*Fairy Tail pertenece a Hiro Mashima
Capítulo 1
Mientras el sol se ocultaba, el caminaba rápidamente por la ciudad, no quería llegar tarde a casa de sus amigos, esa noche harían una gran pijamada para ver películas y convivir un rato antes de que el ciclo escolar iniciara, esa sería la oportunidad perfecta para ponerse al corriente de lo que hicieron sus amigos en las vacaciones.
Él no había salido de la ciudad como los demás, porque había sido castigado; el haber reprobado más de tres materias y tener una que otra pelea lo habían metido en problemas con sus padres, ellos sentenciaron que si otra cosa así pasaba lo mandarían al ejército para que aprendiera de responsabilidad, y claro estaba que él no quería eso. Por ello, hace una semana había decidido que se comportaría, que entregaría todas sus tareas y que no se metería en problemas, a menos que fuera necesario; como defender a sus amigos.
Aún faltaba para llegar a casa de Gray, los pies le dolían demasiado, no tenía dinero para un camión porque se había gastado todo lo que su padre le dio en golosinas, suspiro cansado cuando estaba atravesando el parque, ya no pudo más y se sentó un rato a descansar.
Se sentía sudado y jadeaba por todo lo que había caminado ya, cuando estaba a punto de levantarse un grito lo hizo detenerse.
-¡Detengan a mi perro, por favor!-
Se escuchó a lo lejos, el chico giro pero no vio nada, las demás personas del parque igual lo hicieron pero tampoco observaron nada.
Natsu movió la cabeza y siguió caminando ya con más energía, rodeo la gran estancia del parque con la cabeza agachada, escucho unos ladridos, alzo la cabeza y vio como un cachorrito iba corriendo en dirección a él.
El pequeño animal comenzó a ladrarle con fiereza, al chico le pareció adorable.
Natsu lo acaricio un poco.
-Hola ¿Cuál es tu nombre?- Después se sintió estúpido ¿Cómo podría el perro contestarle?
El perrito gimió.
-Oh, qué bonito estas.- Siguió Natsu hablándole.
-¡Plue! ¡Plue!- Se escuchó una voz femenina, la misma que había escuchado hace un rato.
Natsu observo la dirección de donde venía la voz, después al perrito, de nuevo a la voz.
Cargo al can y se adentró en los árboles, se seguía escuchando el grito femenino con más fuerza con cada paso que daba.
Al caminar un poco más, Natsu al fin pudo ver de quien provenía la voz; estaba de espaldas y tenía ambas manos alzadas mientras seguía gritando: Plue.
-Hola ¿El perro es tuyo?- Pregunto el mientras estiraba al cachorro blanco a ella.
La chica volteo; era rubia y muy hermosa, Natsu observo sus ojos cafés llenos de preocupación con detenimiento.
-Sí, si.- Dijo agarrando al cachorro mientras lo abrazaba. –Ha salido corriendo de casa.
-Debes de tener más cuidado entonces. –Dijo Natsu encogiéndose de hombros mientras observaba su peinado; recogido de un lado atado con un lazo rojo.
-Sí, lo se.- La rubia sonrió con vergüenza. –Gracias por encontrarlo y traerlo hasta mí.
-No te preocupes, está bien. –Natsu sonrió. – ¿Cómo te llamas?
Eso tomo a la chica por sorpresa.
-Mi nombre es Lucy.- Dijo asintiendo con la cabeza. -¿Y cómo te llamas tú?
-Yo soy Natsu, mucho gusto Lucy.- Sonrió abiertamente el chico, esa muchacha en verdad era muy bonita.
La chica se sonrojo al oír su nombre en los labios del chico.
-Ya debo irme. –Fue lo primero que se le ocurrió decir.
–Espera. –Hablo Natsu, ella volteo. –Sé que sonara raro, pero… quisiera volver a verte.
Lucy se quedó sin palabras, el primer chico que conocía en la ciudad de verdad que era atrevido pero también muy lindo.
-Yo también.
Fue lo único que dijo antes de escabullirse entre los árboles, él no la siguió.
En cambio, se quedó ahí parado como un tonto.
Su celular sonó y el contesto.
-¿Vendrás o no?
-Sí, ya estoy en camino.- Le dijo a su amigo Gray.
-Apresúrate, Erza trajo muchas películas y tenemos que verlas todas.
-Ok.
Colgó.
Cuando Natsu llego a la casa Fullbuster todos sus amigos ya estaban ahí; Gray, Erza,Gajeel y Jellal. En cuanto puso un pie todos corrieron a saludarlo, ellos eran uno de los grupos más conocidos de toda la escuela por diferentes razones; Erza y Jellal eran de los más inteligentes; Gray era un imán de chicas; y por supuesto que Natsu y Gajeel eran los reyes de las peleas.
Hablaron sin parar, Erza conto su viaje a las aguas termales con suma emoción emitiendo detalles pervertidos, a veces se preguntaba porque no tenía amigas chicas, después veía a sus amigos y entendía que era porque ella era muy ruda y una chica normal jamás aguantaría su forma de ser.
Jellal relato sus visitas a museos de otras ciudades, hablo sobre las pinturas que vio y le inspiraron; las estatuas más bellas que vio y lo mucho que comió en los mejores restaurantes, de vez en cuando se llevaba burla de los chicos, pero no de Erza, ella siempre era comprensiva y atenta, por eso le encantaba estar en ese grupo.
Gray y Gajeel habían ido juntos a la playa, y habían conocido a muchas chicas, se habían divertido de lo lindo en los hoteles y en los bares, Erza les dijo que eso era estúpido y Jellal estuvo de acuerdo.
El único que no dijo nada fue Natsu; él se la había pasado jugando video juegos en casa.
-Vamos, algo interesante debe haberte pasado. –Cometo Jellal.
-Bueno.- Dudoso hablo. –Al venir aquí conocí a una niña.
Todos estallaron en risas.
-¿Niña? Si tiene 12 años puedes decirle niña, aunque no creo que ese sea el caso. –Dijo Gray divertido.
Natsu resoplo.
-Ya déjenlo en paz-. Hablo Erza. –Cuéntanos.
-Bueno era una "chica". –Hablo.
Y así comenzó a contarles lo sucedido en el parque, les dijo que era rubia y que tenía un perrito, Erza estaba emocionada por lo extraño y romántico que había sido, los chicos lo vitorearon por lo valiente que había sido al pedirle su nombre.
Natsu estaba aturdido por toda la atención, cuando se dio cuenta ya estaban viendo películas y eran más de las 11 de la noche.
-Iré a comprar más dulces. –Aviso.
Ellos respondieron un ¡Aye! Desde los sillones.
Natsu salió de la casa y se dirigió a la tienda de conveniencia que estaba cerca de la casa de Gray, se sintió extraño cuando recordó a la chica que había conocido hace unas horas, y después se sintió más extraño porque sabía que era improbable verla otra vez.
Eso de enamorarte en la calle apesta.
Dijo en su mente.
Entro a la tienda, se dirigió a la sección de refrescos y ahí parada frente al gran refrigerador estaba la rubia con las manos en sus caderas.
-De nuevo tú- Hablo fascinado.
La chica volteo a verlo extrañada.
-¿Dijiste algo?-. Pregunto a la defensiva.
El chico se quedó congelado ante su pregunta, la observo con detenimiento, era la misma chica del parque, mismo cabello, mismos ojos, mismo peinado solo que con un lazo azul, su ropa también era diferente. No podía creer que la había encontrado de nuevo.
-Es genial verte.- Dijo el otra vez acercándose un poco.
La rubia ladeo la cabeza, y ese movimiento cautivo a Natsu.
-Creo que estas confundido, chico.- Dijo ella mientras se cruzaba de brazos y observaba al pelirrosa frente a ella de arriba hacia abajo.
-En la tarde.- Balbuceo. –El parque.
Algo hizo click en la cabeza de la chica y al parecer había comprendido todo.
-¿En dónde estudias?- Pregunto la chica sonriendo de lado.
Natsu no hablo, se sentía extraño por como ella se comportaba, de seguro que en estos momentos parecía un pervertido acosador.
-Vamos, habla.- Exigió ella.
-Fai…
-Fairy Tail, wow.- Exclamo ella mostrando sus colmillos. –Ahí iré yo el lunes, será divertido.
-No entiendo.
-Soy Ashley, un gusto conocerte, chico.- Dijo mientras metía las manos en los bolsillos de su pantalón negro.
-Yo…
-Nos vemos el lunes en la escuela.- Ella hizo el signo de la paz antes de tomar un refresco del refrigerador.
.
.
.
Bueno, como ya notaron o leyeron lol
Es algo nuevo que estoy escribiendo, espero les agrade.
Veré si emparejo esta con la otra historia y ya publico el mismo día los capítulos.
Me gustaría que dijeran lo que piensan.
Kirey se va
Bye, bye.
