Prologo:
Su nombre es Thierry Gadianni.
Real Solid Vision.
Un nuevo sistema nunca antes visto había aparecido, originalmente no era más que una versión futurista de alguna impresora 3d que tenía la capacidad de darle masa a los hologramas, fue sorprendente en un principio, pero para hacer valer esta tecnología realmente en la vida cotidiana era algo mucho más complicado, después de todo, la energía necesaria para mantenerlo no podía ser sustentada.
Así fue como llego la respuesta a ello, la D-Wheel.
"—Sabia que era inútil, no importa que tanto me sujetara de su cintura o que tanto me aferrase a su camisa, solo bastaba un ligero movimiento y mi cuerpo saldría disparado de su D-Wheel, lo sentía en cada curva que dábamos, no tenía los ojos abierto, después de todo solo era un niño asustado, pero acurrucado en su espalda con las lagrimas en mis ojos podía imaginar en mi mente mi piel siendo desgarrada por el viento, mi rostro desprendiéndose de mi cuello en el asfalto y un choque que, terminaba conmigo envuelto en llamas.
Soy un hombre temeroso y fui un niño asustadizo, pero no estoy exagerando, ese no había sido un duelo y sobretodo una carrera convencional, incluso hoy en día no puedo imaginar algo más peligroso que esas D-Wheel. Dejando una luz neón envuelta en rayos de color roja y purpura, ambos duelistas recorrían avenidas enteras como un relampago, la ciudad entera se había vuelto el campo de batalla. Encontrándome a mí mismo en la posición de víctima, debía abrir los ojos, tenía que ver quien era la persona que me había salvado y podía competir con ese monstro, contra ese destello morado.
Tome un momento para mí mismo y con un coraje que no tenía, mis ojos se abrieron por ellos solos, pero en lugar de respuestas, un mar de preguntas nuevas habian aparecido, como por ejemplo: La luz de aquel semáforo en rojo… ¿Cuántas veces la abre visto? No ha pasado un solo minuto, pero ya he atravesado esta misma calle cuatro veces y más importante aun ¿Hasta cuándo va a seguir en rojo? ¿Por qué nadie se mueve? ¿Por qué nadie grita?
No fue que nadie pudiera vernos, es que no nos habían visto, no aun. La energía generada por esta carrera había sobrepasado a todo lo que había visto en ese entonces y ahora, esa cantidad de poder siendo usado para los monstros… ¿Eran realmente hologramas? Sus expresiones, su manera de actuar y pelear, podían sentir un alma palpitando en ellos. Casas enteras eran destruidas, los autos que eran mandados a volar por el impacto de los monstros quedaban meramente suspendidos en el aire, no hay nadie que pueda detenerlos, esta era la clase de camino en el que viven, invencibles, intocables, este era su mundo, su Speed World—"
— ¿No crees… que es un poco dramático? Esta carta, ademas, tu letra es horrible
— Usted no estuvo allí, oficial.
— Entonces, este chico de morado, ¿Qué te hace pensar que esta aquí? En la penitenciaría para menores: Street Patrol.
Hace 11 años, decenas de explosiones estallaron de manera casi simultánea a lo largo de Ciudad Carmersi a mitad de la madrugada, sin embargo, no encontraron ni una sola pista de lo que pudo haber pasado, alguien o algo se las había arreglado para arrasar una ciudad en poco más de un parpadeo, "el crimen perfecto" dirían algunos.
Y la persona que decidió dedicar su vida a revelar ese secreto es: Thierry Gadianni.
Teniendo Riding duels en el día y bueno, más riding duels en la noche, había tenido que convertirse a sí mismo en un detective si planeaba buscar algún tipo de respuestas, podía ser un amateur, pero su experiencia nacida en las calles era una que podía ser envidiada por cualquiera, quizás no tenia los mejores métodos pero se aseguraba de conseguir resultados.
— Esa noche, mientras la mayoría estaban durmiendo, ¡ustedes estaban obligando a los presos a realizar trabajos forzados en el patio de la prisión! Si una persona se opuso ante ustedes, lo más probable es que la hayan mandado a aislamiento y si fue así, si fue enviada a "aquella torre", significa que quizás pudo haber visto lo que paso.
Su nombre era la "Clock Tower Prision", es el sitio de máxima seguridad de la prisión en su mayoría y en la cima de esta, se encontraba la cárcel de aislamiento, con condiciones lamentables que apenas pueden sustentar la vida y entre esas cosas, estaba una única ventana con dirección a la ciudad, media solo unos cuatro centímetros o un poco menos, pero en ese desolado lugar, era el mayor medio de "entretenimiento".
— Eres bastante… Perspicaz, no sé como supo todo ello, ni tampoco me interesa, pero si lo que dices es cierto y ese día había alguien encerrado en aislamiento ¿Qué te hace pensar que todavía sigue aquí? Fue hace 11 años, la única manera de que permanezca aun aquí es que entrase a la edad de 7 años y me gusta pensar que no veré el día en que tenga que esposar a un niño, ¿No lo cree usted?
— ¿Quién hablo de un preso? Los trabajos forzados a esa hora de la noche, incluso como castigo simplemente está mal, Ciudad Carmesí no apoya esto, eso significa que algún grupo de policías debió haberlo hecho, pero no significa que todos estuvieran de acuerdo con el plan… ¿Cierto?
Con una de las cejas arqueadas, apoyo su barbilla en su muñeca mientras observaba fijamente al personaje tan atípico que acababa de llegar a su portería.
— ¿Qué estas insinuando…Niño?
— Así que dime, ¿Que fue exactamente lo que viste esa noche, aquella cuando tus propios compañeros te aislaron y degradaron hasta portero?
Terminando su frase balanceo su dedo índice señalando el rostro del oficial, gano la valentía para mostrar una pequeña sonrisa arrogante.
La manera en como saltaron las cejas del oficial y el sudor que caía desde su cien lo habían delatado, era inútil correr ahora, seguramente con su poder e influencia podría hacer algo para deshacerse de este mocoso, pero ¿Qué hay si no quisiera hacerlo?
Sus ojos se abrieron por completo, no era una acusación que había visto venir, pero decidió no perder la compostura, cerró los ojos y reflexiono por unos segundos, en un momento había vuelto con su cara regular a la vez que le extendía un pequeño papel de presentación, poseía su nombre, apellido, algo sobre su trabajo y el servicio que ofrecía, pero lo importante era la dirección en la esquina inferior derecha, el lugar donde estaba su consultorio.
— Puede que haya visto algo, de ser así, puedes encontrarme en ese lugar, ahora una cosa más ¿Cómo te llamas?
Si esto iba a llegar a algún lado, al menos ambos deberían saber sus respectivos nombres, así que con una sonrisa cubrió su rostro y se señalo a sí mismo con su dedo pulgar.
— Thierry Gadianni, pero todos me llaman T.G.
Parte 1:
El camino para ser un profesional era poco preciso, difuso y frágil, pero si existía un camino corto y seguro, ese tenia que ser aqui, una academia que se enfocaba en recoger a aquellos con potenciales para poder volverse los duelistas del futuro, incluso son lo suficientemente amables como para pagar los estudios de muchos con decenas de becas al año, pero por la misma razon de que solo existe una en su tipo, significa que todos los estudiantes son compañeros de su competencia, cosa que suele ser el mayor problema y a la vez beneficio del lugar.
— ¡Esto es una locura!
La voz aguda de una colegiala rubia, fue ahogada entre el rugir de los motores de un par de D-Wheel, ¿Los conductores? De primer año, Jax y del último año, Colin, ninguno se conocía, pero solo una cosa estaba clara, cualquiera que se haya atrevido a insultar al conductor más rápido y orgullo de la escuela deberá probarse así mismo, en una carrera o en su defecto, sufrir las consecuencias.
Jax no era una persona especialmente violenta o que se dejara llevar por sus emociones, pero esto había cruzado el límite, ahora es personal, pese a que lleva poco más de siete meses de experiencia, nunca antes había estado en un verdadero riding duel.
— Pudimos ser amigos, Colin.
Por otro lado…
Estando en su tercer año de preparatoria y con una asombrosa cantidad de más de setenta riding duels en su historial, no había ninguna razón para pensar que podría perder, al menos eso en condiciones normales. De acuerdo a las leyes de la escuela, cuando dos duelistas de años diferentes se enfrentan, el mayor, comenzara con menos vida de acuerdo a la diferencia de grado.
Como era de esperarse en una escuela que entrena Riding duelist, existe una cantidad considerable de pistas a la que los estudiantes pueden acceder para entrenar, en total hay tres, cada una está ubicada en el medio de un "estadio" con diferentes niveles de dificultad.
— Jax, Colin, no tienen que hacer esto.
Y la chica en medio de ambos duelistas, es…
— …Esta bien, Cora, puedes confiar en mí, me encargare de ese cretino.
Ella había escuchado ese tono de voz antes, no se iba a echar para atrás, al haber crecido junto con él podía saber cuando era un caso perdido pero al mismo tiempo aprendió a cómo lidiar con ello, es por eso que dejo caer sus cejas y cerro sus ojos resignada, ignorando su falda escolar dio un salto intrépido en su dirección, ahora, Jax ha ganado un nuevo copiloto.
— Muy bien, pero no lo harás solo.
Ya que ambos son estudiantes, las D-Wheel que manejan son suministradas por el colegio y tienen las mismas capacidades y diseño, a juzgar por su apariencia daban la impresión que estuvieran a medio-hacer, como si fuesen solo un prototipo, aun así, tomando en cuenta que eran creadas para adolescentes su velocidad podía llegar a los 100km/h.
— Si piensas que al usar a Cora como copiloto me voy a contener, estas equivocado.
Tomando un casco que hacia juego con la moto, lo coloco sobre su cabeza, siguiéndolo, Cora y Jax hicieron exactamente lo mismo.
"Searing Flames" Ese es el nombre de la pista en la que van a correr hoy, es la más fácil de las tres pistas que tiene la escuela, es la única a las que los de primer año tienen acceso, está concentrada en empujar a los estudiantes a perder el miedo en la velocidad así no es más que un gran ovalo, bastante básico.
En el cristal de sus cascos, una voz femenina generada por computadora hablo: "¿Preparado? 3, 2, 1… ¡Riding Duel! ¡Acceleration!
Cuatro segundos.
Solo eso fue necesario para que la primera esquina fuera tomada junto al primer turno con una velocidad de 70Km/h.
Con una mano en el volante y la otra en su primer robo, ¡Jax toma la delantera!
— (¡¿Qué tal eso?! ¿Lo viste venir? ¿Colin…?)
No está.
La distancia entre el punto de inicio y la primera curva era muy corta, esto era normal, pero entonces, si de acuerdo a la información en su casco él había ganado el robo ¿Eso no significa que había sido más rápido? Tuvo que serlo, es la única manera de comenzar, no hay manera de que este frente a él, pero, ¿Por qué tampoco estaba detrás?
No eran más que solo un par de centímetros, pero como si se tratase de su sombra, justo a un lado de él, donde no podía ser visto, Colin lo miro fijamente como lo buscaba con su cuello alrededor de toda la pista.
— (¡¿Podria ser?! A un lado de mi… ¡El—)
En el instante que titubeo, decidió mirar a su izquierda, tenía que saberlo ¿Estaba allí? ¿Había tomado la curva mal? ¿Dejo una abertura? Pero antes de poder saciar su sed de preguntas al girar la cabeza, una mano se adelanto desde el asiento trasero y se interpuso en medio, manteniendo su casco, su vista, en frente.
— (¡¿Cora?! Ya veo, lo entiendo, tú debes saber dónde está él perfectamente ¿No es así? Si volteo ahora, yo…)
— (Esa mujer, Cora, es una buena asistente, de segundo año si no me equivoco)
Desde el asiento de co-piloto, Cora y Colín cruzan miradas.
Tomando la curva a la par de Jax, imitando sus movimiento, escondido en su costado izquierdo, Colin había dominado la entrada, no se trataba de quien comenzaba primero, se trataba del control, la libertad de decidir quién o qué juega y cuando, los riding duel no son más que una batalla entre libertades.
100Km/h.
Una vez la curva había acabado, dejando caer sus dedos en el acelerador sin ningún tipo de temor, el duelista de tercer año, se escapa en el frente dejando detrás de sí solo una pantalla de humo, el primer lugar era suyo ahora.
En los Speed Duel, habían muchos métodos de ganar, independientemente de cómo vaya el duelo, esto sigue siendo una carrera y en lo que respecta a eso, la ventaja de Colín se hacía cada vez más evidente, el no necesitaba herirlo ni una sola vez, si podía asegurarse de llegar primero a la meta, el duelo acabaría inmediatamente dejándolo a él como inevitable ganador.
— Es tu turno, Jax, adelante, después de todo tu eres el primero en robar ¿No es así?
Normalmente sería imposible el mantener una conversación entre duelistas en medio de la pista, sus voces no serian capaz de alcanzar el uno al otro, pero eso no era ningún problema, sus cascos poseían un canal con el que podían comunicarse el uno al otro en cualquier momento que quisieran.
— ¡Coooolin!
4000LP Vs 2000LP
Primer turno
— ¡Invoco en modo de ataque: Genex Neutron Nv4(1800/1200)! Ahora, al terminar mi turno, se activa su efecto especial, me permite añadir un mounstro maquina/tuner desde mi deck a mi mano y la carta que eligo es…R-Genex Oracle, ahora, al agregar esta carta desde mi deck puedo invocarla de manera especial en modo de defensa (300/300)
Por otro lado, cuarenta metros más adelante.
Segundo turno.
— ¿Qué sucede, no hay nada que puedas hacer? Hmp, es mi turno, ¡Robo! Invoco a Fabled Ashnevel(1600/1200) en modo de ataque, ¡Batalla! Ataca a su juguete de metal, ahora, activo su habilidad especial al descartar una carta de mi mano al cementerio su poder se incrementa en 600 puntos, (1600→2200/1200)
Sobrevolando a través de la pista con su par de alas negras, Ashnevel arremete contra Genex Neutron usando una patada en picada, por fortuna para Jax, la real solid visión está restringida solo para duelo entre Duel Runners de ultimo año.
Con el cuerpo de Genex Neutron explotando en el aire, un calor abrasador envolvió el cuerpo de Jax, necesitaba confirmarlo ¿Qué había sido eso? Alzo su cabeza en dirección a la batalla, pero aunque sus puntos de vida habían disminuido aun no se había concluido la fase de batalla.
Abriéndose paso entre un muro de fuego y metal carbonizado, Ashvel atraviesa el pecho de Neutron y sigue su camino en dirección de Jax.
— (¡E-esto es!) ¡Colin! ¡¿Perdiste la cordura?!
Un alarido de verdadera desesperación se escurre entre sus labios.
— (Me voy a asegurar de que este sea tu primer y último duelo)
Siguiendo su camino, la patada se estrella en frente de su rostro.
Justo ahora, debajo de su casco, su boca había sido golpeada al menos desde su perspectiva, tan fuerte como si se tratase de un martillazo, inevitablemente su cara dio media vuelta y desconcertado, había hecho lo último que un duelista debe hacer en un Speed Duel. Dejándolas llevar por el viento, sus manos se separaron del volante.
4000lp→3600lp
70Km/h→68Km/h
Este habría sido el momento donde su D-Wheel perdería el curso del camino y se estrellaría frente a la primera pared, terminando con su carrera como duelista de una vez por todas, pero este también es el momento donde él agradecerá haberse hecho amigo de una persona tan confiable como ella.
Pasando sus brazos alrededor del cuerpo de Jax, Cora de segundo año tomo nuevamente el curso del duelo al sujetar el volante en sus manos, pero no solo se detuvo allí, colocando sus pies sobre los de Jax acelero aun más de lo que él jamás se hubiese arriesgado, ya Colin llevaba el tiempo suficiente corriendo a la máxima velocidad mientras que por su lado, ellos no solo iban a poco más de la velocidad promedio, si no que al ser atacados, también su velocidad sufre repercusiones.
— (¡Tch! ¿Realmente eres capaz de llegar tan lejos…Colin? El boleto para ese torneo, ¿Es tan importante para ti?)
Parte 2:
No piensen mal de él.
Puede que no haya estudiado, este desempleado, soltero y lo único que se le dé medianamente bien sean los riding duels, ignorando que gaste su tiempo libre (realmente siempre está libre) jugando a ser algún tipo de investigador privado, pero nada de eso importa, porque hoy, todo va a cambiar.
— ¡Thierry! ¿En dónde demonios estas?
En una Gasolinera, al extremo de la ciudad.
— ¿Te lo he dicho varias veces, no es así? No me importa tener que alimentarte tres veces al día, pero asegúrate que sea la única preocupación que me des.
Gritando en todas direcciones, un anciano se desplaza a través de la tienda, que por fortuna o no, está vacía hoy para variar, su principal problema no era la falta de clientes, de todas maneras este trabajo es solo una manera de perder el tiempo, por otro lado, ese mocoso…
— (No puede ser, acaso…de nuevo ¿El…?)
Esta no es la primera vez que se perdía de manera tan repentina y ya que no había escuchado el sonido de ningún motor en la última hora, solo había un lugar donde podría estar.
Dando un portazo, el anciano abre la puerta que conecta la tienda con un garaje privado que posee en la parte trasera.
Efectivamente, allí estaba.
—…
Como podía esperarse de la definición de un garaje, este estaba aquí para guardar vehículos, siendo más precisos, D-Wheels, habían varias, muchas a medio terminar tiradas en las esquinas, un par totalmente funcionales pero nada destacable, sin embargo, había una excepción, dentro de una cámara de cristal, en el medio, una D-Wheel profesional de segunda generación reposaba en un asiento acolchado para sus llantas.
— Thierry, se lo mucho que quieres competir como profesional, anhelas tu debut más que cualquier otra cosa, lo pude notar en tus ojos aquel día y lo hago ahora, es especialmente difícil para ti, tomando en cuenta de que no terminaste la escuela.
Moon Spark Blaster.
Esta D-Wheel había sido personalizada y dotada de grandes cualidades aereodinamicas, mientras que su resistencia era solo un poco más de lo necesario su velocidad compensaba todo lo que pudiera desear, aun así, su punto más fuerte recaía en su flexibilidad a la hora de tomar curvas o posiciones poco ortodoxas en un duelo. El color que predominaba era el azul rey con trazos de color blanco a lo largo de todo el asiento, como si hubiera corrido por tanto tiempo que el viento se hubiese quedado impreso en su metal.
Sin haberse dado cuenta, la mano de Thierry ya estaba en el vitral.
— Hey, T.G, no te desanimes, algún día estarás listo para conducirlo y cuando ese momento llegue yo te lo hare saber, estoy seguro que lo sabes, pero este es el único recuerdo que queda de mi hij—Seguramente su abuelo siguió hablando por un rato mas, pero Thierry había dejado de escucharlo, no porque no quería, es porque no podía, las voces en su mente, sus pensamientos habían sofocado todo tipo de distracción— ¿De acuerdo?
Sin haber estado seguro a que estaba respondiendo, Thierry hablo.
— De acuerdo, lo tomare en cuenta, abuelo.
— Muy bien, yo me iré ahora, no te quedes hasta tarde.
Averiguar qué había sucedido esa noche estaba bien y todo eso, pero incluso si lo lograse no se sentiría completo, el acabar con aquella persona era solamente un acto de venganza, sin embargo, esto, esto iba a ser su método de redimirse.
Era cuestión de tiempo para que el torneo mundial comenzara a moverse y para aquellos que no son duelistas profesionales o pueden ganar un pase directo al venir de alguna privilegiada escuela de duelos, solo les queda un sendero por recorrer, el de la puerta trasera, detrás del telón, el poco convencional.
— Lo lamento abuelo, esto no es por mí, es por ti.
Verán, existe un tercer método para poder entrar y ese es el tener una carta de recomendación de uno de los jueces encargados de organizar el evento, estos, viajan alrededor del mundo buscando duelistas proezas, talentosos y únicos, actúan como filtro para lo mejor de lo mejor, pero no todos actúan de la misma manera, un miembro de ese selecto grupo tiene otro tipo de… Perspectiva.
Cree fervientemente en la frase "En el fuego más intenso se forja el metal más fuerte", habiendo alcanzado su posición tras engaños y artimañas, usa un pequeño gran negocio anónimo en una gran recamara oculta debajo de la tierra, donde Riding Duels ilegales son llevados a cabo y al mismo tiempo, decide quién es merecedor de ganar un boleto, una oportunidad para lograr llegar a la cima.
Solo un par de horas después, con la luna en la cúspide del cielo, una llamada lo interrumpió en la soledad de ese antiguo garaje, porque si, aun seguía allí. Thierry no tenía celular pero aun así no lo necesitaba para recibir una llamada, cumpliendo la labor de un D-Gazer, toma su casco desde una esquina de la habitación, puede que no esté en un duelo pero aun así se lo coloca y tras apretar un botón en su costado, una voz distorsionada sale a través de los auriculares.
— El evento comenzara en un par de minutos pero no te veo aquí, no me dirás ahora que te acobardaste ¿Cierto?
— No te preocupes, llegare a tiempo, pero… ¿Solo es una carrera? ¿Solo necesito hacerlo una vez, cierto?
Su voz no titubeo, por el contrario, había sido totalmente firme, sus preguntas no eran algún tipo de suplica, era una amenaza, pero nada fuera de lo común, al menos para los oídos a los que eran dirigidos, quien sutilmente ignoro sus comentarios y se sobrepuso con una pregunta aun mas determinante.
— Solo te lo diré una vez más, esta es una carrera seria, honestamente, no creo que puedas conseguir una D-Wheel profesional y más importante aún, el sistema para mantener el real solid visión.
Tras un sorpresivo "Beep", Thierry termino la llamada.
— Solo una vez, tan solo necesito ganar una carrera hoy y será todo, lo prometo, abuelo.
Con el eco de un cristal desmoronándose y el rugido de un motor, atravesando la noche, T.G sobre Moon Spark Blaster se abalanza a gran velocidad sobre la autopista, él que había conducido todo tipos de D-Wheel pudo notarlo ahora que estaba sobre ella, el asiento era simplemente demasiado grande, no era una cuestión física o de espacio, era más… Emocional, algo de él se sentía sucio al estar aquí y ahora, recorriendo el asfalto como un ladrón hacia una carrera ilegal a solo una oportunidad que no era tan diferente a una apuesta.
— Entrar y salir, así es, la próxima semana esto será solo un mal recuerdo.
El lugar de encuentro donde se desarrollaba este tipo de evento era un poco aislado, aun así, estaba cerca del centro de la ciudad pero gracias a que T.G había salido desde el extremo de la ciudad le tomaría un par de minutos de llegar allí o quizás menos, gracias a la desolada autopista por la que transitaba, que aunque efectivamente en esta ciudad reinaban los riding duel y no paraban en ningún momento del día, no significaba que podían simplemente pelear en cualquier lugar que quisieran o los resultados podrían ser atroces, como por ejemplo…
— ¿Eh? Oye, oye, oye ¡¿Es enserio?!
Tomando la forma de una pequeña colina, el asfalto se doblo suficiente hasta explotar en una lluvia de perdigones en todas direcciones a tan solo un par de decenas de metros de la autopista, la magnitud del golpe fue lo suficientemente grande para levantar una cortina de humo en mitad de la carretera.
— (¿Una carrera? ¿Hasta aquí? Puede ser… ¿Una persecución policial? ¿Me tendieron una trampa? )
Pero antes de seguir formulándose más preguntas, abriendo un agujero a través de esa cortina de tierra, elevándose hacia el cielo, una D-Wheel montada por dos… ¿Estudiantes? Seguía su camino al aire, mientras que por el contrario, ascendiendo de aquel agujero donde se genero el estallido otra D-Wheel acompañada de un demonio rojo alado habían llevado su batalla hasta este lugar.
Y sin darse cuenta, por alguna razón, su casco se había conectado al canal donde se llevaba el duelo, permitiéndolo, aunque opaco, escuchar un comando: "¡Fabled Dianaira, ataque directo!", pero no se limito a eso, en una esquina de su campo de visión, un contador de puntos de vida había aparecido, esto era realmente poco convencional, debe ser cosa de las D-Wheel de segunda generación.
2900LP→100LP Vs 2000LP
Y junto al resultado de cambio de vida, una pregunta apareció en su D-Wheel: "¿Quieres unirte a la batalla?"
Las decenas de metros entre el agujero en el asfalto del cual había aparecido el demonio junto con los dos duelistas había sido reducido a poco menos de un metro y con la vida de dos personas inocentes peligrando, T.G habia sido acorralado.
— ¡Ahhhh rayos! ¡¿Tenía que pasar esto ahora?!
… … …
Battle Royal Mode: ON.
— En modo de ataque, ¡T.G Jet Falcon!
