El diablo también puede llorar

Disclaimer: Los personajes son de Stephanie Meyer, la trama es mía y algunas frases inspiradas en un capítulo de Siete en el Paraíso.

Sipnopsis. Para toda la ciudad, Edward es el mismísimo demonio, con la ira dentro de él, tan solo hay una persona que sabe que no es verdad, tan solo hay una persona que puede sacar lo bueno de él, su hermana y amante , Bella.

No existe la coincidencia, solo el destino, que juega con cartas desconocidas.

Prefacio.

Los sueños parecían desvanecerse casi con cautela, ella miraba con aquella mirada errabunda todo ser vivo que tal vez podría ayudarla, todo se reducía a casi cero, las personas pasaban por su lado sin si quiera percatarse de su presencia y ella las miraba, una a una, con sus características, sus rasgos y pensaba internamente, si era alguno de ellos, quién podría ayudarla.

Pero entonces, entre la multitud, vio a aquel rostro, ella lo observó de reojo, pues, aquel niño, parecía ser el único quién había fijado su mirada en la de ella, algo que la perturbaba. El no debería tener mucha más edad que ella y a pesar de ello, su mirada resultaba un tanto caótica, casi con odio, Isabella se asustó un segundo al ver aquellos ojos esmeralda irradiando de odio, pero el miedo cesó casi al instante, cuando el tomó la mano de la chica y sonrió.

La arrastró hacia la casa Cullen, la pequeña Isabella pasaba entre la multitud sin pasar percibida por nadie, a pesar de que sus ropas pestilentaban, su cabello estaba enrredado sobre sus hombros y su rostro y ropas tenían un color marrón, como el puro barro.

Al llegar a la casa Cullen, Isabella se asustó, cogió la mano de Edward, asustada, ella jamás había visto una casa como esa, los Cullen no eran demasiado ricos, pero tenían diversas comodidades, algo a lo que Isabella no estaba acostumbrada, la mirada de Edward se suavizó al entrar al umbral de su casa, aunque Isabella pudo divisar aquel deje, aquel deje tan extraño que la hacía estremecer, ahora es mía, pensó Edward.

Este, había superado todo obstáculo, había caminado con rapidez desde que vio a aquella chica casi a la puerta de su colegio, parecía perdida y desorientada y sola, tendría uno o dos años menos que él, pero en aquel momento, parecía tan débil que el corazón de Edward se encogió, al ver que no tenía nadie al lado, le recordó a el no pudo resistir en llevársela y ahora, por fin era suya.

'' ¡ Mamá, mamá !'' Gritaba, amarrando la mano de Isabella entre sus dedos y arrastrándola hacia el cuarto azul, donde se hallaba su madre, esta estaba postrada en una cama, con pálida tez, enferma de nuevo, Edward la sonría . '' ¡ Mira lo que encontré ! ''

Esme miró de reojo a aquella chica y aunque su mirada estuviera nublada, podía divisar perfectamente como sus ropas, ceñidas a su piel, eran sucias y su cabello enrredado y por las facciones de su cara, catatónicas y con una leve raya en sus mejillas, parecía hambrienta, muy hambrienta.

'' ¿Quién es? '' Pregunta Esme.

Edward se queda parado, si quiera le había preguntado el nombre, la mira un segundo, Isabella ya si quiera se percata de aquel deje que antes la aterrorizaba. '' ¿Cómo te llamas? ''

'' Is—a—bella— a '' Tartamudeo.

'' ¿Te vale Bella? '' Preguntó Edward con una sonrisa, mientras Isabella asentía débilmente, Edward mira a su madre con aquella mirada segura de sí mismo que a Esme la hacía encogerse en sus sábanas. '' Bella Cullen y es de mi propiedad ''

Isabella le mira, se queda en el sitio, postrada, aquel chico acababa de proclamarle como suya, tragó en seco, mordiéndose el interior de su mejilla, asustada, aquel chico cogió con fuerza su mano, rodeando sus dedos con los suyos .

'' De momento dale algo de comer y que se de una ducha. '' Intenta sonar imponente Esme, aunque su voz está rota.

Edward la arrastra a la cocina, abre el frigorífico, sin soltar ni un segundo la mano de Isabella, saca diversos alimentos, mientras llama a la cocinera, alagando que hiciera una sopa con los condimentos que le dejaba en la mesa de la cocina, se oyó el sonido de afirmación de la cocinera, Edward arrastra a Isabella al cuarto de baño.

'' Dúchate '' Habla Edward, mientras comienza a rebuscar en los cajones productos para el cabello.

'' Pe—pero.. '' Susurra Isabella, hablando por primera vez, Edward la sonríe. '' Tú estás delante..'' Susurra, bajando la mirada a sus pies.

Edward se acerca a ella, cogiéndole de las dos manos, mientras acerca sus labios a los de Isabella, esta se queda perpleja, sin habla y sin respuesta a los labios de aquel practicamente desconocido, Edward se separa y la mira con una suave mirada, aunque aquel deje sigue presente, parece que siempre sigue presente, piensa Isabella.

'' Eres mía, nos casaremos algún día y serás eternamente mía, en cuerpo y alma, no debes avergonzarte de nada. '' Susurra, mientras ayuda a Isabella a quitarse la camisa, esta, no hace nada al respecto, al fin y al cabo.

No le importaba, tan solo deseaba salir de la vida que había tenido hasta el momento y aquel chico parecía ser su perfecta ayuda, se puso de puntillas y rozó sus labios con los suyos de nuevo, mientras sonreían.

Ella era de su propiedad.

'' Por favor, no me lleves dónde estaba antes, por favor..'' Se acerca a Edward, recostando su cabeza en el hombro de Edward, este, incapaz de saber cómo recompensar una muestra de cariño, acaricia su cabello con rudez, de forma inexperta.

Isabella alza la cabeza casi al instante, cogiendo su camisa de forma indecisa y tapándose la poca piel que tenía desnuda, pues aún tenía una camiseta interior, mira a Edward y sonríe.

'' ¿Eres de aquellas personas que no saben dar muestras de cariño? '' Pregunta, aún sabiendo la respuesta. '' Mi padre era igual que tú.. ''

'' ¿Era? ''

'' Murió y nadie lloró por él en su entierro, ni si quiera mi madre, aunque la muerte de él destrozó su vida, no lloró, nunca hubo amor, nunca hubo cariño. '' Sonríe. '' Pero tú no eres así .. ''

Edward sacude la cabeza, desviando la mirada, Isabella coge el rostro de Edward y hace que su mirada choque con la de Isabella, esta le sonríe tiernamente.

'' No lo eres. '' Le asegura.

Gracias a los reviews, se prometió un prefacio mejorado, pues este lo hice con algunas faltas y demás, espero que os guste y que sigáis firmando R&R, x)