Azumanga Daioh.
Retos, besos y quesos Suizos.
Capitulo 1: "La pijamada"
Chiyo Mihama revisó por segunda vez su refrigerador asegurándose de que todo lo que había comprado con sus papás fuera suficiente. Esa noche todas sus amigas se reunirían con ella para una pijamada. A manera de festejar que ya solo faltaba una semana para los exámenes de fin de año.
-Nadie a tocado la comida. –El señor Mihama se asomó a la puerta de la cocina- Tu mamá y yo iremos a una cena de negocios y regresaremos muy tarde.
-Es que estoy muy nerviosa. –Chiyo sonrió apenada- Es la primera vez que todas mis amigas se van a quedar en la casa...
-Serás una excelente anfitriona –El señor Mihama le dio una palmaditas en la cabeza a su hija- Lo llevas en la sangre.
Justo en ese momento sonó la campana de la entrada. El hombre le guiño un ojo a la chiquilla y fue a abrir la puerta. Frente a el estaba una chica de cabello largo y ojos oscuros. Nunca la había visto antes pero supo de quien se trataba.
-Tu eres Sakaki-san ¿Verdad?
La alta y reservada amiga de Chiyo se sentía algo apenada y confundida al ver a aquel hombre ¿Quién era?
-Si... Miyamoto(1) Sakaki... para servirle... –Contestó ella haciendo una discreta reverencia.
-Mucho gusto. Soy el papá de Chiyo-chan.
Sakaki parpadeó ruidosamente. Durante mucho tiempo había pensado que se iba a encontrar en la vida real con aquel enorme y extraño gato amarillo diciéndole que era el papá de su amiga. Nunca imaginó que esa persona fuera tan... Tan... Pues, una persona.
-Mi hija está en la cocina, si gustas pasar. –Dijo el señor Mihama sin notar el azoro de la muchacha- Y si me disculpas tengo algunas cosas que preparar para hoy en la noche.
-Cla... Claro, no hay problema.
Ella entró a la casa dejando sus zapatos en la entrada y calzándose las sandalias de invitados. De alguna manera esperaba que en cualquier momento el hombre se convirtiera en el gato amarillo y saliera volando por la ventana.
-¡Hola Sakaki-san! –Dijo Chiyo muy contenta al ver entrar a su amiga- Eres la primera en llegar.
-Traje jugo y galletas de arroz... –Dijo Sakaki- Tu... Papá me recibió...
-Es verdad. –Chiyo se dio cuenta- Tu no habías conocido a mi papá.
La muchacha estuvo tentada a platicarle acerca del gato amarillo. Pero prefirió no hacerlo. Sintió algo frío rozar su mano y al mirar hacia abajo se encontró con los simpáticos ojos de Tadakishi-san, el enorme perro mascota de Chiyo. Ella sonrió y se puso a acariciarle la cabeza al animal. Chiyo suspiró. Cuando Sakaki se ponía a hacer eso podía durar horas. Alguien llamó a la puerta. La pequeña fue a ver quien tocaba y se encontró con Tomoyo asomando la cabeza. Por alguna razón le recordó a un ratón saliendo de su agujero.
-¡Hola Chiyo-chan! –La chica le sonrió sin entrar del todo- La puerta de la entrada estaba abierta y decidimos entrar.
-¿Decidimos? –Chiyo ladeó la cabeza.
-Fue tu idea. –La puerta se abrió del todo y Yomi apareció detrás de su amiga- Yo le dije que mejor usáramos el intercomunicador.
-No hay problema. –Chiyo ya estaba acostumbrada a las actitudes de Tomoyo- ¿No saben de Osaka-san y de Kagura-san?
-Osaka-chan viene en camino –Yomi entró llevando consigo una bolsa de dormir y una maleta pequeña- Y Kagura-chan pasó por Kaorin.
-Vamos a acomodar las cosas en tu cuarto Chiyo-suzke(2) –Tomo tenía una actitud sospechosa- Te aseguro que tendremos una noche muuuuy divertida.
Koyomi solo alzó los ojos al cielo.
Media hora después, Sakaki seguía acariciando la cabeza de Tadakishi-san, el perro no parecía en lo absoluto enfadado. Yomi y Tomo estaban preparando los bocadillos cuando Osaka y las otras dos muchachas aparecieron por la casa. Osaka mostró a todas algo inusual: Un enorme queso amarillo y lleno de hoyos.
-Este queso no sirve Osaka-chan –Tomo veía el lácteo con desaprobación- Ya se lo empezaron a comer... Y además huele muy raro.
-Serás tonta. –Murmuró Yomi de manera muy audible.
-¡¿Porqué?! –Tomo la había escuchado y era la imagen viva del reproche.
-Así se supone que debe de verse. –Intervino Chiyo- Es un queso gruyere. De Suiza.
-¡Oooooh! –Exclamaron todas al mismo tiempo.
-Mi papá dijo que había que abrirse a nuevas experiencias. –Dijo Osaka- Por eso me dio este pedazo.
-Pues huele raro pero quiero probarlo –Dijo Kagura sonriendo con audacia- Y me supongo que Sakaki también lo probara.
-¿Eh? –En ese momento la aludida se dio cuenta de que le hablaban- ¿Cuál queso?
-¡Te reto a degustar un platillo exótico! –Dijo Kagura tomando una pose de desafío- Veamos si tu paladar de chica tradicional puede soportar un sabor diferente.
Sakaki dejo de acariciar al perro, fue al fregadero de la cocina y se lavo las manos, después tomó un cuchillo y cortó un pedazo de queso. Lo saboreó lentamente y después sonrió satisfecha.
-Un poco viejo pero no muy salado... Esta sabroso.
-¡¿Eeeeeehh?! –Kagura abrió los ojos como platos- ¿Cómo sabes esas cosas?
-Mi familia fue a una feria de comida en Tokio hace dos años y ahí lo probé. –Dijo la chica alta con un aire distraído- Me gustaron mucho los quesos viejos.
-Otra cosa en la que me gana... –Kagura estaba desolada- ¿Es que no hay nada en lo que le pueda ganar?
Osaka se quedo "ida" un momento. Pensaba en quesos viejos. De largas barbas y con bastón; viviendo en asilos para "Lácteos jubilados"
-Deben de tener un excelente plan de retiro...
Kaorin, que estaba a su lado, alzó las cejas y se alejó un poco de ella. Siempre le causaba algo de miedo esa actitud en la muchacha.
-Tengo galletas sin sal y aceitunas –Chiyo sacó esas cosas de la despensa- Podemos hacer algunos bocadillos mas con el queso.
-Mi papá dice que se acompaña con vino blanco –Comentó Sakaki.
-Esteee... No creo que mis padres nos dejen tomar vino... –Dijo Chiyo apenada- Somos muy chicas.
-¡¡Pues yo tengo la solución!! –Dijo Tomo-chan levantando la mano-Cuando veníamos para acá...
Antes de que pudiera terminar la frase Yomi le dio un sonoro zape en la cabeza y la sacó a empujones de la cocina. Las otras chicas extrañadas se asomaron por la puerta y las vieron discutir en la entrada de la casa.
-¡¿De verdad quieres que probemos esa cosa?! –Yomi estaba escandalizada.
-¿Y para que la compramos si no lo vamos a tomar? –Tomoyo estaba bastante tranquila.
-¡Yo no la compre! Fue cosa tuya, a mi no me metas en tus locuras. –Yomi ahora parecía asustada- Si se enteran de que fuimos a esa tienda para... Comprar esa cosa... Nos van a castigar de por vida.
-¿Pasa algo malo muchachas? –Kagura se acercó para averiguar porque tanto misterio.
-¡No pasa nada, nada en absoluto! –Yomi se dio la vuelta mientras le aplicaba una llave al cuello a su amiga- Cosas sin importancia... ¿Verdad, Tomo-chan?
La llave se hizo mas apretada y Tomoyo adquirió un nada saludable tono azul.
-No... Pasa... Nada... –Dijo la chica cuando pudo pasar algo de aire. Yomi la soltó del todo y cayó de rodillas tratando de recuperar el aliento.
Kagura decidió no insistir. Aquellas dos siempre se estaban peleando por cualquier tontería.
-¿Dónde nos podemos cambiar Chiyo-chan? –Preguntó en ese momento Kaorin.
-En mi cuarto ¿Pero no es muy temprano? –Dijo Chiyo
-Si es una pijamada. Se supone que tenemos que estar en pijamas. –La lógica de Osaka era irrefutable.
-Entonces las demás iremos por la comida. –Dijo Kagura- Que la fiesta empiece oficialmente.
Kagura, Yomi, Tomo y Chiyo fueron de regreso a la cocina mientras Sakaki, Kaorin y Osaka subían al cuarto de la pequeña Mihama.
En la habitación se encontraba dormitando tranquilamente Maya. El pequeño gato montes que Sakaki adoptara. Abrió los ojos al escuchar que la puerta se abría. Y saltó de la cama al reconocer a su dueña. Sakaki dio un gritito de gusto mientras recibía en sus brazos al afectuoso gatito. Osaka pasó directamente al cuarto. Con su vista fija en el enorme y calientito kotatsu(3) que parecía estar esperándola. Kaorin estaba detrás de Sakaki. Apretando contra su pecho la bolsa de dormir y desando de todo corazón poderse convertir en ese gatito. Que envidia...
-Sakaki-san... –Suspiró ella.
-¿Pasa algo Kaorin? –La otra muchacha la había oído.
-¡¡No pasa nada, nada de nada!! –Kaorin entró en pánico- ¡¿Porqué habría de pasar algo?!
La chica de cabellos cortos se puso roja como tomate y después se escurrió hasta un extremo del cuarto para cambiarse. Sakaki pensó que Yomi y Kaorin se estaban portando igual. Como si escondieran algo. Pero aquella idea se fue cuando Maya lanzó un rugidito, reclamando atención.
-Ay kamisama... Que pena –Susurró murmuró mientras sacaba su pijama- Lo dije en voz muy alta... Espero que Sakaki-san no haya pensado que soy una rara. –Miró a donde Osaka estaba. Y alzó las cejas con preocupación- Aunque con las amigas que tenemos no creo que se note demasiado.
Osaka estaba vestida solo con sostén y bragas, sentada en el piso y con el pantalón del pijama en la cabeza; se reía bastante entretenida, como si eso fuera algo muy gracioso. Finalmente pareció aburrirse y comenzó a vestirse. Kaorin solo meneó la cabeza e hizo lo propio cuando escuchó un ruido. Sakaki estaba sentada en el suelo de espaldas a ella y parecía tener problemas con algo en su espalda. La chica de cabellos cortos tomó aire y dándose valor se acerco a su admirada amiga.
-¿Pasa algo Sakaki-san?
-El sostén... –Dijo la chica tratando de tocarse un punto en la espalda con ambas manos- Es nuevo y los broches... Están muy duros... No puedo quitármelo...
-¿Se lo va a quitar? –Kaorin sintió que el corazón le estaba saltando como loco en el pecho.
-El pijama es incomodo con sostén –Dijo Sakaki mientras luchaba aun con los broches- Pero no puedo... Debí de traer otro.
-Si... Si quiere puedo... Puedo ayudarla –Kaorin estaba sorprendida con su propia audacia. ¿De donde rayos había salido esa idea?
-Si... Si no te molesta –Contestó la otra muchacha mientras se hacía el cabello aun lado y dejaba al descubierto la espalda.
Con el corazón latiéndole en la garganta, Kaorin estiró las manos y rozó con la punta de los dedos la espalda de su amiga, mientras alcanzaba los broches del sostén, la sensación le erizó los cabellos de la nuca. El broche en realidad no fue tanto problema y pronto fue retirado dejando al descubierto la piel blanca y tibia de Sakaki. Sin pensarlo realmente, la muchacha mas chica puso los dedos en la piel expuesta y escuchó que la otra chica lanzaba una exclamación ahogada. Ella retiró la mano rápidamente.
-Lo lamento. –Se disculpó- ¿La incomodé Sakaki-san?
-No... Lo que pasa... –Sakaki volteó a ver a su amiga- Lo que pasa es que me dio comezón. –Se sonrojó- ¿Podrías rascarme en ese punto?
Por un instante las puertas del cielo se abrieron ante los ojos de Kaorin y escucho las campanas del paraíso tocar su melodía favorita.
-Claro, claro, claro... Lo que usted quiera Sakaki-san
Comenzó a rascar. La muchacha más alta lanzó un suspiro de satisfacción y agacho la cabeza, dando mas campo de acción a su compañera. Kaorin sentía que en ese momento estaba tocando la gloria y que el mundo era perfecto y maravilloso. Nada, nada podía salir mal en ese momento.
-¡¡Trajimos los bocadillos!!
-¡¡WHAAAAAAA!!
El grito de Tomoyo desde la puerta, tuvo el mismo efecto que el claxon de un trailer saliendo de la nada. Kaorin dio un enorme salto hacia atrás y después de un par de rebotes, aterrizó debajo del kotatsu. Que por suerte estaba apagado.
-¿Qué rayos fue eso? –Preguntó Tomo desconcertada.
-A veces... Eres muy ruidosa. –Dijo Sakaki mientras se ponía la camisa del pijama. Aquel comentario, en labios de Sakaki era el equivalente a un regaño. Pero lo dijo tan quedo que nadie lo notó.
Tomo sintió un escalofrío en la espalda y se dio cuenta de que Kaorin la estaba apuñalando con la mirada, desde su escondite bajo el kotatsu.
-Que mal genio trae todo el mundo... –Murmuró Tomo sin entender.
Continuara...
Notas del autor:
1.-Miyamoto: En realidad no es el apellido de Sakaki. Azuma-sensei, jamás nos dijo el nombre completo de la chica, así que me tomé la libertad de inventarle uno. Aunque solo para efectos de presentación.
2.-Suzke: Un sufijo diminutivo, igual que el chan.
3.-Kotatsu: Es una mesa con un calentador debajo. Se le pone una manta encima y se usa para mantener los pies calientes mientras. Osaka es una fanática de dormirse en el.
Y empezamos con una idea que ya tenia como un año en el refrigerador. Por una razón u otra no se terminaba de cocinar. Pero finalmente di con la dirección correcta y espero les guste. Este es como un intento más de que arranque mi pequeño planeta del bloqueo.
Aprovecho también para invitarlos a que visiten mi foro del pequeño planeta. La dirección esta en mi perfil. Escritores bloqueados, artistas inspirados y demás están invitados a darse una vuelta por ahí.
Referente a los fics de otras series en las que ando metido.. pues un poco mas de paciencia. Pronto habrá noticias.
Desde mi pequeño planeta en algún lugar del anime.
