"Amantes"

CAPITULO 1

"De Regreso"

—Ah… Sasuke, no… ¡Sasuke!—dijo en mi oído, como si lo que hubiera oído fuese una petición a seguir aumente la velocidad, sus manos se aferraban a mi espalda, y sus piernas se enredaban en mi cadera.

—Sasuke…no…

— ¡Sakura!— grite. Desperté de pronto…había soñado de nuevo con ella.

Mi frente estaba perlada en sudor, y bajo mis sabanas estaba la consecuencia de mi sueño. Bufe.

Desde mi partida, había soñado mucho con ella, no se aun porque, simplemente no podía olvidar… olvidar sus manos, sus besos, ¡DIOS! sus gemidos. Cubrí con mis manos mis ojos.

Ya habían pasado dos años, dos años, y aun soñaba con esa niña, ella, a la que tanto desprecie y humille.

Solo tenia dieciséis y me había dicho que me amaba, me burle de ella… supe que sufría, muchos me lo dijeron, yo seguía burlándome de ella, era una chiquilla, y tengo que admitirlo yo también, solo le llevaba un año, aun así me divertí ignorándola…

Hasta aquella tarde de septiembre, ella estaba frente a mi, y no pude evitarlo, cuando la vi ahí, indefensa, triste, necesitada, me encanto, y solo supe que después de hacerla mía, quise mas.

Entre a mi baño para darme una ducha fría, la necesitaba, mientras el agua caía en mi cuerpo, no pude evitar pensar en ella de nuevo, como siempre me pasaba cuando soñaba con ella, mi mente se lleno de confusión, solo estuve con ella algunas veces, pero algo la hacia diferente, no supe que, aun ahora no sabia que era, era tan diferente tierna e Inocente pero ala vez…había estado con muchas mujeres, mas hermosas, con mejor cuerpo, con mas experiencia que esa niña entonces…

— ¿Por que sigues en mi mente? — dije apoyándome en la pared de mi baño, mientras el agua escurría por mis cabellos negros y bajaba por mi piel.

Salí después de un rato, debía llegar temprano tenia junta con mi padre y mi hermano, quien después de tanto tiempo había decidió regresar para por fin hacerse cargo de la compañía familiar.

La verdad no era lo mío, pero el se fue y mi padre como siempre tomo la decisión por mi, yo debía hacerme cargo de la administración en Europa, mientras el administraba la empresa en América, yo ni siquiera había terminado la preparatoria, y apenas empezaba a conocerla, a ella.

Me vestí rápido, simple, no tenía cabeza para coordinar, un pantalón de vestir negro y una camisa del mismo color, un saco igual, zapatos, listo.

Salí de mi departamento, último piso eso si era lo mío, tome el elevador y llegue a mi auto. Subí, aumente la velocidad, tal vez me multarían y así llegaría mas tarde, sonreí ante el pensamiento de hacer enfadar a mi padre con eso, pero no paso.

Llegue hasta aquellos edificios rápido, no se me había cruzado por la mente eso, que intentando ser multado también llegaría mas rápido.

Solté un vago suspiro, no podía entender como es que mi vida había cambiado tanto, de un día para otro cambie de ser otro estudiante mas, claro con el apellido Uchiha, pero un estudiante… a ser un joven empresario promesa.

Al entrar a lobby la secretaria me saludo, si la conocía, ella y yo bueno… jugamos un poco, nada serio, desde luego. Sonrió y me coqueteo, me pareció fatal, realmente vulgar, solo la ignore, y tome el elevador para llegar a mi destino.

Entre y como quise todos estaban esperándome, mi padre lucia enfadado, eso me gusto, sabia perfecto que yo no quería estar ahí, mi hermano estaba a su derecha, como siempre para variar, me adentre en la sala de juntas, y me senté justo frente a mi padre como siempre.

— Como siempre tarde — dijo serio en un Tono molesto.

— Hmp— murmure, sin interés.

— No cambias, Sasuke— dijo Itachi sonriente.

— Bueno, la razón de esta junta todos la sabemos ya, Itachi regresa a dirigir las empresas en este continente, y tu Sasuke regresas a Japón— dijo en voz alta— a dirigir las empresas de ese continente— menciono de ultimo.

¿Qué? Eso no era parte del trato, después de que Itachi regresara yo podía hacer lo que se me viniera en gana, no lo que el quisiera. ¡Maldición!

— De que hablas padre ¡eso no me lo habías dicho! — dije frunciendo el seño y alzando la voz.

— Pues así es, y así será —dijo levantándose de la mesa — Eres un Uchiha y eres mi hijo y mientras seas de mi familia aunque te pese harás lo que yo diga — dijo enfadado.

— ¡No te pertenezco! y ya soy mayor de edad, además nunca me dijiste que administraría esas empresas — dije levantándome y alzando mas la voz — Dijiste que podría hacer lo que se me viniera en gana.

— Sasuke, padre, por favor, me fui y ustedes peleando y regreso y siguen, ¿no habrá una forma con la cual no pelen? — dijo Itachi bastante tranquilo.

— Es tu hermano, el siempre me contradice — dijo apuntándome con el dedo.

— ¿Yo?, tu siempre me quieres controlar — Dije firme.

— Por favor Sasuke, solo hazlo, además, estando en Japón, estarás mas cómodo, y ya sabes… —dudo en hablar — Perdón padre pero, estarán lejos uno del otro, ¿eso es lo que quieres no? —dijo hablándome sincero.

— Hmp —me cruce de brazos, pues si era lo que quería, alejarme de Fugaku de una vez, la idea empezó a gustarme.

— Bien entonces eso se hará — dijo Itachi finalizando la pelea.

— Te iras el viernes, así el fin de semana te instalaras y en la semana ya estarás al frente de la empresa de Japón — dijo mi padre dándome la espalda y mirando por el amplio ventanal que había en la sala.

— Hmp, esta bien —dije de mala gana, la verdad volver a Japón después de dos años, me hacia sentir algo extraño en el estomago, nervios, tal vez, no se, pero sabia que quería ir.

— Bueno, esta hecho — dijo Itachi con cara de satisfacción.

Salí del lugar en compañía de Itachi, me dijo que apenas se estaba instalando y que iría a comprar algunas cosas, me perdí en la conversación… solo podía ver que articulaba algunas palabras que la verdad no me interesaron mucho, en mi mente solo podía ver mi casa, el colegio, mis amigos, y ella, de nuevo en mi mente. Llenando mis pensamientos de nuevo.

De pronto Itachi dijo algo que me regreso a la tierra.

— Y tal vez ya te encuentres a alguna chica que te quite lo amargado — dijo aguantando la risa.

— ¿Eh? —dije parando del golpe.

Me miro atento unos segundos, y después soltó una sonora carcajada, le mire extrañado y arque una ceja, ¿que le parecía tan gracioso?

— Entonces — dijo parando o tratando de parar de reír — Si hay alguien hermanito— dijo posando una de sus palmas en mi hombro.

— No se de que hablas— murmure y seguí caminando, sentí que me seguía y soltaba pequeñas risas bajas detrás mío.

— Eres mi hermano Sasuke, a diferencia de mi padre yo no te presiono, déjalo salir, dime ¿hay alguien que te guste? — dijo en ese tono amable y tranquilo que me enfurecía tanto.

— Tu te fuiste y el me obligo a venir aquí, dices no ser como el — masculle por lo bajo, tratando de ocultar la furia que me recordaba el que mi padre me controlara tanto.

— Sasuke, me fui por que el me mando, ¿crees que yo estaba feliz?, no termine la universidad, y tenia novia, que por cierto, me odia, yo también deje a mis amigos, a mi familia, a mama— dijo mirando al frente y arrugando un tanto el ceño.

— Pues si, pero tu puedes aguantarlo mas, yo ya no puedo, además a ti si te apoya, eres su favorito— dije mirando lo mismo que el y sintiéndome el mayor idiota del mundo.

— Bueno, bueno, cambiemos de tema, dime ¿como se llama? —dijo sonriéndome extrañamente amable.

— ¿Quién? —dije despreocupado.

— La chica que te gusta, y no me lo niegues — dijo riendo bajo.

— No hay chica —dije metiendo las manos en los bolsillos del pantalón y volteando hacia otro lado, escuche que reía de nuevo y voltee a ver su rostro, ¿De que reía tanto?

— Sasuke —murmuro mirándome, aguantando la risa —No te creo — dijo con una sonrisa en los labios y volviendo a mirar al frente en la calle.

No respondí y entre con el a un restaurant en el cual decidimos comer, después de pedir siguió con el interrogatorio.

— Ya dime Sasuke, no le diré a nadie, quien es la chica que te gusta, bueno no te pido nombres, dime como es, ¿es bonita? — dijo inquiriendo nuevamente.

Preciosa, pensé. — Nadie me gusta — dije serio mientras miraba por la ventana.

— Ah, ¿si? — dijo mirándome con picardía —¿Entonces por que te sonrojas? — dijo con una enorme sonrisa en la comisura de sus labios.

Voltee a verlo, mis malditas mejillas me delataban, ¿es enserio?, el reía a mas no poder de nuevo, rayos, ahora sabia de que reía tanto, bufe y trate de mirar a otro lado.

Tan solo con pensar en "alguien" que me guste, su rostro llegaba a mi, las imágenes de ella y yo… realmente me pregunto ¿será una estúpida obsesión?, solo pensaba ella, siempre.

¿Por qué?

— Ya dime — dijo mirándome despreocupadamente.

— No importa, ella me odia — al fin solté mientras miraba al mesero que se dirigía a nosotros con las bebidas.

-Hmp, entiendo… la enamoraste, la llevaste a la cama y luego no le volviste a llamar, como con las otras, ¿no? —dijo enumerando con sus dedos.

— No — bufe, enojado.

— Entonces, no entiendo, a todas la tratas igual… — se detuvo y su rostro se ilumino — ¡Ah!— dijo con sorpresa, — Con ella no pudiste verdad — dijo sonriendo de lado.

Pasaron unos minutos antes de que respondiera.

— En realidad… si pude — dije con una sonrisa asaltándome sin darme cuenta.

— ¿Y? — dijo el mirándome atento.

—Fue antes de saber que vendría, la conozco desde niños, nunca me pareció relevante, solo era una chica mas, ella me dijo que yo le gustaba, era bonita, pero la verdad jamás me intereso — dije aun sonriendo de medio lado — Es solo que, después de ella…— murmure frunciendo el ceño.

Era extraño pensar en sentir algo por ella, eso de los sentimientos no se me da, pero cuando pienso en sus ojos jade mirándome con esa dulzura que siempre cargaba y en sus mejillas llenas de color, tantos deseos de verla de nuevo me invaden, de tenerla cerca.

— Hmp, entiendo, pensaste en solo la cama, y terminaste… am no se — se veía dudoso en decir algo.

— No importa ya —dije cortante y mire nuevamente por la ventana.

Esa conversación se estaba tornando bastante extraña, yo no era mucho de hablar con Itachi, si bien era mi hermano siempre había algo que me separaba de el, al pasar a la adolescencia, jamás volvimos a tener una relación igual a cuando éramos niños.

— Bueno… pero Sasuke te diré algo, te conozco y jamás te había visto reaccionar así, piénsalo —dijo mirándome serio — Quizá estas ¿Enamorado?

Le mire inquieto.

Después de la cena, y varias preguntas mas por parte de Itachi, regrese a mi apartamento, la verdad sus palabras movieron algo en mi, llegando a Japón tal vez me gustaría verla.

Aunque quizá, que tal si tiene novio, o sigue odiándome.

Definitivamente no, no debería interesarme, seguro ya se olvido de mi y además como para que la buscaría, que le diría, no en definitivo no la buscaría.

Me sentía cansado, después de una ducha simplemente me arroje sobre la cama decidido a dormir, pero su imagen volvió a mi, sus labios rosados, sus mejillas sonrosadas, sus ojos jade, su delicado y femenino cuerpo sobre el mío, como aquellas pocas veces que durmió en mi cama.

¿Que es lo que causaba en mí?

Su maldita cara de inocente que se cargaba, sus característicos cabellos rosados, que soltaban ese aroma a cerezos en esa forma tan natural, sus labios, y cuando a pesar de su inocencia su cuerpo respondía al mío, su inexperiencia me encantaba, la manera en que temblaba en mis manos al tocarla, toda ella, definitivamente tenia la cara mas hermosa que haya visto en mi jodida vida, era diferente a otras mujeres bellas, su belleza no se ocultaba tras maquillaje, era natural, sencilla, eso me fascinaba.

Tal vez, si la buscaría.

Domingo, 16 de Julio de 2017, les informo que estoy retomando la edición de esta historia, que se encuentra terminada desde 2014, la cual cuenta con 23 capítulos.

A modo de advertencia, posiblemente verán un pequeño salto en la forma en la que escribo a partir del capitulo 11, en el cual empece a re editar, hablando de 2017, una disculpa de antemano. Espero subir un siguiente capitulo mañana. Una disculpa aún más grande por los años de abandono, si hay alguien ahí que me leía anteriormente, de verdad lo siento.

Dejenme un comentario, de verdad se los agradecería.

Besos, Clau.