Disclaimer: Ni Twilight, ni su música ni sus personajes me pertenecen. Yo solo los hago por diversión y sin fines de lucro.
Aviso: Este fic participa en el Reto Drabble "Neófitos" del foro Sol de Medianoche.
Oscuridad.
Después de que el fuego que consumía mi cuerpo completo cesara solo quedaba eso. Una gran y temible oscuridad.
Y no es que yo el gran oso Emmett McCarty le temiera a la oscuridad pero esta era…diferente, esta me envolvía como si quisiera tragarme por completo, hundirme en el olvido, hasta que lo olí y algo cambio en mi drásticamente, cualquier otro sentimiento se fue a la parte trasera de mi mente, ahora en mis pensamiento solo corría una voz burlona gritándolo: ¨SANGRE, SANGRE, TOMEMOS TODA LA SANGRE¨
Y corrí.
Corrí tanto como mi ahora cambiado cuerpo me lo permitió, me maraville con el dulce olor que emanaba de alguna parte de este profundo bosque.
Hasta que vi ese líquido que llamaba a pecar, por el cual el monstruo de mi interior rugía lleno de posesión.
Una niña. Ese manjar le pertenecía a una niña de no más que 6 años. Tirada en el piso con las rodillas raspadas y una pierna sangrante
-Señor ¿Por qué tiene los ojos rojos?
- veras niña, son para…observarte mejor
- ¿y esos colmillos tan puntiagudos?
- soy nuevo en esto pero al igual que a los osos y a los lobos, supongo que me ayudaran a comer mejor
-¿Cómo mis dientes señor oso?
-no exactamente, mis dientes son un poco más…fuertes, hechos para pelear con otros animales de mi especie y pues para atrapar a mi presa, lo de una especie más…débil
-¿eso no es malo señor oso? Mi mami me dice que no hay que aprovecharse de los débiles
-¿y tú mami no te dijo que no hay que hablar con extraños?
Fue lo último que logre susurrar antes de abalanzarme hacia ella y encajar mis dientes en su blanco cuello.
/
Una vez mi frenesí termino y mi sed quedo saciada me di cuenta de lo que sucedía…ahora era un monstruo.
Y no cualquier monstruo, un vampiro sangriento de sangre que había matado a una pequeña niña indefensa e inocente la cual solo había cometido el error de estar frente a él.
Y así fue como el gran Emmett oso McCarty odio vivir…claro después encontró a su rayo de luz, Los Cullen y a su hermosa domadora Rossalie y descubrió que aunque fue un monstruo asesino de inocentes era el vampiro enamorado más feliz de esa existencia.
Solo le quedaba algún remordimiento.
¿Qué más da un corazón menos latiendo? Después de todo, no es su culpa que existan los débiles.
¿FIN?
asdfghjklñ este es el primer fic en el que participo, espero no sea tan malo ah
