Saint Simpsons: The Lost Canvas Finalmente, Queridos Amigos, Camaradas, finalmente la larga espera por fin ha terminado, aquí doy por comenzado con el inicio de "Saint Seiya: El Lienzo Perdido", relatando los hechos ocurridos durante la Guerra Santa contra el Emperador Hades, la cual tuvo su marco espacio-temporal en la Europa del Siglo XVIII y cuyos protagonistas fueron los predecesores de Seiya y compañía, los cuales contaron con el apoyo de Abraham Simpson, Charles Montgomery Burns y los Hermanos Stan y Ford Pines, sumando también a Rose Cuarzo, las Cristal Gems y al General Skips de Crisaor, quien fue uno de los más Oficiales más importantes en el Imperio de Poseidon.
Antes que dejo siempre bien y claro que no soy dueño ni de Saint Seiya, Los Simpsons, Gravity Falls, Steven Universe y Regular Show, éstos pertenecen a sus respectivos dueños, empresas y país. Mi objetivo es simplemente entretener y espero lograrlo como hice con tantos otros crossovers e historias :3.
Saludos y agradecimientos para todos los que me han seguido y prometo continuar, ya que además haré las películas de Abel, Lucifer y Eris, sumando Episodio G, Soul of Gold y si Kurumada actualiza el manga de Next Dimension, haré también con el nombrado.
Espero que les guste y no olviden de comentar y dejar opiniones.
¡Comenzamos!
Capítulo 1: (Saint Seiya: The Lost Canvas, Opening I)
- "Desde la Era Mitológica, cada 243 años se repite la Gran Guerra entre la Diosa Athena y Hades, el Rey del Inframundo. Ahora, una nueva Guerra Santa está a punto de comenzar. Cuando el Mal surge en la Tierra, reaparecen los Caballeros de la Esperanza...¡Los Caballeros de Athena! Ellos visten las Armaduras que representan a las 88 Constelaciones y mantienen la Paz a costa de sus vidas, ¡dicen que sus Puños desgarran el Cielo y estremecen la Tierra!" Contó el Abuelo Simpson a sus nietos y amigos junto a sus Camaradas de la Última Guerra Santa en la que participaron.
Europa, Siglo XVIII: Las campanas de la Iglesia en un pequeño pueblo de Italia, amurallado para protegerse de posibles ataques enemigos, más que nada por el temor a que los Turcos aún tuvieran algún truco para volver a lanzar sus ataques y expandir su Imperio Otamano por Europa, pero esa idea había muerto después de su expulsión total en el Siglo XVII en la Batalla de Varsovia, por lo cual ahora solo quedaban como simples medidas de seguridad esos muros. Por las calles de ese bello pueblo y bajo un Cielo tan pintoresco y lleno de vida, caminaba un joven rubio, sus ojos eran azules, portaba un abrigo largo y negro con el cuello dorado y cerrado al frente, un pantalón blanco con unas alpargatas negras, también portaba una medalla colgada en su cuello. Alzó la vista hacia el Cielo y pudo contemplar, con una bella sonrisa en su rostro, el vuelo de una bandada de palomas blancas, las cuales desaparecieron en la lejanía, justo en ese momento, desde los callejones, una voz furiosa lo sacó de sus pensamientos.
- ¡Ven aquí, rayos, maldito perro! Gritó un joven castaño, el cual le estaba tirando piedras a un pequeño perro color blanco.
- ¡No te escaparás! [Juró su compañero de overol azul, el cual logró derribar al indefenso animal] ¡¿Viste eso?! ¡Sí, le di! Festejó por haber logrado su objetivo.
- Yo le daré en la cabeza. Agregó el castaño, el cual no estaba satisfecho, justo en ese momento, el rubio entró en aquel lugar.
- ¡Perfecto! Festejó su compañero y siguieron con el bombardeo de piedras, el rubio al ver esa escena de maltrato, corrió y cubrió al pequeño perro con su cuerpo, recibiendo varias pedradas, una de ellas le dio en la cabeza, llevando a que se produjera una herida sangrante, los dos chicos pararon con su juego.
- Basta, por favor. Les pidió el chico, en un estado de timidez.
- ¿Qué cosa? Oye, pareces una pequeña niña con esa cara. Se burló el castaño.
- Pero si yo conozco a ese niño, vive en el Orfanato que está cerca del pueblo, viene a la Iglesia para tomar clases de pintura, es muy extraño. Reconoció el joven de overol azul al rubio.
- ¡Oye, tú, devuélveme ya al cachorro! [El castaño le sacó al pequeño animal de sus brazos] Se lo merece por haberse comido nuestro almuerzo, ahora le daremos una lección. Continuó aquel joven.
- ¡Por favor, no sean tan crueles con él! Rogó el rubio a ellos.
- ¡¿Y qué te importa?! Preguntó furioso el castaño.
- ¿Sabes qué tan costoso nos costó comprar nuestra comida? ¿Eh? Agregó el del overol azul, mientras que el rubio sacaba de su maletín un frasco de pintura.
- Entonces, acepten este frasco de pintura roja, a cambio del perro, por favor. Propuso un intercambio.
- ¿Qué? Preguntó el que sujetaba al perro.
- Yo fui a comprarla a la ciudad y si la venden, al menos podrán comprar algo de pan. Les dijo y fue entonces que accedieron al trueque.
- Bien, entonces la venderemos. Señaló el del overol.
- ¡Claro, a cambio del cachorro, podremos comer algo más que pan, mejor así! Festejó el castaño y le devolvió el perro al rubio, el cual aterrizó sano y salvo en los brazos del joven pintor, para luego lamer su rostro, en señal de agradecimiento.
- Todo va a salir bien. Le prometió el chico, viendo que se alejaban los dos pendencieros.
Justo en ese momento, veloz como un rayo, la patada de un joven de cabellos café, dio contra los dos jóvenes.
- ¡NADA DE TIENDA! Exclamó el joven y de un patada en el rostro, lanzó a uno de los jóvenes contra una caja de verduras que estaba pegada a una pared.
- ¡TENMA! [Exclamó el nombre de su amigo, el rubio, mientras que caía el frasco de pintura sobre su cabeza, pero sin romperse al caer contra el suelo] ¡Agh! Tenma.
- ¡¿En qué demonios estás pensando?! ¡¿Cuántos días crees que vas a tener que trabajar para poder comprar esa pintura nueva?! Si quieres pintar de nuevo, debes...Le dijo el chico, pero detrás de él, el joven de overol azul tenía un palo de madera en sus manos.
- ¡TOMA ESTO! Exclamó aquel atacante, mientras que su compañero se lanzaba al asalto, peor Tenma logró neutralizar ambos ataques, dejando a los rivales sorprendidos, para luego derribar a ambos rivales a los golpes.
- ¡Tenma, eres un Ser muy cruel! Ellos no tienen comida ni dinero, además...Le reprochó el rubio por haber usado la violencia, pero se quedó callado.
- ¿Además qué...? Preguntó el peli café.
- ¡Odio que resuelvas las cosas usando la violencia! Criticó el rubio por el proceder del chico de ojos rojos.
- Lo acepto, perdón. Se disculpó Tenma.
- ¡Mejor discúlpate con ellos! Le ordenó el rubio.
- Lo lamento, ¿ya estás feliz? Se disculpó ahora Tenma con los dos jóvenes, los cuales emprendieron la retirada.
- ¡Maldito, ya verás! Le amenazó el castaño.
- Te juro que te arrepentirás. Advirtió el de cabellos negros, pero Tenma apretó el puño con fuerza.
- ¡Bien, aquí los espero! Dejó establecido el joven el sitio donde pelearía contra ellos.
Los dos jóvenes rivales se asustaron.
- ¡Ya ven! Pidió el rubio, harto de la violencia y salieron de allí.
- Pero, ¿quién es él? Quiso saber el castaño.
- Él también vive en el Orfanato. Añadió su compañero.
- Tenma, ¿qué te parece si nos vamos juntos? Así ya no te preocuparás por mí. Le sugirió el rubio.
El tiempo pasó y en el Orfanato, Alone se encontraba pintando un bello lienzo, su compañero era el cachorro, el cual ya estaba crecido y miraba entusiasmado la creación de esa obra de arte. Aquel lienzo gigante era una mujer de cabellos rubios, cubierta con una túnica blanca sobre un mar de nubes. En ese momento, unos pasos se sintieron en la silenciosa Iglesia y un joven de cabellos rubios y lentes que ocultaban con los rayos del Sol el color de sus ojos, se detuvo para ver aquella obra.
- Eres persona de quien he escuchado hablar. [Dijo el rubio, llamando la atención de Alone, quien detuvo su trabajo para ver al misterioso invitado.] Parece como si esa pintura estuviera a punto de cobrar vida. Dijo, admirando su trabajo y por el vidrio de sus lentes, unos ojos dorados se asomaron.
- ¿Quién eres tú? Preguntó Alone al peli dorado.
- Permíteme presentártelo, él es el Sacerdote que vive en la Catedral del Bosque. Intervino un hombre de barba y cabellos grises con tonos blancos.
- Maestro. Dijo Alone, mientras que se acomodaba las mangas.
- Él está interesado en tus pinturas y vino hasta aquí solo para poder apreciarlas. Le contó el hombre, mientras que el Sacerdote se acercaba hasta él.
- ¿La Catedral del Bosque? [Preguntó Alone.] "Nunca lo había visto, a pesar de que siempre voy ahí". Pensó para sus adentros, ya que nunca había visto a ese extraño personaje, el cual se detuvo para admirar aquella obra.
- ¿Eres tú quien siempre visita mi Catedral? Preguntó, sorpresivamente, el Sacerdote, llevando a que Alone abriera la boca y sus ojos se agrandaran por semejante sorpresa.
- A...A...Así es. Respondió, tartamudeando.
- Quiero saber por qué lo haces, ¿acaso te gusta la Pintura que se encuentra en el Sótano de nuestra Catedral? Quiso saber el peli dorado, mientras que la Luz del Sol iluminaba sus lentes.
- Sí, claro, aunque yo ya sé que no puedo entrar a verla, la verdad siempre me niegan la entrada. [Contó Alone, mientras que se podían ver imágenes de aquella bella Catedral de aspecto Gótico] Al momento de ver esa Pintura Mística, cualquier Pecador se arrepentiría inmediatamente y lloraría profundamente desde el fondo de su corazón. Al mirar esa Pintura, se ha convertido en uno de mis grandes sueños. Mostró sus deseos el rubio de ver aquella enigmática obra de arte.
Una Estrella apareció en la frente del Sacerdote.
- ¿Crees que un Pecador lloraría? Quiso saber.
- "¿Eh? Esa luz" Pensó Alone, llevando la mirada hacia el Sacerdote, el cual volvió a mirar la pintura de él.
- Alone, y en este cuadro, ¿por qué los ojos de este hermoso Ángel no están pintados? Preguntó el peli dorado.
- ¡Ah! Eso es porque todavía no consigo el color exacto: Rojo, busco un color rojo profundo, parecido al del Ocaso, ya he intentado con muchos tonos pero ninguno es. Respondió a la pregunta del Sacerdote, quien dibujó una sonrisa en su rostro al ver la determinación y energías positivas del joven rubio.
- Hum, eso es porque los colores humanos son muy limitados. [Esa fue la respuesta del peli dorado, quien llamó la atención de Alone, ¿cómo sabía de eso? La curiosidad lo atraía como una imán magnético] el color que percibe el ojo humano es una simple ilusión causada por la luz: Lo que quiero decir es que son falsos, ninguno de esos colores es real.
- ¿Entonces hay colores falsos y colores verdaderos? Preguntó Alone sorprendido.
Otra vez esa luz violeta que asomaba de la frente del Sacerdote y la estrella también.
- Veo que entiendes, los Colores Falsos son incapaces de volver insensibles a todas las personas. Alone, si en verdad estás en busca de un color verdadero, ve a la Montaña que está al Norte; en ese lugar crece una flor que dice que nació del Ala de un Ángel, esa flor posee el color rojo de la Tierra, el verdadero Color Rojo. Le contó el Sacerdote, mientras que al día siguiente el chico de cabellos rubios partió, acompañado del perro, en dirección hacia esa región donde encontraría aquel color para su pintura.
El camino era difícil e inclinado por su accidentada geografía, pero eso no iba a detener a Alone, quien estaba en su búsqueda de hallar el color rojo, que según le había contado aquel peli dorado, había venido de un Ángel.
- El camino está muy empinado, ¿será verdad que existe ese color rojo? ¿Un verdadero color rojo? [Se preguntó el rubio, cuando fue en ese momento en el que los ladridos del perro lo sacaron de sus pensamientos] ¡Ah, Cora, vas a perderte! [Fue tras el perro, Alone, quien al internarse en un sendero, cientos de pétalos rojos llovieron de los árboles y arrastrados por los vientos, hasta que al final del túnel, una luz llamó su atención] Aquí es, aquí es donde está el verdadero color rojo, la verdad es un lugar muy hermoso, es como el Paraíso que narra la Mitología Griega, que descansa al borde del Río Lethe, allí donde solamente los Dioses pueden entrar: Los Campos Elíseos, jaja. Quizás...este podrá ser el verdadero color rojo del que hablaba el Sacerdote, pero es totalmente diferente del que yo quiero. [Dijo Alone, maravillado de aquella belleza en la Naturaleza, preparó su caballete y de ahí empezó su trabajo] Bien, Cora, ya que estamos en este lugar, aprovecharé la ocasión para pintar un paisaje tan hermoso. El Sacerdote dijo que los Colores son Ilusiones, yo voy a demostrarle todo lo contrario, porque a mí me gustan mucho, incluso el rojo, tiene diferentes tonos: Rojo Vivo, Rojo Suave, Rojo Brillante, ¿no te parece fabuloso que un solo color se transforme en muchos otros solamente con la luz? [Lanzó su pregunta Alone, mientras que los animales, desde los conejos, los ciervos, un oso, las ardillas hasta los pájaros se acercaban hasta él para contemplar su trabajo] Todos los Seres en este Mundo y todos sus Colores, la verdad me gustan mucho. Pero de todos los Colores, mi preferido es...[Iba a decirlo, pero de golpe, una ola de miedo invadió a sus invitados y éstos huyeron] ¿Qué fue eso? ¿Qué es lo que está pasando, amigos? [Preguntó, mientras que Cora ladraba hacia el enemigo que se estaría acercando]
- Tu podrías poseer todos los Colores de este Mundo si quisieras. Sabías que si mezclas todos los Colores que produce la luz, obtendrás una inmensa oscuridad. Yo me llamo Pandora. Habló una hermosa mujer de estatura alta, de físico exuberante, muy bien proporcionada, de cabellos negros, largos y piel blanca y tersa. Vestía prendas al estilo Gótico, mostrando muy bien proporcionado su cuerpo. Cuando Cora le ladró, una misteriosa fuerza provino de ella, matando al perro y causando la tristeza de su dueño.
- ¿Por qué? Le preguntó a ella por haber tomado esa decisión, mientras que las lágrimas bajaban por su rostro, Pandora se arrodilló y tomó con sus delicadas manos a aquel chico.
- Veo que no puedes odiar, ¿verdad? [Preguntó ella, divertida, besando los labios de aquel joven, cuando de golpe, al hacer contacto, gotas de sangre salieron y cayeron hacia la mano de Alone, luego del beso, Pandora se alejó un poco y tenía ahora una corona de rosas en sus manos] Te he estado buscando desde hace tiempo, Mi Señor. Le dijo ella, los Cielos se nublaron, truenos, relámpagos y rayos comenzaron a oírse, una feroz tormenta de viento y agua iba a lanzarse como un bombardeo sobre aquellas regiones norteñas, mientras que Alone retrocedía aterrado.
- ¡¿Qué dijiste?! Preguntó Alone, tenía ahora la corona de rosas en su cuello, cuando de golpe, el medallón que llevaba en su cuello se iluminó y una especie de defensa lo cubrió.
Lejos de allí, aquel extraño clima llamó la atención de cuatro hombres jóvenes, los cuales estaban por salir de los bosques, estaban en una misión de reconocimiento y portaban unas llamativas Armaduras doradas, negras, verdes y naranja.
- Miren, amigos, por allí. Les llamó la atención uno de ellos, de cabellos castaños y musculoso.
- ¿Qué estará pasando, Stan? Preguntó otro joven y de cabellos castaños cortos y bien peinados.
- Miren, esa mujer y a ese chico rubio, algo no me gusta, debe estar detrás de este extraño cambio de tiempo. Señaló Stan Pines, quien sería en el futuro el tío de los gemelos Dipper y Mabel Pines.
- ¡Pandora, esa maldita desgraciada! Exclamó furioso su hermano gemelo, de lentes y cabellos castaños también, Ford Pines, quien sería el abuelo de los gemelos.
- Ha encontrado, al parecer, a alguien que ocupará el puesto de Su Señor, eso no lo voy a permitir. Juró otro de los integrantes de aquella tropa, sus cabellos eran también castaños pero de color más oscuro y una formidable musculatura, el hombre se preparó para ir a salvar al joven.
- Detente, Abe, esa mujer es letal, no debemos atacarla, no está en nuestras órdenes, el Patriarca se enojará si sabe de esto. Le pidió Stan de que no interviniera.
- Amigos, hice mi juramento como Caballero de Acuario y no me importa lo que nos diga el Patriarca, somos amigos y juramos defender este bello Planeta, así que...¡¿Quién está conmigo?! Preguntó Abraham Simpson, futuro padre de Homero y abuelo de Bart, Lisa y Maggie.
- Cuenta conmigo, viejo amigo. Juró Charles Montgomery Burns, quien era el Caballero de Cuervo.
- ¡Y conmigo! Agregó Stan.
- ¡Y también conmigo! Finalizó Ford.
- ¡Muy bien, amigos, al ataque! Ordenó Abraham y se lanzaron al rescate de Alone.
- Nuestro Dios necesita un cuerpo humano para resurgir en este Mundo, ¿y sabes qué tienes? El cuerpo con el Alma más pura que existe en toda la Tierra. [Le dijo ella, mientras que la medalla se transformaba en un medallón, el cual tenía inscrita la siguiente frase o palabra: "Yours Ever", Alone estaba petrificado, envuelto en la Corona de Flores, la cual era ahora su prisión].
Pandora se arrodilló ante Alone.
- Te he estado esperando, Mi Querido Señor Hades. Dijo ella con un tono de respeto hacia el joven, mientras que los rayos empezaban a estallar y eso era visto hacia más al Sur.
- ¡ALTO, PANDORA! Le ordenó una voz, haciendo que ella se volteara y viera a aquellos cuatro jóvenes que iban al rescate de Alone.
- ¡Malditos! ¡¿Qué están haciendo aquí, Caballeros?! Preguntó ella, alzando la voz, furiosa y amenazante, lista para dar combate.
- ¡NO PERMITIREMOS QUE TE LLEVES A ESTE CHICO DE AQUÍ! Le advirtió Burns, quien lanzó toda una cortina de humo, mientras que Stan y Ford la distraía con copias suyas, producto del "Espejo del Engaño", técnica de Ford y Stan.
- Tranquilo, pequeño, ya estás a salvo, ven. Le dijo Abraham, mientras que rescataba a Alone de las garras de la peli negra.
- "¿Qué fue eso?" Se preguntó Tenma, mirando hacia el Norte.
Con Alone a salvo, los Caballeros emprendieron la fuga, no podían quedarse a luchar contra Pandora.
- ¡Stan, de prisa, vamos! Le pidió Ford.
- ¡Ustedes huyan, yo la detendré todo el tiempo que pueda! Ordenó su gemelo.
- ¡Jamás te dejaré solo, tonto, estamos juntos en esto! Hizo recordarle Ford de su juramento de hermanos.
- ¡Jajaja, nunca cambias, hermanito, bueno, hora de demostrarle a esta maldita quiénes somos! Exclamó Stan.
- Jeje, cuando Mi Señor despierte, ustedes serán los primeros en morir, espero verlos llegar a arder en las Prisiones del Inframundo. Río ella, mostrando ese destino aterrador.
- ¡Eso ya lo veremos, Bruja, ahora muere! Exclamó Ford y le lanzó su ataque, pero la chica lo devolvió.
- ¡"Ventiscas Heladas"! Lanzó Stan su ataque y logró congelar a Pandora.
- ¡Rápido, salgamos de aquí, Abraham nos dijo que nos separaremos, luego nos encontraremos en el Punto de siempre! Pidió Ford y escaparon de allí, dejando a Pandora sola, mientras que ella se descongelaba.
A su vez, en los senderos del Norte, un misterioso joven castaño, protegido con un sombrero oriental y vestido de viajero con sus pertenencias, avanzaba bajo la terrible lluvia que caía por allí, cuando algo le llamó su atención.
- ¡¿Qué?! Exclamó sorprendido y vio como un ataque iba contra él, los cuales explotaron sobre su persona.
Enseguida, tres misteriosos hombres con Armaduras de tonalidades oscuras aparecieron y se rieron burlonamente del crimen que habían cometido.
- Fue demasiado tonto. Dijo uno de ellos, el cual era grande.
- Ustedes son Espectros del Inframundo, ¿verdad? Preguntó una voz misteriosa, la cual llamó la atención, tomándolos por sorpresa y miraron hacia todas partes.
Se giraron y vieron que el mismo castaño de sombrero oriental aún seguía de pie y sin ningún daño a la vista.
- En ese caso, hay algo que en este momento me gustaría preguntarles. Alegó él pero eso no le cayó para nada bien a los rivales.
- ¡CIERRA LA BOCA, ACABAREMOS CON ÉL! Exclamó el líder de aquel grupo y se lanzaron al asalto, el castaño lanzó su sombrero oriental al aire y de un cofre dorado, el cual estaba dentro de una cesta de nimbre, emergió la Armadura Dorada de Libra, ésta se pegó al cuerpo del joven, donde en su espalda estaba la imagen de un Tigre del Asia, al unirse la Armadura, un feroz rugido hizo temblar a todo el sitio.
- ¡ESA ARMADURA ES DE...AY NO! Gritó aterrado el líder del grupo, mientras que el joven preparaba su ofensiva, tras detener su paso y pisar con fuerza el piso.
- ¡"LOS CIEN DRAGOS NACIENTES DE ROZAN"! Lanzó su ofensiva, la cual mandó por los aires a los enemigos.
- ¡TÚ ERES DOHKO DE LIBRA, ¿VERDAD?! Preguntó el líder del grupo, mientras que una sonrisa de victoria apareció en el rostro del joven.
Los enemigos cayeron al suelo, mientras que el Espectro Líder estaba sangrando en la cabeza.
- Esto es imposible, uno de los más poderosos entre todos los Caballeros de Athena...¿Por qué? Se preguntó el personaje y Dohko se arrodilló frente a él.
- Para derrotar a Hades, por supuesto, el hecho de que ustedes anden por aquí, significa que sin duda alguna, Hades ya se encuentra de vuelta. ¡¿DÓNDE ESTÁ TU REY?! [Preguntó severo a los capturados]
- No te lo diré...Mucho menos ahora que ha encontrado a su sucesor...Ustedes, los Mediocres Caballeros de Athena no podrán encontrarlo nunca, no hasta que llegue el momento. Le advirtió el Espectro Giganto de Cíclope, quien murió junto con sus compañeros por las heridas provocadas por el ataque de Dohko, quien quedó pensativo en las palabras del rival.
- "Es cierto, el fuerte Cosmo de Hades que sentí hace algunos días, sea vuelto cada vez más débil, es como si...el propio Hades se hubiera convertido en un Ser Humano común y corriente, tengo que darme prisa" Pensó Dohko, mientras que se ponía en marcha.
De vuelta en el pueblo italiano, Abraham había puesto a Alone en una cama que tenía la Iglesia, recostándolo para que pudiera recuperar sus fuerzas y con un paño humedecido en su frente, antes de que lo descubrieran, éste desapareció de allí.
Poco tiempo después, Alone abrió los ojos, encontrándose con Tenma y una chica pelirroja en el interior del recinto iluminado por las velas.
- ¡Qué bueno que ya despertaste, Alone! Se puso contento el chico de cabellos café.
- ¡Qué gusto! Dijo la pelirroja.
Alone se levantó y se quitó el paño húmedo.
- ¿Dónde...? Preguntó, un tanto mareado.
- ¡¿Dónde?! ¡Estamos en casa, por supuesto, Alone! Dijo la pelirroja.
- ¡Sí, claro! Es que te encontré desmayado en el camino a la Montaña. Le contó Tenma.
- ¿Dijiste camino a la Montaña? Preguntó Alone confundido, ya que aquel Caballero lo había llevado hasta la Iglesia.
- Sí. Respondió Tenma afirmativo.
- Tenma dijo que presintió que estabas en peligro y fue entonces que se le ocurrió buscarte a la Montaña y tuvo mucha suerte en encontrarte. Yo también me asusté. Dijo la chica, llevándose las manos a su rostro.
- ¿Ah? Entonces ¿tú sentiste esa presencia? Preguntó Alone al chico.
- Jeje, quizás sea algo que heredé. Pero si puedo sentir algo aquí dentro, como si dentro de mi cuerpo existiera un Universo. Le contó Tenma.
- ¿Universo? Preguntó Alone.
- Sí, mientras lo siento, más fuerte se hace dentro de mí, es una gran fuerza, siendo algo maravilloso: Un Poder Gigante que nace dentro de mí. Alegó el joven, orgulloso de tener esa fuente de poder.
- Je, Tenma, otra vez tus cosas raras. Se río la chica.
- Bueno, en ese caso...Iba a decir Alone, cuando un fuerte dolor lo hizo retroceder y venía de su cabeza.
- ¡Tranquilo! No te esfuerces tanto. [Le calmó Tenma, mientras que el Medallón se movía y caía piso] Mira eso, se te cayó. Dijo el chico, quien se iba a arrodillar para tomarlo, pero Alone se adelantó.
- ¡NO LO TOQUES, TENMA! [Gritó el rubio, sorprendiendo a los dos chicos.] Es...nada. Pidió disculpas y bajando su tono de voz.
- Yo...Iba a decir Tenma.
- Entiendo bien esa sensación que dices. Oye, Tenma, dime, ¿tú puedes sentir lo que hay dentro de mí? Quiso saber Alone, cuando una fuerte explosión sacudió los exteriores y varias chicas entraron a la habitación, asustadas.
- ¡Tenma, Alone! Gritaron ellas, mientras que afuera seguía lloviendo y la actividad eléctrica también era su protagonista.
- Pero, ¿qué les pasa a ustedes dos? Se ven muy pálidas. Quiso saber el chico de cabellos café.
- ¡Es que es terrible...el Rio de la Montaña se desbordó y se dirige hacia acá! Les informó una de las chicas, donde afuera, las fuerzas militares se hicieron cargo de cerrar la entrada principal a la ciudad, mientras que las aguas destruían todo a su paso afuera.
- Entonces, ¿las personas de la Ciudad cerraron las puertas para salvarse así mismas? ¡Maldición, pero ¿en qué diablos están pensando esas personas?! Preguntó furioso el joven, quien golpeó con fuerza la pared.
- Tenma, permite que yo vaya. Pidió el rubio.
- ¡No puedo permitírtelo, Alone, en tu condición no...! Se negó el joven a dejarlo ir solo, pero éste se levantó de la cama.
- Estoy bien, nada más iré a pedirles que abran las puertas nuevamente, jeje, lo lograré, Tenma. Te podría apostar que toda la gente que vive en esta Ciudad no tiene mal corazón. Prometió el chico.
- ¡Otra vez tus tonterías! ¡Eres un tonto, Alone! Le retó Tenma, mientras que el rubio consolaba a la pelirroja que lloraba por el miedo de las inundaciones.
- No te preocupes por nada, Pequeñita. [Le tranquilizó el rubio y ella dejó de llorar, Tenma pegó un salto hacia el otro lado de la habitación] ¡Tenma!.
- ¡Solo iré a dar un paseo! Exclamó.
- ¿Un paseo? ¿Qué estás planeando? Quiso saber Alone.
- ¡Solo quiero ir al Río! Exclamó Tenma.
- Oye, tú solo no. Pidió Alone de que no que fuera.
- ¡Lo prometimos, seríamos Sasha, tú y yo! Le hizo recordar la promesa hecha.
Una serie de recuerdos aparecieron en la mente de Alone, en especial de aquella niña de cabellos lila y la promesa que hicieron bajo un frondoso árbol en un bello día de Sol en los campos.
- Yo los protegeré, no importa cómo, somos una familia y también amigos. Dijo Tenma, quien abrió la puerta y salió corriendo bajo la lluvia.
- Tenma, pobre, ¿Qué estará planeando? Se preguntó la pelirroja, mientras que una de las más pequeñas lloraba, apoyada en el hombro de Alone.
- ¿Y qué pasará con nosotros? Preguntó otro niño de cabellos rubios.
- Estaremos bien, Tenma es algo impulsivo, pero él siempre es sincero, es gentil y nunca rompe sus promesas. Confío en él, además le creo. Les dijo Alone, levantando la moral de aquellos pequeños, quienes lloraban y la mayor rezaba para que estuvieran a salvo.
Mientras que Tenma estaba en los vados del río, donde un muro dividía las aguas a la mitad, en el lado Occidental, éstas corrían a toda prisa desde las Montañas y los truenos seguían resonando en el ambiente.
- "Hubo un derrumbe ¡y estas rocas detienen al río! ¡¿Qué podré...hacer yo solo?!. ¡¿Cómo podré salvar a todos?! ¡¿Qué hago?¡!" ¡AHHHHHHHHHHHH, MALDITAS ROCAS! [Pensó para sus adentros el joven, quien dio un feroz golpe contra el derrumbe y del interior de las rocas, comenzó a filtrarse el agua, la cual tuvo la fuerza de arrojarlo contra el suelo] ¿Qué hago? ¡Tengo que hacer algo! [Tenma estaba listo, se levantó, a pesar de la herida sangrante que tenía, se preparó para dar otro golpe contra el derrumbe] "Yo prometí que los protegería. ¡No me rendiré! ¡No importa lo que suceda, NI TAMPOCO LO QUE PASE CONMIGO!" [Se dijo así mismo, dando golpes tras golpes contra las rocas] "¡Agh! ¡Me rompí la mano! Sin embargo, ¡no me importa nada!" Juró el joven, quien tenía sus manos ensangrentadas por los golpes.
- Abe se está demorando, llevamos varias horas esperándolo en el Punto asignado y nada, lo iré a buscar. Dijo Burns, quien estaba con Ford y Stan, pero el Caballero de Acuario no aparecía todavía.
- Detente, Monty, no puedes, además puedo sentir la presencia de esa desgraciada de Pandora. Permaneceremos aquí hasta que la lluvia pare y luego lo buscaremos. Le prometió Stan, sabiendo que Abe podía cuidarse solo.
Abraham había logrado salvar a Alone y llevarlo hasta la Iglesia del pueblo, pero durante el escape, Pandora había logrado darle caza y lo atacó por sorpresa con su Lanza, la cual atravesó la espalda del castaño.
- Espero que puedas hallar la paz, Abraham de Acuario, en el Inframundo te estaré esperando para darte el peor castigo por atreverte a atacarme enfrente de Mi Señor. Le dijo Pandora, mientras que unos rayos la iluminaron.
- No me importa si muero o no, mis amigos y yo te detendremos. Juró el castaño.
- ¿Seguro? Por lo que yo veo es a un hombre debilitado y herido, tratando de aferrarse a la vida, porque al llegar al Inframundo, te esperaré la peor de las torturas. Dijo ella, arrodillándose, Abraham pensaba que lo mataría, ya que estaba sin muchas fuerzas para hacerle frente a la rival, cosa que fue todo lo contrario, un beso extraño, cálido y frío pudo sentir en sus labios, mientras que la muchacha de vestimentas Góticas se iba retirando.
- Te he dado el "Beso de la Muerte"; te perdono la vida pero solo por ahora, cuando nos volvamos a ver, le llevaré tu alma a Mi Señor y él decidirá tu castigo. Adiós, Abraham de Acuario. Se despidió Pandora y con otra caída de rayos, ella desapareció de los bosques.
Abraham quedó tendido en el suelo, mientras que avanzaba como podía, a pesar de la herida causada, no podía dejarse rendir, su suerte cambió cuando vio que alguien que venía por esos senderos, protegida por tres misteriosa chicas, se acercó hasta él corriendo.
- ¡Caballero, ¿se encuentra bien?! ¿Qué le pasó? Preguntó una bella mujer de cabellos con largos rizos rosa fuerte, piel color melocotón, estatura alta, llevaba un vestido largo, sin mangas con una estrella en su vientre, la cual daba al descubierto una gema.
El hombre no respondió al llamado de la joven.
- ¿Qué crees que le puedo haber pasado, Rose? Preguntó Perla, quien se arrodilló y lo movió hacia atrás, viendo que estaba herido.
- ¡Lo han herido! Una puñalada de una lanza, este hombre va a morir, yo me encargaré de sanar sus heridas. Dijo ella, pidiendo a las Cristal Gems que se retiraran para que pudiera curarlo con sus lágrimas y así sanar la herida que tenía, producto de la Lanza de Pandora.
Una vez recuperado, Abe abrió los ojos.
- ¿Qué...Qué me pasó? ¿Dónde está...dónde está esa maldita? Preguntó Abraham un tanto mareado.
- Tranquilo, ya pasó, ya estás a salvo, Caballero de Acuario. Dijo la mujer.
- ¿Quiénes son ustedes? Preguntó Abe, sorprendido de ver a aquellas personas allí.
- Soy Rose Cuarzo, la Líder de las Cristal Gems, nos hemos refugiado aquí en la Tierra, escapando de la tiranía de Diamante Amarillo, pero aquí también hay una maldad que se puede sentir en el ambiente. Se presentó la mujer de cabellos rosa fuerte.
- Ella tiene razón, nosotras también lo sentimos, una fuerza bastante aterradora. Alegó Garnet.
- ¿Se refieren a Pandora y a Su Señor? Preguntó Abe.
- Sí, la hemos visto pero pensábamos que no era un peligro, me retracto de lo que dije. Alegó Amatista.
- Tengo que llegar con mis compañeros urgentemente, me están esperando en el Sur. Pidió Abe.
- Tranquilo, lo llevaremos con ellos. Le tranquilizó Perla y se pusieron en marcha.
A su vez, Dohko se hallaba también, pero más hacia el Sureste, caminando por los bosques y bajó la lluvia, pronto sintió aquella presencia que lo hizo volver hacia atrás en su camino.
- "Hum, es un Cosmos. ¡He podido sentir un pequeño Cosmos diferente al de los Espectros!" [Pensó el castaño, quien se lanzó a la carrera hasta llegar a los acantilados, desde donde allí abajo, Tenma estaba tratando de destruir el derrumbe] "¡Imposible, es un niño! ¡¿He intenta derribar esas rocas?! ¡Qué tontería! Aunque lo lograra, moraría aplastado" ¡Oye, ¿qué pretendes?!. Después de hablarse así mismo, Dohko le pregunto al muchacho de lo que hacía, mientras que en los pensamientos de Tenma, podía oír los rezos de Alone y los niños del Orfanato.
- "Los escucho, las chicas y Alone, ellos están rezando por mí, lo sé, puedo sentir su fuerza y el Universo que hay dentro de mí lo dice, ¡vamos, tú puedes, estoy seguro de eso! ¡Tú podrás...Tú podrás...TÚ PODRÁS SALVARLOS A TODOS!" Se dio comienza así mismo y la energía lo envolvió por completo, al escuchar los rezos.
En ese momento, Tenma con todas sus fuerzas concentradas y de un fuerte golpe, terminó por destruir el derrumbe de rocas que bloqueaban el río.
- "¡¿Qué?! ¡No puede ser! ¡Ese niño pudo destruir la pared de piedras, la energía que envolvió su cuerpo por un instante fue su Cosmos, sin duda! ¡Increíble, qué valiente!". Lo felicitó Dohko, para luego rescatarlo, ya que Tenma se había desmayado en el suelo y las aguas lo iban a arrastrar hacia una muerte segura, por lo cual saltó desde el acantilado y lo salvó de morir.
A salvo y con las aguas del río devuelta a la normalidad de sus cursos, Dohko llevó al joven a tierra seca y firme.
- ¡Oye, resiste, ya hiciste lo más difícil! Le pidió Dohko de que despertara, mientras que lo reanimaba.
Pronto Tenma abrió los ojos.
- Las chicas...mi amigo Alone, ¿están a salvo? Prometí que pasara lo que pasara, yo los salvaría a todos. Preguntó el joven, un poco mareado pero en buen estado, al extender su mano, Dohko se la tomó.
- Ahora tranquilízate, el río volvió a su cauce natural, tú los salvaste. Informó el castaño.
- Lo logré. Dijo victorioso y con una sonrisa en su rostro, Tenma.
- "¿Quién es este niño?" Se preguntó Dohko sorprendido.
Pronto, al llegar el nuevo día, las lluvias cesaron y comenzó a despejarse.
- Oye, dime algo, ¿te gustaría usar esa fuerza y valentía para ayudar a otras personas? [Preguntó Dohko a Tenma, quien quedó sorprendido.] Esto es para proteger la Paz y la Justicia, ¿a ti te gustaría llegar a ser un Caballero de Athena?. Le propuso esa idea.
Esa idea quedó en su mente un buen rato.
- ¡Oye, Tenma, ya no te muevas! Le pidió Alone, quien estaba haciendo un retrato de su amigo, pero por sus constantes movimientos y estornudos, se le hacía imposible.
- Eso quisieras. Respondió su amigo.
- Quedate quieto, porque quizás sea la última vez que puedas pintarte. Le pidió, ahora con un tono triste en su voz.
- No te preocupes, volveré pronto, como un Caballero de Athena. Le prometió y Alone depositó su pincel.
- Ya acabé. Respondió.
- ¿Hum? Quiso saber sorprendido el joven de cabellos café.
- Es que...yo quería pintar el rojo de tus ojos pero no puedo. Respondió triste al no poder pintar esa parte de su retrato.
- ¿Mis ojos son rojos? ¡Oye, yo no soy ningún conejo!. Preguntó y luego se enojó por lo dicho.
Eso le causó risa a Alone.
- No es eso, es que cuando la luz del Sol o la de una fogata iluminan tus ojos castaños, brillan distinto, brillan con mucha fuerza, pero, por ahora, no puedo recrear ese color. Cuando seas un Caballero y regreses, continuaré la pintura. Juro que seré el mejor pintor del Mundo cuando vuelvas. Por eso...Hizo su promesa Alone, pero al ver que su amigo partiría para ser un Caballero de Athena, la tristeza le invadió y comenzó a llorar, Tenma se levantó y apoyó su mano en la cabeza del joven.
- Ya, es una promesa. Acordó el peli café, sonriéndole y haciéndole saber que tenía una promesa que cumpliría al volver.
Pronto Tenma se despidió de Alone y salió afuera, donde Dohko lo estaba esperando.
- Vámonos, Dohko. Pidió Tenma, listo para partir.
- ¿Pudieron terminar la pintura, Tenma? Le preguntó el castaño oriental.
- No, pero la terminaremos después. Respondió el chico.
De golpe, una extraña sensación llamó la atención de Dohko sobre aquel chico rubio.
- ¿Está pasando algo? Preguntó Alone, un tanto desconcentrado por la mirada extraña que tenía Dohko.
- ¿Eh? Ah, no, nada, perdón. Lo que pasa es que tus ojos llamaron mi atención. [Se disculpó el castaño, bajando su sombrero oriental.] Llegó el momento, Tenma, vamos al Santuario. Ordenó el hombre y se pusieron en marcha, no sin antes que Tenma le hiciera recordar algo muy importante a Alone.
- ¡Por favor, no olvides la promesa, ¿sí, Alone?! Le hizo recordar, cosa que a Alone le produjo tristeza pero no podía verse así en la despedida de Tenma, así que sonrió y se despidió de él.
- "Seremos amigos para toda la vida, ¿verdad?" Pensó para sus adentros, mientras que se despedían.
Después de la partida de Tenma, en la Catedral del Bosque:
- Han pasado 243 años de la última vez y me parece que finalmente el día del Renacimiento de Hades está por llegar. Dijo el Sacerdote de cabellos dorados, sacándose los lentes.
- Es verdad, únicamente esperaremos a que despierte completamente. Añadió Pandora.
- En ese momento, toda la vida que habita en la Tierra perecerá y el Planeta será dominado por el Rey Hades, quien se proclamará Rey del Inframundo. Finalizó el peli dorado, mientras una ráfaga de movimiento se llevaba consigo varios pétalos rojos hacia el Norte, desapareciendo de aquel sitio.
Lo que ellos no sabían, era que estaban siendo vigilados por Abraham y sus compañeros, a quienes se les había unido Rose Cuarzo con las Cristal Gems.
- Eso ya lo veremos. Juró Ford, apretando el puño con fuerza.
- Debemos alertar al Patriarca y al Santuario, volvamos ya. Pidió Burns.
- Espera, él no nos podrá creer a menos de que ocurra, por ahora los vigilaremos, muy pronto les daremos el aviso. Sugirió Stan, deteniendo al peli blanco.
- Tienes razón, por ahora volvamos al Santuario y permanezcamos en silencio, no queremos dar falsas noticias, de lo contrario nos podrían imponer algún castigo. Sugirió Abraham y dejaron la zona de la Catedral del Bosque, sin que Pandora o el Sacerdote se percataran de su presencia.
¡Chan Chan! :D Aquí les traigo el primer capítulo de "The Lost Canvas", espero que lo disfruten, comenten, dejen reviews, etc :3. Iré haciendo también las películas así llego con Soul of Gold :D.
Saludos, fuertes abrazos y agradecimientos para aletuki01, FreedomGundam96, Fipe2, Kitty 1999 y lady-sailor.
En el capítulo que viene, el Santuario y la llegada del General Skips de Crisaor, enviado del Emperador Poseidon.
Cuídense y que tengan un buen Miércoles :D.
