Disclaimer: Soul Eater no me pertenece, es de Atsushi Okubo.


Todos quieren la flor rosa

Pareja: Shinigami y Chrona.

Misión perfecta, premio perfecto.

Chrona Makenshi caminaba felizmente por los pasillos de Shibusen camino a la dirección, mientras pensaba en lo que pediría por cumplir con su misión a la perfección. Sonrió, estaba feliz y entusiasmada por lo que pediría, ya lo había pensado demasiado bien y lo que exigiría como premio era algo que la haría la persona más feliz del mundo.

Llegó a la entrada del despacho y tocó la puerta nerviosamente, sus piernas comenzaron a temblar e inhaló aire antes de escuchar un ''pase''.

Caminó a paso lento y empujó la enorme puerta de madera, lo primero que vio al entrar fue al Shinigami sentado tranquilamente en una silla que se encontraba atrás de un escritorio.

— ¡Hola Chrona! —la saludó alegremente—. Toma asiento por favor —le señalo una silla que se encontraba enfrente de su escritorio.

La peli rosa obedeció y dirigió su paso hacia el lugar indicado.

Se sentó y el director de Shibusen comenzó a hablar:

— ¡Chrona! Me enteré que cumpliste la misión que te asignamos a la perfección y como sabes eso merece un premio. ¡Vamos pídeme lo que quieras! —en su tono de voz se notaba alegría.

—Qui-quiero un… —tartamudeó la hija de Medusa.

— ¿Un qué? —preguntó.

—U-un be-beso —se sonrojó completamente.

El Shinigami quedó totalmente sorprendido y pensó « ¿Un beso de quien? ¿De Kid?» pero como no estaba seguro, lo mejor era preguntarle.

— ¿Un beso de quien?

— D-de Us-usted —la muchacha se ruborizó.

— ¿Qué? —preguntó con un tono de voz más fuerte de lo habitual. Chrona cerró los ojos esperando un severo regaño, en vez de eso obtuvo otra pregunta:

— ¿Dónde quieres el beso? ¿En la frente?

—No —dijo—. E-en la bo-boca.

Sí el hombre no tuviera puesta una máscara, quedaría al descubierto su inevitable sonrojo; hace tiempo que nadie le pedía un beso y ahora una persona que podría ser hasta su hija se lo pedía. Se rascó la nuca.

—Está bien —se levantó de su asiento y alzó parcialmente su máscara dejando al descubierto sus labios, estos para Chrona eran tan perfectos que la dejaron hipnotizada. El hombre se acercó a ella y le preguntó:

— ¿Estás segura?

—Sí.

Se inclinó y juntó sus labios con los de Makenshi. Fue un beso pequeño, no duró más de treinta segundos, sin embargo para los dos participantes ese acto fue como una eternidad. Se fueron despegando poco a poco dejando en sus bocas el sabor del otro.

—Gra-gracias —fue lo último que dijo la chica antes de correr e irse.

En los pasillos se topó con el hijo de su amor platónico, sin embargo lo paso de largo ignorándolo por completo, Death the Kid sólo la miró sorprendido.

—Buenas tardes padre ¿Ya le ha dado su premio a Chrona?

— ¡Ha! —exclamó fingiendo sorpresa—. Justamente de eso estábamos hablando. Me pidió unas enchiladas*.

— ¿Enchiladas? Ese platillo no lo venden aquí.

—Lo sé, le pediré a Stein que la lleve a México.

—Bueno nos vemos después padre. Tengo cosas que hacer.

Observó a su hijo hasta que desapareció de su vista, y de inmediato fue por su teléfono para llamar a una agencia de viajes, buscando vuelos directos a México para el día de mañana.

Las personas siempre sorprenden cuando les preguntas a quien aman.


Enchiladas: Platillo típico mexicano.

Todos quieren la flor rosa: Es una serie de one shots o drabbles de Soul Eater. Todas las parejas serán relacionadas con Chrona, eso quiere decir que seran ChronaxTodos