Esta historia participa en la sección "Desafíos" Octava Lista – Emociones, del Foro "La Noble y Ancestral Casa de Los Black"

"Las cinco compañías"

I

Frustración

Se dejó caer en su cama, Crookshanks soltó un maullido y fue a buscar un poco de sus caricias. Dejó que su dueña le hiciera cariño detrás de las orejas, aunque no le gustara, su dueña estaba enojada, y hacerle pasar un mal rato no era ningún buen plan.

-Lo detesto-Crookshanks soltó un maullido y le observó de forma atenta.-Nunca me hace caso ¡Soy prefecta! Debería tenerme respeto-espetó furiosa.

La castaña se sentó en su cama, y dejó de acariciar a su gato quién se quejó en un maullido. Se pasó un bucle desordenado por detrás de la oreja y bufó.

Tomó uno de sus cojines y comenzó a golpearlo contra la cama, desordenando más su cabello, haciendo que sus mejillas se arrebolaran y que aquella sensación frustrante de su pecho no se fuera en ningún momento.

-¿Por qué? ¿Por qué ni siquiera me mira?-se cuestionó y entró a llorar. El gato se acercó a ella y colocó una de sus patitas en la pierna de la joven, como si tratara de infundirle ánimos.

Hermione tomó a su gato en brazos y lo abrazó sin dejar de llorar, sabiendo que su gato nunca le comprendería.

Porque para Hermione no había cosa más frustrante que Fred no le mirara, aunque fuera solo para discutir.