Lo despertó el llanto de un bebé, pero no era un bebé cualquiera, no claro que no, era SU bebé, había accedido a tener otro hijo, sólo para complacerlo, aparte no estaba tan viejo, a decir verdad ni siquiera estaba viejo, estaba por cumplir 36 años, una edad promedio, para un hombre promedio, lástima que él no fuera un hombre promedio.
-Brian… te toca-dijo Justin mientras se daba la vuelta en la cama y se envolvía con las sábanas de nuevo.
-No… a mí me tocó hace un rato-dijo Brian mientras hacía lo mismo.
-Yo me levanté a darle de comer hace una hora…-bostezó Justin
-Si… se me olvida quién de los dos le da la teta-dijo Brian
-Deja de jugar y ve a por él… antes de que…
El llanto de otro niño se hizo escuchar en la casa.
-Genial-dijo Justin mientras resignado se levantaba de la cama
Brian le siguió los pasos y se puso la bata de baño para levantarse, luego se colocó sus pantunflas y fue a la habitación de al lado.
-Ya, ya…ven aquí sonyboy-dijo Brian mientras sostenía a su hijo en brazos- eso es…¿qué pasa?, ¿tienes hambre?- agregó mientras le metía el dedo en la boca, el niño comenzó a chuparlo de inmediato.
Brian puso al bebé de nuevo en la cuna y fue a buscar su biberón, Justin siempre ponía uno nuevo al lado de la cuna, Brian comprobó que la leche estuviera bien y entonces se lo dio, el niño se cayó al instante.
-Eso es pequeño…¿quiéres el móvil?, claro que si-dijo mientras encendía el móvil y salía de la habitación del pequeño, encontró a Justin en el pasillo con otro bebé en brazos.
-¿Dónde está mi pequeña?-dijo mientras se la quitaba a Justin de las manos- Hola hermosa
-Creo que quería que su papá la cargara-dijo Justin- se ha callado en el momento en que la agarraste.
-Tu también eres su padre-dijo Brian mientras le daba de comer
-No el biológico-agregó Justin- supongo que tiene una especie de sensor que indica quién es el biológico y quién no.
-¿Sensor?, son niños no máquinas… aparte si así fuera Sonyboy se daría más contigo que conmigo- dijo mientras entraban los dos a la habitación de la pequeña- eso es- agregó mientras la depositaba en su cuna.
-Vamos a la cama-dijo Justin mientras abrazaba a Brian por la espalda.
-De acuerdo-dijo Brian y le besó los labios
Brian y Justin fueron a su habitación y se acostaron en la cama, Brian lo abrazó mientras se acomodaban para dormir.
-He estado pensando…-dijo Justin
-Ajá…
-Que… tal vez… deberíamos ir a Pittsburg.
-¿Qué?-dijo Brian, era la primera vez que hablaban de volver a Pitsburg desde que se habían mudado de ahí, hacía ya algunos años.
-Si… me refiero a que… Debbie debe de extrañarnos muchísimo y… no he visto a mi madre desde hace un tiempo… creo que querrán conocer a los niños y…
-Conocieron a los primeros tres-dijo Brian- ¿recuerdas?, en la última fiesta de cumpleaños del pequeño Michael, vino Debbie y Lindsay y Melanie y Michael y Ben y Gus hasta Hunter estuvo aquí…
-Si pero… creo que deberiamos llevar a los niños a que los conozcan…
-¿Quieres que le llevemos Melanie y Lindsay a sus hijos?, Justin apenas y conseguimos que cada una cediera sus derechos…
-Te lo debían… por Gus
-Si pero tampoco porque nos los hayan cedido se los llevaremos a demostrarles que no son parte de su vida…
-Por favor…-dijo Justin mientras le besaba la cara- Por favor… Por favor… Por favor…
-Esta bien-dijo Brian- iremos a Pitsburg, el fin de semana ¿de acuerdo?
-Y nos quedaremos una semana…-dijo Justin
-No hablamos de eso-dijo Brian enarcando una ceja
-No…- dijo mientras le besaba el cuello e iba descendiendo y descendiendo y descendiendo hasta llegar a su punto débil- pero no dirás que no
Brian soltó un gemido en cuanto Justin comenzó a succionar, parecía una maldita aspiradora, lamía y succionaba, esa era una de sus formas de lograr sus objetivos…
-No hagas tanto ruido… los vas a levantar-dijo Justin antes de volver a su labor.
Cuando finalmente acabó, regresó a su lugar al lado de Brian.
-Entonces…¿una semana?-dijo Jutin mientras le acomodaba el cabello
-Un mes si quieres-dijo Brian riendo mientras lo besaba.
Se quedaron dormidos después de eso… mas no durmieron por mucho tiempo por que a las seis de la mañana sonó el despertador.
-¿Tan rápido?-dijo Brian mientras se levantaba de la cama y se dirigía al baño, salió a los veinte minutos ya vestido y listo.- Despierta ya corazón-le dijo a Justin en el oído.
-Estoy despierto-dijo Justin mientras se paraba de la cama y se dirigía al baño.
-Iré preparando el desayuno-dijo Brian
-No se te ocurra poner un pie en mi cocina-agregó Justin desde el baño
-Desde cuando es ¿tu cocina?-dijo Brian
-Desde que nos mudamos juntos-dijo Justin- Brian tu no sabes hacer ni un huevo frito, deja de hacer el tonto y levanta a los chicos, tienen colegio.
Brian se dirigió a fuera de la habitación y entró en la primera puerta a su derecha, un cuarto enorme de color rosa pastel con flores pintadas en las paredes se alzó ante él, el clóset, los muebles todo en rosa y la cama matrimonial con dósel en el medio de todo.
-Buenos días princesa-dijo Brian a la niña que dormía plácidamente- Vamos pequeña… despierta… Daphne… arriba pequeña.
-¿Papi?-dijo la pequeña, una niña rubia con el cabello rizado y la tez blanca como la de Justin, de una hermosa sonrisa y grandes ojos cafés.
-Hoy es día de colegio-dijo Brian- será mejor que te alistes
-Tí-dijo ella y se levantó para ir a la ducha.
Brian salió de ahí y entró en la siguiente habitación, ésta era color azul, con balones de fútbol en las paredes y una cama en forma de balón de fútbol en el medio.
-Despierta Cariño-dijo al niño que dormía en la cama- vamos Mikey… arriba…
-No quero…-dijo el chico
-Hoy toca colegio Mikey…-dijo Brian
-No quero ir a colegio-dijo el pequeño Michael, el niño era la cara de Brian en todos los sentidos, tenía muy pocos rasgos de Lindsay en él, sólo su gran corazón era lo que había sacado por parte de su madre.
-Tienes que ir… sino serás un vagabundo que comerá de los basureros
-No… poque tú me vas a he comer
-No toda la vida, pequeño Mikey-dijo Brian- así que saca tu bello trasero de la cama o te deseredo.
-Ti-dijo el niño mientras Salía de la cama.
Brian salió de ahí y entró en la tercera habitación, de nuevo era rosa y casi idéntica a la primera, salvo que en lugar de flores tenia pintadas mariposas.
-Hola mi amor-dijo Brian a la pequeña niña castaña que estaba sentada en la cama- venía a depertarte.
-Ya he despeté
-Ya me dí cuenta-dijo Brian, la niña era casi idéntica a Justin, salvo por el cabello castaño de Melanie, fuera de eso era Justin en mujer.- le ganas a tus hermanos, tal vez por eso tu eres mi preferida…
-He yo banar-dijo Deborah
-De acuerdo-dijo Brian saliendo de la habitación.
Se dirigió a la cocina y vió a Justin terminando de servir los platos del desayuno, las cinco sillas estaban en orden y las dos periqueras también, Brian se sentó en su lugar.
-Buenos días-dijo Justin mientras lo besaba
-Buen día-dijo Brian- ¿has visto mi móvil?, creo que lo he dejado…
-¿En la mesa?-dijo Justin completando su oración y dejando el celular al lado de Brian
-Detesto que hagas eso-dijo Brian
-Brian… el celular no en la mesa, por favor…
-Solo espera un…-sonó el celular- Kinney…
-Presidente de Kinnetics, mejor amante del mundo y un gran padre primerizo-dijo Justin.
Brian le hizo una seña para que se callara
-¿Cuándo?-dijo Brian- ¿esta mañana?, ¿Y qué le has dicho?... bien… gracias
Brian se levantó de su asiento fue hacia Justin y lo besó.
-He cerrado el trato con Electric fireplaces- le dijo en cuanto se separaron.
-¡¿En serio?!- dijo Justin- es maravilloso Brian…
-Ni que lo digas…kinnetics va viento en popa…
-¿Y los niños?-dijo Justin
-Arreglandose para el colegio…-contestó Brian
-¡¿Arreglándose?!, Brian tienen dos años ellos no se arreglan solos-apresuró Justin mientras entraba corriendo a la primera habitación.
Daphne estaba intentando ponerse la ropa interior y un montón de cosas estaban tiradas por todo el cuarto
-Déjame ayudarte cielo-dijo Justin mientras le ponía su calzoncito- Brian… ¿podrías ir con Mikey, por favor?
Brian salió a la habitación de al lado y encontró al chico saliendo del baño chorreando agua.
-Hola campeón-dijo Brian mientras lo tomaba en brazos y lo subía a la cama, después comenzó a secarlo- ¿Qué tal la ducha?
-Bien-dijo el chico, a pesar de tener sólo dos años hablaba muy bien, Brian le puso la ropa interior, y luego el uniforme del colegio, para finalmente arreglarle los zapatos.
-Estás listo-dijo al niño- ve con Justin para que te peine
El chico fue con su otro papá y mientras Brian entró en la habitación de la última chica
-Hola cielito-dijo a Debbie, miró a la niña que intentaba amarrarse los zapatos sola, era muy inteligente para tener dos años, ya se había vestido.- déjame hacerlo-dijo mientras le ponía los zapatos- bien… ahora ve con Justin que el te peina.
La niña fue corriendo con su papá Justin, mientras que Brian regresaba al comedor, cuando los niños se sentaron ya estaban cambiados y listos.
-No puedo creerlo Brian-dijo Justin mientras se sentaba en la mesa- tienen dos años, no se visten solos… ¿a qué hora llega la niñera?
-A las ocho-dijo Brian mientras comenzaba a comer.
-Eso es dentro de veinte minutos
-Así es- dijo Brian, los cinco estaban desayunando tranquilos cada quién en su mundo, pensando en sus cosas.
-Ayer me encontré a alguien en el trabajo-dijo Justin
-¿Sí?, que interesante cariño- agregó Brian sin quitar los ojos del periódico
-Supongo…-dijo Justin- ¿recuerdas a Ethan?
-¿Ethan?, ¿Ethan qué?- dijo Brian
-Ethan Gold… violinista… paganini
Brian alzó los ojos del periódico de inmediato y miró a Justin
-¿Paganini Jr.?- dijo Brian-¿Cómo cojones lo encontraste en TU trabajo?
-Fue a ver mi exposición de arte… ayer…- dijo Justin- me ha saludado
-¿Y tú que has hecho?-dijo Brian
-Me lo he cogido en el baño…-dijo Justin- ¡¿qué clase de pregunta es esa Brian?!, lo saludé de vuelta.
-Creí que habían terminado en malos términos
-Pues al parecer él ya lo olvidó- agregó Justin en tono despreocupado- andaba buscando gente de mercadotecnía, para su nueva gira… le he recomendado Kinnetics
-¡¿Qué tu hiciste qué?!-dijo Brian dejando de un lado el periódico
-Brian… los niños-dijo Justin- modera tu tono de voz… no he hecho nada malo… sólo te he recomendado a un conocido
-Un conocido no querido-dijo Brian- no me interesa tener tratos con Paganini Jr.
-Estás siendo infantil Brian, sólo es trabajo, es todo… siempre puedes rechazarlo…
-¿Le has platicado de nuestros hijos?
-No…-contestó Justin- no ha surgido el tema
-No ha surgido el tema… si me imagino…
-¿Qué te imaginas?
-Que se lo han pasado de lo grande platicando como viejos amigos de toda la vida… Oh Ethan recuerdas lo bueno que nos lo pasábamos cuando estábamos juntos… Si Justin lo recuerdo…- agregó mientras se levantaba de la mesa, Justin se paró tras de él.
-Brian… no hemos hablado mucho-dijo Justin- sólo me ha preguntado como estoy… y le he dicho que muy feliz… al lado tuyo- dijo mientras lo abrazaba- Brian por amor de dios, tenemos cinco hijos preciosos, una buena casa, una seguridad excelente y ya no soy un chicuelo tonto, ¿crees que dejaría todo esto por…?
-¿Una buena polla?-dijo Brian
-Ni tan buena-agregó Justin- la tuya es mejor… y más grande
Brian sonrió y Justin lo besó.
-Te amo Brian Kinney-dijo Justin
Entonces sonó la puerta
-Iré a abrir-dijo Brian, pero antes de eso Justin lo frenó y enarcó una ceja a la expectativa- yo también te amo Justin Taylor- fue entonces que lo dejó ir.
Brian abrió la puerta y se encontró con una mujer de unos veinte años, bonita para los heterosexuales, pero para él repugnante.
-Hola me llamo Leah y me mandaron de la agencia-dijo la chica
-Hola-dijo Justin acercándose a la puerta- adelante, mira ellos son Daphne, Michael y Deborah, nosotros los llevamos al colegio en las mañanas y tu los recoges por las tardes, salen a las doce del día, no antes no después, en el cuarto dormitorio del lado izquierdo está Theodore Emmet, es uno de los bebés, toma leche cada cuatro horas, pero intenta darle alimentos sólidos en las mañanas, se baña a las doce y media del día y después toma su siesta, en el dormitorio de al lado está su hermana Jennifer Marie, tiene los mismos horarios que Teddy, en cuanto a los más grandes no los dejamos ver Tv más de dos horas al día y tienen deberes que hacer, el señor Kinney llega a casa a las seis de la tarde, para esa hora toda la casa debe estar limpia, yo llego poco después o algunas veces antes que él, en cuanto uno de los dos llegue podrás irte, no debes abrirle la casa a nadie que sea extraño, en caso de que algo suceda te dejé los números apuntados en el refrigerador igual que todas las notas en caso de que algo suceda con los niños… Bien Leah me llamo Justin y él es mi esposo Brian…
-Mucho gusto-dijo la chica
-Igualmente-dijo Justin- Brian apresúrate se nos hace tarde
Brian salió de la habitación con su maletín de trabajo.
-Chicos en fila aquí y ahora-dijo Brian, los niños se formaron para salir de su casa
-¿Se lavaron los dientes?-dijo Justin y los niños asintieron-Bien en ese caso… nos vemos Leah
Los cinco salieron de la casa y dejaron a la niñera sola dentro, al bajar a su garage, Brian tomó las llaves de su volvo.
-No, no, no… ni pensarlo señor Kinney-dijo Justin- te llevas la camioneta.
-¿La camioneta?-dijo Brian- pero…
-Quedamos que no subiriamos a los chicos al volvo, es peligroso para ellos
-Bien, vamos Chicos papá Justin, no quiere diversión para ustedes.
Justin dio un beso en la frente a cada uno de sus hijos
-Los amo-les dijo cuando se subieron
-¿Para mí no hay beso?-dijo Brian
Justin lo besó como siempre lo hacía, como si estuvieran solos en el mundo.
-Te amo-dijo Brian
-Te amo-dijo Justin- te llamaré llegando a Nueva York.
Brian arrancó su navigator y tomó la carretera al colegio de los niños…
