Harry Potter: amoríos en hogwarts

Capítulo 1 : reencuentro y sorpresas

Llego el sexto año de harry potter en la escuela hogwarts de magia y hechicería, como de costumbre paso el final de sus vacaciones en casa de su mejor amigo Ron Weasley.

Como cada año todos se dirigían a la plataforma 9 ¾ y allí se reencontraban con el expreso que los llevaría directo a hogwarts. Al llegar a la plataforma Ron, Harry y Ginny vieron a lo lejos a una chica con un enorme baúl y tenia un gato muy peludo y marrón en sus manos. Cuando se acercaron confirmaron su sospecha era Hermione Granger, la mejor amiga de Harry y Ron, pero al parecer estaba más alta que la ultima vez que la vieron y tenía el pelo de contextura normal y con ondulaciones definidas y prolijas. Ella vio a dos chicos y una chica acercarse. Dos de ellos eran pelirrojos de ojos claros medio verdosos medio azulados. El otro tenía un pelo negro azabache, su cicatriz tan habitual y dos faroles color verde esmeralda, reconoció en seguida que se trataba de Harry, Ron y Ginny, los tres estaban mas altos y podría decirse que mas atractivos. Lo mismo que ellos opinaban sobre Hermione. Cuando por fin estuvieron frente a frente Ron se lanzó a los brazos de Hermione estrechándola fuertemente, mientras que ella trataba de empujarlo de encima suyo para saludar a los demás.

yo también te extrañe Ron- dijo Hermione, roja porque todavía le costaba respirar después de semejante apretón.

Hola Harry- le dijo Hermione mientras lo abrazaba, pero delicadamente a diferencia de Ron.

Mientras Harry se encontraba rodeado de los brazos de su mejor amiga, hubiera deseado quedarse allí para siempre, no sabía porque pero quiso pensar que fue porque había extrañado mucho a su mejor amiga. Casualmente Hermione pensó en lo mismo, no quería separarse de ese abrazo nunca y dedujo que era porque con Harry se sentía protegida. Hasta que una leve tos dijo:

Hermione creo que también yo estoy esperando tu saludo- dijo Ginny, con vos de reproche, Hermione se ruborizo un poco porque temía q se haya notado la intención de no separarse de Harry, y rápidamente lo soltó y abrazo a su gran amiga.

Hey Ginny! Estas más alta- dijo Hermione para cambiar la expresión de enojo del rostro de esta.

Si, creo que todos estamos mas altos y atractivos-dijo con una picara sonrisa en su rostro y rápidamente su mirada se desvió hacia Harry, el cual no lo percibió debido a que se había quedado mirando a Hermione y pensó que nunca se había dado cuenta de lo bella que era hasta ese momento; pero sus pensamientos fueron interrumpidos.

Vamos Ron, recuerda que somos prefectos y debemos hacer guardia en los vagones-dijo Hermione de forma segura y autoritaria.

Como olvidarlo-dijo Ron con expresión de tristeza en su rostro y luego agrego,-bueno Harry supongo que nos veremos luego, reservanos lugares. Ron se metió en el tren.

Adiós- dijo Hermione dedicando una sonrisa a su amigo y siguiendo a Ron.

Bueno Harry creo que deberiamos buscar un lugar disponible ¿no?-dijo Ginny alegremente por la situación de tener que viajar sola con Harry.

Eso creo –dijo Harry, desanimado por la idea de separarse de sus amigos.

Creo que aquí estaría bien-dijo Ginny señalando a un compartimiento vacío.

Harry ni siquiera le respondió a Ginny, entró sus cosas y se sentó junto a la ventana. Ginny lo imitó y se sentó frente a él de modo que pudiera notarla. Harry se percato de la incomoda situación y decidió mirar al paisaje, en cuanto hubiera uno, porque todavía no habían arrancado.

En ese momento justo cuando Ginny iba a empezar a hablarle a Harry de lo mucho que tenían en común, alguien entró. Era una chica rubia con el pelo largo, ojos saltones y algo desorbitados, y llevaba su típico collar de corchos, que por el olor que despedían, era seguro que tapaban algo más fuerte que cerveza de manteca.

-hola Harry, hola Ginny-dijo Luna Lovegood al sentarse junto a Ginny, quien la miro con cierto enfado que no pudo disimular ya que sus planes se habían arruinado.

Luna comenzó a hablar con Ginny, que de mala gana la escuchaba, sobre las vacaciones y lo que hicieron. Quien confeso que había estado ayudando a su padre en notas del "quisquilloso".

-¿sabían que los hipogrifos antes de aparearse realizan un baile como especie de ritual, en donde brincan sobre una pata?-dijo luna firmemente como si se tratara de un tema serio. –lo leí en una de las notas que mi padre preparaba para su diario.

Harry tuvo que hacer grandes esfuerzos para no soltar una carcajada, y luego se le vino a la mente la imagen de hipogrifos apareándose y sintió nauseas e intento pensar en otras cosas y termino coincidiendo con Hermione en que los comentarios de luna son tan alocados como ella.

Ginny sin embargo puso expresión de asco y se resigno a mirar el paisaje, ya que no podía conquistar a Harry tampoco le parecía necesario fingirle atención a luna.

Luna noto la indiferencia y saco un ejemplar de el "quisquilloso" y se puso sus escalofriantes lentes y dio vuelta el diario boca a bajo, ya que el truco de esos lentes era que podían leer cualquier texto boca a bajo. Lo cual a Harry le parecía extremadamente ridículo pero prefirió eso antes que una Luna aburrida quisiera hablar con él. En ese momento entran Hermione y Ron y se sientan al lado de su amigo, primero Hermione y luego Ron, algo apretados ya que eran 5 y el compartimiento era para cuatro, pero no contaban con la visita de Luna. Sin quejarse Harry les hizo lugar.

-estamos exhaustos, las bromas en el tren se han intensificado-dijo Hermione seriamente.

-los mas chicos ya no le temen a los prefectos como en nuestros tiempos- dijo Ron apenado

-tú, no le temías a los prefectos, tenias miedo que Percy te acuse con mamá-dijo Ginny burlonamente.

Ron al igual que sus amigos hicieron caso omiso del comentario de Ginny y tanto él, como Harry se dispusieron a poner al tanto a Hermione de lo que había hecho en sus vacaciones. Luna no le quitaba al vista a su ejemplar y Ginny muy disgustada por como era ignorada puso fría mirada en el paisaje.

Hablaron durante bastante tiempo, hasta que se dieron cuenta que habían llegado a hosmeade. Se pusieron su uniforme, recogieron sus cosas y se metieron en las carrozas llevadas por thresteals (creo que así se escribe), que los llevarían al castillo.

Cuando se encontraron en el gran comedor y se sentaron en sus respectivas mesas, notaron que no había una silla vacía como de costumbre, que debía ocupar el nuevo profesor de defensas contra las artes oscuras; sino a todas ocupadas y ninguna cara nueva. Cuando terminaron de comer Dumbledore se preparó para su clásico discurso anual:

-bienvenidos a los nuevos y bienvenidos nuevamente a los de siempre- dijo el anciano mucho mas demacrado que el año pasado.-la seguridad de hogwarts este año esta sumamente reforzada, debido a como todos saben, el regreso de Lord Voldemort (algunos sintieron escalofríos al oír el nombre de esa persona).-por lo tanto mucho cuidado y sean responsables-...y luego de una gran lista de recomendaciones de Filch, dijo-voy a anunciar a los alumnos que defensas contra las artes oscuras la dará el profesor Severus Snape,(quien en ese momento sonrió ásperamente detrás de su cortina de grasoso pelo). Los alumnos enfadados se preguntaban quien lo remplazaría en pociones, Dumbledore por arriba del murmullo agregó:

-además el profesor Snape seguirá enseñando la asignatura pociones.

Resonó un OH no! En todo el salón, y otras expresiones de quejas por parte de los alumnos, entonces el director ordenó que ya podían retirarse a sus cuartos.

-saben l oque esto significa-dijo Ron preocupado- doble ración de Snape diaria, es horrible podrá torturarnos el doble y humillarnos en diferentes temas, ¿por qué es tan injusta mi vida?-se quejó Ron.

-esto tan bien significa mucha tarea-dijo Hermione pensativa.

-nos vigilará día y noche-afirmó Harry enojado.

-¿no le daremos razones verdad?-dijo Hermione, recordando sus viejas aventuras y castigos recibidas por ellas.

-claro que no- dijo Harry, sonriéndole a su amiga que aunque lo había dicho seria no podía ocultar la dulzura en su mirada.

-Harry ¿te sucede algo?- asombrada ante la vista que Harry clavaba en ella durante un largo rato.

-heee...no nooo nada- dijo Harry, nervioso porque fue descubierto- es que me quede pensando en las cosas que tendremos que hacer mañana.

-son demasiadas seguro-dijo Ron

-por lo que propongo que lo mejor es ir a dormir ahora- dijo Hermione.

Los tres se dirigieron a la sala común de griffindor y luego de dar la contraseña:-si eres una oriental debes ser una Ravenclaw-dijeron los tres al unísono y la dama gorda los dejó entrar. La sala estaba vacía excepto por Ginny que quería una segunda oportunidad para hablar a solas con Harry, pero este, enseguida le dio a Hermione un beso en la mejilla y empujando a Ron subió por las escaleras hasta el cuarto de los hombres.

-¿sabes si Harry sospecha que quiero conquistarlo?-pregunto abiertamente Ginny a Hermione.

-no lo creo, ¿eso quieres?-pregunto Hermione curiosa.

-si, esta mas lindo que nunca y estoy segura que este año va a fijarse en mí, ya que aparento mayor edad ahora ¿ no es cierto?- dijo Ginny decidida.

-claro, supongo...es decir...si-dijo Hermione deseando que sea mentira lo que acababa de decir; y se despidió de Ginny y se metió en su cama tocando la mejilla que Harry había besado, y preguntándose porque se sentía tan rara frente a Harry. En el cuarto de los chicos Harry trataba de buscar una explicación a ese repentino interés en su mejor amiga. Ambos pensaron:

-¿y si estoy enamorándome de él/ ella?- pensaron cada uno respectivamente.

-no! No es posible-dijeron los dos en su mente.

-no puede ser además mi mejor amiga lo amo durante toda su vida, ¿cómo puedo hacerle esto a Ginny?-se pregunto Hermione

-no, no de ninguna forma, Ron hace tiempo me confesó su amor por Hermione no le puedo hacer esto a mi mejor amigo-pensó Harry.

-definitivamente no es posible ni cierto –pensaron ambos a la vez, mientras cerraban los ojos e intentaban dormir no muy seguros de lo que acababan de decidir y afirmar.