Disclaimer: El mundo y los personajes a los que hace referencia este fanfic le pertenecen a J.K Rowling.

Hola queridos lectores:

Primero que nada "Este fic participa en el Minireto #2: "La otra cara de la moneda" del foro "Un Pequeño Rincón". Este escrito está basado en un mito mexica llamado El conejo de la luna, que es de mis favoritos, si tienen oportunidad de leerlo estaría muy bien, es súper cortito y le daría contexto al fic. Espero que lo disfruten. ¡Besos!


San Potter

Hace mucho tiempo, aburrido de la cotidianidad de su entorno, la deidad conocida como Serpiente Emplumada decidió viajar por el mundo convertido en humano. De apariencia portentosa digna de un ser divino: rubio, barba rala y facciones afiladas, Quetzalcóatl hizo un largo recorrido hasta encontrarse muy cansado y hambriento.

Caminó hasta que la luna apareció en el cielo y las estrellas brillaron en el firmamento, el aire traía consigo una aroma que prometía tormenta y en su paseo por buscar refugio se encontró con un hombre de cabellos azabache, "¿Qué es lo que comes tan amenamente?" preguntó el dios, "manzanas verdes" respondió el hombre y de inmediato le ofreció un jugoso fruto que el dios acepto de buen agrado. Para entonces caía una lluvia torrencial y no había donde ocultarse. En un gesto amable el hombre ofreció al dios su propia capa impermeable.

Los rayos iluminaban el cielo y los truenos llenaban el apacible silencio, fue entonces que al dios se le ocurrió una idea, como muestra de agradecimiento decidió obsequiarle al hombre una marca en su frente para que todo el que la viera supiera que se trataba de alguien especial. "Por la bondad de que me has mostrado te obsequiare este regalo" proclamo la serpiente emplumada y atrapo un rayo en la palma de su mano para después estamparla en la frente del hombre.

Fue de esta manera que el hombre de cabellos azabaches paso a ser conocido como San Potter.