PROLOGO
Se podría decir que a simple vista somos humanos comunes y corriente con una vida estándar, ya saben, estudios, trabajos, deportes, unas que otras salidas, pareja, hijos y todas esas cosas cotidianas que está acostumbrada o yo diría computarizada en las mentes de las personas con una capacidad de pensar muy limitada, ojo no odio a los humanos yo soy humano también solo que a diferencia de ellos pertenezco a un grupo discriminado y no me importa, somos mutantes odio esa terminología yo nos llamó "la gente más cool en este maldito universo" somos pocos pero poderosos no somos aceptados por la sociedad por eso vivimos escondiendo nuestros poderes, en su mayoría somos molestados y maltratados ya que matar un humano condenaría a todos los de mi clase pero matar un mutante te hace héroe, ya saben a lo que me refiero somos peor que un pedazo de porquería por eso vivimos a parte no en otro mundo pero si lejos de esa sociedad.
Mi nombre es Quinn Fabray tengo 18 años y lo que dije anteriormente lo mantenía hasta que tenía 12 años sigo manteniendo una que otras palabras en pie, solo que ahora si odio a un grupo de mutantes que antes los llamaba familia, refugio, pero son unos hipócritas, junto a su Profesor S que era como mi padre, comprendí que estaba bajo un yugo que no me dejaba evolucionar y ahora con todo este poder que he desarrollado gracias a Sylvester y a un fuerte entrenamiento que en mis 10 años que dure en la academia del profesor S nunca aprendí, ahora si podre destruirlos, ni el amor de mi vida, dueña de esos ojos color chocolate que un día me robaron mi corazón, mi aliento podrá detenerme.
Tengo otra familia, otro propósito, un solo objetivo y lo lograre, seis años, solo seis años bastaron para dominar mi poder y darme cuenta que soy más poderosa que ellos.
Profesor S: "No seas cobarde y mátame a mi deja a los demás fuera de esto" –Ensangrentado y boca arriba escupía con dolor el profesor-
Q: "No seas iluso, no creas que te matare a ti nada más, matare a todos tus alumnos, no son solo un par de basuras" –Lo miraba con ira, sus ojos ya no eran avellana que transmitía calma, eran verdes oscuros se podría decir que si la mirabas por 1 minuto los podías ver negros-
R: "Déjalo Quinn, tú no eres así" –Gritaba desesperada-
S: "Q, hablemos no termines con esto así, piensa en los demás, un día fuimos familia" –Estaba agarrada agarrando a Brit que estaba herida y desmayada-
Q: "¿Se pueden callar de una buena vez? Jamás me buscaron, preguntaron por mí, nunca supe de ustedes, continuaron con sus vidas mientras me entrenaban y me torturaban, no merecen el perdón y tu Berry –Voltio a mirarla con odio- "Lamento que no puedas casarte con Hudson"
Hubo una explosión de gran poder, después de una nube de polvo se produjo un silencio tenebroso, solo se veían cuerpo por todo el campo de batalla y solo uno de pie en el medio, se sacudió el cabello corto y rosa sensualmente y se puso sus lentes oscuros.
Q: "Esto es solo una advertencia para ustedes jóvenes mutantes, para la próxima será peor" –Se lo decía más que todo al profesor que era el único que estaba medio consciente, este solo la miraba con cara triste, no podía creer que esa era misma Quinn amigable, alegre y sonriente que él había criado y amado hace durante 10 años la rubia se marchó con su grupo de ahora nuevos amigos y su mentora Sylvester que le dedico una sonrisa de superioridad al Profesor S y con esto se desmayó.
Yo no era así, no siempre fui mala, se preguntaran porque conocía a mis oponentes, como les había dicho antes era mi familia pero me abandonaron, me dejaron a mi suerte y jamás se lo perdonare, mi cabello era rubio y Santana, Birttany eran mis mejores amigas, la más importante en mi vida era mi estrellita Rachel Barbra Berry, pero ya no quiero tocar ese tema, de solo nombrarla me duele, déjenme contarles mi historia y porque después de seis años busco venganza.
CONTINUARA….
