Un pequeño problema.

Capitulo 1.

Un caso muy extraño.

•◘.SebasxCiel.◘•

Era una tarde tranquila y normal en la mansión Phamtomhive, y el cabeza de familia se encontraba en su despacho, mientras leía una carta de parte de la reina, que indicaba que había unas misteriosas desapariciones en ciertos lugares de personas adultas, y que según las investigaciones hechas por la policía de Londres, no tenían algo en común, por lo que tenía que ir "a ciegas" en este encargo.

La única pista que tenían era que la misma cantidad de personas adultas desaparecidas, eran las mismas de niños que encontraron abandonados, a las pocas horas del acontecimiento.

Podría decirse que esto sería un buena pista, pero los niños al parecer, no recuerdan nada.

Así que no podrían ayudar a las investigaciones de saber quién es el culpable.

-Ah maldición no puedo con esto- se rindió Ciel mientras aventaba las hojas del reporte con fuerza sobre el escritorio, había analizado el caso un sinfín de veces y ya harto decidió llamar a su mayordomo.

_Si? Se le ofrece algo Boochan-dijo su mayordomo en cuanto hizo su aparición en la puerta del despacho.

-Sebastián…quiero algo dulce -le respondió Ciel mientras se estiraba.

-No joven amo, comer desde antes el postre arruinara su apetito.-le dijo con tranquilidad el mayor.

-This-bufo Ciel, cuando Sebastián se ponía en su plan de cuidarlo como Mama gallina lo molestaba.-Bueno ya está la cena?

-En unos minutos más, va a bajar de una vez?

- Si, ya que, contesto Ciel molesto mientras se levantaba y salía del cuarto.

Ciel estaba terminando de cenar, cuando se oyó el timbre de la puerta y Sebastián fue a atender, regreso unos minutos después con una noticia de la policía.

-Boochan acaba de informar que ha ocurrido otro ataque, es necesario que valla.

-De acuerdo, Sebastián prepara todo para la salida,

-Si mi señor respondió Sebastián mientras su joven amo salía del comedor en dirección a la puerta.

En unos minutos tanto amo como mayordomo ya estaban llegando al lugar de los hechos, ahí se encontraba la policía, mientras atendían a una niña de 5 años que al parecer era la víctima.

-Que ocurrió?

-Conde, solo lo mismo de siempre-contesto con deseen el jefe de la policía.- Nada nuevo para usted pues ya debe de saberlo no?

-Claro. Cometo Ciel restándole importancia. Es la niña?-sin esperar respuesta se adelanto y miro a la pequeña más de cerca, era rubia y de ojos azules como Elizabeth, y parecía muy asustada.

-Donde estaba cuando la encontraron?

-Al fondo del callejón, al parecer regresaba de hacer compras.-le dijo un policía y Ciel se acerco de inmediato, con Sebastián atrás de el.

La escena era un simple callejón, pero lo raro era un charco que estaba en medio del lugar, pues no había llovido en un tiempo, y por supuesto no debería de estar ahí.

Ciel se acerco al agua y la olio, no tenía un mal olor, anqué estaba muy grasosa y tenía un consistencia muy rara pues le través el guante que llevaba rápidamente.

-no veo nada extraño Sebastián y tú?

-Uhh no yo tampoco Boochan, solo está el misterioso charco. -comento Sebastián mientras pensaba.

-Que piensa hacer Conde?-pregunto un policía.

-Por ahora tomar una muestra de esa agua, vamos Sebastián.

El pelinegro solo asintió y en unos segundos ya estaba recogiendo la muestra en un tubo de ensayo.

-Creo que esto será sufriente. Ahora Boochan?.

-Vamos a la misión, estoy exhausto.

Sebastián sonrió y lo condujo al carruaje, y recién llegaron Ciel se preparo para dormir, como siempre.

-Boochan, buenos días para el desayuno prepare unos panqueques, con te negro fresco. -hablo Sebastián cuando estaba abriendo las cortinas, de la habitación de Ciel.

-Bien Boochan…es hora de levantarse-susurro mientras destapaba un poco esa bolita que se veía en medio de la cama, pero en cuando lo destapo, se hizo para atrás…ese chico no era su Boochan.

Continuara…..