14 / Enero / 1987

Hola:

Oye, ¿sabes?, en este mundo, alguna vez, a un extraño prisionero conocí.

Y la única forma de poder hablar con él, era por aviones de papel.

No me importaba que mi padre no estuviese de acuerdo.

Prometeme una cosa, si yo muero, tu viviras superaras el dolor.

Desearía que hubiésemos tenido más tiempo juntos.

Te amo.

Adiós.