Era una hermosa mañana en las afueras de Paris, en un convento de monjas. Una mujer de no más de 60 años, la madre superiora, miro a su alrededor, parecia que estaba buscando a alguien.
–¿Sabes donde esta Marinette?–pregunto la madre superiora a la hermana que estaba a lado de ella.
–Probablemente este corriendo hacia acá, otra vez.
No muy lejos de ahí, se encontraba una joven acomodandose el velo mientras corria. Se habia despertado tarde otra vez. Ella corria lo mas rápido que podia, al llegar intento recuperar el aliento. Despues de haber descansado un poco entro a misa. Se puso lo mas silenciosamente a lado de la persona en la ultima fila. A los segundos vio a una niña que estaba viendo videos con su teléfono y tenia sus audifonos puestos. A Marinette le parecio una falta de respeto a Dios por no poner atención. La niña volteó su cabeza al sentirse observada, entonces vio que Marinette la observaba.
–Apaga eso, por favor.– le susurró Marinette a la pequeña niña, de nombre Manon.
Manon ignoro a Marinette, pero Marinette no se iba a dar por vencida.
–Por favor, apagalo.– le volvió a susurrar y le hizo señas para que lo apagara.
Manon volteo a ver a Marinette retadoramente y estiro su dedo y le subio volumen al video que se reproducia en su telfóno.
–Probablemente lo hizo porque no pudo escucharme.– se dijo a ella misma.
Marinette se fue sigilosamente atrás de Manon para poder decirle que apagara el teléfono. Manon al ver a Marinette la volvio a ignorar, en ese momento Marinette se aguantó todas las ganas que tenia de golpear a Manon. Le quito un audifono a Manon pero Manon lo volvió a jalar, asi ellas dos iniciaron una pequeña pelea por ese audifono. Por un descuido Marinette jaló demasiado fuerte el audifono que termino lanzando el teléfono al hacia un lado, en el acto quitando los audifonos. En ese momento todos voltearon a ver al pequeño aparato que producia tanto ruido.
Marinette intentando remediar su error fue a agarrar el teléfono, pero al aventarse por el teléfono lo golpeo haciendolo volar entre los asientos. Marinette se fue entre los asientos intentado agarrar el teléfono, pero un pie lo avento todavía más lejos de Marinette. Cuando al fin Marinette pudo agarrar al teléfono, vio todo a su alrededor y Marinette sentia que se moría de vergüenza.
Lo que Manon veia era el concierto en vivo de la banda mas famosa de Francia, A. . La banda estaba conformada por tres talentosos chicos que eran: Theo, el mas risueño y distraido de los tres y era el baterista; Nathanael, el mas serio y calmado de los tres y el guitarrista y rapero; y el lider de la banda y vocalista principal, Adrien. Ellos tres eran considerados los angeles de Francia, por eso el nombre de la banda, para ser uno de los ángeles de Francia, Adrien, era demasiado arrogante.
Mientras tanto con los miembros de A. estaban llendo a casa.
–¿No te duele tu garganta, Adrien?– preguntó el presidente de la disquera al vocalista.
Adrien solamente lo ignoro. La verdad era que si le dolia y mucho.
–Es por eso que el doctor dijo que no debias cantar en vivo. Sólo debiste usar playback.– le volvió a hablar el presidente a Adrien.
Adrien no queria usar playback, ¿por qué el, el gran y perfecto Adrien, debia usar playback? Primero tendría que congelarse el infierno para que Adrien quisiera usar playback.
–¿Pero no terminó perfectamente bien? Bueno, al final le tembló un poco la voz. Pero estoy seguro que nadie lo notó.– comentó Nathanael.
–¿Se te quebró la voz?¿Dónde…? No me di cuenta.– dijo sorprendido Theo.
–Adrien, no tienes permitido cantar en vivo de ahora en adelante.– declaró el presidente.
–¿Qué hace un cantante además de cantar?– preguntó enojado Adrien
–Porque tomaste parte del proyecto, creo que sabes que cantar en el sexto álbum puede causarte desgaste en las cuerdas vocales. No tienes la capacidad de cantar esas canciones.
Despues de unos segundos de un silencio incómodo, volvio a hablar el presidente.
–Tendremos un vocalista más como lo planeamos.
–Como sabrás, no cualquiera podrá cantar mi canción.– dijo arrogantemente Adrien.
–No es "cualquiera". He encontrado una buena voz, así que ustedes conocerán a este chico pronto.
–Sólo esperemos y veamos quién es, Presidente.
Adrien sonreia arrogantemente, pues el era mejor cantante, nadie podía ganarle, o eso creia el.
Mientras tanto en el convento. Era obvio que castigarian a Marinette por hacer todo ese show en misa, en presencia de Dios. Marinette tendria que limpiar los "regalos" de las palomas en todas las estatuas.
–Hoy empezaré con David. Julián y Tomás, por favor esperen.–
Marinette parecia acostumbrada a ese castigo, ya que se podia ver a Marinette desahogandose con las estatuas.
–David, te has dado cuenta, ¿verdad? Yo cometi otro error hoy, he contaminado el santuario con música no santa.– le reveló avergonzada.
Mientras Marinette seguia lavandole el brazo a "David", empezó a tararear la canción de A. , pero al darse cuenta de lo que hacía, empezó a suplicar perdon a Santa Maria.
Mientras Marinette empezó a persinarse, la toalla que estaba cubriendo la parte baja de David se cayó. Marinette se apresuro a taparlo nuevamente, pero veia a otra parte mientras le volvia a poner la toalla, ya que Marinette era muy inocente.
–Bueno, nos avergüenza a los dos… todo el tiempo. Sería mejor si tuvieras una pequeña pieza de ropa, como Julián o Tomás.– mientras ella le decia eso, pudo ver algo extraño en el trasero de David.–¡Oh, Dios! David tienes popo de ave en el trasero.– dijo Marinette apenada por David
–Cuando me vaya a Roma, ¿Quién limpiará a David tan bien como yo? Los pajaros del barrio usan tu trasero como baño. Me preocupa.
A unos metros de Marinette se encontraba un joven de nombre Nino buscando a una hermana mientras sostenia una foto. El joven de la foto tenía un gran parecido a Marinette.
–Asi que una de estas caras pertenece a una Hermana. ¿Por qué tenia que ser una hermana?
~.~.~.~.Unas horas más tarde.~.~.~.~.
–Mari, no tienes que ir allá sola.– le dijo preocupada la madre superiora.
–Es mi pasaje para ir a Roma el que está siendo enviado. Debería ir al aeropuerto y recogerlo. – contestó muy segura Marinette.
–Marinette, ¿Crees que puedas manejar la motocicleta?– le pregunto mientras le sonreia con cariño.
Marinette ante tal pregunta agarro el manillar y lo movio a ambos lados y contesto con una sonrisa:
–Monto bien en estos días.
–Señal de vuelta a la derecha.– le dijo la madre superiora a Marinette para ponerla a prueba. Marinette encendió la señal e hizo como si fuera a la derecha.–Señal de vuelta a la izquierda.– le dijo repitiendo el procedimiento.
–¿Estás realmente segura de que estarás bien?– preguntó la madre superiora preocupada.
–Madre Superiora, regresaré pronto.– le contesto Marinette mientras se ponia un casco.
Después de decir esto Marinette se dirigió hacia el aeropuerto. Marinette manejaba tranquilamente, pero vio a un carro detrás de ella asi que se puso de lado para que el auto pudiera pasar. En el carro venia Nino, al ver que ella se movió a la izquierda, el tambien se movió a la izquierda. Marinette se volvió a cambiar pero esta vez a la derecha. Nino adelanto su auto y freno para taparle el camino a Marinette ante este acto Marinette tuvo que frenar. Nino se salio del auto y se puso frente a Marinette.
–Hermana, usted conoce a Mario, ¿verdad?– preguntó Nino después de suspirar.
–¿Quién es usted?
–Conoce a Mario, ¿No?
–¿Po- por qué pregunta eso?
Nino no contesto su pregunta y le quito el casco a Marinette, Marinette se estaba asustando, porque no todos los dias mientras vas al aeropuerto te quitan tu casco y te preguntan sobre tu gemelo.
–¡Ustedes son exactamente iguales!– exclamó sorprendido Nino al verla sin su casco.
~.~.~.~.En el estudio con A. .~.~.~.~
–¡Mario! ¡El Mario del que estoy hablando es este tipo de aquí!– dijo el presidente al señalar la foto que tenian de Mario en el monitor.–Su voz es "increible", un "milagro". ¡SORPRESA!
~.~.~.~.De vuelta con Marinette y Nino.~.~.~.~
Marinette lo unico que pudo hacer ante el acto de Nino fue gritar como si su vida dependiera de ello.
–¡¿Qué?! ¡¿Qué?! ¡¿Qué hice?!– preguntó Nino asustado por el grito de Marinette.
Marinette seguia gritando, pero nadie la escuchaba ya que estaban en un lugar vacio. Entonces Marinette golpeo a Nino en donde nunca se le pega a un hombre. Marinette al ver a Nino quejarse del dolor se preocupo.
–Espera… espera… Ay… espera. Quiero decir, ¿Por qué tú…? ¡¿Qué hice?!– al terminar de decir eso Nino se enderezo, pero no duro mucho ya que Marinette lo golpeo con su casco tirandolo en el acto.
Marinette se volvio a subir a su moto y acelero dejando a Nino en el suelo. Nino se apresuro para subirse a su auto y empezó a seguir a Marinette.
–¡POR FAVOR! ¡ESPERA! ¡OYE!– empezó a gritar Nino desde su auto, entonces decidio acelerar, al estar lo suficientemente cerca de Marinette para no gritar le dijo.–Hermana, por favor para. ¡Para! ¡Para la moto! ¿Ok?– Marinette seguia acelerando, queria escapar de ese loco.– ¿Por qué no escuchará?– se preguntó Nino al ver a Marinette alejandose.
Marinette seguia avanzando sin mirar atrás, Nino la seguia pero al estar cerca de ella un carro que iba muy lento paso.
–Oiga, ¡muevase!– le grito Nino al conductor.
Después de un rato de una entretenida persecución, Nino la volvio a alcanzar.
–¿Acaso no conoce a Mario? ¿Mario? ¡Su hermano gemelo! ¡Mario! ¡Mario esta en un gran problema!– Marinette al escuchar eso frenó de golpe, se empezo a preocupar por su hermano, ¿Qué le habra pasado?
~.~.~.~.En el estudio con A. .~.~.~.~
–Mario será el cuarto miembro de A. . No se puede. "Imposible", es la voluntad de Dios. Dios de… Oh Dios mío, Jesucristo Superestrella ¡OK!– el presidente estaba muy inspirado describiendo a Mario.
~.~.~.~.De vuelta con Marinette y Nino.~.~.~.~
Marinette ente sus manos tenia una foto de Mario, el habia cambiado mucho desde la ultima vez que se vieron, se veia mas maduro.
–Realmente es Mario.– dijo admirando la foto.– Su cara realmente se ha hecho mas vieja. ¿Estarás comiendo bien?
–Hermana… yo…– empezó a decir Nino.
–Oh, no soy una Hermana todavía. Aún estoy estudiando.– dijo una orgullosa Marinette.
–La razón por la que estoy aquí hoy es por Mario y tengo que decirle algo muy importante que decirle.
–¿Algo le paso a Mario?– pregunto preocupada Marinette.
–Algo grande le paso. Nuestro Mario. ¡Él ha sido seleccionado como miembro de A. !– dijo Nino muy feliz.
Marinette lo empezó a ver confundida, tenia una cara de "¿y eso con que se come?"
–¿A.N… Qué?– finalmente pregunto.
–¿No conoce al grupo de A. ? ¿Hermana? ¿A. ?
–Ya le dije que todavía no soy una Hermana.– Marinette reia avergonzada.
–¡Eso no es importante ahora! Mario ahora mismo… ¡Ha sido… escogifo para ser el próximo miembro de A. la famosa banda de rock del país!– dijo medio enojado Nino.
–Ah… pero, ¿Cuál es el problema?– Marinette no entendia el problema en eso, su hermano habia cumplido su sueño.
–Ya que estoy tan desesperado, hoy… yo vine… a pedirle ayuda Hermana.– mientras Nino decia esto el se habia puesto de rodillas.
–¿Qué esta haciendo?
–Esto es, Hermana…
–No soy una Hermana todavía.– le volvio a repetir Marinette a Nino.
–¿Entonces qué?¡¿Eh?! ¡Santa señora!... ¿Qué quiere? Bien, bien. ¡Dios! ¡Dios! ¡Dios! ¿Eh? Por favor. Nuestro Mario, quiero decir, su única familia, su hermano gemelo, Mario. Por favor, ayúdelo.– el pobre de Nino estaba muy desesperado y cansado.
–Umm… ¿Cómo?
–¿Cómo?– repitió Nino, después de unos segundos de pensar en su respuesta.–Conviertase en Mario.– le pidió.
