LUZ Y OSCURIDAD
No es una lucha eterna… Es un amor incomprendido.
Así como existe El bien y mal, el Yin y el Yang, así se compone el alma, cuando se separa en el mundo, una mitad posee más luz y la otra más oscuridad.
Una experiencia que nos hace sentir cuando tu amor no es correspondido, cuando dos almas compatibles, calladas y sumisas, encuentran el equilibrio para volverse a juntar.
Severus experimenta nuevamente el amor, nada más que con Hermione, creyéndose ignorado y no correspondido, trata de volver a su faceta fría para que ella no traspase su corazón; Hermione tristemente enamorada de su Profesor, decide conquistarlo, aunque no sabiendo cómo ni cuándo… El destino conspira.
RATED: M/R18
OBRA A FIN DE CONCURSAR EN EL LONGFIC SEVMIONE.
…
CAPITULO 1: MI LUZ
POV HERMIONE
Una vez más, me despierto fastidiada cada mañana sin nada nuevo en mi despertar, sin nada que me motive a estar alegre, tal vez deba recordarme lo de cada mañana.
Estaba viva, había triunfado el bien sobre esa terrible guerra, que todo había terminado y sobre todo que él estaba vivo.
Sí, eso era lo mejor de todo, que él estaba vivo, que comenzaba de nuevo su vida, aunque para mí, solo invisible pasaba a su lado, nunca una mirada de más que no sea que verme como una estudiante, nunca una sonrisa, nunca un comentario que no sea hiriente, pero bueno, estaba vivo, se encontraba conmigo, aunque no juntos literalmente, pero si en el mismo plano existencial y eso ya era mucho para mí, es más, era suficiente para mí.
Ese era mi impulso, solo eso basto para poner una sonrisa en mi rostro y levantarme para iniciar un nuevo día, me levanto de la cama, me arreglé y bajé a desayunar.
Llego al comedor y me reuní con mis compañeros, había pasado solo unos meses desde el término de la guerra que no había muchos alumnos, solo los que quisieron quedarse a reconstruir el castillo y las vidas de los héroes de guerra.
Giré mi mirada a la mesa de Profesores y ahí lo vi, tan serio y pensativo como siempre pero vivo al fin y al cabo, lo observe durante un tiempo y cuando él alzó la mirada, desvié mi atención a mi desayuno, con eso me sentía feliz aunque él no me mirara.
El desayuno transcurrió normal salvo por un aviso al final de la Directora McGonagall.
-. Les quiero decir, que a pesar de que perdimos a muchos, no todo fue en vano y estoy segura que ellos no querrían que esta depresión que muchos mantenemos se quede siempre así, debemos volver a lo que Hogwarts era, debemos volver la luz a nuestro hogar -. La Directora McGonagall tomó un breve respiro y prosiguió. -. Hemos planeado un baile, no formal, donde sólo el único fin que será el unirnos más después de la guerra, pero si ustedes deciden el querer venir formal, no habrá restricciones, esta invitación estará abierto a otras escuelas, mostrando nuestra unión al mundo mágico, traten de disfrutar esto, es un nuevo comienzo -. Sin decir más, la Directora bajó y el desayuno terminó.
A lo largo de ese día, ese era el tema principal "El baile" y con la curiosidad de saber quién se presentaría.
Para mí, solo era un baile más, nada que me hiciera despertar una emoción por buscar una pareja, aunque conociendo la adicción que tenía Ron sobre mí, seria frustrante sus intentos de querer pedirme que lo acompañara al baile, yo deseaba asistir, deseaba ver como el mundo mágico celebraba la paz, como la felicidad y la paz volvían a estar juntas.
Aunque eso significaba ir sola, no me importaba, aunque eso implicaba que al único que quisiera de pareja fuera a él, que él estuviera feliz, solo eso quería y si era a mi lado mucho mejor.
El día transcurrió normal, clases pequeñas y reconstrucciones al castillo, caminatas por el bosque prohibido, haciéndome sentir en paz, un paseo que no debía ser nada raro salvo por algo inusual que sucedió.
Caminando por el bosque prohibido pude ver al Profesor Snape recostado en un árbol viendo hacia el lago, tan tranquilo, tan en paz, eso me hizo sonreír, no quería importunarle, pero el verlo tan tranquilo me hizo querer verlo así, aunque fuera solo en esa ocasión.
Me acerque entre los árboles, al parecer sin percibir molestia en mi profesor, él estando recostado, de pronto levantó la vista, haciendo que me escondiera mucho mejor, pero solo pude ver como el Profesor sacaba un libro de su levita y se disponía a leer, leyendo y escribiendo en el mismo, tal vez haciendo anotaciones como lo hizo en algún tiempo de estudiante.
Podía sentir el calor inundando mis mejillas, sin duda sentía un gran cariño y respeto hacia su persona, era alguien listo, culto y con una gran lealtad y de acuerdo a lo que me conto Harry, con un gran corazón capaz de entregar todo por la muer que amaba.
Si, y ese era el problema, la mujer que amaba, que seguramente aún sigue amando, a la que aún estaba en su mente y en su corazón, por la cual incluso su alma cambió llevando su patronus grabado por ella, una pizca de celos despertó en mí.
Si bien estaba feliz de ver el gran hombre que se escondía tras esa fachada fría, también estaba triste sabiendo que esa faceta tan humana, jamás yo la podría conocer tan de cerca, tan mía, siendo mi amor por él, algo que siempre mantendría en mi mente, en mi corazón, donde él, ocuparía su lugar por siempre aunque nunca llegase a ser mío.
Aunque este amor, jamás él lo sabría, pero eso no me hacía rendir, por algo tenia orgullo Gryffindor, de ser posible, eso no se quedaría así, le demostraría lo que yo sentía, aunque fuera su burla, aunque él no me correspondiera, el sabría la verdad, no sabía cómo, no sabía cuándo, pero estaba dispuesta a sacarme ese peso del alma, debía ser sincera y aunque él no compartiera el mismo sentimiento sería suficiente para sentirme en paz.
O al menos eso esperaba, quería intentarlo, antes del Baile donde seguramente más de una estaría sobre el queriendo captar su atención, y si esto pasaba quería que él me tuviera en su mente, que estuviera tan bloqueado por la conversación que no tendría ni tiempo de ver a alguien más, posiblemente era cruel y manipuladora, pero era un riesgo que con gusto estaba dispuesta a correr.
Lo observe hasta que él, guardó su libro de nuevo en su levita y recostó nuevamente su cabeza en el árbol, dispuesto a dormir, sonreí ante lo maravilloso que se veía así de relajado y salí por donde había llegado, dejando a mi amado ahí y mis pensamientos aun rondando en mi mente planeando mi siguiente movimiento, planeando como traerlo a la Luz… A MI LUZ.
