Parejas
Principal: SpxUk
Secundarias: UsUk, Spamano, FrUk, Etc Se irán conociendo a medida que avance la historia.
Nº de Capitulos: 7
Día 1: Un accidente desafortunado…
Como ya típico en las reuniones entre naciones el orden no era exactamente el que reinaba en ese lugar, pero en esta ocasión estaba especialmente violenta por así decirlo, en un lado estaban Arthur nuestro ilustre caballero agarrándose de los pelos con Francis nuestro ¿amado? Pervertido, junto con Antonio dando a relucir su "pasión" en cada golpe hacia el rubio-cejon, mientras que en otro lugar junto a los latinos Chile y Perú nuevamente discutiendo-peleando a puño limpio sobre el origen del Pisco-, cuantas peleas verbales y físicas habían tenido por ese "dilema" por así decirlo y con un Boliviano exigiendo nuevamente salida al mar, en fin lo mismo de siempre, y como siempre Alemania tratando a gritos de poner en calma la situación y como siempre nadie lo ponía ni una pisca de atención a excepción del italiano.
Ya cansados de la situación Romano junto con USA trataron de calmar la situación con España Inglaterra y un inconsciente Francia que yacía en los pies de ambos, si inconsciente, cuando comenzaron los golpes por accidente le llego un puñetazo de ambas naciones a la vez, mientras que por su lado Argentina trataba de calmar a Chile y Colombia junto con Brasil a los otros dos, entre tanto forcejeo Argentina resbalo y cayó al suelo mandando a volar a Manu hacia donde estaban los otros en el momento menos indicado, puesto que Iggy había sacado ya su varita en el enfado dispuesto a usarla en contra de Antonio, este cayó sobre ellos haciendo que Arthur soltaba su varita y callera al suelo provocando ahí una nube de humo rosa
-¡Arthur! – Preocupado por su pareja Alfred se acerco rápidamente a la nube - ¡Arthur! ¿Estás bien?
- ¡Antonio! – Lovino al igual que el rubio se acerco a la nube preocupado, aunque nunca lo admitiría, por el español –
- Argh! Hijo de puta ¿Qué mierda hiciste? Suéltame – se escucho la voz de Antonio mucho más agresiva
- Ya quisieras imbécil – Esta vez se escucho la voz de Inglaterra y el sonido de una cadena –
- Cuidado ¡bruto! – De entre el humo aparecieron Inglaterra, era él pero era diferente al igual que España, ambos estaban vestidos como en su época pitara, pero eso no era lo más raro, Antonio tenía en su cuello un collar con una cadena sujetada por el británico ambos se miraban con odio absoluto – Tsk
- ¿A-Arthy? – Logro articular el Americano, no lo podía creer ¿ese era su Iggy?, SU Iggy? –
- ¿Hmm? – La fiera mirada se poso ahora en el rubio - Who the fuck are you? – Acto seguido lo apunto con su pistola, para luego rodear el lugar con sus ojos – and…Where the fuck we are? – Soltó la cadena de Antonio y acto seguido este se puso a un lado de él
- Ba-bastardo? ¿Qué diablos haces? – Lovino estaba igual o peor que el rubio en la estupefacción, empezó a acercarse a donde estaba Antonio pero una mano lo detuvo, era Francis, que por pura suerte no había caído en esa nube –
- No te acerques a él en este momento Lovino, ni tu tampoco Alfred
Al escucharlo el ahora, Imperio británico fijo su mirada en el francés, una mirada cargada de odio y resentimiento, lo sabían, ahí correría sangre británica o Francesa eso no era seguro.
El ambiente tenso se cortó de repente por un llanto de un bebe, todos los presentes miraron hacia donde provenía el llanto y se encontraron con un niño de no más de un año moreno con las mejillas rosadas colgando de la ropa de Inglaterra, cabe decir que este no se encontraba muy feliz con el mocoso mojándole su chaqueta, lo miro con mala cara y lo tomo de una de sus piernas y lo levanto, lo miraba con cierta cara de curiosidad
"¿Quién mierda era ese mocoso?" Esa pregunta resonaba en la cabeza de todos los que ahí estaban. El pequeño miraba a Arthur como si fuera la cosa más interesante sobre la faz de la tierra para luego reír, era una hermosa risa eso no se lo podían negar
Martín quien se había escondido por ahí al ver al niño se acerco a los otros y susurro - ¿Manu? – Todos lo quedaron mirando con cara de interrogación – ¡Es manu! Miguel mira es Manu! – El peruano se acerco comprobando lo que su amigo decía y ciertamente era el chileno
- ¡TU MOCOSO! – Lo llamo el inglés – Es tuyo esto – señalo al bebe – te lo doy – y simplemente como si fuera un saco se lo lanzo al argentino que tuvo que correr para alcanzarlo y que no se golpeara con el suelo –
- Che! Cejotas ten más cuidado ¡boludo! – Acurruca al niño en brazos que reía, pero cuando se vio en otra persona, comenzó a llorar nuevamente pidiendo los brazos del oji-verde, todos los miraban incrédulo sobre todo Argentina, ¿su Manu prefería estar en los brazos de un sádico pirata que en los suyos? – No me lo creo –
Y no era el único, Arthur lo miro con enfado el llanto ya le estaba empezando a molestar así que fue donde el otro y lo tomo de nuevo con una sola mano y mágicamente el niño reía jugando con el arete del pirata
- Ja.. jajajajajajajaj ¿Quién lo diría? El gran Arthur Kirkland con un bebe jajajajajaja ¿Qué dirían tus hombres si te vieran? Jajajajajaja
- Muy gracioso Carriedo pero – sin previo aviso lanzo al bebe hacia el moreno y este inconscientemente lo atrapo - tú te vez mejor cariño
- ja ja que gracioso Arturo – Miro al niño aun así, y bueno tenía que admitir que era muy lindo con unos enormes ojos cafés lo miraban con curiosidad para luego mostrar una hermosa sonrisa
- Muy bien Anthony veo que te has encariñado con el pendejo - era gracioso como ambos se nombraban con el idioma del otro insultándose con eso – en fin pasando al asunto serio – dirigió al galo que se mantenía a cierta distancia por precaución, no es que le tuviese miedo… ¡no! Era solo que en ese estado el inglés era muy peligroso, sobre todo para su hermosa persona, según él - ¿Qué está pasando aquí frog? – y nuevamente apunto su arma hacia el rubio – explica rápido –
Suspiro, como explicarle a un pirata sanguinario con un arma y un increíble odio a su persona que se encontraban en el siglo XXI entre otras cosas – Baja tu arma cher~ no la necesitas, nadie te hará nada – Lo miro desconfiado bajar su arma en frente de su jurado enemigo que clase de idiota haría eso
- En tus sueños frog, empieza –
- Como quieras cher~ primero que todo – se acerco al americano y paso su brazo por sus hombros – ¿lo reconoces? – el pirata lo analizo
- No, en mi vida lo he visto aunque por su cara puedo ver que es un idiota – Bien no estaba muy lejos de la realidad
- HEY! I'm not an idiot – refunfuño el Americano – hmmp! Francia please explica lo que está sucediendo, este Arthur no me agrada
- Al parecer nuevamente la magia de nuestro amigo británico fallo
- Si eso es obvio – dijo sarcástico el argentino
- France de que estás hablando, mejor dime donde diablos estamos
- Cher este es el año 2012
- ¿Qué? - Ambos quedaron en estado de shock, 2012… debía ser una broma
- Vamos Francia no juegues eso es imposible amigo – el español aun con el bebe en los brazos lo miraba atónito –
- Suponiendo que lo que dices es verdad, ¿Cómo se supone que llegamos acá?
- Por tu "magia" querido, y el cómo solucionarlo, pues bueno es tu magia tu arréglalo – y sin más se cruzo de brazos
Suspiro, el idiota del vino tenía razón si esta era su magia él mismo tenía que solucionarlo, trato de razonar lo primero no era magia muy poderosa como mucho duraría una semana eso era algo, lo segundo que harían en ese tiempo
- ¿Una semana no es mucho, Capitán que propone hacer? – para que negarlo esto sería divertido, una semana no era mucho tiempo había que aprovecharlo ¿no? - Jujujuju~
- Je~ veo que tienes algo pensado ya~ soy todo oídos – Sonrieron cómplices, decidieron entre ellos que mientras estarían en esa época harían una tregua, bueno hasta donde se podía
Se preguntaran que paso al final con todos los de la reunión, bueno en primer lugar a Martín luego de ser noqueado por el brasileño fue llevado de vuelta a su casa, la razón Arthur casi lo mata por simplemente caerle mal.
Los únicos que quedaron al final fueron Alfred, Lovino, Francis, Felciano quien estaba acompañando a su hermano, y Ludwig, los otros se habían retirado.
- Bueno en fin, mis honorables caballeros, pero nosotros nos retiramos – Hablo caballerosamente el inglés junto con una reverencia, y sin más tomo a Antonio y huyeron del lugar, mundo nuevo mucho que explorar, más para esos dos
- ¿QUÉ? – Todos quedaron atónitos, eso debía ser una broma, inmediatamente todos salieron en busca de ese par
Se separaron para buscar mejor por la ciudad, Alfred fue el primero en encontrarlos y vaya que escena se encontró, Arthur estaba atacando a un auto enterrando su espada desde el techo de este mientras que Antonio junto con Manuel reían, y lo aplaudían
- ¡Arthur! ¡Baja de ahí! – Le grito pero este solo lo miro y siguió en lo que estaba – ¡Arthur es enserio baja de ahí! – Saco su celular y llamo a Francis, le dijo donde estaba y que avisara a los demás – Arthur si no bajas en este instante…
- ¿Entonces qué? Jajaja enserio crees que escucharía a un niñato como tu – lo apunto con su espada y con una sonrisa que Alfred creía nunca a ver visto en su ex – tutor una sonrisa altanera llena de soberbia – No me hagas reír te falta por lo menos unos 500 años antes de poder enfrentarme niño – Alfred parpadeo un par de veces antes de afilar su mirada y lanzarse contra él, no iba a dejar que se burlara de él incluso si era su Arthur quien lo hacía.
A Arthur eso lo tomo por sorpresa, sonrió y con una sola mano paro el golpe, era tan infantil y fácil de provocar, todo un niño, agarro la muñeca del muchacho y lo dejo en el suelo, antes de que Alfred pudiese reaccionar ya tenía la espada en su cuello
- Como dije, 500 años demasiado joven – Justo cuando le iba a dar el golpe final apareció Francis inmediatamente su atención se desvió hacia el otro rubio
- Arthur déjalo no sabes lo que haces – Trataba de calmarlo, aunque sabía que eso era bastante improbarlo
- Wow~ ¿Qué no sé lo que hago? Haz tenido mejores salidas my friend en fin, me quedaría a conversar y disfrutar cortándote la garganta, pero – dirigió la mirada hacia el moreno que estaba viendo todo desde una cierta distancia – en estos momentos no me convendría – Era cierto Francis era amigo de Antonio matarlo o hacerle daño terminaría con la temporal tregua que habían establecido y eso ahora no era lo más razonable – bye bye~ - se fue corriendo hasta llegar donde esos dos que lo esperaron y se fueron, inmediatamente Francis fue a ayudar al americano aun tirado en el suelo.
- ¿Estás bien?
- Francis… él me detuvo solo con una mano… a mi… - Estaba en shock, a él, al poderoso Estados Unidos de América lo habían detenido con una simple mano
- No te sorprendas tanto – rio por debajo – ahora Arthur es más poderoso de lo que imaginas, por algo era un imperio ne pas sous-estimer(no lo subestimes)
Al darse cuenta ellos ya habían desaparecido, era el turno de Romano, él fue el segundo en encontrarse a los "fugitivos" y los encontró nada más y nada menos robando en una joyería
- Oh querido este va perfecto con tus ojos – decía el español mientras colocaba un collar con una esmeralda en el cuello del otro – perfecto
- Oh my love, is beautiful Gracias – Tomo la mano del español y deposito un tierno beso en ella – aunque en ti quedaría hermosa también
- Awww~ eres tan romántico – divertido pellizco la nariz de este sonriendo tierno – jajajaja
- Ouch~ Arruinas el ambiente Antonio – se quejo el rubio, riendo también, era divertido pasar el tiempo así, sin sus correspondientes responsabilidades como imperios destinados a matarse entre ellos.
Lovino miraba a los dos con una mano en su boca, su Antonio estaba mostrando su más hermosa sonrisa a alguien que no era él, en su vida había visto sus ojos verdes brillar con tanta intensidad como lo hacían en este momento con el inglés, los celos lo carcomían no quería seguir viendo, se giro para irse era demasiado para él mas se detuvo cuando escucho el llanto del bebe, por supuesto se había olvidado de Manuel, su sobrino lo mataría si le pasaba algo a su chileno
- ¿Qué pasa bebe? – Antonio le estaba hablando con cariño, ¡CON CARIÑO! Ahora si estaba loco o por lo menos eso pensaba el inglés, ambos por alguna razón le habían tomado cariño al niño aunque claro ninguno de los dos lo aceptaría delante del otro, aunque en Antonio era más que evidente, no era bueno escondiendo las cosas, y eso él lo había descubierto hace muchísimo tiempo ya, con el tiempo aprendías a conocer a tu enemigo más que a ti mismo y ellos eran la prueba misma de eso, se conocían tan bien que cuando alguno de los dos tenía algo en la cabeza el otro ya lo sabía.
- Tsk puede que tenga hambre, mira como está devorando tu ropa – y efectivamente el niño estaba masticando la ropa del español, suspiraron era cierto ya era tarde y ellos también tenían hambre
- ¡Hey! ¡Ustedes bastardos! – Lovino se había acercado a ellos mas se congelo cuando ambos posaron su vista afilada en el italiano – tsk es hora de volver ya es tarde – ambos lo miraron amenazantes "piensa rápido, piensa rápido, vamos tu puedes ¡merda!" – se está haciendo tarde eh imagino que no tienen donde quedarse vamos con los otros y lo arreglamos que les parece – bastante pobre la escusa pensó pero era eso o que lo degollaran ahí mismo y gracias pero aun quería vivir –
- Hm… ¿qué dices? Así nos ahorramos el buscar techo y comida – Comento Antonio era verdad era tarde y ya estaban cansados –
- Hm… tienes un punto, además – paso el brazo por el hombro del italiano, ganando se por una parte una mirada celosa de Antonio y por otra el temblor del joven italiano - si intentas cualquier cosa – susurro en su oído – fácilmente los mataremos a todos, espero que lo entiendas
- ¡SI SEÑOR! – se apresuro a decir, llamo a Francis y le dijo que iban en camino que preparara comida para ellos junto con el bebe y que decidieran con quien se quedarían, obvio no los iban a dejar solos y que causaran más destrozos de los ya hechos
Al llegar lo primero que hicieron fue, obvio, comer pero como Manu no aceptaba que nadie excepto esos dos se le acercasen Arthur fue quien tuvo que lidiar con la comida del bebe, ya que Antonio se había ido a duchar, por votación casi unánime se quedarían en casa de Francis, una porque Lovino le tenía demasiado miedo al rubio y otra porque a Alfred le podían venir sus ataques de celos y bien ahora Antonio no era el señor tolero todo que digamos y qué decir de Arthur, ambos se quedarían en la alcoba de invitados uno para cada uno, ahora el problema era el bebe, no podía dormir solo y quería estar solo con esos dos pero si los dejaba dormir juntos que garantía había que la casa permaneciera el pie al día siguiente.
Llegaron a la casa y Francis les prestó ropa a ambos aunque el inglés seguía mirándolo con desconfianza ellos habían sido los que se habían negado de la brillante idea de Lovino, el quedarse en la casa del francés, brillante ¿no?
Y así la noche cayo, Antonio se había ya dormido cuando noto que alguien le golpeaba el rostro, abrió los ojos de golpe e inmediatamente se puso de pie mas cuando miro en la habitación no había nadie, Manuel era quien le había estado tratando de despertar, lo miro extrañado estaba temblando y tenía los ojos llorosos se acerco a él y lo tomo en sus brazos, probablemente había tenido una pesadilla durante la noche.
- Esta bien bebe, yo estoy aquí nada te pasara – trataba de confortarlo mientras cantaba despacito una nana española pero el bebe aun estaba inquieto con sus pequeñas manitos le indicaba que quería ir a alguna parte y para su pesar, ya sabía a dónde, salió de su habitación y en total silencio se fue hacia donde se encontraba Arthur, al llegar se escabullo en su cama.
- ¿Qué pasa? – dijo aun somnoliento
- Shh… no es mi culpa – al decir esto Manuel se acomodo entre ambos tomando sus manos y por fin quedándose dormido – es de él – y acto seguido siguió el ejemplo del menos y se durmió casi al instante con una sonrisa en su rostro
- Tsk… ya que –
Notas: El próximo capito se demorara un poquito ya que estoy en exámenes finales, espero tenerlo listo en una semana o máximo dos… espero…
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