¿Un fin de semana podrá cambiarlo todo?

Disclaimer: Los personajes de la saga Crepúsculo son propiedad de Stephenie Meyer y su casa editorial.

El resto de los personajes pertenecen a mí y a mi imaginación.


Capitulo 1: Primer día

Esto no era lo que tenía en mente cuando accedí a ir de campamento con los chicos.

Habíamos quedado en vernos en el apartamento de Alice, desde donde todos nos iríamos en el jeep de su hermano, quien había vuelto apenas unos días atrás. Teníamos todo un fin de semana completo para nosotros y su idea había sido la de acampar. Genial. Nada mejor para el cabello y las uñas que estar rodeada de mosquitos, barro y humedad por tres días. Pero en fin, la cosa era pasarla entre amigos y acampar por tres días no suponía un sacrificio demasiado grande.

Me había levantado cerca de las seis para arreglarme y desayunar antes de salir.

Opté por ponerme mi bikini y un vestido blanco encima. Hacia bastante calor pues las vacaciones de primavera acababan de comenzar, así que era bueno ir con algo ligero.

Me calce mis chanclas de goma y luego de tomarme un jugo con tostadas salí rumbo a casa de Alice con tiempo de sobra, pues no quedaba a mas de diez minutos de la mía.

Aparqué mi coche a un lado de la acerca y me bajé con mi bolso en una mano. Había intentado por todos los medios solo llevar solo lo necesario, cosa que me había llevado ¡horas! pero al final había reducido todo a unos cuantos shorts, playeras, ropa interior y demás cosas.

Alice estaba parada a un lado del enorme jeep de su hermano esperándome con una sonrisa y vestida al ultimo grito de la moda en ropa deportiva, como era de esperarse.

-¡estoy tan contenta de que vayamos a pasar todo el fin de semana juntas!- dijo saltando y dándome un abrazo con tanta alegría como siempre.

- es bueno volver a verte Alice- dije yo luego de que ella me soltara.

- por supuesto que si. No sabes cuanto te extrañe- me dijo feliz- aunque solo hayan pasado cuatro días.

Yo solté una risita.

- y es bueno volver a verte a ti Rose- escuché a mis espaldas una voz muy conocida.

Me volví para comprobar que se tratara de el y por poco me quedo muda al verlo.

Llevaba puesta una playera blanca que se ajustaba a cada uno de los músculos de su perfecto cuerpo y resaltaban sus musculosos brazos. Unos shorts negros que le hacían por demás justicia a sus estrechas caderas, y zapatillas completaban su look junto con su sonrisa de hoyuelos de siempre.

-hola Emmett- dije sonriéndole

-wow, como pasa el tiempo- dijo viéndome de arriba abajo- en verdad me he perdido bastante estando en Washington.

Yo no respondí. Ya habían pasado más de tres años desde la última vez que lo había visto y seis desde lo que había ocurrido. Había pasado demasiado tiempo en definitiva, pero no por eso iba a actuar diferente. Todo se había aclarado entonces.

- es tu culpa estudiar lejos-dijo Alice como reprimenda- y por eso que tampoco hemos podido salir todos juntos.

Emmett solo le sonrió a medias para luego despeinarla.

-¿tienes tu maleta en el auto o…?- me pregunto ahora volviendo sus ojos hacia mi

- es justo esta- dije señalando la que tenia en la mano y entonces escuché un grito.

- ¡no puede ser!- chilló Alice.- no pudiste haber metido toda tu ropa ahí Rose- parecía mas que sorprendida.

- no todos nos llevamos el armario a un campamento de tres días- la acuso su hermano- no como tu.

- tu no tienes ningún sentido de la moda, así que no tienes derecho a opinar- lo acusó para luego volverse hacia mi- en serio. ¿Dónde esta tu maleta Rose?

- es esta- dije yo alzándola en el aire- no voy a negar que me costo resumir todo a esto, pero no voy a llevar tantas cosas solo para tres días.

Emmett se rió.

- genial- resopló Alice- ahora yo seré la única con tanta ropa y a la que no dejaran de molestar por eso. Ya sabes que con Bella no puedo contar pues ella vive con un guardarropas que juro que a mi me haría dar una ataque y como tu no traes mas que eso…- soltó un largo suspiro.

-ya tranquila duendecita- le dijo Emmett pasándole un brazo por sobre el hombro- prometo no molestarte mas de lo necesario por tu obsesión hacia la ropa.

Ella lo fulminó con la mirada y luego le dio un puñetazo en las costillas.

-ey- se quejó- juro que todavía no se para que te enseñe a defenderte si vas a usarlo en mi contra.

-sabes que te quiero- le dijo ella con su mirada de perrito y que a la que nadie se resistía.

Emmett cargó mi maleta en su coche y entonces llegó Jasper a quien Alice recibió saltando sobre él y con todo un espectáculo de besos.

-¿no creen que ya fue suficiente?- dijo Emmett molesto y al ver como su hermana no se despegaba de Jasper. No es que fuera demasiado celoso, según me había dicho Alice, pero aun no acababa de agradarle su novio. Lo había visto en un par de ocasiones, y con eso había bastado para no caerle bien, a diferencia de mí, puesto que Jasper me parecía ideal para Alice.

Éste, tras el comentario de Emmett, él la puso en el suelo y entonces se dirigió a nosotros.

- lo siento- se disculpó- ¿Cómo están?

- excelente- contesté yo.

- bien- dijo Emmett a lo que Alice bufó.

-puedes ser mas amable si quieres- le reprochó

- solo si quiero- apuntó el. Tan terco como siempre.

Ella estaba a punto de replicarle cuando Jasper la interrumpió.

-amor, olvídalo ya- le dijo acercándola a el por al cintura- es obvio que él aun no confía en mi y no es justo que lo obligues a hacerlo.

-¿ya ves?- insistió el otro- de cualquier forma sabes que lo intento, por ti hermana.

-solo espero que todos la pasaremos bien el fin de semana-dijo- y ganándose con ello una risa contenida por parte de Emmett, para quien parecía imposible que eso llegase a pasar con Jasper allí.

Ya casi habíamos acabado de subir todo al jeep cuando llegaron Edward y Bella en el Volvo de él.

-lamento la tardanza, es solo que se nos hizo tarde por que…- Bella no parecía saber que rayos decir y la verdad por como llevaba su cabello yo supe por que.

- me quede sin gasolina a mitad de camino, y esta dormilona no quería levantarse.- dijo él refiriéndose a ella y con una sonrisa en la cara que demostraba claramente que había pasado en lugar de eso.- lamentamos haberlos hecho esperar- dijo como todo un terrible mentiroso.

-oh, fue mi culpa por supuesto-dijo Bella poniéndole mala cara

-lo es por vestirte así- dijo él señalando sus shorts de mezclilla tan cortos junto con una blusa ajustada al cuerpo y los que veía con algo más que picardía.

-si así comenzamos el viaje, yo pido la tienda más lejana a la suya-dijo Emmett- preferiría no escucharlos teniendo sexo todo el día.

Edward se rió y entonces se acercó a saludarnos a cada uno al igual que Bella.

-seis meses sin verte y aun no cambias-dijo Edward- ya veo que Washington no es tan malo. ¿Qué tal las chicas?

-nada mal- dijo el- pero nada se compara al hogar

-por completo de acuerdo- contestó el otro abrazando a su novia para luego plantarle un beso en la boca.

Los chicos cargaron el resto de las cosas en el auto y ya seguros de que nada faltaba nos subimos. Bella y Edward ocuparon el ultimo asiento de dos y delante de ellos Alice y Jasper, dejándome a mi el asiento del copiloto, por supuesto.

-hey, no muerdo si es lo que crees- me dijo Emmett poniéndose sus gafas negras al ver la cara que puse por tener que ir junto a él y dedicándome una de sus sonrisas galantes- a menos que lo quieras.

Yo puse los ojos en blanco y entonces me subí.

Lo cierto es que no me molestaba sentarme junto a Emmett, sino que no estaba segura si aquello hubiera sido lo que habría hecho en un principio. No desde me había dado cuenta cuanto aún me atraía. ¿Y por todos los cielos a quien no? Era Emmett McCartney. Alto fornido, rudo y gracioso. Esos ojos cafés su sonrisa con hoyuelos, sus labios, su espalda ancha y su cuerpo...

Pero no podía pasar nada entre el y yo. Ya lo sabía, y eso no haría más que hacer aun más difícil para mí pasar aquel fin de semana en su compañía.

Y eso sin contar el modo en que el me había estado observando desde que había llegado.

Él encendió al radio y tras encontrar una emisora con la que todos estuviéramos contentos se dedicó a conducir.

-¿Cómo cuanto dura el viaje hermanito?- preguntó Alice

- unas cuantas horas. Estaremos allá por la tarde, bastante antes de la cena.

-quiero imaginarme que pararemos en el camino ¿no?- dijo Bella algo preocupada.

-si, una vez, dos si es necesario, y conste que lo hago por ustedes- dijo Emmett muy seguro de si mismo-. Si fuera por mi haría este viaje de una sola vez, pues cuanto con bastante gasolina como para ir y volver, pero, no viajo solo al fin y al cabo.

- ya Emmett- le dijo Edward- son chicas y tienen sus necesidades, sabes que no son como nosotros.

Comentario por el que recibió una muy mala mirada por parte de todas nosotras.

-tu también tienes necesidades- apunté yo- pero no creo que vayas a saciarlas en el auto.

-estoy de acuerdo- apuntó Jasper a lo que yo le dedique una mirada agradecida.

Edward y Emmett eran grandes amigos. Si bien en parte era por que se conocían desde niños y habían compartido todo hasta terminar la secundaria, ahora que estaban lejos aun mantenían el contacto.

No tengo idea de cuanto rato estuvimos hablando y bromeando hasta que me quede dormida. No estaba cansada, pero me di cuanta de que había caído rendida únicamente cuando sentí como algo me rozaba la mejilla derecha.

Abrí los ojos exaltada y entonces me encontré con él viéndome.

-¿Qué…?

-hicimos una parada- me interrumpió antes de que pudiera terminar de formular mi pregunta- los chicos están comprando algo de comer, supuse que querrías bajar también.

-lo siento, no me di cuenta de cuando…me dormí- dije algo avergonzada e incorporándome. Sin darme cuenta había terminado casi acostada en el asiento e inconvenientemente inclinada hacia su lado.

-no importa- dijo aun sin dejar de mirarme- si estabas cansada…

-algo, pero no creí que tanto como para dormir- él me dedicó una sonrisa.

-no hemos hablado hace mucho- apuntó- ¿Cómo vas con la universidad?

-bien, dos años más y ya tendré mi titulo. No me quejo, todo va según lo planeado.

-te felicito- dijo- yo comencé a trabajar hace poco en una nueva clínica y la verdad es que no es nada lo que esperaba.

-¿demasiado arduo?- quise saber. Él negó

-aburrido-dijo en cambió- creí que allá las cosas serían diferentes, pero estoy considerado buscar otra cosa.

-estoy segura de que lo conseguirás- dije

-¿por qué lo crees?

-siempre que te has empeñado algo, has terminado por conseguirlo- dije y sin evitar recordar todas las cosas que él había conseguido desde que lo conocía.

-es algo que todos deberíamos hacer-dijo- y has venido sola hoy ¿por qué?- preguntó y sin que yo esperara tan brusco cambio de conversación

- supuse que sería algo entre amigos, pero dada la relación de Edward y Bella y el hecho de que Alice haya traído a Jasper, no pensé que debía venir con alguien- dije aunque no era del todo cierto. Él, sin embargo, no se contentó con esa respuesta.

- yo también he venido solo pero eso no significa que no haya deseado traer a alguien ¿qué tal Sean, que pasó con él?

-terminé con el hace casi un año- dije y sin desear recordarlo. Nuestra relación nunca había sido muy buena pero después de encontrarlo con otra, había terminado con él.

-me alegro que lo hayas hecho- dijo y yo me lo quedé viendo estupefacta. ¿Es que tenía que ser siempre tan sincero?

-¿te alegras?

-era un idiota-dijo aunque solo lo había conocido en una ocasión e incluso entonces me lo había dicho, estando demasiado borracho por su puesto, y donde no había perdido la oportunidad de flirtear conmigo una vez más- demasiado débil para ti

-¿y me lo dices ahora?

-no me escuchaste entonces- apuntó y yo supe que llevaba razón. Estaba demasiado calada con él como para ver eso-¿de modo que no hay nadie más ahora?

-no estoy sola- dije, sin dar demasiados detalles- si eso responde a tu pregunta

Él me sonrió y solo entonces noté lo cerca que estaba de mi. Inconscientemente me tiré hacia atrás logrando que mi espalda chocara con la puerta.

-te ves diferente-dijo- desde la ultima vez

-ha pasado un tiempo, la gente cambia

-¿y tú has cambiado Rosalie?

-en algunas cosas-respondí- ¿tú no?

-oh, por supuesto que sí- dijo- sin embargo hay cosas que no desaparecen - dijo esta vez sin dejar de mirarme- por mucho tiempo que pase.

-iré a ver como va el resto con las compras- dije sintiéndome algo incomoda y saliendo del coche- enseguida regreso-dije y tras cerrar la puerta me dirigí a la tienda de la gasolinera donde estaban los demás.

Perfecto. Eso había salido perfecto. A penas llevaba unos minutos con él y me había sentido de nuevo como una estúpida e inexperta adolescente. Cosa que me había prometido no volvería a pasar.

Camine algo insegura hasta la puerta y la abrí de un tirón.

Los chicos ya tenían casi todo lo que necesitaban, así que solo los ayude con las últimas compras que no consistían en más que comida chatarra y varias latas de soda y cervezas para luego volver al auto.

Los chicos subieron las bolsas con ellos, mientras nosotras tres íbamos al baño.

No es que mucho nos gustaran los baños de las gasolineras, pero luego de ir más de cuatro horas en un jeep camino a la nada, todas lo necesitábamos.

Nos tardamos lo usual, unos diez o quince minutos, arreglándonos el cabello y haciendo nuestras necesidades, pero al parecer eso logró que ellos se molestaran

-¿es que tanto tienen que tardar?- se quejó Edward.

- ya estábamos por ir a buscarlas para ver si no se habían perdido- dijo Jasper

-¿acaso nos estas llamando estúpidas?- le recrimino Alice.

-no, no quise decir eso... solo- intento justificarse él a lo que se ganó un buen puñetazo de Alice en las costillas.

-bien- festejó Emmett más que feliz- supongo que al fin le has dado un buen uso a esos golpes que te enseñé.

Jasper le dedicó una mirada envenenada y luego de que cada uno volvió a su lugar el vehículo se puso en marcha una vez mas.

Esta vez Emmett y yo no volvimos a hablar durante el viaje, aunque yo me había permanecido despierta el resto del trayecto.

Cerca de unas dos horas mas tarde al fin llegamos al dichoso bosque donde acamparíamos por los siguientes dos días y medio.

No estaba nada mal, bueno, ni que yo fuera experta en acampar y menos aun en bosques, pero no parecía demasiado aislado y tenebroso.

Había pinos, ombúes y varios setos que pude ver cerca de donde nosotros frenamos. Era un pequeño claro en medio de un montón de árboles y le sitio perfecto para plantar un campamento.

-esto queda en medio de la nada- se quejó Alice al bajar.

- por algo se le dice acampar amiga- le dije yo.

- Dios, pero en serio es un bosque- dijo. Aun parecía no creérselo

-¿y donde pensaste que iba a llevarte a un camping donde tienes un supermercado y un spa a cinco minutos?

- no estaría nada mal- añadió ella, pero al ver la mirada de todos decidió no decir mas nada.

Los chicos descargaron todas las cosas del jeep y entonces se dispusieron a plantar el campamento. Ellos quedaron en armar las carpas mientras nosotras íbamos por "leña" para hacer la fogata.

Estábamos las tres en medio del bosque sin saber que rayos consideraban ellos como leña.

-¿llevamos ramitas o… que?- dijo Bella.

- tiremos un árbol y ya- dijo Alice con sarcasmo- ¿que mas vamos a llevar sino?

-ok ramas, pero no demasiado chicas, algo como esa- dijo yo señalándoles una mediana- sino van a matarnos.

Todas acordamos que ese tamaño era el adecuado y durante la siguiente media hora nos dedicamos a recolectar ramas para hacer la fogata.

Cuando volvimos al claro, cada una con los brazos llenos de ramas. Los chicos estaban tirados en el suelo tomando unas cervezas y con las carpas ya armadas.

-¿es que piensan que haremos una fogata con eso?- dijo Emmett.

-¿Cuánto mas quieres?-pregunté yo y algo molesta con él

- como tres o cuatro veces más que eso- dijo- no nos alcanza para nada

- bien, ve y hazlo tu- se quejó Alice y arrojó todas las ramas al suelo- a ver si puedes hacerlo mejor.

- bien- sentenció el- Jasper, ven y ayúdame,- le ordenó- a ver si tus habilidades como campista nos sirven de algo- el aludido se puso de pie y juntos se perdieron entre los árboles.

Unos minutos después y cuando ya nosotras perdíamos la esperanza de que regresaran sino hasta dentro de un buen rato; aparecieron triunfantes con cinco o seis ramas enormes cada uno en los brazos y dejándonos a nosotras en completo ridículo.

Las arrojaron todas sobre las que nosotras habíamos conseguido y tras tirar un chorro de vodka de la botella que teníamos y un fósforo, encendieron un buen fuego.

-eso es lo que yo llamó una fogata- dijo Edward.

- si, y una en la que tu no participaste en nada- le dijo Bella dándole un beso en los labios. El solo rió y volvió a besarla.

Serían ya cerca de las cuatro o cinco de la tarde y ya todo el campamento estaba armado.

-¿y bien ahora que hacemos?- dijo Alice

-¿quieren nadar?- preguntó Emmett.

- no veo ningún lago, genio- apuntó Bella.

- en serio, ustedes las chicas le buscan la vuelta a todo ¿a que si?

- ¿y como íbamos a nadar si no hay agua?- repuntó ella

- no hay agua aquí, pero si hay un lago cerca ¿no es así Edward?

Su novia lo miró interrogante.

-si, bueno, no creí que iríamos hasta mañana, pero podemos ir hoy, es igual.

-¿acaso ya habían venido aquí ustedes dos?- pregunté

- en año pasado, con unos amigos de la universidad. En ese entonces no conocíamos la zona y en realidad pasamos el ultimo día aquí, fue cuando descubrimos el lago que no esta muy lejos de esta zona- me explicó- entonces... ¿quieren nadar un rato?

-yo si- chilló Alice a lo que yo estuve de acuerdo. La verdad estaba haciendo bastante calor y la idea de ir a nadar por un rato era tentadora.

Los chicos estuvieron de acuerdo, así que sin más que tomar algunas cosas del campamento, todos nos dirigimos hacia allí, siguiendo con cuidado a Emmett y Edward, que lideraban el camino. No fue un trecho difícil por suerte, solo árboles y setos, nada complicado, aunque si los mosquitos abundaban por allí.

Finalmente el lago apareció, un más grande de lo que yo esperaba y rodeado por varias piedras hacia el oeste.

Alice no perdió el tiempo y tras quitarse la playera que traía puesta se lanzó a toda prisa al agua. Jasper la siguió y enseguida Emmett, Edward y Bella también se les unieron.

Fui la ultima en meterse.

-vamos Rose, ven aquí- gritó Bella

Sin embargo no era ella la que me preocupaba o incluso si el agua estaba fría o demás. Era él. Pude verlo observándome desde lejos, expectante y sonriendo.

Finalmente me quite el vestido y me lancé al agua.

Nadé tranquila mientras veía con los demás jugaban entre ellos.

-¿aburrida?- preguntó detrás de mí

-no-dije pasándome una mano por el cabello y sonriéndole- ¿tú?

-menos aún-dijo nadando a mí alrededor en tanto yo sentía su respiración cerca de mi cuello. Suspiré- tendremos que compartir la tienda esta noche- me dijo- ¿estás de acuerdo no?

-¿tengo opción?- pregunté esta vez mirándolo a la cara

-no creo que logres separar a las parejitas… pero puedes intentarlo- se rió

-no tiene caso- dije- tendré que soportarte.

-no se si esa sea la palabra correcta-dijo- tal vez… convencerme, detenerme, incitarme…

-¿aún te justan los juegos?

-más que a cualquiera- afirmó- como dije antes, hay cosas que no cambian

-no pienso jugar contigo- afirmé y logrando que él me mirara fijo- ya no soy una niña Emmett.

-lo sé- dijo y sus ojos me vieron de ese modo que entonces lo hacían y yo me sentía vulnerable y desnuda.

-y por eso cambian las cosas- agregué para luego zambullirme otra vez y nadar hasta la orilla desde donde me quedé viendo todo.


Bien, este fue el primer capitulo. Espero que les guste y me muero por leer sus reviews al respecto.

un saludo a todas.

Bella McCartney Darcy