Esta historia no me pertenece, sólo hago la traducción.
Los personajes pertenecen en su totalidad a Stephanie Meyer.
Esta historia esta re-escrita por una amiga de la escritora original, quien esta actualizando esta historia es DawnVisions. Pueden encotrar la historia en Inglés en mis favoritas.
Sólo llevan publicados 4 capítulos, de los cuales llevo traducidos la mitad, al ser una re-escritura de historia, son bastantes largos pero muy entretenidos.
La historia original tenía 63 capitulos, hasta donde la autora Meilzdoggg01, decidió abandonarla, ya que al final de su último año de secundaria sintió que la historia no se dirigía hacia donde quería, la historia cambiaba constantemente la trama y tenía giros bastantes inesperados. Pero como el argumento fue bueno, en vez de abandonarla, la cedió para que hagan de ella algo mejor, y ciertamente esta sucediendo.
No las aburro más.
Descripción: Cuando Bella Swan se mudó a Forks, nada la habría preparado a ella para acostumbrarse a vivir con los excesivos gastos de los Cullen o a su protectora naturaleza, especialmente sobre ella. Tampoco podría haber evitado enamorarse Edward Cullen, desde el primer día. M/AH/OOC
Esta historia puede contener situaciones, vocabulario y acciones no recomendables de leer para menores de 18 años. Que lo hagan, corre ya por cuenta de cada uno.
Capítulo 1 : Encuentros Casuales
BPOV
Los primeros días en las escuelas nuevas son siempre iguales; el chico audio visual obsesivos que atrapa y acompaña por el campus a la nueva víctima, acompañándola a los almuerzos y ofreciéndole un hombro para llorar.
Es mi primer día en la Secundaria de Forks, mi madre, René, salió en un viaje con su novio Phil, un jugador de ligas menores de baseball. No era justo que ellos tengan que estar siempre preocupándose por otra persona, y quería darles un descanso. Así que fui contra todo lo que siempre dije, acerca de odiar este pequeño pueblo. Ignoré la voz en mi cabeza que gritaba en protesta por mi decisión y aborde el avión hacia Forks
Charlie, mi padre, el jefe de policía y yo, nunca hablamos demasiado. Supongo que podrían llamarnos "Ermitaños Sociales". Es una descripción bastante acertada. Pero, créanlo o no, tan incómodo y triste como pueda sonar, lo prefiero de ese modo. Nunca he sido esa que está robándose la atención, más bien soy la que está siempre sentada atrás; nunca sobresaliendo en nada, pero tampoco inferior.
Siempre fui una buena estudiante; buenas notas, nunca trasnoché y siempre hice mis tareas. Incluso, estoy en un par de clases avanzadas. Nada muy cerebral. Sólo lo necesario para que mis aplicaciones a la universidad sean mejores
Fue muy duro dejar Phoenix; sabía que extrañaría muchísimo. No porque el clima es más confortable en Phoenix, es solo más… apropiado para mi. Forks es uno de los lugares más húmedos y fríos en los que estuve en mi vida; y mi equilibrio y coordinación, dejan mucho que desear. Así que no estaba necesariamente buscando por hielo y nieve. Peligrosas, resbaladizas trampas mortales.
El problema con Forks (junto con otra gran cantidad de cosas) es el hecho que cuando nieva, no es lo suficientemente frío para que los copos cristalizados lleguen al suelo, como en las partes más frías de Europa. Nop, en cambio, es nieve húmeda que se mezcla con la lluvia, que cae en el suelo salpicando y haciendo charcos de agua por todas partes. Luego, más tarde, cuando se pone más frío, el agua se convierte en hielo.
Renée tuvo que ordenar un par de botas especiales 'extra seguras' para hielo y nieve para mi. No sería nada menos que un milagro si me las arreglara para mantener intactos todos mis miembros durante la primera semana.
Nunca fui de poner demasiado esfuerzo en mi apariencia. Así que me puse unos comunes jeans, una remera de mangas largas blanca, con mi chaqueta negra encima. No hay necesidad de mencionar que me calcé mis botas extra seguras para completar mi atuendo.
Luego, más rápido de lo que esperaba, estaba sentada en mi Chevy – la cual me compró Charlie como regalo de bienvenida – en el estacionamiento de la escuela; y lentamente encontré el coraje para salir y caminar con confianza ( o no) hacia la secundaria de Forks.
Respiré profundamente y abrí mi puerta, y con cuidado me asomé al pavimento; Agarrándome de la camioneta, una mano en el techo y la otra en la parte superior de la puerta y con mucho cuidado puse mis pies en el helado camino.
Retrocedí para cerrar mi camioneta y me volví haciendo mi camino hacia el gran cartel que rezaba 'RECEPCIÓN'.
Cuando entré en la pequeña oficina, vi a una pequeña mujer sentada en un escritorio, tipeando furiosamente en su decrépita computadora que estaba prácticamente zumbando por el esfuerzo. Aclaré mi garganta, y me moví un poco para atraer su atención. Funcionó. Ella desvió la mirada de su ordenador y me moví detrás del escritorio, sus ojos se abrieron un poco más y se ajustó las gafas que estaban cayendo por su nariz, con una seguridad que pareció presionarlo directo a sus ojos.
"Umm, Hola", dije con nerviosismo, esperando que mi voz no temblara, odiaba presentarme a mi misma, "Soy Isabella Swan, acabo de mudarme aquí desde…"
"Phoenix, Arizona. La hija de Charlie, ¿no?" Abrí mi boca, como para decir algo, cuando ella continuó abruptamente, "¡Claro que eres tú! Tienes los mismos ojos, Podría decir que eras tú con un kilómetro de distancia".
Ella estaba prácticamente sonriendo de oreja a oreja; le dí una sonrisa por respuesta.
"Es un placer conocerla, Señora…"
"Cope, Sra. Cope", me entregó dos trozos de papel y un pequeño adhesivo con mi nombre en él, "Este es tu horario de clases, un mapa del colegio y un adhesivo con tu nombre, lo lamento querida, pero es sólo por hoy. Espero que tengas un lindo primer día y déjame ser la primera en decirte 'Bienvenida a la Secundaria Forks'."
Le agradecí cortésmente y abandoné la habitación.
No había caminado 3 metros en el hall cuando lo ví.
O mejor dicho, lo 'oí', creo. El estaba deteniendo chicas al azar en el pasillo preguntándoles por Isabella Swan. Gemí internamente. Este era el tipo de chico que mencione anteriormente, el audio visual. Decidí darme la vuelta y moverme en otra dirección, cuando sentí una presencia detrás de mí.
"¿Isabella Swan?"
"No, lo lamento, debes estar equivocado." Me giré para continuar mi dirección cuando él me detuvo con una mano en mi brazo.
"¿Estás segura que no eres Isabella Swan?" su tono era condescendiente, no me gustaba.
"Positivamente"
"Entonces, ¿Por qué estas usando un adhesivo que dice 'Isabella Swan', si ese no es tu nombre?"
Maldición. Lo había olvidado. Sólo quería salir de allí. Tan discretamente como pude, me arranqué de mi remera el adhesivo con mi mano libre y lo arrugué, metiéndolo en mi mochila que estaba en mi hombro.
"Oh,...umm" Empecé a pensar rápidamente, esperando que pueda encontrar una adecuada excusa lo más rápido posible, cuando él me interrumpió.
"Mi nombre es Newton, Mike Newton". ¿Quién demonios se creía que era? ¿James fucking Bond? Estaba empezando a asustarme. Sus dientes tenían una leve coloración amarillenta y su pelo lucía como si no se lo hubiera lavado en por lo menos un mes…o más. "Te he estado buscando" El radar de acosadores estaba al máximo. ¿Qué voy a hacer si algo pasa?¿debería correr?. Él continuó. "Sólo estaba pensando si podría mostrarte toda la escuela hoy, podemos almorzar juntos, incluso podría cargar los libros por ti." Este no era el chico audio visual común. Este era seriamente uno muy trastornado. Era hora de actuar.
"Uh… Gracias Mike, lo aprecio, pero tengo un mapa y además hoy estaré dejando la escuela para la hora del almuerzo" Eso era fue lo suficientemente sutil,¿cierto? No muy Obvio.
"¡Seguro!, sin problemas. ¿A dónde quieres que vayamos?" hice una mueca de horror, este chico era ¡ín-cre-i-ble!
"Emm, Mike, quise decir YO sola. Necesito parar en casa y recoger algunas cosas de todas maneras. No quisiera importunarte." AHORA SI. Esperaba no estar no siendo demasiado dura.
"Puedo ir. Me encantaría – no amaría – ver tu habitación." QUE. DEMONIOS. Estaba empezando a enfadarme ahora sí.
"Si… No Mike. Está bien. Enserio"
"No, no lo está. Quiero ir contigo." El tomé mi muñeca y trato de enlazar mis dedos con los suyos. Cerré mi mano en un puño, y traté de soltarme.
"No. Mike."
"Oh, vamos, Belly. Tu sabes que tambien lo quieres" Su putrefacto aliento dio de lleno en mi cara dándome arcadas. Ya no sabía como iba a salir de esto. El pasillo ya estaba vacío, los demás estudiantes lo había dejado para entrer en sus primeras clases y yo estaba aquí estancada con 'aliento de vómito' respirando en mi cara.
"Mike, déjame ir." Sus ojos brillaban.
"No."
"Mike, enserio. No estoy bromeando." Él se puso aún más cerca de mi, su apretón en mi muñeca se hizo más intenso y más fuerte. Dejé salir un pequeño gemido y él apretó incluso más fuerte. Mi primer día de escuela, e iba a tener mi primer moretón, y ni siquiera iba a ser mi culpa. ¿Qué más iba a hacerme? No pude evitar el pequeño llanto que escapó de mis labios.
"NEWTON" ¿Qué demonios crees que estas haciendo? Estaba demasiado aterrada para ver de donde provenía el furioso grito. Tal vez era alguien que también quería lastimarme, no podía moverme, no podía hablar. Lentamente, la mano en mi muñeca desapareció, quise tomar un poco de aire para aliviarme, pero el aire no podía calmarme en lo más mínimo.
"¿Que es lo que quieres, Cullen?" Su tono era furioso.
"Déjala en paz."
"¿Perdón?"
"Te. Dije." Él empezó a pronunciar cada sílaba, como si Mike fuera discapacitado mental. Pensándolo bien ahora, probablemente lo era. "Déjala. En. Paz."
"No." Pero contrario a sus palabras, Mike, dio un paso hacia atrás, luego otro, y otro. "Vas a arrepentirte de esto, Cullen" Se burló.
"Lo Dudo, Mike, lo dudo mucho. Ah y apropósito, mi nombre es Ed-ward. Tu puedes decirlo, lo sabes. E-d-w-a-r-d." Mike lanzó un bufido y salió corriendo por el pasillo y luego por una puerta.
Me sentía mareada, mi cabeza daba vueltas y el frío piso empezó a acercarse a mi rostro. Eso fue hasta que sentí dos brazos alrededor de mi cintura.
"Epaa!.. Hey! Creo que estas un poco asustada. Tal vez deberías sentarte, la cafetería se encuentra a unos metros de aquí. Consigamos algo para que comas." Asentí con la cabeza y el mantuvo uno de sus brazos en mi cintura y el otro en mi brazo, para mantenerme equilibrada. No pude decir que no, estaba demasiado avergonzada de lo que había ocurrido con Newton. Me burlé de su nombre en mi cabeza.
Me sentó en una de las sillas y se dirigió hacia una de las expendedoras de café. Volvió a los pocos minutos con una bandeja. Había en ella 2 cafés, jugo de manzana y una ensalada de frutas. Miró un poco incómodo. Mordí mi labio inferior en anticipación; espero que no se haya arrepentido de haber detenido a Mike.
"Um.. Yo.. Um, no sabía que es lo que te gustaba." Me relajé un poco y sonreí. El apoyó en la mesa la bandeja y acercó el jugo, el café y la ensalada de frutas hacia mí.
"Gracias", tomé el jugo de manzanas y tomé un pequeño sorbo.
"Bella, acabas de tener un colapso. Por favor… por favor salva mi cordura y toma un poco más de azúcar."
Él abrió el pote de ensalada de frutas y me lo acercó, junto con un tenedor. Pinché un trozo de manzana y la puse en mi boca. Mastiqué lentamente, mientras pensaba que era lo próximo que iba a decir. Tragué lo que tenía en mi boca, y luego tomé otro sorbo de jugo de manzana, ahora más largo, y volví mi atención hacia él.
"Asi que… Presumo que ese chico Mike, no es la mejor compañía." Miré su rostro y estuve segura de ver un dejo de ira en sus ojos antes de que el pudiera controlarse. "Ajam…" dijo secamente. "Presumes bien. ¿Qué estabas haciendo con él de todas maneras? La mayoría de las chicas saben que deben alejarse de él. ¿Te gusta jugar con fuego?" Su tono era raro, incluso cuando trataba de ocultarlo, podía ver a través de su fachada.
"No lo sabía. Mi nombre es Isabella Swan. Me mudé este Sábado, ¿conoces a Charlie Swan,el Jefe de Policía?" El asintió. "Soy su hija" Estaba a punto de continuar, cuando una pequeña y casi invisible sonrisa se esparció en su rostro.
"¿Qué?" Estaba confundida.
"Nada, no es nada… sólo que, tu eres la hija del Jefe de Policía, y no llevas contigo un spray de pimienta? ¿Debe ser la primera vez, no?" oh .ja. Es uno de los graciosos. Uno de los lindos también. Sé que no lo conozco de hace mucho pero como puedo dejar escapar la perfección de mis ojos! No puedo creer como nunca me di cuenta como su desordenado cabello broncíneo caía sobre su cara antes. Lo profundo de sus ojos verdes, que sientes que podrías haberte ahogado en ellos sin nada o nadie quien pueda detenerte. Mis ojos viajaron más abajo pasando por su perfecta nariz hasta sus labios. Desearía poder… Bella! Detente. Demasiado Lejos. Dejar que tu mente te lleve un poco más allá, ¿por qué no? No me di cuenta que estaba esperando una respuesta de mi, hasta que aclaró su garganta. Volví mi vista hasta encontrarme con su mirada.
"¿Bueno..?" dijo.
"Bueno ¿Que?"
"¿Que estabas haciendo con Newton?" Sus ojos ardían en los míos.
"Yo sólo, estaba yendo a mis clases y él estaba preguntando a otras chicas por mí, si me conocían. Entonces cuando me dí la vuelta para evitarlo, Él ya estaba a mi lado. Antes de tener la oportunidad de sacarme el adhesivo con mi nombre y poder salir corriendo. Traté de irme, pero luego él ya no me soltó." Edward dejó salir un bajo gruñido que escapó de su garganta y logré oír algo que murmuró entre lineas, que sonó como 'Necesito decírselo a mis hermanos. Nada bueno.' Esperé a que él diga algo, cuando me di cuenta que a su vez el esperaba lo mismo de mí. Así que tomé las riendas.
"Entonces..., ¿Aún vas a presentarte?"
Él parpadeó, confundido.
"Lo siento. Soy Edward Cullen. Vivo aquí, en Forks, desde hace 4 años, con mi madre Esme, mi padre Carlisle y mis hermanos adoptivos. Ellos son Emmet y Jasper... y sus novias son Rosalie y Alice."
"oh." No sabía que decir, pero no estaba preparada para decirle adiós todavía. Terminé mi ensalada de frutas y mi jugo de manzanas y acerqué el vaso de café hacia mi. "Y, ¿tus hermanos también están en esta escuela?"
"Así es. Rosalie y Emmet están en su último año. Y Jasper, Alice y yo estamos en el penúltimo año."
"Me encantaría conocerlos" Dije con honestidad. Si sus hermanos son tan buenos como él, estaba segura que no tendría problemas con ellos. Pero, un momento, ¿que tal si él no quiere que los conozca?¿Que tal si sólo quería que saliera de mis mareos para que vuelva a hacer lo que estaba haciendo antes de que yo y mi magnetismo al peligro llegara a Forks? Me sentí mal otra vez. Pero esta vez no era por el aliento vomitivo. Era por mi inseguridad y vergüenza. Sentí sus ojos en mi rostro y no quise mirarlo. El suspiró.
"Bella, ¿En que estas pensado?"
"¿Qué quieres decir?" Mantuve mi mirada en mi café.
"Por favor, Bella... Es muy frustrante cuando estas tan callada. Mírame." No lo hice. Sentí su tibia mano acomodarse debajo de mi mentón, elevándolo para que mis ojos se encuentren con los suyos. Lo miré mientras sus penetrantes ojos se fundían con los míos. Antes de que pueda desviar mi mirada, sentí un cálido sonrojo subiendo por mis mejillas.
Genial. Perfecto. Ni siquiera puedo mirarlo a la cara sin sonrojarme. Su mano cayó de mi mentón y me miró con una expresión perpleja.
"¿Te estas sonrojando?"
"A falta de costumbre..." Murmuré casi incoherentemente y puedo decirte que estaba luchando internamente para no tener una sonrisa en su rostro.
"Por cierto, " agregó, "Me encantaría que conozcas a mi familia." Sonreí y estaba prácticamente haciendo un baile interno en mi cabeza. Que ridículo, "Pero por ahora, probablemente deberíamos salir de aquí, la cafetería querrá tener todo listo para el almuerzo. Deberíamos irnos." Asentí en acuerdo y nos paramos, tiró en el tacho la basura y dejó en una pila la bandeja. Ni siquiera tuve oportunidad de objetar nada. Caminamos lentamente fuera de la cafetería y nos detuvimos cuando llegamos a la puerta principal. Me giré hacia él.
"¿Y ahora, que?"
"Bueno, ¿Que quieres hacer? No creo que sea una buena idea..." Secretamente, no estaba en contra de saltarnos algunas clases, tengo buenas notas, pero a pesar de que amo volver a ver las cosas que ya se, no era exactamente lo que mas deseaba hacer. Pero tenía curiosidad de porque no debería ir a clases, según él.
"Mike está allí"
"Oh." Seguramente había además muchas otras razones por las cuales no quería ir a clases.
"Y no quiero que estés en ningún lugar cerca de Él." Sonaba algo vicioso cuando dijo 'él'.
"Protector, ¿no?" Le pregunte con una tímida sonrisa. Su sonrisa por respuesta fue peligrosa.
"Sólo de las chicas nuevas de Phoenix que no pueden protegerse solas" Fruncí mi ceño y su sonrisa se hizo más pronunciada.
"Está bien. Suficiente. ¿Que quieres hacer entonces?"
Estuvimos dando vueltas por el campus por un rato y cuando le pregunte a Edward si estaría bien para la escuela, si iba a cas para el almuerzo y me quedara allí, el estuvo de acuerdo con gran entusiasmo. Estaba caminando hacia mi camioneta, cuando sentí sus brazos, una vez más, alrededor de mi cintura.
"¿A. Dónde. Te. Crees. Que. Vas.?" Sólo lo miré con el ceño fruncido, podría encenderme en él.
"Em. A. Casa. Tu Sabes. C-A-S-A, en mi 'vrrroom, vrrooom'."
No pudo detener la sonrisa que apareció en si cara e hizo que sus ojos brillaran.
"Emmet va a amarte. Por Cierto, esa camioneta, ya no hace 'vrroom vrrooom', hace 'chugga chugga', la oí esta mañana"
"Cállate, Chev tiene personalidad."
"¿Chev?" Dijo arqueando una ceja. Maldición.
"Bueno, es un Chevy. Chev parece un buen nombre", dije tímidamente. Se echó a reír y yo solté un bufido y comencé a caminar hacia la puerta del acompañante de mi camioneta, cuando volví a sentir esas malditas garras de acero detenerme una vez más.
"Edward, si no me dejas entrar en la camioneta, ¿Cómo voy a llegar a mi casa?"
"Te voy a llevar a casa. En mi Volvo." Respondió sin vacilar "No voy a dejar que alguna de tus ruedas patine, que te suceda algo más terrible aún. No podría perdonármelo." La última oración la murmuró para si mismo y luego hubo un silencio. Entonces algo hizo un clic en mi.
"Espera un segundo. Mañana. ¿Como llegaré a la escuela, mañana?" sus rasgos se aligeraron un poco.
"Bueno, puedo pasar a buscarte en la mañana temprano, de esa manera no tendré que preocuparme de salvarte de alguno de esos… tarados que quieran salirse con la suya contigo."
Miré aún lado, escapando de su mirada y me sonrojé otra vez. No era la esencia de lo que había dicho, eso era serio. Pero la última parte. Nunca he tenido un novio, nunca fui besada por eso, y que Edward hablara de 'querer salirse con la suya conmigo' o incluso queriéndome… parecía absolutamente ridículo.
"Está bien. ¿dónde está tu auto?" Él me sonrió y comenzó a caminar a través del estacionamiento.
Cuando llegamos hasta su estúpido y brillante Volvo, abrió la puerta del acompañante y en cuanto me deslicé dentro; entró en el asiento del conductor y encendió el motor. Estuvimos fuera de la escuela y en el camino hacia la entrada de la casa de Charlie antes de darme cuenta. Edward manejaba rápido.
Salió del auto y me abrió la puerta del pasajero por mi. Estaba empezando a lloviznar un poco, así que Edward se aseguró de que llegue segura hasta la puerta de mi casa. Aparentemente mi 'equilibrio y balance' dejaban mucho que desear. Vaya… me pregunto dónde he oído eso antes… No lo sé.
"La escuela comienza a las 8:30 am., mañana; así que... ¿te paso a buscar a las 8 am?" Me sonrió amablemente, pero pude ver un destello de malicia en su mirada. Él va a conseguirlo uno de estos días.
"Claro, me parece bien. Charlie estará en el trabajo para ese momento y tu tienes mi número, sólo me mandas un mensaje si algo va mal y tengo que caminar." Él pareció irritarse.
"Créeme, Bella, estaré aquí para las 8 am mañana, motor encendido, puerta del acompañante abierta. Sólo para Tí"
Sonreí. "Okay, Nos vemos."
Me observó mientras abría la puerta de la casa y entraba cuidadosamente en ella, antes de volver a encender su auto. Nos saludamos desde las ventanas. Luego su auto desapareció.
EPOV
Desperté más temprano de lo usual a la mañana siguiente, simplemente un resultado de haberme ido a dormir demasiado temprano. Bajé a la cocina para lentamente prepararme mi desayuno y luego volver arriba para cepillar mis dientes y vestirme.
Me tomé el tiempo para darme una ducha y me puse mis jeans oscuros, un puollover beige y mi saco negro. Pero aún tenía una hora y media por matar antes de ir a buscar a Bella. Excelente. 90 largos minutos para enloquecerme. Cuando llegue a casa después de dejar a Bella, no pude parar de pensar en ella. Su rostro y el tiempo que pasamos juntos ayer, se repetía en mi cabeza una y otra vez, como una película. Ni siquiera podía recordar en que estaba pensando antes de que Bella entrara en mi vida. Me recuerdaba a un fragmento de 'Cumbres Borrascosas':
'He soñado en mi vida, los sueños que se han quedado conmigo, y han cambiado mis ideas, y se han infiltrado en mi, como el vino en el agua, alterando el color de mi espiritu'
Bella es ese sueño. Ella está siempre en mis pensamientos, como el más dulce de los vinos mezclado con agua.
Antes de irme a dormir, no pude dejar de pensar en ella, en su rostro formándose en mi mente. La mirada de ayuda que tenia en su rostro cuando Newton la tenía atrapada. El modo en que se muerde suavemente el labio inferior cuando está pensando en algo. Como mueve sus largas ondas de cabello marrones sobre sus hombros para ocultar ese encantador rubor rosado en sus mejillas, cuando tomé su cara para que me mirara. Sus hermosos ojos marrones, que parecían fundirse en los míos.
Todas esas cosas acerca de ella, no podía sacarlas de mi mente.
Cuando mis hermanos y hermanas estuvieron en casa, Emmet me preguntaba una y otra vez por que estaba tan distraído, no quise dar explicaciones, así que me disculpé con todos, saltándome la cena y fui a mi habitación, murmurando algo sobre una tarea para Biología.
Traté desesperadamente de trabajar en la tarea de esa materia, pero no hubo caso. Cada vez que pensaba acerca de la escuela, el rostro de Bella aparecía otra vez en mi mente. Era ridículo, pero rápidamente abandoné mis cuadernos y me recosté en mi cama, sólo pensando en Bella.
¿Qué era lo que había hecho conmigo? Sentía como una inútil lucha el tratar de alejarla de mi mente. Nunca había pensado tanto en una chica. Ella era sólo otra chica, una más ¿no?
Sólo lo pensé 3 segundos y lo descarté. No. Ella no era sólo otra chica. Tenía tantas cualidades seductoras que no podía olvidar ni quería hacerlo. Quería hacer una lista de ellas.
Si ella me dejara hacerlo. Esa era la verdadera pregunta. ¿Me querría ella a su lado? No parecía descontenta en que la haya dejado en su casa ayer o en que la pasara a recoger esta mañana. Sólo quería mantenerla a salvo.
El sólo pensar que Mike Newton podría alguna vez lastimarla, o incluso tocarla otra vez, era más de lo que podía soportar.
Emmet, Jasper, Alice y Rosalie, ya habían salido hacia la escuela, asique estaba esperando al pie de las escaleras a que el tiempo pasara. Finalmente, no pude soportarlo más. Tomé mis llaves del gancho donde estaban colgadas, salí por la puerta principal y me subí a mi coche. Eran las 7:48 am; sólo 12 minutos más antes de llegar a la casa de Bella. Conduje hacia la Cafetería que estaba calle abajo y compré 2 cafés con Leche y vainilla, luego subí a mi auto y comencé mi camino hacia la casa de Bella – más rápido de lo normal, - debo agregar, probablemente a causa de mi ansiedad.
Me estacioné en el asfalto frente a su casa a las 7:59, dejando el motor encendido, salí y abrí la puerta del acompañante. Me recosté en el costado del auto, esperando que ella saliera de la puerta de su casa.
Traté de eliminar todos los pensamientos negativos de mi mente, si nada más podría funcionar, todavía podríamos ser amigos. Obviamente, quería mucho más que eso. Ser su protector, su mejor amigo… e incluso, su ¿amor? No puedo creer que estoy pensando así. Recién he conocido a la chica, seguramente no debería ser todo tan rápido ni tan fuerte…
Estaba reflexionando cuando la puerta principal se abrió, y la chica de mis sueños caminó cuidadosamente y descendió los escalones del frente de su casa, caminando hacia mi auto. Sonrió y noté un poco de color en su rostro cuando hice un gesto hacia mi auto y la puerta abierta del pasajero con una mano y una gran sonrisa en mi rostro.
"Hola Edward" Oh por favor, di mi nombre otra vez. "Gracias por buscarme esta mañana. Lo aprecio mucho" Dijo tímidamente, no hay necesidad de mencionar que me encantaría continuar con esta rutina de aquí hasta que terminemos la secundaria.
"Eres más que bienvenida, sube, hay un café en el sostenedor, si quieres…" Estúpido Edward, ella probablemente ya ha tomado una gran taza de café en la mañana con su desayuno, es lo que la gente normal hace.
Ella entró en el auto y me apuré al dar la vuelta y llegar al lugar del conductor. Ella tomó su café, lo destapó y aspiró su aroma, antes de cerrar sus ojos y dejar aparecer una pequeña sonrisa de satisfacción. Esta chica iba a volverme loco.
"Gracias. Nos quedamos sin café esta mañana y esto huele delicioso." Ella abrió sus ojos y me dio una tímida sonrisa antes de poner el vaso de café en sus labios.
Esos... hermosos...deliciosos labios. Le sonreí en respuesta y comencé a conducir hacia la escuela. Todas las preocupaciones del principio se fueron, comenzamos a hablar acerca de Phoenix, como eran su madre y Phil, sus intereses y ese tipo de cosas que la hacen única.
BPOV
Continuamente, Edward me hizo preguntas en el camino hacia la escuela; asombrado de que mi materia favorita sea Historia Antigua e impresionado de que asista a las clases de Biología Avanzada.
Estaba realmente sorpendida de verlo estacionado en mi casa a las 8:00 esta mañana, pero tal vez él sea diferente a los demás chicos que conocí en Phoenix. Estaba muy feliz de no haber estado nunca en una relación, ellos parecían una pérdida de tiempo. No puedo recordar cuantas veces tuve a mis amigas llorando en mi hombro y preguntándome cuan patéticos e irresponsables podían resultar sus novios.
Tal vez…, y sólo tal vez, Edward Cullen sea diferente. Desde luego, él hizo su papel de dulce, cariñoso, hermoso Dios Griego y caballero. Sé realista Bella. Nunca se interesará en Tí. Entiéndelo ahora. Decepcionada con cómo me las arreglé ayer para avergonzarme y enredarme con Mike Newton y, a continuación le obligue a recogerme hoy, realmente no quise darle más de mi charla sin sentido.
Nos sentamos en silencio durante el resto del trayecto a la escuela y cuando entramos en el estacionamiento de la escuela, salió y dio la vuelta para abrir la puerta. Cuando estuve fuera, caminó más cerca de mí y pasó su mano por detrás de mi espalda. Sentí mi respiración cortarse mientras el familiar color rojo subía por mis mejillas. Continuó pasando su mano y luego se acomodó, dejando su mochila sobre sus hombros.
Tu, tonta Bella.
Se dió vuelta y me miró, sabiendo el efecto que tenía en mi. Cerré la puerta del acompañante y comencé a caminar hacia la puerta principal del edificio, con Edward caminando lentamente a mi lado. Mi tranquilo paso pareció no molestarlo, y entonces algo me sacudió. Un pensamiento pasó por mi mente y me sentí culpable, entonces me detuve.
"Edward," él se detuvo y me miró otra vez, "no tienes que escoltarme por todo el campus otra vez. Estoy segura de saber dónde se encuentra todo." Él tenía una expresión confusa en su rostro y yo miré al piso, "No quiero molestarte más, ya te hice perder tus clases ayer."
"Bella, no me importa, tú no eres una carga y me encantaría estar contigo y acompañarte a tus clases. Incluso dejaré que cargues tus propios libros." Me dio una pequeña sonrisa, que luego desapareció de su rostro, "Al menos… Que no me quieras contigo."
"¡No!" Casi grité, "Sólo que no quiero importunarte."
"Bueno, no lo estas haciendo. Así que deja de pensar en ello, necesitamos ir a clases hoy, tenemos Biología"
Le dí una pequeña sonrisa y luego continuamos caminando hacia el laboratorio. La campana sonó justo cuando llegábamos a la puerta, nos movimos rápido dentro del laboratorio sentándonos juntos en un escritorio vacío al fondo de la clase. Miré hacia la pizzarra y gemí en voz baja cuando leí 'Fotosíntesis' con un apartado con definiciones debajo de ella. Había dado este tema 2 años antes en otra clase avanzada, no es exactamente el tipo de material más intrigante para investigar.
Edward estaba acomodando sus libros en el escritorio cuando se detuvo, él debió haber escuchado mi queja.
"Bella ¿Qué sucede?"
"Posiblemente es el tema más aburrido de todos para mi en Biología, ¿no aprendieron esto el año pasado, o el anterior?"
El rió. ""Hace tres años en realidad. Biología avanzada.¿Por qué crees que estamos sentados al fondo de la clase?" Me reí y estaba a punto de responderle cuando el Sr Banner entró en la sala.
"Buenos Días, clase, por favor copien toda la teoría de la Fotosíntesis que se encuentra en la pizarra. Luego me gustaría que en parejas completen la actividad." Bla, bla,bla. Qué emocionante. Saqué mi libro de actividades y una lapicera; luego comencé a copiar las notas del pizarron. Desvié un poco mi mirada hacia mi izquierda para ver al Dios Griego que se sentaba junto a mí. Pensando lo que sucedió ayer, rápidamente cambié de opinión; nadie en su buen juicio eligiría a Newton por sobre Edward Cullen quien estaba sentado a centímetros de mi, mirándome.
Un segundo.
"Atrapada." Me susurró Edward.
"No se de que estas hablando," aparté mi rostro y empecé a copiar furiosamente las notas que me faltaban.
"Tu voz miente, pero tus mejillas dicen la verdad," dijo, y pude sentir en su voz, la obvia sonrisa de oreja a oreja plantada en su cara.
"Sigo sin entender de que hablas." Acomodé mi cabello delante de mi hombro izquierdo, tratando de formar con él una cortina entre nosotros. No es necesario mencionar que sentía en ese momento como mi rostro se esparcía un rojo y un calor cada vez peor.
"mmm, claro, Bella. Tendré que recordartelo más tarde." Tragué forzadamente y luego me relajé cuando ví que Edward volvía su atención hacia sus libros y continuó trabajando.
Cinco minutos después, oí un pequeño rasguño a mi lado y segundos más tarde un pequeño trozo de papel apareció frente a mis libros.
¿Cuál es tu siguiente clase?
Saqué mi tabla de horarios y le contesté.
Francés.
Edward tomó la nota y mi tabla de horarios para compararlo con el suyo. Tomó ambos y los puso en medio del escritorio, eran casi idénticos, salvo que cuando el tenía Inglés, yo tenía Francés.
La nota continuó yendo y viniendo un poco más. Si fuera por mí Edward podría arrancar hojas y pasarme notas, cuando quisiera.
Demonios, Tengo Español. Obvio, obviamente que el maldito Dios puede hablar otro idioma. Tal vez tenga suerte. Tal vez no sea tan bueno. Mi francés era muy rudimentario... tal vez nuestros niveles de idiomas podrían ser más o menos los mismos. Rápidamente escribí y le pasé otra nota sin que el Sr Banner se diera cuenta de nuestra silenciosa comunicación.
¿hablas fluído?Ví su boca contraerse antes de que una sonrisa apareciera en su rostro. Sus carnosos y perfectos labios se acomodaron en una sonrisa, y supe mi respuesta.
Tomaré eso como un sí.
Esme, mi madre, solía vivir en España antes de conocer a Carlisle, dice que los idiomas son una buena herramienta. Soy el único de mis hermanos que toma clases de Español. Emmet y Jasper se rieron cuando hablamos de aprender otro idioma, Rosalie no tiene tiempo, y Alice, ella aprendió Español con sus nana, así que esta tomando clases de Francés desde hace algunos años.
Ahora era mi turno de sonreír. Sentí un pequeño matiz de satisfacción vengativa antes de hacer lo que se me había ocurrido. Iba a torturarlo un poco.
Ton sœur parle en français? C'est chouette ! Moi aussi… Mais je parle seulement un petit peu.
Lo que escribí fue un Francés bastante básico '¿Tu hermana habla Francés? ¡Qué bien! Yo también, pero sólo un poco.'
El estuvo quieto por un minuto, para luego comenzar a escribir algo y me volvió a pasar la nota.
Franchement? Je peux parle en français aussi.
Lo traduje al castellano en forma rápida y silenciosa, '¿Enserio? Yo también hablo Francés.' Fruncí el ceño al leer la nota. Sí, no sólo sabe hablar Español, él habla Francés también.
Malditamente Fantástico. Volvió a tomar el trozo de papel.
Debiste haberte visto tu expreción. No tuvo precio. Pero, lamento haberte arruinado tu momento. Mi padre Carlisle, él es doctor y trabajó en Francia algunos años, antes de mudarse a Forks, él me enseñó y ahora está tratando de enseñarle el idoma a Alice.
No pude pensar en nada para responderle. Edward Cullen era increíble. Todo en él parecía gritar que era perfecto. No tuve tiempo de escribir una respuesta. La campana con el final del segundo periodo sonó. Finalmente.
Tomé mi mochila y caminé junto a Edward hacia mi clase de Francés, él se detuvo en la puerta y me miró con sus ojos, pensativo.
" Nos vemos aquí después de clases – Ambos tenemos un periodo libre después, igual que mi familia, así puedes conocerlos y almorzamos todos juntos, … si quieres". Asentí con un tímido "Suena bien." Y me giré para entrar al salón; Edward había comenzado a caminar hacia su clase en el siguiente edificio. Cuando esa criticona voz en mi cabeza decidió que era momento de intervenir. 'Por Dios, Bella, si vas a continuar actuando de esa forma, ya puedes ir diciendole adiós a Edward Cullen y toda su perfección.' No. Realmente me gusta este chico. Simplemente, no voy a dejarlo ir. 'Entonces será mejor que se lo digas'. Me burlé de mi misma, a veces tenía ideas bastante tontas. Pero, tenía razón – si no actuaba rápido podría perderlo, y él encontrar alguien más interesante. Creo que no podría soportarlo. Así que será mejor que le de algo en que pensar. Tomé un profundo respiro. Él estaba casi al final del corredor y no quería que se fuera antes de que oyera lo que tenía para decirle.
"¿Edward?" El se giró y comenzó a andar los pocos metros que nos separaban. Ambos nos detuvimos; puedo hacer esto, me dije.
"¿Si, Bella?" Me miró a través de sus pestañas y si no fuera por la poca acción, habría continuado con mi plan A. En cambio, crucé la distancia que nos separaba y me paré en la punta de mis pies para susurrarle un pequeño 'Je te veux' en su oreja izquierda, dejando que mis dientes rozaran el lóbulo de su oreja. Le dí un pequeño beso en la mejilla y me volví corriendo hacia mi salón de clases, con mi cara al rojo vivo de vergüenza.
EPOV
Ella me besó y luego salió corriendo. Ella susurró en mi oído 'Te quiero', me besó y salió corriendo. Está bien, sólo fue un beso en la mejilla, pero esos deliciosos labios que he estado mirando por los últimos dos días, se posaron en mi rostro.
Mi mente seguía vagando mientras entraba en mi salón. No iba a haber manera de que esta clase se pasara lo suficientemente rápido para mí.
BPOV
Lo besé y me fui. Hice la estupidez de susurrarle 'Te quiero' en su oído y dejarlo. Sólo fue un beso en al mejilla, pero whow. Su piel era tan suave que sólo quería volver y tomar su cara entre mis manos, trazar todo el recorrido de la linea de su barbilla con mis dedos, su perfecta nariz y esos perfectos labios. Él no pareció quejarse de nada cuando lo hice, así que tal vez esa es una señal para que siga adelante. Lo vería en la hora del almuerzo y tal vez ahí tenga la oportunidad de …
"¿Isabella, Isabella Swan?, ¿Dónde está mademoiselle Swan?". Rápidamente salí de mis pensamientos.
"Oui, Aquí", dije levantando mi mano. "Y es Bella, sólo Bella."
"Bueno, Bella, mi nombre es Madame Mayoraz, y estoy remplazando al titular de la asignatura por algunos meses. Me gustaría compartir algunas de las pautas y hábitos en mi clase…" comencé a distraerme otra vez; esta vez más rápido. No iba a haber forma de que esta clase pasaras lo suficientemente rápido para mi.
Todo en lo que podía pensar era en el rostro de Edward, sus fuertes brazos y su duro pecho con esos perfectos abdominales más abajo que ya pueden verse, incluso a través de su remera. Lo único que deseaba era poner mis manos debajo de ella y dejar que mis dedos trazaran el camino hacia arriba y abajo en su pecho y en sus…
"Mademoiselle!" pegué un salto del susto. "COMO estaba diciendo, en mi clase, ¡los estudiantes DEBEN prestar atención!" Me estremecí un poco cuando la voz de Madame M. subió dos octavas.
"Lo lamento, Madame". Mentira, no lo lamentaba en absoluto. Pensar en Edward era mucho mejor que cualquier otra cosa. Creo que ella oyó en mi respuesta la falta de sinceridad; porque su cara comenzó a cambiar de colores, de blanco a rosa, de rosa a roja y de roja a azul.
"Sal. De. La. Sala." Era como si estuviera hablando en otro idioma.
"Pardon?"
"Dije, 'Sal de la sala'". Sin necesidad de otra instrucción, tomé mi mochila y dejé el salón. No es que me había perdido mucho, en realidad había oído la primer parte… ella sólo se estaba presentando. Tendré que controlar más mis fantasías con Edward la próxima vez… Eso espero.
Vagamente recordé dónde era la siguiente clase de Edward, así que estuve buscando en esa dirección por unos 20 minutos antes de encontrar el edificio correcto. La campana sonaría en unos 5 minutos, estaba por dirigirme hacia su salón, cuando vi un montón de nieve endurecida.
Cuando la nieve cubre los accesos, la gente de mantenimiento se encarga de acumularla a los costados. Después de un par de semanas se vuelven pilas duras como roca. Esto parecía un buen momento como para probar mi orden especial de botas 'extra seguras'. Comencé a caminar hacia la nieve y empecé a saltar sobre ella, las botas realmente funcionaban. No me patinaba ni un poco. La campana sonó y empecé a caminar a un lado de la nieve. Estaba casi al final de la pila, así que salté para poner mis pies sobre el asfalto. Pero tan pronto como mis pies tocaron el piso, resbalaron. Me encogí y me preparé para el impacto contra el suelo, que nunca llego. Sentí en cambio, esos familiares y cálidos brazos otra vez, empujándome hacia un lado, plantándome en el negro asfalto antes de que mi cabeza golpeara el piso.
Me giré para ver a Edward y estuve a punto de decir algo ingenioso, cuando su expresión me sugirió que haga otra cosa. Me separé unos pasos de él suavemente y Edward se movió en mi dirección, sacó sus brazos de alrededor de mi cintura y sus manos tomaron mis muñecas gentilmente.
"Bella, por favor, ¿Puedes prometerme algo?" Él estaba tan cerca de mí. Su delicioso aliento a menta invadió mi rostro.
"Lo que sea" dije sin aliento.
"Bien, escucha cuidadosamente," me acerqué un poco más a él y su boca estuvo en mi oreja, "¿Crees que podrías considerar la posibilidad de esperarme antes de hacer cualquier cosa potencialmente peligrosa o irresponsable?" Retrocedí y lo miré irritada.
"Eso" dije señalando el montículo detrás de mí, "No fue mi culpa."
"Oh, ¿Enserio?" dijo elevando sus cejas,
"Sí, enserio. Se suponía que estas botas no patinaban, ellas tienen EXTRA suela" Estaba muy molesta.
Edward trató de ponerse serio, pero no lo consiguió. Él sonrió.
"Bella, botas con extra suela, funcionan bien en la nieve. Pero... ¿ves eso?" Dijo señalando el hielo del pavimento detrás de nosotros, "Eso es peligroso. Ese tipo de botas no funcionan en hielo como ese." Me tomé mi cabeza, realmente estaba siendo irresponsable. Comencé a caminar hacia un banco que estaba a un costado del edificio donde Edward había salido de clases. Él me siguió y permaneció de pie cuando yo me senté. Algo parecía perturbarlo.
"Y, aparte de todo eso, ¿Te importaría decirme que hacías fuera de tu clase tan temprano?" Demonios.
"Bueno... Preferiría que no." Pero tenía el presentimiento de que Edward no me iba a dejar librarme tan fácil de esta, y el sentimiento era mutuo.
"Bella, si no me lo dices, encontraré la manera de averiguarlo..." Él parecía hablar enserio.
"Estaba soñando despierta" Por favor, por favor, si hay un dios, por favor que me salve ahora.
"¿Y sobre que soñabas despierta?" supongo que no puedo llamar a algún amigo o algo así para que me saque de esta.
"Nada..." Prácticamente estaba murmurando por la humillación y ahora parecía que él se interesaba aún más.
Realizó unos pasos para acercarse a mi y se arrodilló frente a mi. Me miró, a través de sus pestañas y supe en ese momento y en ese lugar que iba a perder esta pequeña lucha y con ella algo de mi dignidad. Dejé que mi cabello cayera en frente de mi rostro – esperando que la evidente verdad pueda no ser tan mala como el rojo de mis mejillas.
"Bella, ¿sobre que soñabas despierta?" me repitió.
Suspiré, cuando antes terminara, mejor.
"Tú" murmuré.
"Perdóname, no te oí,"
"Tú…" repetí.
"Bella, estas murmurando"
"Estaba soñando despierta contigo, Edward" Levanté mis ojos para verle la cara y vi esa estúpida sonrisa en su rostro. Eso – eso- él –él- ÉL ME OYÓ TODO. LAS TRES VECES. Mi rostro estaba literalmente encendida y volví mi mirada hacia mis rodillas. Ni siquiera podía levantarme y salir corriendo, porque él estaba en frente mío. Lo único que quería, era que todo quedara en el olvido. No puedo creer, que no solo lo admití una, ni dos, sino TRES veces. Sus cálidas manos pasearon por mis brazos, luego mis hombros, mi cuello para finalmente quedar a los lados de mi cara. No puede más que descansar mi rostro en su palma derecha mientras con su mano izquierda lentamente trazaba el rosa de mis mejillas y bajaba hacia mis labios. Tomó mi cabello suavemente y lo acomodó detrás de mis orejas y elevó mi cara para que lo vea. No podía respirar. Movió su cabeza hacia mi oído y susurró algo en mi oreja que hizo que un nudo se forme en mi interior y que mis piernas parecieran gelatina, incluso estando sentada.
"Yo también estuve soñando despierto contigo, y dudo mucho que el tuyo sea tan malo como el mío."
Su voz era áspera y todo lo que quería en ese momento era sus labios sobre los míos. Movió su cabeza hacia abajo y besó mi clavícula, luego un poco más arriba, en mi cuello, y luego justo en mi mentón.
No pude soportarlo más. Estaba loca por su contacto. Puse su cabeza más arriba, a mi nivel y esa fue toda la invitación que necesito para unir su boca con la mía. Después de un par de segundos, su lengua acarició mi labio inferior, pidiendo permiso para continuar, a la que accedí inmediatamente. Su lengua se torció y danzó en mi boca. Moví una de mis manos para posarla en sus broncíneos cabellos, mientras con la otra acariciaba sus perfectas facciones, con las que había soñado todo el día. Y cuando finalmente nos separamos, me dio un suave y dulce beso en mis labios. Se sentó a mi lado, en el banco, y suavemente enlazó sus dedos con los míos y puso por encima su otra mano, tratando de calentar mis frías manos.
"Quería hacer eso, desde el primer momento que nos conocimos" Me susurró suavemente.
"Yo también," Respondí con honestidad.
EPOV
Wow, sólo, wow.
Creo que estoy enamorado.
Ella es perfecta.
Lista, bonita, divertida, irremediablemente torpe y –
Todo lo que siempre quise e incluso más.
BPOV
Creo que estoy enamorada.
Ni siquiera se como describir este sentimiento.
Realmente, No lo creo… lo sé.
Sé que estoy enamorada.
De Edward Cullen.
Así termina el primer Capítulo =).
Me gustaría saber que les parece la historia, así puedo transmitirselo a la Autora original.
Por otra parte estoy dándole los últimos detalles a una historia mía, la cual me gustaría que se pasaran a leer en cuando la cuelgue.
Más Reviews aparezcan, más rápido subo el capítulo que sigue =).
Sólo con 10 me conformo =).
