NOTA: Los personajes de Inuyasha no son míos son propiedad de mi Rumiko bonita (para que luego no me demanden ¬¬) pero si fueran míos…. Pues lean y se darán una idea jeje.

AnGeLuZ YuMi: Hola!! Solo quería decirles que este fic lo hice por que el caso de Sesshoumaru y Kagura me recuerda al de mi Shishio y Yumi, ya que Sesshoumaru y Shishio son los hombres poderosos y a la vista de todos son fríos , pero cuando se tratan de Yumi y Kagura cambian su forma de ser (aunque Sesshy es un poco mas frió) En realidad se parecen mucho haber …Tienen Ayudantes (claro los de Shishio son mejor) digamos que Rin es como Soujirou siempre sonriendo y de buen humor y además son como sus hijos. Una espada aunque Sesshy solo la agite y ya, Shishio sabe usarla bien aunque no pueda destruir tantas cosas con ella con solo agitarla, Son los malos de la serie (Sesshy a veces se muestra bueno jeje) Tienen una mirada mortal (aunque súper sexy xD) y lo mas pero mas importante…su vieja…su amor…su mujer…ahuevo Yumi y Kagura (Yumi esta mas buena jaja)

Bueno también esta historia contiene algo de Lemon si!!! Así que están advertidos en leerlo, *pero no se hagan a todo el mundo se fascina el Lemon* así que no se hable mas (bueno lea) y empecemos con el fic =D.

Aclaración: En este fic digamos que yo no le corte el brazo a Sesshy, de acuerdo, así que todo su hermoso cuerpo esta completito.

"Entre El Y Yo, El Cielo Solo Tiene Nubes Negras"

---CaPitulo 1..Vive ---

El viento soplaba en dirección al oeste, la brisa era refrescante pero al mismo tiempo tétrica, el ambiente tenía algo extraño, no podía explicar que era, pero en su cabeza curiosamente miles y miles de cosas pasaban por su pensamiento.

La brisa se hizo más intensa y el frió comenzó a esparcirse por toda la región, pero daba la impresión de que el viento lo llamaba, como si quisiera decirle algo, sentía una gran presión en su pecho…como un mal presentimiento, estaba preocupado por algo, pero por que sería…era casi el mismo sentimiento que obtuvo cuando secuestraron a Rin…cuando ella la secuestró…cuando Kagura se la llevo.

Aunque el sentimiento no era exacto, ahora su preocupación era más grande y eso no lo dejaba pensar claro, a pesar de siempre se mostraba un rostro tranquilo y confiado, ahora lo que lo invadía era la duda. Esperó a que sus acompañantes durmieran, y por unos segundos observo a la pequeña Rin, era como un pequeño ángel, este ángel se acurrucaba en el dragón acompañante, así como el sapo que era jalado por ella para utilizarlo de almohada.

No paso mucho tiempo para que ellos quedarán totalmente dormidos, así que decidió salir a caminar por sí encontraba algo extraño, considerando que el viento seguía soplando creando un llamado en él, como si lo necesitará; por ende, no lo pensó y se adentro en el bosque donde descubriría lo que sucedía.

Ella seguía caminando mientras luchaba contra el fuerte dolor que su cuerpo le provocaba, luchaba para no quedarse varada en el camino, para no ser devorada por los demonios de esa región, lo único que quería era refugiarse, en una cueva, un lago lo que fuera pero quería que ese maldito no la encontrará. A pesar de que la sangre caía constantemente de su cuerpo ella no se rendía, tenía que alejarse mas de esos rumbos, pensó que tal vez por el olor de su sangre sería Inuyasha quien la encontraría primero, o tal vez el lobo de Koga, cualquiera menos el joven Youkai que le había robado el corazón, todos menos el…

Su olfato no lo engañaba, olía a ella, ese olor no podía ser otro, ese olor lo tenia impregnado en el cuerpo, en la mente y en el alma, solo podía ser la sangre de la ama de los vientos la que lo llamaba, así que pensando lo peor trato de apresurarse siguiendo ese olor lo que lo llevo a salir totalmente del bosque; sin demoras ya estando fuera, su buen olfato tenía que guiarlo hasta ella.

No soportaba ese dolor, la herida en su abdomen, en sus hombros, sus costillas, sus brazos la mataban, las heridas eran profundas, hasta le sorprendía que siguiera con vida, su vista comenzó a nublarse, ya no podía sentir sus piernas, su cuerpo ya no le respondía, su cuerpo le imploraba un descanso y no importaba en donde, pero tenía que hacerlo, así que soltando su abanico se dejo caer al suelo , pero con la poca fuerza que le quedaba trato de dar una última mirada para ver en que lugar exactamente se encontraba, y talvez así conocer el lugar de su tumba, conocer el ultimo lugar donde la soledad dejaría que muriera de una buena vez. Kagura ya estaba lista para dejar este mundo, pero sin estar conciente de lo que veía o imaginaba, una silueta muy familiar y un par de ojos ámbar se postraron sobre ella, un mirar extraño…

Se estaba volviendo loca, eso fue lo que pensó Kagura, pero aun así sus labios pronunciaron un nombre que la había hecho delirar varias veces en el pasado.

-Sesshou…maru…- fueron las últimas palabras de la Youkai antes de caer totalmente inconciente al suelo.

El Youkai tenía en la mira a la joven, estaba tendida en el suelo, la sangre recorría su cuerpo, sus hombros y su rostro eran el camino de la sangre que descendía rápidamente de su interior, no podría creer lo que veía, nunca la había visto tan herida ni tan indefensa, era irreal…Pero de pronto un extraño sentimiento surgió de él, tenía que protegerla… ¿la razón? Desconocida…

Así que simplemente la tomo en sus brazos y la llevo al campamento en donde se encontraban descansando Jaken y Rin.

Al llegar ahí, pudo ver que la pequeña Rin se encontraba despierta, simplemente jugando con una rama que contenía una pequeño caracol, al ver que su amo bonito había llegado, su rostro mostró una sonrisa de forma inmediata, pero al ver detalladamente lo que traía con el, su semblante cambio al ver a la lastimada Kagura cubierta de sangre, y casi como un reflejo arrojo la rama lejos de ahí para correr hacia ellos.

-¿Por qué sangra tanto Señor Sesshoumaru? ¿Qué le ha pasado a la señorita Kagura? – preguntaba la niña muy preocupaba y alterada.

-No lo sé Rin, pero despierta a Jaken para que vayan por más leña- Esas fueron las órdenes que le daba Sesshoumaru a la niña mientras recostaba a Kagura en un árbol torcido que estaba a poco metros de donde se encontraban.

Rin obedeció a su amo y de inmediatamente fue a despertar al sapo el cual no muy convencido sobre la idea de ayudar a Kagura, tuvo que obedecer las ordenes de su amo.

-Ay! Ah! – Se quejaba Kagura debido al enorme dolor que sus heridas le provocaban.

Sesshoumaru no podía explicarse como o quien llego a provocárselas, su olfato no le indicaba ningún olor fuera de lo normal, tal vez Inuyasha o Koga pero si ese hubiera sido el caso…despediría olor a Bestia.

La miro fijamente varios minutos, su respiración lucia agitaba, y su cuerpo temblaba en reacción al frió y a sus heridas. Sesshoumaru coloco su estola sobre Kagura al predecir que su estado empeoraría gracias al frió.

Por unos instantes, su corazón latió de manera distinta, como era posible que su Kagura pasará por tan malas condiciones… ¿Era qu…Pero que estaba diciendo ¿su Kagura? No…ella ya tenía un dueño, claro al cual detestaba, pero ella estaba totalmente atada a el, y no había nada que el pudiera hacer, bueno más bien nada que el por ahora quisiera hacer.

Dejo de pensar un momento en ello y se dedico a observar a Kagura, a pesar de estar herida aun conservaba ese rostro lleno de seguridad, una de las cosas que mas le atrajo de ella, su carácter era fuerte, ella era una de sus mejores oponentes, y jamás se dejaba vencer, así que no podía explicarse la situación actual.

El Youkai se acerco más con el fin de tocar su rostro con su mano derecha, su mejilla estaba fría, casi sin vida, por lo que con su otra mano libre tomo la mano de Kagura, lo que provoco una reacción casi natural en ella al apretar la mano de él, con el fin de acurrucarse en la mano que sujetaba su mejilla, Sesshoumaru se quedo anonadado y al mismo tiempo maravillado por aquello.

-Señor Sesshoumaru! – Un grito rompió sus pensamientos, así como la acción anteriormente realizada.

-Señor Sesshoumaru, el señor Jaken y yo trajimos mucha leña y medicinas de la aldea que está cerca de aquí, también trajimos un poco de comida que una anciana nos regalo, porque dijo que era una niña encantadora – dijo la niña con una sonrisa en su rostro.

Sesshoumaru sabía que la medicina humana no serviría de mucho, era buena sin duda, pero no confiaría en los métodos humanos para la vida de un Youkai.

-Ve con Jaken al rió de los Hurakis, y traigan las hierbas Hikiris – Fue la orden de Sesshoumaru.

-Pero Señor Sesshoumaru, las hierbas Hikiris son un regalo para uso exclusivo para su familia, no es posible que piense usarlas en esta…mujer, además existen muchos tipos de hiervas Hikiris. – Interrumpió el sapo algo molesto, al escuchar la conversación.

-Jaken!-

-Ah… si Amo Bonito?- Pregunto nervioso.

-HAZ LO QUE TE ESTOY DICIENDO Y DEJA DE HACER COMENTARIOS ESTUPIDOS!!- Dijo algo alterado el Youkai.

-OK, OK, amo y que hierba desea?– preguntaba un asustado ayudante.

-La roja – dijo fríamente el Youkai.

-Esta bien, amito, iré en seguida, vamos chiquilla!!- Ordenaba Jaken.

Jaken y Rin, salieron en el lomo del dragón, por lo que Jaken sabia que tenian que ir deprisa, ya que el tono de Sesshoumaru era más severo de lo que normalmente era. A pesar de no apreciar a Kagura, aparentemente era el único del grupo al que no le agradaba su presencia, Rin era la que mas afecto le tenía, pero ahora Jaken se cuestionaba si su amo podría tener algún tipo de aprecio, tomando en cuenta las circunstancias su amo Sesshoumaru jamás había actuado de esa manera, era realmente perturbador el hecho de que permitiera que alguien más se acercara a Rin y sobre todo después del secuestro. Pero eso no lo era tan importante ahora, si no conseguir las hierbas, porque si no lo hacia, talvez la única muerte no sería la de la ama de los vientos.

Sesshoumaru veía como a lo lejos sus compañeros desaparecían en busca de las hierbas que servirían para mejorar la salud de Kagura. Ahora lo que tenía que hacer era concentrarse en aplicar las medicinas de los humanos que Rin había traído, a pesar de su falta de confianza en las mismas el estado de Kagura era critico para empezar a dudar de la capacidad humana.

El conocimiento de Sesshoumaru sobre la medicina humana, era nulo, solamente había visto como era que los cazadores la usaban para las heridas provocadas por los demonios, pero jamás había experimentado la curación de alguna de ellas. Sabia que la única forma de hacerla era untar sobre Kagura ese gel extraño, lo que significaba…tocarla...

La idea era extraña para él, pero al ver que la respiración de la mujer aun lucia agitada, decidió aplicarla el mismo, tenía que hacerlo ya que no sabia si los demonios dejarían que fuese una tarea fácil para Jaken y Rin.

Sus dos dedos se llenaron del gel que había sacado del pequeño bote, era algo espeso, sabia que se usaba para las heridas superficiales, y al ver el rostro de Kagura con ese terrible golpe, no hizo que el dudara, así que solo se acerco a menos de un medio metro de Kagura, se inclino un poco y suavemente unto el gel en el rostro de la mujer.

Una sensación fresca recorrió su espalda, en verdad que su rostro era suave, y a pesar de los golpes mantenía su gran hermosura, en su vida había sentido algo tan suave ni tan delicado, en las diversas ocasiones donde tuvo contacto físico con ella, no pudo aprovechar la oportunidad de tocar su rostro, varias veces solo toco sus manos y rozo sus hombros, recordando así la vez que tuvo la oportunidad de tomarla en sus brazos para protegerla del lobo Koga, aunque en esta ocasión las circunstancias no eran prometedoras y su vida peligraba, el leve pensamiento sobre el anhelo de observar sus ojos abrirse por la luz natural del nuevo día recorría su mente.

AnGeLuZ YuMi: Hola!! Bueno esta es la primera parte del fic, así que en los próximos descubriremos porque Kagura esta gravemente herida, y porque no quería encontrarse con el guapo Sesshoumaru, y bueno el Lemon aun no será revelado jaja entiéndanla esta herida U.u

ESTE FIC ES 10000000000 % MEXICANO como yo.