Perdonad, por unos fallos perdí la historia pero la publicare de nuevo.

Percy iba a lomos de su pegaso, Blackjack, junto con Jason montado sobre Tempest los dos tenían una misión para recuperar el objeto de un dios. La balanza de Kairos, el dios del momento adecuado u oportuno que fue robado. Quirón les encargó la misión a él y a Jason así que fueron, antes de marcharse Jason se despidió de Piper con un beso. Y Percy no pudo evitar pensar en Annabeth.

Después de la guerra gigante todo volvió a la normalidad, bueno todo lo normal que pudiera ser la vida de un semidiós, Leo se fue con Calipso y les llegaban mensajes iris de que les iba bien, Frank y Hazel se volvieron al campamento júpiter. Nico se quedó en el campamento mestizo e inició una relación con Will, aunque al principio le sorprendió luego se alegró por ellos estaba contento que Nico fuera feliz por fin. Había tenido poco de eso en su vida. Grover volvió con sus funciones de señor de lo salvaje y estaba de viaje. Jason se quedó en el campamento con Piper y al acabar el verano se fueron a una escuela en Los Ángeles. Hedge y su familia se fueron con ellos, mientras él y Annabeth se quedaron en el campamento luego irían a la misma escuela y Percy quedándose en casa con su madre y Paul.

Al principio las cosas funcionaron pero después todo fue cuesta abajo, a Annabeth le dieron una beca en Harvard, era una oportunidad única y se fue. Los dos acordaron seguir viéndose cuando pudieran por correo electrónico o mensajes iris pero esto fue disminuyendo. Hasta que todo acabó, Percy estaba hundido las primeras semanas, se encerró en su cuarto, su madre consiguió sacarlo y que tomara el aire y poco a poco fue volviendo a la rutina.

Iba a la escuela y después a casa, en verano fue al campamento sus amigos lo apoyaban y animaban, Nico y Will se quedaban asaban los tres malvaviscos. Percy los ayudaba en la enfermería entrenaba a los nuevos semidioses e incluso Dionisio se mostró menos desagradable con él. Cuando tenia tiempo iba a Nueva york a ver a su madre y a Paul, su madre estaba a punto de publicar su libro y estaba emocionada. Percy se alegró mucho por ella. Blackjack lo distraía ya que este sentía su dolor. Con el tiempo se animó un poco y fue cuando Quirón los llamó a Jason y a él para una misión y allí estaban.

—¿Cuánto queda? — pregunto Percy, se encontraban en Stokes State Forest, Nueva Jersey donde Quirón les había informado siguiendo el rastro de la magia de la balanza.

—No mucho— Jason observaba el lugar a través de sus gafas, los dos aterrizaron en el lugar sin problemas, se bajaron de los caballos y sacaron sus armas.

—Tenga cuidado jefe, y deles—con eso Blackjack y Tempest se fueron.

Los dos continuaron, hacia calor y sudaban como pollos, la marcha duro una hora, pasaron un riachuelo y rocas cubiertas de musgo. Al pasarlo vieron unos troncos de árboles destrozados, tirados por el suelo, como si alguien los hubiera derribado con un golpe. Agarraron sus armas fuertemente y siguieron el rastro. De repente, Jason se detuvo y Percy chocó contra él.

— ¿Que? — Jason le tapó la boca con la mano y con la cabeza señaló en dirección hacia una cueva.

— Lo hemos encontrado—
Los dos semidioses se aproximaron a la entrada de la cueva, donde se oía un ruido de respiración, no sabían que monstruo sería, así que, los dos debían andar con pies de plomo. El ruido era cada vez más fuerte. A lo mejor es un dragón o un gigante pensó Percy, esperaba que no fuera esto último, ya había tenido suficiente de gigantes para toda su vida aunque, con su suerte era más que probable que fuera uno.
Por eso, su sorpresa fue grande, no solo porque no fuera un gigante dormido, sino un ser más pequeño y horrible de lo que creía, era el que producía ese ruido, miró a su lado y Jason también estaba con los ojos muy abiertos, tanto él como Jason pensaron lo mismo ¿Qué era ese monstruo