¡Holaaaaa!
Como lo prometi, un nuevo fanfic :D este es Eren x Levi, pero descuiden, Rivaille sigue siendo igual todo un pelado (?) tal y como lo amo :D gracias una vez mas por todos sus reviews en mi otro fanfic, espero que este sea de su agrado, por ahi aparecera otra pareja y algunos otros personajes de shingeki no kyojin, y si Erwin aqui tambien hara de las suyas :P sin mas les dejo el primer capitulo.
ADVERTENCIA: Esta historia es ficticia, los personajes le pertenecen a su respectivo autor: HAYIME ISAYAMA, yo solo los uso para fines perversos (?).
DISFRUTEN SU LECTURA.
CAPITULO I:
-¡attchh! eso duele...-le curaban una herida.
-¡quedate quieto!-solicito la persona que lo curaba con algodón lleno de antiséptico.
-es que arde...-se quejo.
-si no duele no funciona, ahora: ¡no te muevas!-saco de un botiquín una gasa y tela adhesiva.
-jajajaja ¡que lloron eres Eren!-decia otro chico que se mofaba.
-¡callate! todo comenzó por tu...¡aahhh! ¡Armin, podrías tener mas cuidado!
-jejeje...¡ya esta! ahora sigues tu Jean.
-¿yo? no, no. yo estoy bien-contesto nervioso, no es que no quisiera ser curado por aquel rubio de mirada tan tierna, si no porque sabia que le dolería debido a la gran herida en su brazo.
-no, no lo estas. Eren...-se dirigio al otro chico haciéndole una señal.
-jejeje...-rio con malicia y agarro a Jean por debajo de sus brazos apretándolo haciéndole una llave para que no se moviera.
-no...no...Armin...espera...¡aaaaaaaahhhhhh!-grito al sentir la aguja con anestesia para poder coserle su brazo.
Los dos chicos habían sido curados por...bueno, el chico rubio no tenia idea de cuantas veces hacia eso que comenzó a perder la cuenta. Suturo el brazo de Jean ya que tenia una cortada que aunque no era grave si no era curada debidamente podía infectarse.
-wua...en verdad te queda ser medico...ya no me duele...gra...gracias...-rasco su cabeza avergonzado.
-de nada...pero enserio chicos, dejen de meterse en problemas...esas peleas no les traerá nada bueno-aconsejo, mostrando una preocupación por sus amigos.
-¡ellos son los que nos buscan, no nosotros!-justifico Eren, con esa mirada desafiante que se enmarcaba mas por sus ojos color verdes.
-pues no deberían alentarlos, ademas, no siempre estaré aquí.
-entonces...fue cierto lo que dijiste, ¿no?-pregunto Jean.
-si...cuando termine la preparatoria me iré a la universidad a estudiar medicina.
-por lo de...tu abuelo...¿no es así?-cuestiono con cautela Eren.
-eh...si...-contesto aflijido. Su abuelo llevaba tiempo enfermo y aunque tenia medicamentos que lo estabilizaban, el se sentía con la necesidad de hacer algo mas por el.
-bueno, eso es...un buen propósito Armin, creo que...te verías bien en bata...jejeje-comento Jean ocultando un poco el hecho de que se había sonrojado por lo que había dicho.
-¿eh? gra...gracias...-no pudo evitar también sonrojarse, aquello fue algo que le gusto mucho y mas viniendo de Jean.
-¡idiota!-le dio un sape a Jean-Armin estudiara eso por su abuelo, no por la bata...
-¡ca-callate Eren!
-jejeje...-el chico rubio poso su mano sobre su boca al reírse por lo que Jean y Eren discutían; a pesar de que parecían llevarse como perros y gatos ellos eran bueno amigos-chicos, chicos...no me importa realmente, jejeje deberían irse ya, mi abuelo no le agradara verlos aquí.
-esta bien...¡nos vemos, que tu abuelo se mejore!-se despidio Eren que fue el que salio primero.
-ehm...ya me voy...gracias por curarme...ehm...-queria decir algo mas, pero no sabia como hacerlo.
-¿Que esperas cara de caballo? ¡apresurate!
-¡aarggg, te he dicho que dejes de llamarme así!-volteo molesto siguiendo a Eren, hizo una reverencia a Armin y se retiro.
Salieron de la casa de Armin rumbo a la calle, pasaron a la tienda a comprarse unas sodas, y de ahí fueron al parque a perder el tiempo un poco mientras terminaban sus bebidas.
- aahh...¡que buena esta!-le habia dado un largo trago a su bebida, como hacia calor y estaba fría sentía refrescarse de dentro hacia afuera-¡ey, Jean! ¿cuando le dirás?
-¿eh? ¿de que hablas?-por un momento la voz de su amigo lo saco de sus pensamientos así como de la lata en sus manos que empinaba a su boca.
-no te hagas...hablo de Armin.
-¿que? ¿no...no se de que hablas?-agacho la mirada nervioso.
-¡jajajaja! ¿crees que soy estúpido? te gusta...y creo que a el...también...los veo juntos y parecen echar chispas-le divertia acorralarlo de esa manera.
-¡no seas idiota! estas...estas imaginando cosas...
-claro que no...-le miro desafiante.
-pero...soy hombre...y el...el también...no creo que...eso este bien-se lamentaba con la mirada cabizbaja mientras miraba su lata como si encontrara las respuestas ahí.
-¿quien lo dice? si a el le gustas...y a ti te gusta, no le veo nada de malo...
-Eren...¿no te importa?-lo miro sorprendido.
-jajajajaja...¿que dices cara de caballo? a mi me da igual...a mi no me importaría verlos juntos. siempre serán mis amigos.
-¡deja de decirme así!-se mostro molesto, tomando a Eren de las solapas de la camisa.
-ok, ok...tranquilo...-tomo las manos de Jean y las alejo de su ropa.
-tsk...tengo que irme...-le dio un ultimo sorbo a su bebida, aplasto la lata y la arrojo a el bote de basura, dándole en el blanco-sera mejor que vuelvas a tu casa...deben estarte buscando.
-mas al rato...-vio alejarse a su amigo mientras el se quedo ahí sin aun terminarse su bebida-¡ey, Jean! ¡piensa lo que te dije!
Su amigo solo levanto la mano despidiéndose y afirmando que haría lo que le sugirió.
Estuvo un rato más en el parque, llenándose de ruido de parejas que pasaban, del viento sobre las ramas de los arboles, de niños jugando en los juegos; para luego, aplastar la lata tirarla en el bote, y caminando con sus manos dentro de los bolsillos de su pantalón; con una mirada indiferente ante la gente que lo rodeaba, ante todo lo que lo rodeaba. Faltaban 5 cuadras para llegar a su casa caminando a paso lento ya que no le apuraba llegar temprano a casa pues era molesto estar ahí.
Al llegar frente de su casa, trono los dientes y dio un largo suspiro, parecía que llegaba a un funeral, y no a su casa. Con la misma indiferencia entro.
-¡bienvenido a casa señorito!
-¡bienvenido a casa señorito!
-¡bienvenido a casa señorito!
-¡bienvenido a casa señorito!
Desde el jardinero, el mayordomo, la servidumbre. Todo el personal de su casa lo saludaba cuando llegaba, lo despedía cuando se iba. "que fastidio" se decía a si mismo. Su familia nunca se encontraba en esa casa, o debería decir, mansión; que, a pesar de que se encontraban llena de gente que trabajaba sirviéndolo, era como si no estuviera nadie. Su padre era director de orquestas, su madre era violinista, y su hermana una chica hermosa que era la que había heredado los dotes de sus padres: era pintora, y autora de canciones; las vendiá para cantantes famosos a un alto precio; por lo tanto, siempre estaban viajando y de un lugar a otro, la casa estaba llena de lujos y de la constante música como fondo que presidia a la familia de Eren que parecía tenerlo todo: fama y riqueza; sin embargo, el era otra situación. "la oveja negra de la familia" así se calificaba a si mismo y sentía que así mismo su familia parecía verlo. Era desaliñado, agresivo, rebelde, sacaba malas notas y parecía no tener ningún don para ningún arte en especial. Agradeció que su familia no se encontrara en casa, pero cuando así pasaba, era para reprocharle para presionarlo de que hiciera algo con su vida. En un principio, cuando era mas pequeño lo intento; pintura, música, artes plásticas, baile; casi todo, pero no parecía apto para nada y siempre terminaba saliendo de las escuelas a donde lo inscribían por una pésima conducta. Ahora, parecía que lo dejaban tranquilo, por lo que pasaba el tiempo con sus amigos, sobre todo con Jean, Marco y Connie, teniendo conflictos con pandilleros: Berth, Reiner, y Annie que siempre le buscaban pleito; No le gustaban las confrontaciones, pero siempre sabían como provocarlo y por lo tanto terminaban muy mal hiyendo siempre a ver a Armin para que les curara las heridas.
Se dirigió a su habitación, tenia ganas de dormirse un poco antes de que la servidumbre lo llamara a comer; sin embargo su plan fue eliminado en cuanto vio a su mamá salir de la sala.
-¡Dios mio Eren! ¿que te paso?-estaba asustada aproximándose a su hijo que le toco la herida protegida con la gasa.
-tsk...mamá estoy bien...-alejo aquella muestra de preocupación, si algo que detestaba era que lo trataran como niño.
-¡claro que no! volviste a pelearte, ¿no es así?
-...-apreto los dientes y evito la mirada reperendedora de su madre.
-¡¿Que te he dicho?! no me gusta que haces con tu vida hijo...-dio un largo suspiro para calmarse, y así mismo para cambiar de tema- bien...hablaremos de eso mas tarde, pero por ahora necesito que vengas conmigo a la sala de estar.
-¿eh, para que?
-necesito presentarte a alguien...
-mamá yo...
-no me discutas...ven...
No sabia que era lo que ahora su familia le tenia preparado, pero se dijo que fuera lo que fuera no aceptaría, el no era apto para ninguna de las cosas que su familia si. Ya pensaba las palabras correctas para negarse.
Al entrar en la sala un hombre de baja estatura miraba hacia la ventana con una taza de porcelana de la mas alta calidad con algún liquido caliente que emanab de la misma en su mano.
-hijo, hemos probado infinidad de cosas en que puedas ser talentoso, pero ahora creo que de verdad esta sera tu vocación.
-¿de que hablas?-pregunto irritado sin quitar la mirada de aquel hombre que le daba la espalda.
-oh...así que es el...-djo el hombre al girarse para ver al chico.
-mamá...¿quien es este?
-Eren, te presento al señor Levi Rivaille, el sera tu maestro de piano. Esta recomendado por la escuela donde estudie. El es pianista y pintor de oleo. aprenderás mucho del.
-gusto en conocerte...-hizo una leve reverencia, pero su mirada era seria, sin ninguna expresión.
-¿que cosa?-no podia creerlo, ¿que pasaria ahora? fue lo que se pregunto.
Sus miradas se cruzaron de una manera casi amenazadora, ahí se habían dicho todo sin necesidad de palabras, el chico se dijo, por la mirada del hombre: Dura e inexpresiva, pero con un aire de sensualidad y gallardia por la forma en la que se paraba frente a el, que era alguiende cuidado. Portaba un moño ridículo en su cuello, tenia una cadera de reloj que colgaba de su saco, y olia a un perfume que aunque le molesto, era delicioso a su olfato. Pudo percatarse de que era muy pulcro, y que por su apariencia era un hombre de carácter fuerte, supo entonces que no seria fácil lidiar con el.
PROXIMO CAPITULO:
-¡no, asi no!-dio un golpe a las manos que se encontraban sobre el piano con la batuta
-tssch...-lo miro con odio pero no dijo nada
-¡otra vez!-cerro los ojos para escucharlo, pero para nada le sonaba afinado-¡lo estas haciendo mal!-le volvio a golpear.
Sus manos ya se encontraban rojas de los golpes, incluso le dolían los dedos; pero no sabia podía negarse, aquella mirada fría e intimidante era suficiente para no poder levantarse y darle una bofetada a ese hombre que le intentaba enseñar a tocar el piano.
...
¿Que tal eh? es un capi cortito para iniciarlas en la historia, ¿les gusta el maestro de piano Levi *-*? a mi se me hace super sexy jajaajaj bueno como sea levi es sexy _ Espero les haya gustado, espero subir el segundo capi pronto, todo depende de sus reviews eehh? *las amenaza* xD jajajaja .
Gracias por leer :D
Saludos ;)
