Déjame estar contigo…
Simbología:
-…- diálogos
-"…"- pensamientos
- cambio de escena
Disclaimer: Los personajes de Sakura Card Captors no me pertenecen. Son exclusivamente de CLAMP.
Prólogo
En una mansión se encuentra una mujer acompañada de una chica y un chico. Por su semblante parece estar preocupada y triste.
Desde un tiempo, su hija ha estado desvariando mentalmente. De ser una chica inteligente, madura, observadora, alegre, entusiasta y positiva; pasó a ser (valga la repetición) deprimida, triste y poco comunicativa. La joven se encierra en si habitación y a veces hace preguntas extrañas. Apenas se limitaba a cumplir sus necesidades corporales y responsabilidades escolares.
Cuando estaba muy pequeña, era una niña muy alegre, divertida y carismática. Le encantaba jugar con su padre y con su madre, los sábados en el parque. Siempre pedía un hermanito con el cual divertirse. De vez en cuando, despertaba a sus padres muy temprano para desayunar y pasear al perro, o sino, para dormirse con ellos.
Todo era felicidad en su vida, hasta que… su padre falleció. Vio al ser que la había engendrado, postrado en una cama de hospital mientras luchaba por su vida, pero fue inútil. La alegría que la caracterizaba se esfumó junto con su padre. Siguió siendo niña aparentemente "feliz" ante los demás, pero sólo lo hacía para no preocupar a nadie. Tuvo que madurar muy rápido.
Sus antes ojos amatistas llenos de brillo, se opacaron por la pérdida de un ser querido, provocando la tristeza y la soledad que guardaba en su corazón. Aprendió a vivir así: triste por dentro y mostrando una cara de felicidad absoluta ante los demás. Su madre, en cambio, en vez de estar siempre con su hija, dándole cariño, amor, consolando la pérdida de su padre… olvidó el dolor de esta, y se refugió en su trabajo para tratar de disminuir su propio dolor, en vez de estar con su única hija apoyándola.
Con el tiempo. Exactamente cuando tenía 16 años, empezó a deprimirse, a encerrarse en su habitación, y a veces se ponía rebelde.
Su madre decidió llevarla a un psiquiatra, este le dijo que le daría un tratamiento con pastillas (tranquilizantes, sedante…). La chica se resistió a tomarlas.
Al cabo de un tiempo, la llevaron a otro psiquiatra, éste dijo que la chica debía tomar terapias. Le dieron las terapias y se puso peor. La joven decía que esos médicos eran unos hipócritas y cínicos, que sólo cobraban sin ayudar realmente a las personas.
Y así fueron visitando diferentes psiquiatras y ninguno a podido con el caso de Tomoyo. Hasta el día de hoy.
La señora que estaba junto con el par de chicos, dijo- no soporto ver así a mi hija…- al borde del llanto.
-Lo sé tía… Yo tampoco quiero ver así a Tomoyo- le dijo la chica de ojos verdes
-Sakura…- dijo Sonomi abrazándola
El novio de la chica observaba la escena, mientras pensaba en una posible solución y…- lo tengo- dijo de repente
-¿Qué sucede Syaoran?- le dijo Sakura
-Conozco a un psiquiatra muy bueno- dijo Syaoran
-¿Cómo se llama?- dijo Sakura
-Takashi Yamazaki- dijo el chico
-Lo hemos intentado Syaoran… y ya ves como se pone Tomoyo…- dijo Sonomi
-Pero no cuesta nada intentarlo de nuevo- dijo Syaoran
-Está bien- suspiró Sonomi
-¿Para cuando hacemos la cita?- preguntó Syaoran
-Para mañana- dijo Sonomi
-Pues para mañana será- dijo Syaoran
-
-¿Si?- contestó un hombre su celular
-Hola… ¿me recuerdas?- le dijo el otro hombre
-¡Hola, hermano! ¿Cómo estás?-
-Estoy en Japón…-
-¿QUÉ? ¿En el aeropuerto?-
-De camino a mi departamento…-
-¿Cómo que departamento?-
-Así es Takashi-
-Vaya… ¿cuándo lo compraste?-
-Hace 6 meses…-
-Bárbaro-
-Por sino te acuerdas Takashi, mi nombre es Eriol, no Bárbaro…- dijo burlonamente
-Mita tú-
-¿Qué miro?-
-Deja de burlarte Eriol Hiraguizawa-
-Está bien-
-¿Por cuánto te quedas aquí?-
-Por un buen tiempo-
-¿Y vas a ejercer la psicología aquí?-
-Por supuesto-
-Me alegra-
-Bueno, te dejo-
-Está bien. Matta ne!-
-Jaja. Hasta luego-
-
Notas de la autora:
Aquí estoy con una nueva historia. Espero que sea de su agrado. Ciao!
2Miru
