Disclaimer: Hetalia no me pertenece sino a Hidekaz Himaruya
Setting: AU
Capítulo I: Inizio
6 de la mañana es la mejor hora para empezar un entrenamiento para la ex potencia del eje según Alemania , a pesar que Italia siempre se terminara quejando de que no le daba tiempo para desayunar o para dormir y Japón bueno el solamente obedecía las ordenes sin protestar
Todo iba como costumbre Alemania, Japón e Italia empezaban el calentamiento con un trote sueva aunque para el italiano esto era muy pesado, Alemania aun no entendía como era que su mejor amigo aun no se acostumbrara a estos entrenamiento ya habían pasado más o menos 1
Siglo y medio desde que se conocieron y desde que lo incluyo en sus entrenamientos matutino pero aun seguía igual de débil físicamente y cuando tenía la oportunidad se escapaba con la escusa que Inglaterra se encontraba presente aun que desafortunadamente esa escusa ya no le serbia ya no estaban en la guerra y sería difícil ver al cejotas caminando por Alemania sin algún motivo político o económico.
De todas forma Italia ya no se le sería fácil escapar ni siquiera fingiendo que aun se encontrara dormido le ayudara pues sabía a la perfección que eso no le impedirá al alemán de tirarle las frazadas y de provecho a él al suelo para que despertara.
A cambio Japón siempre suele despertar temprano sin siquiera que lo vengan a levantar y nunca había tratado de escapar ni siquiera cuando Alemania le preparo ese estricto entrenamiento y dietas por su alto consumo de sodio, como el japonés decía "un verdadero hombre nunca se daba por vencido a los retos que se le enfrente" es por eso que siempre daba lo mejor de él sin importar lo duro que fuera y lograba mantener un ritmo firme junto al alemán en el entrenamiento, lástima que Italia no aprendiera esas cosas de el
-¡ ITALIA! Apresura el paso o te vamos a dejar atrás y esta vez no te vamos a esperar como la ves pasada-
-vee~ pero Alemania, Ho sonno e fame-
-italia-kun esfuércese un poco más, solo nos falta 30 vueltas más –
- Korrektur, a nosotros nos faltan 30 vuelta a Italia le falta 32 vueltas –
era verdad por la poca resistencia física que poseía el italiano solía quedarse atrás en el entrenamiento y por ende solía atrasar a los demás, a pesar que en varias ocasiones Alemania le había dicho que no le iba a volver a esperar siempre lo terminaba esperando y el norteño sabía bien que a pesar de que Alemania se mostrara como alguien muy estricto, serio y poco sensible, suele tener un gran paciencia con él, como dejarlo dormir con él en la misma cama y cada vez que gritara por ayuda iba a estar ahí para ayudarlo, claro que eso no cambiara el hecho que si en estos momento llegara a detenerse solo 5 segundos para descansar lo aria trotar el doble de lo que le faltaba o peor no lo dejaría comer pasta el resto del día
-Alemania, ¿después del…entrenamiento…puedo comer pasta?-pregunto el italiano con algo de cansancio a pesar que llevaba poco tiempo trotando
-solo cuando termines -
Ya con un buen motivo para seguir Italia decidió dar su mejor esfuerzo para terminar de una vez y comer su deliciosa pasta pero primero debería alcanzar el ritmo de sus dos amigos ya que iba dos vueltas atrás de ellos y no quería volver a atrasarlo por su culpa pero era inevitable no estaba hecho para estos
Ya habían pasado aproximadamente 25 minutos para que el alemán y el japonés terminara con su trote y se encontraran descansando en el punto de partida esperando al italiano que aun le faltaba una vuelta más por dar, desde ese punto podían observar como el lamentable trote del italiano iba en descenso, llegando a la velocidad de poder caminar a su lado sin mayor esfuerzo
-¡vamos Italia, ya falta solamente una vuelta más para que puedas descansar!-
-vee~-
-Alemania-san –
-¿qué sucede Japón?-
-creo que algo no está bien con Italia-kun-
-¿Por qué lo dices?-
De repente sintieron el sonido sordo de un cuerpo golpeándose contra el suelo al mirar a donde provenía el sonido vieron al italiano tirado en el suelo boca abajo. Al principio creyeron que se había tropezado con sus cordones otra vez pues nunca se los abrochaba bien, pero al pasar los segundos no vieron ninguna reacción de parte del norteño
-italia-kun?-dijo casi en un susurro el asiático
Alemania fue el primer en acercarse a su inconsciente amigo, lo tomo en brazo y lo levanto levemente del suelo para comprobar su estado, se sorprendió al ver su piel pálida además de el característico color canela de su amigo y lo labios morados en vez de los rosados labios del norteño algo no estaba bien eso era seguro .
-Japón ayúdame a llevarlo a mi casa no creo poder abrir la puerta al cargarlo-dicho esto tomo el cuerpo del inconsciente italiano con más fuerza y lo cargo camino a casa acompañado por el Japón que de vez en cuando miraba a sus amigos con preocupación
