómago. Todavía nadando en un sueño de felicidad; Hilda peinado distraídamente los dedos por su pelo, a la espera de su corazón llegar a la calma. Poco a poco, Tusk empezó colocando suaves besos castos, sobre la piel de su estómago, olfateando hasta su pecho para que pudiera alcanzar el espacio entre su caja torácica. A continuación, saltando encima de ella, él comenzó a salpicar de besos en la base de su garganta. Hilda desnudó la columna de su cuello, moviendo parte de su cabello suelto, lo que le obligó a seguir adelante antes de que llegara a su premio. Uno fue debajo de la barbilla, besando y lamiendo, dando suaves caricias con sus labios, hasta que subió y se le permitió reclamar sus labios de nuevo, sintiendo las manos que ella había estaba presionando contra su mandíbula, profundizando el beso.
Este era un tipo diferente de beso que ella había recibido de Zola o cualquier otra mujer. Hubo una espiga ahí que Hilda sabía que procedía de ella, lo que la llenó de una emoción sucia como ella abrió la boca para sentir el barrido caliente de la lengua de Tusk. Finalmente, el levantó la cabeza y la miró, acariciando un nudillo sobre su pómulo.
"No ha sido tan desagradable, ¿verdad?" Murmuró. Por más que trató de ocultarlo, Hilda vio la inclinación de suficiencia de su boca y ella rodo los ojos
"Supongo que era pasable." Ella se burló de él con un encogimiento de hombros
"¡Pasable!"
"Oye, esto es demasiado para mí el reconocer que, para ser tu primera vez, lo hiciste muy bien. ¿Cómo es que aprendiste, ¿eh?"
"B-bueno, pase mucho tiempo solo, viviendo en una isla. Tuve montones de tiempo en leer…algunos textos y libros concerniente a la sexualidad y…algunos videos no decentes." creo que esos eran de mis antepasados, los antiguos humanos
"Eh…a pesar de ser primerizo, debo admitir a pesar de mi misma, que eres bastante bueno, pero…" Hilda poso uno de sus dedos en el pecho desnudo de Tusk y a medida que iba acariciándolo, iba produciendo escalofríos por todo su cuerpo, mientras le hablaba en un tono sensual, irresistible para sus hormonas masculinas
"¿Qué dices si te concedo el mismo favor? Nunca lo he hecho con un hombre, así que no estaría mal decir que es 'mi primera vez' también. ¿Eh?" Termino de decir Hilda como ella solo se inclinó de rodillas sobre Tusk, tumbando a este de espaldas a la cama
Con cierta lentitud asfixiante, ella fue bajándole los Boxer el chico, dejando al descubierto por primera vez frente a ella, la parte intima de la anatomía masculina. Hilda asintió antes de mirar hacia abajo, mordiéndose el labio inferior mientras veía su pene, aunque no tenía ni idea de cómo hacerlo al principio; Hilda notó que el miembro de su pareja pedía atención a gritos, así que se dirigió hacia esa parte. Tan cuidadosamente colocando la punta en la boca, chupando suavemente. Estudiando de cerca las diferencias fundamentales que existen entre un hombre y una mujer, decidió seguir adelante, aventurándose en nuevos y desconocidos terrenos, que, con gusto vacilante ella quería transitar.
Primero lo recorrió completamente con su lengua y después lo introdujo todo en su boca, lo degustaba tratando de imaginarse como si fuera el manjar más rico que existía sobre la faz de la tierra. Movimientos como de si chupar un helado, le venían a la mente a Hilda, tratando de buscar el modo adecuado de poder darle gusto a su compañero y a ella misma. Hilda no podía soportarlo más, apretándose de nuevo a su alrededor mientras se acercaba, sus caderas se sacudían ligeramente a medida que acercaba su polla hasta su garganta, gimiendo en voz alta hacia él. Hilda continuó bombeando la cabeza, chupando lo más difícil cuando su lengua lamia lentamente a lo largo de su eje.
Ante tales cuidados, y sin poder aguantarse más, debido a que esta era la primera vez que el sentía tal placer llenándolo ante tal acción, Tusk gimió, derramando su líquido, corriéndose en la boca de su compañera. Hilda se quejó en voz alta, provocando que el hombre agarrara las mantas a cada lado de él, su espalda arqueándose al liberarse en la boca de Hilda, y esta bebió el líquido como si fuese un elíxir de vida; Ella se tensó rápidamente al sentir cada ráfaga en su boca, esperando unos segundos antes de tragar vacilante todo ella, levantando la cabeza hacia él, tosiendo un poco y jadeando. Limpió con su lengua los últimos rastros de la sustancia viscosa que habían quedado en el miembro de su amante, tratando de hacerse una idea del sabor del líquido viscoso que se corría por su boca, bastante diferente de lo que había probado antes.
Tusk se mordió el labio al verla. "L-lo siento ... espera ... ¿¡En verdad tragarla!?"
Hilda tenía su cara coloreada en rojo brillante, igual que su cabello, como ella lo miró, asintiendo con la cabeza. "¿N-No se supone que…? Yo no sabía qué más hacer…además, esto es la primera vez que se lo hago a un hombre, sabe tan raro…" Dijo sacudiendo su cabeza sucesivamente
Hilda no podría decidir si este extraño sabor viscoso en su boca que recién trago, era algo bueno o no, comparado con el de las mujeres con las que había estado, tenía un sabor más espeso y un color más blanquecino y textura más blanda, no podía dejar de sentir cierta curiosidad por esto, dándole un entendimiento más sobre la obvia diferencia entre la anatomía femenina y masculina.
Tusk negó con la cabeza. "Fue genial y era increíble." Acariciaba suavemente los muslos de la chica
Luego continúo hablando con lo siguiente "Creo que hay una última cosa que queda por hacer."
Hilda solo sonrió, pero esta vez con una expresión de cariño, preparada para lo que iba a venir, "Lo sé, también es mi 'primera vez' aunque con un hombre…espero sepas guiarme, ya que en esto soy tan inexperta como tú."
"Yo también lo soy, pero tratare de hacerlo bien…" dijo Tusk esta vez sin duda alguna como paso a besar a Hilda una vez mas
Tusk como todo un caballero fue recostando a Hilda sobre la pequeña cama de la celda, como se apoyó sobre ella con sus codos, mientras se recostaba encima de ella, sintiendo fascinación y excitación por estar con aquella mujer, el cual le hacia trasmitir por dentro un fuego ardiente, casi como fuego puro, que le hacían estremecer por dentro, y le hacían arder su ser, instándole a poseer a aquella mujer, por la cual sentía un deseo inmenso, quizás del mismo que sentía por Ange.
El solo desvió aquellos pensamientos traicioneros dirigidos hacia la mujer que amaba, y solo se dejó llevar por la pasión, que en ese momento sentía. Mientras estaba de pie ante ella, Hilda se obligó a anular la necesidad de evitar los ojos, mirándolo de lleno. Su pene sobresalía con orgullo de una mata de pelo oscuro incluso rizado. Hilda no tenía la menor medida mediante la cual juzgar si era más grande o más pequeño que el hombre promedio, pero tenía un fugaz pensamiento preguntándose cómo todo encajaría dentro de ella. Tusk puso una rodilla en el colchón y se arrastró hacia ella. Se reclinó, estirando mientras cubría su cuerpo con el suyo. Era simple instinto a desprender sus piernas hasta que sus rodillas se presionaron en el colchón de modo que Tusk podría instalarse entre la cuna de sus muslos.
Al principio, parecía que simplemente estaban mirando el uno al otro y Hilda podría decir por la tensión en su cuerpo que Tusk estaba conteniendo el peso de encima. De todos modos, ella podía sentir la dureza de su pene contra su bajo vientre. Parecía reacio a dar el siguiente paso. Esta repentina timidez después de que él había enterrado su cara entre sus muslos era entrañable.
Hilda tenía curiosidad. "¿Puedo tocarlo de nuevo?" Pregunto sensualmente
Él estaba claramente sorprendido a petición de ella, moviéndose bruscamente como se incorporó más lejos de ella. "Por supuesto."
Ella lo alcanzó lentamente, como si se tratara de un animal que se asustan con facilidad. Él se torció en el momento en que ella lo tocó con sus dedos. Tusk le enseñó a agarrarlo y la animó a mover su mano hacia arriba y hacia abajo. Su pene estaba duro, pero la piel parecía deslizarse sobre su eje por debajo y con cada carrera descendente, la carne se apartó revelando una punta bulbosa que estaba goteando un líquido claro.
Ella seguía bombeando su mano arriba y abajo de la longitud, pero al ver cómo estaba afectando a Tusk, al ver como sus parpados se estremecían y estaban a la deriva, abriéndolos y cerrándolos, y que se balanceaban al ritmo de su mano, hacia arriba y abajo en la mano, los músculos temblorosos desde el esfuerzo. Ella sintió una ráfaga de energía llenándola como dejo de lado lo que estaba haciendo, lanzándose en él, ella rozó sus labios contra los suyos, haciéndole abrir los ojos de nuevo.
Ella sonrió antes de morderle el labio. "Estoy lista, si usted es ..."
Tusk asintió, aparentemente sin habla por el desenfreno de la chica, entonces desplazándose hacia atrás y bajando sus caderas entre sus muslos. Se agachó y tomó su pene en la mano, colocando la punta contra los pliegues de la chica. Ella apoyó las manos en sus brazos, apretando un poco más fuerte para que su cuerpo se abriera para él. Era una sensación completamente ajena, y el tramo era algo picado, haciendo que Hilda colocara una expresión indescifrable, debido a las nuevas sensaciones que estaba experimentando. Tusk se dio cuenta de ello.
"No puedo parar-"
"¡No!" Exclamó Hilda, alentándolo a seguir. "La sensación se desvanece. Por favor, Tusk, no hay necesidad de parar."
Ella lo vio sonriendo a ella como puso una expresión burlona, esta vez el en su cara. "Mucho, chica dulce. ¿Ahora qué? Dime que quieres."
"Te quiero dentro de mí," Alcanzó a decir. Ni siquiera era una mentira.
Tusk miró con esa intensa mirada en sus ojos. "¿De qué me quieres? Dime lo que te gusta."
Él bajó su boca a su cuello, mordisqueando y lamiendo en la piel sensible. Hilda se atragantaba. "No lo sé."
Él la miró y bromeó: "Pensé que me ibas a enseñar."
Ella se sonrojó cuando él volvió su atención a su cuello, tratando de llegar a una respuesta. Él cerró los labios sobre su lóbulo de la oreja derecha y movió su lengua alrededor de él. "Lo siento. ¿Qué te gusta?" Menciono ella
"No lo sientes…" murmuró, dejando escapar el aire caliente sobre su oído, "Me gusta tu boca. Me gustan sus tetas. Me gusta besar su coño, haciendo sentir el dulce picor con la lengua."
Las caderas de Hilda se arquearon en la memoria y Tusk se rio. "No cabe duda de que te ha gustado, ¿verdad? Me encantó cuando aullaba como la 'loba' que eres."
Pero él hizo lo que le había mandado y comenzó a deslizarse hacia adelante y hacia atrás, empujando más profundo con cada empuje hasta que sus cuerpos se tocaban y podía sentir los pelos gruesos en contra del interior de sus muslos.
"Probar a cambiar en mi contra." Tusk aconsejó, alcanzando hacia abajo entre sus cuerpos para que pudiera presionar su miembro viril contra su interior. Hilda había sabido que era incluso posible que una mujer llegar hasta el clímax más de una vez en una sola noche, allí estaba ella, jadeando y moviendo sus caderas contra él mientras los débiles ecos de placer construidas con la sensación cada vez más placentera dentro de su interior. Ella trató de mantenerse al ritmo de Tusk, viendo como sus cejas surcan por el esfuerzo. Desde la mirada de expresión extraña en su rostro, esto debe sentirse muy bueno para él y Hilda se preguntó por qué estaba aún tratando de esperar a ella, después de que ya había hecho el clímax dos veces.
Hilda se aferró a los hombros de Tusk como las olas de placer se arremolinaban en ella, girando sus caderas con fuerza y obligando a abrir los ojos para que pudiera ver mientras se estremecía y perdía el control de su ritmo. Estaba temblando mientras el hombre se calmaba encima de ella y las propias piernas de Hilda eran tan débiles por todo el esfuerzo que había hecho, ella no sabía qué hacer con ello, no cuando aún estaba dentro de ella. Sus cuerpos se enfriaban juntos, abrazándose, con Hilda escuchar los latidos lentos cercanos de Tusk contra ella, antes de que el finalmente se levantó a sí mismo y salió fuera de ella. Era una sensación peculiar, sintiendo su pene salir de ella. Ella no sabía dónde buscar, qué hacer, qué decir. Así que solo dijo lo que se le vino primeramente a la cabeza.
"Eso fue bueno, pero…no creas que esto aún ha terminado." Decía ella con una sonrisa lánguida de lado a lado
"¿Aun quieres seguir con más?" Pregunto Tusk entre sorprendido y ansioso
"Eso fue…alucinante…quiero más…dame más…déjame ver la gran destreza y resistencia, que se dice, tienen los del sexo opuesto…"
"¡Sus palabras son mis órdenes!" Decía el hombre excitado
Tusk gruñó mientras se movía hacia atrás para ayudarla a voltearse sobre la cama, mientras la chica se apoyaba en cuatro patas, apoyada en sus camas y rodillas en la cama, detrás de Tusk con sus rodillas apoyadas sobre el suave colchón. Atrayéndola hacia el con sus manos y rodillas y posicionándose firme contra ella. Entonces él estaba usando su mano para frotar la cabeza de su pene arriba y abajo en su humedad. Hilda se quejó. Todavía era sensible allí. La penetró sin mucho empuje constante, llenándola por completo. No duele nada, se sentía completa y extrañamente satisfecha.
Tusk se quejó. "Eres perfecta. Tan caliente y húmedo y apretado."
La agarró por las caderas y comenzó a moverse dentro y fuera de ella, lenta pero profunda. Como Hilda arqueó su espalda, cogió su ritmo, llegando a un lugar profundo dentro de ella, con lo que el dolor de espalda ya era una sensación 'dulce'. Ya podía sentir el aumento de tensión. Tusk gruñó como su ritmo vaciló por un momento. "No voy a durar mucho tiempo, se siente muy bien."
Él le soltó las caderas, inclinándose sobre ella para ahuecar su pecho con la mano izquierda, mientras la derecha se deslizó entre sus piernas. Sus dedos empezaron a frotar en ese punto sensible y dulce que su boca había encontrado antes al besarla allí entre sus labios menores, mientras seguía empujando en ella. Ella se estaba acercando. Ella movió sus caderas hacia atrás, para reunirse con él empuje para el momento decisivo.
"Ven a mí, mi 'dulce chica'. Gime para mí."
Cuando su pico la golpeó, ella empujó hacia atrás con tanta fuerza que por un par de momentos Tusk no podía hacer nada más que la misma rutina en su contra. La sensación de tenerlo dentro de ella y sentir su liberación, sólo intensifica el placer, se sentía como si ella lo estaba apretando. Ella volvió a gemir fuertemente. Cuando Tusk reanudó sus movimientos, su ritmo creció errática. Sus manos agarraron sus caderas de nuevo, su deslizamiento hacia atrás y hacia adelante sobre su eje. Se estabilizó sus caderas entonces, comenzando a empujar de nuevo, más duro y más profundo que antes. Después de unos pocos trazos más, sintió liberar en lentas pulsaciones su semilla caliente dentro de ella, mientras dejaba escapar un gruñido casi inhumano.
Se desplomó contra su espalda, cayendo a su lado, tirando de ella contra él. Él le acarició el cuello, jadeante, sus latidos resonando a través de su cuerpo. Después de un par de minutos, su miembro ya ablandado se deslizó fuera de ella, y su respiración volvió a la normalidad. La besó en el hombro.
"Yo no te lastime, ¿verdad?" Exclamaba el con genuina preocupación como era su naturaleza
Ella se movió en sus brazos, volteándose a verlo para sonreírle. "No me hizo daño, Tusk. Me siento muy bien. Gracias."
Él le devolvió la sonrisa y la besó en los labios. Movió las sabanas que había regadas, para cubrirlos a ambos, casi que abrazados. Con el ceño fruncido le hablo. "No debería haber derramado dentro de ti. Lo siento, Hilda."
"Da igual… ¿o estas preocupado de que pueda hacer algunos bebes? Si es que es así como se hacen…"
"Yo…tengo la intención de tener bebes…pero con Ange, yo…soy…su caballero…"
De pronto fue cuando la conciencia de Tusk comenzó a traicionarlo, sabía que lo que le estaba haciendo a Ange era una traición, pero no pudo evitar venirle a su mente, la imagen de bebes, con color de cabello rojizo, y con ojos del color de él, color de su cabello "besado por el fuego", justo como Hilda, la mujer que tiene entre sus brazos ahora mismo.
"Tsk… ¿te estas arrepintiendo ahora, después de lo que hicimos?" Pregunto Hilda en un tono de reproche
"Si, un poco…pero supongo que a estas alturas no puedo arrepentirme…es solo que…pensé que los niños que fuera a tener, serian con Ange…siento que la estoy traicionando de muchas maneras…"
"Bah…no es tiempo para pensar en arrepentimientos, después de lo que acabamos de hacer…"
"Lo sé, pero no pudo evitar venirme a la cabeza, una imagen…de unos niños míos…con tu color de pelo…nuestros niños."
Respondía Tusk como pasaba una mano, acariciando el rostro de la peli roja, la cual sentía estremecerse a su contacto, mientras se revolvía entre sus piernas, aun con la sensación de haber estado hace unos momentos unida a Tusk, en algo más que solo sus cuerpos…era una sensación que no sabía describirla. Con una mujer ella sabía que podía explorar las distintas partes de su cuerpo, como si fuese suyo propio, ya que tenían la misma anatomía. Pero con Tusk, fue algo difícil, ya que fue como si experimentara algo similar a su primera vez (La cual fue con Zola, cuando aún era bastante joven, pero entre menos recordara eso, mejor.) A pesar de que se desenvolvió muy bien, las diferencias entre la una y la otra resaltaban a la vista.
Con una mujer era una exploración placentera, de forma lenta de cada parte de su cuerpo para hacer explotar sus sentidos, con lo que tuvo con Tusk, es como si fuese una gran explosión de placer, como una bomba que se arremolinara dentro de ella, para explotar todo de lleno dentro de ella, literalmente. Realmente lo había disfrutado, a pesar del inicio tímido del chico.
"Dices idioteces Tusk…dudo que estemos listos, tu y yo para eso…aun así…" Dijo ella mientras lo besaba suavemente en los labios
"Quizás algún día…" Susurro ella suavemente como Tusk, llevado por el deseo siguió correspondiéndole el beso, pero con pasión
Así continuarían ambos por unos minutos más, antes de acabar y que Hilda, le pidiese ayuda para rescatar a Ange y atacar a Embryo. Tusk no dudo ni un segundo, y antes de que Rosalie viniera, ya ambos estaban vestidos y listos para lo que tenían que hacer. Tenían que empezar por detener a Jill primero.
Antes de salir, Rosalie detecto un pequeño olor agridulce, casi que familiar venir de ambos, lo que, reconociéndolo, su rostro adquirió un tono rojo al pensar en lo que pudieron haber hecho los dos solos, durante menos de una hora.
Se aseguraría de preguntarle a Hilda más tarde.
FIN ONE SHOT 1
Notas Finales:
Bueno, aquí otra historia One Shot que quise probar el subir. Sobre todo, referente a cuanto he mejorado en esto de los Lemon/Smut, así solo sea como un aprendizaje. Por lo que decidí comenzar con esta serie por obvias razones. En si CROSS ANGE Rondo of Angel and Dragón (Cross Ange: Tenshi to Ryuu no Rondo.) Aunque no sea un anime espectacular, pero si bueno, me gusto lo suficiente para tenerla entre mis favoritas de mechas, y querer trabajar en ella. No creo que este sea el único proyecto que trabaje en esta serie, tengo muchas ideas que se me vienen a la cabeza sobre esta y que puedo seguir trabajando en ella. Así que igual seguiré, aunque quiero saber que les pareció esto, me ayudaría también como introducción a este fandom.
Si bien es un Smut de corte hetero, algo raro en este fandom, predominado por el Yuri, no crean que estará así por mucho tiempo xD…Me gusta probar variaciones, algunas Shipping de corte Crack solo para ver como quedarían, y hay algunas de corte Crack Yuri que me gustaría probar también, esta fue solo un ejemplo que quise colocar empezando.
Sin más pues, están invitados a leerlo, se espera que más historias de este universo, al menos en nuestro idioma en español sigan saliendo, así sean solo One Shot; al menos un pequeño aporte no estaría de más como trato de hacer yo. Sin mas no les quito más de su tiempo y me despido, no sin antes pedirles para quien se tome su buen tiempo en leer esto, el dejar un Review que así sea pequeño me ayudaría mucho.
Me despido, Saludos.
