SEGUNDA TEMPORADA! Es la continuación de ME QUEDAS TU y esta vez veremos a los Sombrero de Paja con las nuevas parejas después de encontrar el One Piece. Que lo disfrutéis y GRACIAS por leer este fic.

VISITAR A UN VIEJO AMIGO

Pasaron ya más de dos años desde aquel fantástico día en que le había dicho a su preciosa pelirroja lo que sentía por ella, desde que la beso por primera vez y desde que llego a ser posible gracias a un sueño que se diera cuenta de lo que quería decirle su corazón. Y también habían pasado más de dos años desde que su nakama, aquel espadachín malhumorado también dio aquel grito en la cocina que hizo que una morena de ojos azules se diera cuenta de lo que sentían el uno por el otro. Dos parejas y el mismo sentimiento.

Durante estos dos años habían vivido muchas aventuras y cada una mas peligrosa que el anterior, donde habían sufrido penalidades, donde rieron después de superarlas, donde sangraron y lloraron con cada golpe que recibían, pero eso si, siempre unidos, tenían razones para hacerlo, para no rendirse nunca y es que luchaban por un sueño, luchaban por los sueños de los demás. Muchas veces creyeron que no lo conseguirían, o que perderían a alguien en el camino debido a las heridas y a los rivales que se enfrentaban, pero ese chico de goma lucharía siempre por sus nakamas, lucharía siempre por su sueño, lucharía siempre por la mujer que amaba. Ya habían derrotado a todos los Yonkou, entre ellos a Shanks, una de las batallas más duras que podían recordar, sobretodo para el moreno por lo que significaba para él, pero si quería ser el Rey de los Piratas no tenia otra opción, necesitaba demostrar que se lo merecía y sabia que aunque lo derrotara siempre mantendrían esa amistad especial, ya que fue el pelirrojo el que lo llevo a ser pirata, a tener ese sueño y eso nunca cambiaria, además que Shanks lo vería siempre como aquel niño tan inconsciente y tozudo que le recordaba a como fuera él de pequeño, o como era el anterior Rey de los Piratas.

A la vez que los mugiwara derrotaban a los cuatro emperadores otro hombre llamado Monkey D. Dragon consiguió poner fin al Gobierno Mundial, y era esto lo que ahora mismo preocupaba más al moreno y capitán del Sunny por que solo una semana después de encontrar el One Piece ese hombre, su padre, apareció para pedirle un favor y desde aquel encuentro, un mes atrás no podía parar de pensar en lo que le pido.

-Luffy...¿Estas bien?, me tienes preocupada. - La pelirroja se acercó la cabeza del Sunny que era donde estaba sentado el moreno, en dos pasos agiles de la practica lo alcanzó y lo abrazo por detrás. - Se que sigues pensando en lo que dijo tu padre...

-Oh Nami... si... lo siento, no quería preocuparte. - Girándose cogió a la pelirroja por la cintura y la sentado delante de él para poder abrazarla al igual que lo había hecho ella antes. - Me conoces muy bien, es imposible ocultarte nada... Shishishi. - Le sonrió para después darle un beso en la mejilla.

-Llevó mucho tiempo soportándote, es normal que te conozca tan bien... - Le saco la lengua y le guiño un ojo. - Y no me gusta cuando estas así...

-Es que... es difícil de explicarlo... - Puso una cara seria y miró hacia el horizonte. - Sigo sin entender por que me lo pidió...

-Luffy... es el líder del Nuevo Gobierno Mundial y tu eres el Rey de los Piratas, estamos fuera de la ley, es normal que te lo pida siendo tu padre... - Le sonrió mientras cogía su mano para entrelazarla sabiendo que eso lo relajaba.

-Lo se... pero cuando lo vi a los ojos... - Recordó aquel momento delante de su padre, como lo agarro del hombro y los ojos de aquel hombre con un tatuaje en su rostro lo miraba serio, pero también como si su petición fuera acompañado de suplica más que de un consejo.

-Ese hombre es un misterio para todos, hasta para los que están más cerca de él estoy segura, así que no pienses más en eso... - Quería que se olvidara del tema cuanto antes. - Estoy segura que lo veremos otra vez y podrás preguntarle la razón.

-Si, tienes razón...Shishishi - Sujeto el rostro de la pelirroja para que la mirara y le regalo una gran sonrisa seguida de un beso.

El resto de la tripulación se dedicaban a hacer cosas por el barco para de alguna forma matar el tiempo hasta la próxima isla. A Usopp y a Chopper se les había ocurrido ponerse a jugar a las cartas en la cubierta mientras que Brook tocaba una canción sentado en las escaleras y Franky retocaba unos pqueños engranajes de su brazo izquierdo. Zoro y Robin se encontraban en el gimnasio, uno entrenando y la otra leyendo en alto para los dos. Sanji estaba en la despensa buscando ingredientes para la cena y Jinbei estaba en el timón llevando el rumbo en la dirección que le había marcado la navegante.

-Usopp... ¿donde crees que iremos ahora? - Le pregunto el pequeño reno mientras seguía jugando.

-Pues... no lo se... - Levanto lo vista después de aquella pregunta para mirar hacia los lados.

-¿Crees que volveremos a casa?... - El doctor soltó las cartas y miró al cielo con una sonrisa. - Ojala Luffy quiera volver... tengo ganas de ver a la doctora Kureha... - Dijo con melancolía pero con una sonrisa.

-Y yo quiero ver a Kaya... - El tirador también soltó las cartas y comenzó a sonreír.

-Shishishi... y lo haremos. - El capitán y la navegante habían bajado de la cabeza del Sunny y se acercaron a sus nakamas.

-¡OHHHH! ¡¿VOLVEMOS A CASA?! - Tanto el doctor como el tirador a la vez que el músico y el carpintero que estaban en la cubierta gritaron a la vez mientras en sus ojos se podían ver estrellas de la ilusión por la noticia.

-Si, volvemos a casa, pero antes de nada tanto Luffy como yo hemos pensado en hacer una cosa... - La pelirroja y el moreno se miraron con complicidad. - Brook... es hora de vayamos a dar una visita Laboon. - Le dijo sonriendo.

-A... a... junto... Laboon... - El músico no se lo podía creer, una gran alegría comenzó a inundarlo por completo haciendo que empezara a llorar con una gran sonrisa y se lanzara en el aire a abrazar a sus dos nakamas. - ¡LUFFY-SAN! ¡NAMI-SAN! ¡GRACIAS! - Los apretaba muy fuerte de la emoción por ver que se cumpliría si promesa.

-Shishishi... no es nada Brook. - Como podía sujetaba su sombrero para que no le cayera de la fuerza de aquel abrazo.

-Brook, tranquilo... y suéltame ya que me ahogas. - La pelirroja se estaba poniendo colorada y le costaba respirar.

-Yohohoho... lo siento Nami-san. - El esqueleto se reía dando dos pasos hacia atrás para dejarles su espacio. - Pero es que estoy muy feliz yohohoho.

-Lo... lo entiendo, pero no vuelvas a abrazarme tan fuerte que casi me matas. - La navegante respiraba mejor pero aun le costaba coger aire.

-Luffy-kun, tenemos que hablar. - El gyojin miró para el moreno de reojo.

-Dime Jinbei, ¿Qué ocurre?... - El capitán se acerco a su nakama y se coloco enfrente a él.

-Llevamos un mes navegando en dirección al Red Line, y yo diría que nos quedan dos semanas para llegar a esta velocidad... - Su mirada era bastante seria. - Necesito que me des tu permiso para adelantarme e ir a la Isla Gyojin...

-¡¿QUE?! Pero si solo quedan dos semanas... ¿por que te quieres ir ya?- El moreno se cruzo de brazos con cara de enfado y incredulidad.

-Necesito hablar con el Rey Neptuno de nuestra llegada... - Intentaba mantener la calma con su capitán. - Ahora que eres el Rey de los Piratas, tu llegada a cualquier isla puede ser un peligro para la misma, por eso necesito hablar con él para avisarlo que vamos hacia allí.

- Si es por eso... entonces tienes mi permiso para adelantarte... - Tenia la cabeza gacha y estaba un poco triste por que su nakama se fuera pero parecía que entendía la situación.- ¿Y cuando te vas?...

-Ahora...cuanto antes me marche mejor. - El gyojin señalo al carpintero para que se acercara y cogiera el timón en su lugar.

-¡¿AHORA?! - El moreno tenia los ojos abiertos de par en par de la sorpresa.

El peliverde y la morena bajaron hacia la cubierta mientras el cocinero salía del interior del barco ya que aquellos gritos le habían llamado la atención y querían saber que ocurría. Cuando Jinbei le explico lo que pasaba, aprovecho para despedirse de todos y marcharse sobre un tiburón ballena al que había llamado.

-Entonces quedan dos semanas para llegar a la Isla Gyojin... - El rubio cogió su pitillo con una mano y expulso el humo lentamente por su boca, tenia la cara seria pero todos sabían lo que iba a ocurrir ahora. -¡DOS SEMANAS PARA VER A MIS LINDAS SIRENAS! - Sus ojos se habían convertido en corazones, su cuerpo temblaba sin cesar como si estuviera hecho de gelatina con los brazos en alto y una hemorragia nasal que sino paraba les traería un antiguo recuerdo.

-¡SANJI NO EMPIECES! - El doctor le gritaba con preocupación y poniendo sus manos en la cabeza.

-Siempre será el mismo ero-cook... - El peliverde tenia una leve sonrisa de lado.

-Zoro... - La arqueóloga lo miraba de reojo también con una leve sonrisa, sabia que con aquello se daría cuenta de que no tenia ganas de separarlos otra vez culpa de unas de sus peleas habituales.

-¿Qué?.. es que si lo es lo es... - El espadachín señalaba con los dos brazos hacia donde estaba el cocinero sangrando por la nariz, como dejando claro que tenia razón.

-Ya, pero no hace falta que lo digas idiota. - La pelirroja le dio un golpe en la cabeza tirándolo al suelo dejándole un chichón.

-Shishishi... bueno chicos, ya esta todo claro... -El moreno subió unos escalones para que lo vieran bien. - Nuestra próxima parada... ¡ISLA GYOJIN!

-¡SIIIIIII! - Gritaron todos a la vez animados mientras el nuevo Rey de los Piratas tenia aquella sonrisa tan característica en su rostro.

-Continuara-

Acabado este primer capitulo de esta nueva aventura! Espero que os haya gustado y ojala dejéis comentarios jejejej MUCHAS GRACIAS POR LEER ESTE FIC!