Disclaimer: Todo reconocible de Harry Potter es propiedad de J.K Rowling.

Este fic participa en el reto "Viñetas de emociones"del foro"La Noble y Ancestral Casa de los Black"

Puff, os juro que pensé que no lo haría cuando vi mis emociones, pero curiosamente la idea llegó como caída del cielo. Ya quisiera que la inspiración me llegara así con las demás cosas que aun me faltan por escribir.

Pero en fin, mientras tanto, os dejo con esto y espero que os guste ^^


Tres emociones y sin tu amor...

Envidia, Ilusión y Decepción.

Envidia...

Astoría podía recordar que en alguna parte había leído algo de los pecados capitales y si bien se dijo a si misma que seguro se iba al infierno por soberbia, esa tarde difería y se condenaba a los avernos por envidia. Sí, aunque fuera difícil de creer ella podía llegar a envidiar algo de alguien más. Ella que lo tenía todo y que lo que no tuviera lo podía comprar, sentía que las entrañas le quemaban del coraje cada que veía a Pansy con él.

—No te entiendo, puedes andar con cualquiera y te fijas en el odioso novio de esa loca —le dijo su amiga Paige, cuando el orgullo de la menor de las Greengrass cedió y admitió que le gustaba Malfoy y que además se moría de la envidia que le tenía a Parkinson.

Sin duda alguna no se conocía lo suficientemente bien, pues si era capaz de tragarse sus palabras y admitir que le gustaba un chico que había dicho que era odioso y que Pansy tenía mal gusto, era caso perdido, se quemaría en el averno por envidiosa y no por soberbia.

—Yo tampoco lo entiendo, ¿sí? Solo sé que cada que los veo quiero ser yo la que besa a Malfoy —admitió, desesperada por la emoción que la invadía y que no recordaba haber sentido antes en su vida.

—Amiga, lo que tú tienes no es envidia es enamoramiento —declaró la pelirroja, mirando a Astoria con algo de preocupación.

—Envidia o amor, me da igual, ya no lo quiero sentir —masculló y golpeó la almohada de su cama como si fuera una niña pequeña haciendo berrinche porque le habían negado una paleta.

Y quizás ese era su problema, Astoria era mimada y caprichosa, acostumbrada a tener lo que se le antojara cuando quisiera y ahora que se le antojaba Draco, no lo podía tener y solo le quedaba morderse la lengua y añorar eso que Pansy tenía y ella no.

Lo admitía, era una maldita envidiosa, aunque por el objeto de sus deseos bien valía la pena condenarse a una hoguera.


¿Así que, qué tal? ¿Les gusto? ¿No les gustó? ¿Merece comentario? ¿Galletitas? ¿Ranitas? ¿Cruciatus? ¿Avadas? ¿Algo? xD

Ya saben que cualquier cosa es bien recibida.

¡Un beso y gracias por leer! ^^